Las claves del E3
Con el E3 ya pasado, llega la hora de comentar algunos de sus grandes momentos, analizar lo sucedido y analizar las posibles consecuencias de lo que ha dado de sí de cara al futuro a corto, medio y largo plazo de la industria.
Ha sido un E3 interesante, aunque casi todos lo son de una manera u de otra. A fin de cuentas, desde la última gran feria del año -el Tokyo Game Show- y la primera gran feria del siguiente año -el propio E3- hay bastantes meses de por medio, y aunque las noticias nunca cesen y haya eventos interesantes como el CES o la Games Conference, es en el E3 donde se definen las líneas maestras de lo que la industria tiene preparado para sus fieles en el el futuro, generalmente a corto plazo aunque siempre hay excepciones.
Por ello, una vez comentada la feria desde todos los posibles ángulos y hablado de los títulos y sucesos favoritos -o no tan favoritos-, ha llegado la hora de dar un último vistazo al E3 2010 y analizar los sucesos más destacados del evento, los que pueden definirlo mejor y aquellos que harán que se recuerden estos días dentro de la pequeña historia particular de esta industria.
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Nintendo, un nuevo rumbo
La presencia garantizada de 3DS, que al final se ha quedado con ese nombre, y de un nuevo Zelda para Wii auguraba un evento previo interesante por parte de la compañía de Kyoto, pero Nintendo superó todas las expectativas realizando una fantástica conferencia previa centrada completamente en juegos, comenzando ni más ni menos que por el propio Zelda para Wii, que hacía realidad el viejo sueño de usar el notable cel-shaded de Wind Waker pero dentro de una estética más crecida, con un Link más adulto. El momento quedó un poco estropeado por las interfencias de un recinto repleto de dispositivos inalámbricos, pero Skyward Sword tenía un aspecto ciertamente interesante y prometedor.
A partir de ahí fue toda una exhibición de cómo hacer una conferencia convincente, reduciendo al mínimo las charlas sobre ventas y las estadísticas de pasadas conferencias para mostrar toda una sucesión de nuevos proyectos protagonizados por algunos de los personajes más añorados de la compañía. Kirby reaparecía con un plataformas de una estética muy original y nuevas mecánicas, Donkey Kong también reaparecía con un plataformas puro de perspectiva 2D que recordaba inmediatamente a los Donkey Kong Country de SNEs, e incluso se desveló un remake del Goldeneye para N64, anuncios que se combinaban con otros como un nuevo y muy interesante vídeo de Metroid, más centrado en hacer ver que el juego conserva los aspectos atmosféricos propios de la serie, la excelente presentación de Epic Mickey a cargo de Warren Spector, demostrando la notable evolución gráfica de este prometedor proyecto. Y lo mejor estaba por llegar.
3DS, la triunfadora
Como correspondía a la importancia del momento, fue Satoru Iwata el que se encargó de presentar al mundo la nueva plataforma portátil de Nintendo, una 3DS con un diseño deudor de su antecesora, DS, con esa naturaleza plegable tan reconocible y las dos pantallas, aunque las comparaciones acaban ahí. La clave está en la pantalla superior que será la dedicada a visualizar el juego y la que incorpora la tecnología para ver las imágenes en 3D sin gafas, dejando la inferior de apoyo y para ser usada de forma táctil. Es complicado evaluar el efecto 3D sin verlo en persona, pero las impresiones fueron positivas, y además Nintendo ha sido lo suficientemente inteligente como para incluir la capacidad de ajustar o eliminar completamente el efecto, de modos que los usuarios no se sientan forzados a adaptarse a esa nueva apuesta.
Pero lo que realmente sorprendió de 3DS no fue ni su pantalla, ni sus aparentemente notables capacidades técnicas -de la que Nintendo no proporcionará datos oficiales como manda la tradición-, lo que impresionó fue la lista de proyectos con los que ya cuenta con la máquina, empezando por el tanto tiempo rumoreado Project Sora de Sakurai, que resultó ser ni más ni menos que un nuevo Kid Icarus -como nota curiosa, el ex-periodista de IGN Matt Cassamina, después de muchos años apuntando a que un nuevo Kid Icarus estaba entre las cartas, ha tenido que ver el anuncio justamente el año en el que ya no trabajaba en prensa especializada-. A ese impactante vídeo le siguieron toda una ristra de nombres ilustres como Metal Gear, Resident Evil, Kingdom Hearts, Professor Layton, Dead or Alive, Shin Megami Tensei, Stret Fighter IV, Contra, Dragon Quest, Final Fantasy... no es que aparecieran imágenes o vídeos de todos esos proyectos, pero sólo su mención demostraba algo: el apoyo que las productoras preparan para la nueva máquina de Nintendo.
Si hay una cosa que Nintendo no ha logrado desde los tiempos de N64 es lanzar una máquina que esté bien arropada por el resto de la industria. Por unas razones o por otras, Nintendo ha dependido de sus propias fuerzas para lanzar sus máquina. En esta generación sin ir más lejos, Wii ha ocupado un discreto lugar en las inversiones de las productoras, mientras que DS no empezó a despertar grandes atenciones hasta que Nintendo la hizo funcionar con juegos como Nintendogs o Brain Training. Por eso es significativo que 3DS aparezca tan arropada desde el principio con juegos de renombre. Hay que tener en cuenta que la tendencia en Japón se ha desplazado de forma muy notable a las portátiles, y la industria japonesa podría haber decidido que 3DS es el vehículo perfecto para desarrollar esa trancisión con más intensidad, por lo que habrá que estar muy atento a su evolución y a las noticias que puedan surgir al respecto en el próximo TGS.
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Por encima de todo, no hubo ni abuelas sonrientes, ni Vitality Sensor, ni siquiera Cammie Dunaway, Nintendo se centró completamente en juegos dedicados a sus fans, a aquellos que han seguido la trayectoria de la compañía desde que eran niños. Lo más que la compañía se permitió en una dirección más global fue con Wii Party, pero le dedicó el tiempo justo y no lo convirtió en el centro absoluto de la conferencia como pasó en su día con Wii Fit y Wii Music. Lo curioso es que, al ser Iwata preguntado por el Vitality Sensor y Wii Relax, el presidente de Nintendo afirmó que el E3 no era el lugar para ese tipo de productos y que la compañía prefería centrar el E3 en juegos a medida para el público de la feria. Es gratificante que después de dos años criticando las conferencias de Nintendo por su falta de atención hacía el público y a los medios que siguen con más intensidad la feria, los directivos de la compañía hayan escuchando y entendido que hay un lugar idóneo para cada cosa y que el E3 es para el usuario dedicado y tradicional; esa lección aprendida ha permitido a la compañía de Kioto dominar, sorprender y agradar en esta feria, por encima de sus rivales.
Microsoft, en los viejos zapatos de Nintendo
También es casualidad que justamente en el año que Nintendo ha reaccionado ante las críticas de sus pasadas conferencias, a Microsoft le haya dado por llenar el hueco dejado por la compañía de Kioto y se haya dejado llevar por la fiebre del marketing. Esa molesta enfermedad se produce cuando las compañías se olvidan de donde está el verdadero protagonista de una feria de videojuegos -una pista: videojuegos- y les dan a sus departamentos de marketing cantidades absurdas de dinero para dar "un campanazo" mediático, lo que deriva en toda una serie de "geniales" ideas para capturar la imaginación de los medios, usando mucha retórica, palabras grandilocuentes y espectáculos que poco tienen que ver con el propósito de un E3 -hay que insistir: videojuegos.-
Si ya se había criticado reiteradamente a Nintendo por su insistencia en las ventas, en las familias, y en abuelas sonrientes jugando a los bolos virtuales, Microsoft decidió rizar el rizo con un espectáctulo recargado y lleno de "magia", "poesía" y ponchos blancos para promocionar Kinect. Fue un espectáculo extravagante, cargado de retórica y sin la información práctica que la prensa especializada deseaba escuchar; ni siquiera se hicieron demostraciones en vivo del periférico, con actores simulando que se movían en sincronía con lo que pasaba en la gran pantalla - algo que fue duramente criticado una vez que aparecieron imágenes filtradas del evento, en donde se podía apreciar claramente que los movimientos no coincidían con lo que se veía en pantalla-. Todo sea por el espectáculo.
Al día siguiente Microsoft también puso casi todo el énfasis en Kinect, con demostraciones como la de una niña pequeña jugando con un tigre virtual, dos hermanas hablando de la manera más insulsa posible para demostrar las capacidades de videoconferencia del aparato, demostraciones pregrabadas -otra vez-... la compañía de Redmond centró la conferencia en el periférico, dedicando el tiempo justo a sus títulos más dedicados como Call of Duty: Black Ops, Fable 3, Gears of War 3 y Halo: Reach -con sólo Metal Gear Rising y el teaser de Codename: Kingdoms como auténticas novedades-, proyectos de sobra conocidos a estas alturas. Todas las novedades fueron orientadas a Kinect y prácticamente ninguna de ellas parecía especialmente dirigida a un público tradicional -excepto el juego de Star Wars, y quizás Forza, aunque este último parecía muy simplificado en su control. Todo lo demás se reducía a juegos de gimnasia, de baile, de cuidar mascotas, minijuegos o conducción arcade.
¿Precio? misterio, pero dado que todas las tiendas empezaron a fijar el precio de Kinect en 150 dólares, cabe preguntarse por qué la compañía no lo mencionó en cualquiera de los dos eventos que dedicó al dispositivo. Eso por no hablar de los diversos incendios mediáticos que la compañía ha tenido que afrontar: la confirmación de que las demos mostradas de Kinect no funcionan con más de dos jugadores -por el momento- y el reconocimiento de que hay problemas para que el dispositivo reconozca los gestos de personas sentadas. Microsoft asegura que las funciones de navegación estarán bien calibradas, tanto de pie como sentados, pero dado que Kinect es un producto muy innovador y sin referencias, sería bueno que la compañía fuera fijando razonablemente lo que se puede y lo que no se puede hacer con el dispositivo, para ir creando una imagen más sólida de cara a la prensa y el público potencial.
Microsoft tiene motivos para ser crítica a nivel interno con la forma que han tenido de gestionar la promoción de Kinect en este E3 y de cómo éste ha canibalizado el resto de la oferta para 360 ¿de verdad merece Kinect eclipsar a la interesante línea interna y externa de juegos de 360? Porque de lo que se ha hablado más en esta feria es de Kinect, cuando hoy por hoy no es un producto que esté orientado a los que asisten al evento -lo que se ha criticado a Nintendo incansablemente durante los últimos años-. También es cierto qie semejante cosa no afectó para nada a Nintendo y a su fulgurante éxito con su "público expandido" y posiblemente desde Microsoft se aspire lograr un resultado similar, pero el tiempo dirá si les ha merecido la pena el sacrificio.
Sony: Move, 3D, PS2, PSP, PS3, Juegos...
Si hay algo que distinguió a la conferencia previa de Sony fue que resultó muy larga tanto por el ritmo de exposición y la cantidad de charlas como por la cantidad de frentes que la compañía japonesa está tratando de cubrir en la actualidad. La conferencia comenzó con el nuevo caballo de batalla que la compañía ha encontrado: las 3D, enmarcado dentro del impulso que se está viendo por parte de toda la industria audiovisual para llevar el 3D a los hogares, algo en lo que Sony tiene doble juego, pues no sólo produce software y películas orientadas al 3D, también produce televisores con esa tecnología, así que es lógico que tengan muchos intereses en el campo. Sin embargo está por ver si la gran limitación actual de la tecnología: las gafas, resulta un obstáculo demasiado importante para las aspiraciones de la compañía.
Sony tiene especial confianza en el combo Move y 3D, como una forma de alcanzar una capacidad de inmersión superior en el juego. Puede resultar interesante, y al contrario que Kinect, Sony parece interesada en vender su Move tanto para aplicaciones más familiares como a jugadores más dedicados. La idea de Move puede no ser muy original, pero la ejecución parece estar a buen nivel y el precio por mando, 49 dólares, es razonable -algo más caro con el subcontroller, el mando auxiliar con un stick analógico-, pero es opcional y un Dual Shock puede hacer las mismas funciones, aunque hay que cogerlo de una manera bastante peculiar-. De la demostración de Move, hay que destacar la presentación de Sorcery, que fue toda una sorpresa ya que no se sabía nada de él y demostró ser muy competente, además de ofrecer una función interesante para el mando de Move, que era utilizado a modo de varita mágica.
Más discutible por parte de Sony fue su apuesta por PSP, una consola que ha bajado a números preocupantes de ventas en todas partes menos en Japón. La portátil se enfrenta a tres problemas: que ya ha sido claramente superada por DS, que ya no tendrá la ventaja técnica frente a 3DS y que iPhone canibaliza su potencial atractivo como dispositivo multimedia ¿la solución? bajar precios y orientarla a un público más joven como una máquina especializada en juegos, o al menos eso se desprende de la campaña promocional que Sony ha preparado y que anunció en la feria para darle un impulso. Pero la pregunta es ¿será suficiente? toda la atención de los medios en materia de portátiles se reservó para 3DS, y DS cuenta todavía con algunas bombas como los futuros Pokemon, PSP tiene juegos muy interesantes en perspectiva, pero ninguno de ellos parece ser la solución que necesitaría la portátil para cambiar la percepción pública de que su vida se agota. Hay quien piensa que Sony necesita una respuesta más impactante -PSP2- ante el reto de 3DS, pero de momento se ha optado por esperar y darle el protagonismo a lo que hay; habrá que esperar hasta el Tokyo Game Show para saber seguro si Sony ha descartado una nueva portátil para un futuro inmediato.
Por lo demás, Sony hizo gala de su sólida línea interna, con especial protagonismo para Little Big Planet 2 y la presentación estelar del nuevo y esperado Twisted Metal para PS3, claramente orientado al juego multijugador. Sin embargo, las ausencias resultaron dolorosas: Versus finalmente no ha llegado a este E3 y se lamentó especialmente que no se mostrara nada nuevo de The Last Guardian, o se anunciara la rumoreada reedición de Ico y Shadow of the Colossus, teniendo en cuenta lo mucho que valoran los medios la presencia del Team Ico en las conferencias de Sony. Tampoco hubo lugar para Journey, el nuevo e interesante proyecto de los creadores de fl0w y Flower, que sólo ha aparecido en un anuncio posterior y mediante imágenes. Pero al menos Sony dedicó un espacio suficiente a varios juegos, presentó algunos novedades como el mencionado Sorcerer, dio algunos golpes de efecto como el de Portal 2 y la presencia de Gabe Newell, e incluso ofreció la fecha definitiva del lanzamiento de Gran Turismo, aunque cueste de creer. No fue la conferencia más impactante o efectiva posible, pero mantuvo una línea sólida y razonablemente interesante.
Una feria de secuelas
Si hay una tónica general que define el E3 2010 es la enorme cantidad de secuelas que se han visto, algo sintomático de un periodo en esta generación donde la tecnología está razonablemente consolidada y los estudios se dedican a recoger el fruto de sus esfuerzos anteriores con secuelas que aprovechen el éxito anterior para llegar a cotas más altas de popularidad. Lo más difícil es siempre la primera parte, en el que hay que introducir un universo nuevo, reglas, ideas, mecánicas... y todo eso usando en muchas ocasiones tecnología relativamente nueva y no condolidada. Las secuelas son relativamente más fáciles y su éxito se aprovecha de la base ya creada, por lo que no sólo son más sólidas, tambien obtienen mayores márgenes de beneficios.
Sabiendo eso, es fácil comprobar que a estas alturas de generación, las secuelas/precuelas dominan el panorama de manera abrumadora: Portal 2, Gears of War 3, Halo: Reach, Little Big Planet 2, Infamous 2, Motorstorm: Apocalypse, Killzone 3, Crysis 2, Gran Turismo 5, Dead Space 2, Crackdown 2, Dead Rising 2 Civilization 5, Mafia 2 ... la lista es realmente interminable, aunque claro, hay secuelas y secuelas, algunas secuelas saben que tiene que satisfacer una demanda de más de lo mismo para un público que quiere exactamente eso, mientras que otros juegos usan las secuelas para ir en direcciones completamente diferentes o ser mucho más ambiciosos que sus predecesores.
Por ejemplo, Gears of War incorporará un modo cooperativo para cuatro jugadores, nuevos modos de juego y posiblemente un salto técnico y visual, pero sigue siendo un Gears of War con complementos, no se puede esperar una nueva dirección revolucionaria para un juego de estas características. Lo mismo se puede decir de juegos como Killzone 3 o Dead Space 2: diferentes entornos, saltos tecnológicos y algunas novedades, pero los fans de ambas series saben qué esperar de ambos proyectos.
En el otro polo estarían juegos como Little Big Planet 2, que aprovecha su secuela para redefinir todo su concepto creativo y llevarlo mucho más allá del plataformas. Lo mostrado por Media Molecule en la feria demuestra que la secuela abrazará la idea de convertirse en todo un kit de construcción de juegos, construido sobre la base de que crear es divertido; los cambios son tan radicales que, salvando la estética, se puede decir que LBP y LBP 2 tienen poco que ver, una nueva dimensión. Lo mismo se puede decir de Portal 2, misma idea base, mismos protagonistas, pero lo que se pudo ver en el E3 habla de un juego de una complejidad en otro orden de magnitud, de una escala muy superior a la del original, que era más un experimento que un juego con todas las de la ley. Portal 2 no irá acompañado como un extra a Episode 2 dentro de un Orange Pack, sino que es un juego completo, y por lo tanto Valve lo trata como corresponde y las expectativas crecen en consecuencia.
Algunos descubrimientos
Pese al dominio de las secuelas, en un E3 siempre se descubren cosas, algunas muy notorias, que acabanconvirtiéndose en "grandes sorpresas" del E3, otras más discretas, pero muy interesantes para aquellos que siguen a los más pequeños y buscan experiencias nuevas, fuera de los circuitos más comerciales. Por ejemplo, Rage ha sido un "descubrimiento" en esta feria, no porque sea nuevo -lleva ya varios E3 estando presente de algún modo en la feria- sino por su rendimiento y la sensación de que está muy encima técnicamente que la gran mayoría de FPS que se han visto estos días. Es la primera vez que se ha visto el juego funcionar en una consola tal y como aparecerá el mercado, y el resultado es francamente impresionante, no sólo en el detalle de sus gráficos sino también en la riqueza de otros aspectos como el de la animación, lo que le ha valido numerosos comentarios positivos, incluyendo el de "Mejor juego del E3 2010" para esta revista.
También resultó un placer redescubrir Epic Mickey y ver su notable evolución gráfica desde aquellas cuestionadas primeras capturas que se desvelaron hace unos meses. Siguiendo con las impresiones positivas, hay que decir que el nuevo Deus Ex ha ganado muchos enteros en credibilidad gracias a la demo jugable del mismo mostrada a puerta cerrada en el E3 y al respeto que el equipo parece tener en las ideas y conceptos originales, aquellos que hicieron al Deus Ex original un clásico inolvidable. También convenció Obidian con el nuevo Fallout: New Vegas, que pese a que no cuenta con el motor gráfico más potente del mercado, sí ofreció muestras del talento creativo del estudio y de los grandes narradores con los que cuenta. Tampoco hay que olvidar a Vanquish, proyecto ya presentado hace unas semanas, pero que en el E3 ha dado nuevas muestras del dominio que tienen los integrantes de Platinium a la hora de realizra juegos de acción, esta vez bajo la batuta de Shinji Mikami. Y siguiendo con la acción, mención para Bulletstorm, que demuestra que los FPS sin complejos y con raciones ingentes de acción sin destilar nunca mueren.
Pero las grandes superproducciones tienen ya visibilidad de sobra, son los pequeños proyectos los que reclaman atención en momentos de reflexión como este. Por ejemplo, está el ya mencionado Journey, de los creadores de Flower, del que "sólo" han aparecido unas imágenes pero que son más que suficientes para capturar la imaginación de los jugadores: una figura humana vestida con una capa en medio del desierto, o en frente de lo que parecen vestigios de civilizaciones perdidas, todo bajo una estética particular y evocadora. El pequeño estudio es un especialista en crear juegos en lo que el placer no está en el propio juego, sino en el viaje virtual que propone, y Journey parece un salto cualitativo en esa dirección.
Otros tres títulos juegan la carta de su particular estética para capturar la atención, con Children of Eden a la cabeza, la secuela espiritual de Rez por parte de Mizuguchi, donde el audio, los gráficos y la interactividad se mezclan en un juego que promete grandes sensaciones y una experiencia diferente, construida sobre la base sentada por Rez pero con una mayor escala y ambición. Otro juego de estética única es Project Dust, el nuevo título de Eric Chahi, el creador de Another World, que parece inspirarse en juegos como Populous, siguiendo la idea de guiar a un pueblo en el uso del ancestral poder para calmar y controlar los elementos, único medio posible para evitar su desaparición. Por último, hay que mencionar al muy curioso Rock of Ages de Ace Studio -creadores de Zero Clash- donde un chocante estilo gráfico se pone al servicio de una mecánica muy simple: poner defensas de cara a evitar que una bola gigantesca llegue a la fortaleza que se defiende.
Además de lo mencionado, hay que dar a la bienvenida a una nueva oleada de plataformas y juegos de acción con perspectivas 2D, en lo que parece una nueva tendencia a recuperar sabores añejos. Por ejemplo, en el campo de los plataformas se pudo ver un nuevo Rayman en su perspectiva clásica y haciendo gala del vibrante color que siempre le ha caracterizado. Otros plataformas destacados fueron Limbo, un juego para XBLA en blanco y negro que puede convertirse en el nuevo Braid, y Trine 2, que tiene un aspecto realmente prometedor y que promete superar a su predecesor en todos los aspectos; y todo eso sin contar los plataformas tradicionales por parte de Nintendo, ya mencionados, como Donkey Kong Returns. Para los que busquen más acción: dos Beat'Em Up con animaciones y gráficos impactantes: Shank y Dust: An Elysean's Tail, ambos descargables y ambos con un gran potencial, a los que se les une Necromachina, un título de acción 2D pero más orientado al multijugador y creado por el director de la versión recreativa de Strider, toda una garantía.
Una feria en la línea de lo esperado
No ha habido demasiadas sorpresas en la feria en líneas generales, los juegos que se esperaban han estado presentes, aquellos que estaban dudosos no lo han hecho, como es el caso de Final Fantasy Versus, y las novedades que han surgido son interesantes, pero nada especialmente chocante. Algunos rumores que hubieran subido la intensidad de la feria, como una PSP2 que presentara batalla a la nueva portátil de Nintendo, no se han producido -aunque los mismos rumores indicaban que su presencia en el E3 estaba casi descartada, así que técnicamente todavía podría ser verdad que ciertos estudios ya cuentan con un kit de desarrollo de PSP2-.
Lo más sorprendente quizás ha sido la acertada postura de Nintendo, que se ha ganado la simpatía y la aprobación de los usuarios, arrasando en las votaciones de mejor conferencia previa, tanto en Meristation y sus foros como en otros muchos medios. Fue con diferencia la compañía que más sorprendió con sus proyectos, lo que cimentó con una muy convincente demostración de 3DS, tanto en calidad como en cantidad de proyectos. Microsoft se convierte en la otra cara de la moneda, recogiendo los peores defectos de los últimos años de Nintendo en el E3, aunque con una particularidad: ese movimiento final en la conferencia de Microsoft en el que Don Mattrick, imitando a Oprah, regaló a todos los asistentes el nuevo modelo de Xbox 360, lo que generó cierta polémica sobre si Microsoft estaba intentando comprar a los medios, pero que en el fondo es sólo un movimiento promocional para generar atención -y la prueba es que numerosos medios, incluyendo Meristation, han sido críticos con la compañía y su manera de afrontar este E3 en particular.
Pero si por algo pasará a la historia este E3 2010 será por la ¿desastrosa? conferencia de Konami, que rozó el surrealismo por una serie de circunstancias difíciles de evaluar. Hubo luchadores mexicanos ensarzados en peleas de guantazos, dos productores japoneses -Tak Fujii y Naoki Maeda- realizando dos presentaciones de una manera muy peculiar -siendo justos, es siempre difícil dirigirse al público en un idioma diferente al propio, pero el resultado logrado por ambos fue chocante en el mejor de los casos-, un Igarashi que parecía algo hundido moralmente, productores con miradas amenazantes a sus compañeros... Además, por alguna razón, Konami dejó el streaming de la conferencia repitiéndose sin descanso, y en algunos foros se montó un maratón de "conferencia de Konami" en el que los foreros visualizaban continuamente la conferencia para comentar todos sus detalles. Además de los recuerdos, la conferencia de Konami deja numerosos vídeos de aficionados tratando de hacer justicia a los momentos álgidos de una velada ciertamente memorable para la compañía japonesa.
Anécdotas graciosas aparte, ha sido un E3 a la altura de las expectativas aunque quizás un poco previsible por el hecho de que no ha habido esa noticia impactante que ha sucedido en otros año, fruto especialmente de la competencia entre Microsoft y Sony, este año no ha habido toquecitos por la espalda de Kojima, ni Wada ha saltado en la conferencia de Microsoft para anunciar Versus en 360. Todo ha ido más o menos como se esperaba, con algunas ausencias decepcionantes y algunos descubrimientos interesantes. Habrá que estar atento a la próxima Gamescom y al futuro Tokyo Game Show, para tener una perspectiva más completa de lo que puede pasar en los próximos meses, y Meristation acudirá como siempre a esas citas para acceder a la información más completa del mundo del videojuego.
