[E3] Pocas sorpresas, mucho Kinect

Un año más Microsoft se ha prestado al espectáculo del E3 del más alto nivel. Desgraciadamente la extraordinaria conferencia que ofreció el año pasado ha sido el peor baremo con el que medir la perorata de los grandes nombres de la compañía de Seattle. Todo comenzó por el camino habitual de este tipo de ocasiones, se mostraton algunos de los grandes lanzamientos planeados para este año: Call of Duty Black Ops, Metal Gear Rising (muy interesante lo que mostró Konami), Gears of War 3, Fable 3, Halo Reach... Incluso hubo tiempo para sorpresas como es el caso del acuerdo con Crytek para crear un título exclusivo todavía bajo el nombre en código 'Kingdoms'. Hasta aquí todo interesante, pero no demasiado sorpresivo y con mucho menos bombo y platillo que lo visto el año pasado. 

Fue a partir de este momento cuando el evento comenzó a decaer, con la presentación del acuerdo de exclusividad con ESPN (que a nosotros, españolitos, ni nos va ni nos viene...), con los 'Manolos' americanos dando el cante sobre el escenario. A esto le siguió el momento Natal (aunque ahora se llame oficialmente Kinect, este inventó siempre seguirá siendo Natal), mostrando una vez más todo aquello que ya vimos el día anterior en el espectáculo a cargo del Circo del Sol. De este modo desfilaron una retahíla de títulos de corte familiar (Kinect Sports, Kinect Adventures, Kinectimals, Kinect Joy Ride, Your Shape Fitness Evolved, Dance Central...) que llegaron a su colofón con el acuerdo de exclusividad para crear un título basado en el universo Star Wars en 2011. Se mostró por cierto el mismo video que tuvimos ocasión de ver el día anterior, confirmando las sospechas de que se trataba de una simple actuación, grabada, y no de una demo en tiempo real.

Si bien tras esto llegó el supuesto megatón de la mañana, con Don Mattrick anunciando a bombo y platillo el lanzamiento practicamente inmediato de un nuevo modelo de Xbox 360, más pequeño, con mejores características y que supuestamente arregla al 100% el problema de las tres luces rojas. Una vez más el show tuvo un gran borrón, esta vez fue un leak desde una web italiana que desveló la sorpresa con casi 24 horas de antelación arruinando lo que habría sido un golpe de efecto en toda regla. Sólo el anuncio de que los asistentes a la conferencia recibirían una máquina en su casas logró aumentar los decibelios al punto culminante del evento. 

En resumidas cuentas, una conferencia marcada por el éxito exacerbado del año pasado y por las fugas de información de las últimas horas. Quizá la mala planificación de Microsoft, que presentó Kinect y sus juegos la noche anterior, han sido la clave que ha arruinado el impacto del evento. Pocas novedades en el terreno jugable más clásico y un sabor agridulce para aquellos que esperaban algo más allá del terreno para todos los públicos en cuanto a la cámara de captación de movimiento de Xbox 360. Sin embargo lo que si es cierto es que se puede decir que todos los tipos de jugadores tendrán motivos para alegrarse de cara a las navidades. Veremos que hacen el resto de compañías, Microsoft ya ha puesto sus cartas boca arriba.