Dark Void, Impresiones
La nueva aventura de ciencia ficción de Capcom presenta una variedad de géneros que mezcla la acción en tercera persona con espectaculares luchas en el cielo y una ambientación post-apocalíptica en un mundo lleno de sorpresas.
Dark Void será, si no hay otro retraso de última hora, uno de los juegos más apetecibles del inicio de 2010. Capcom retrasó la salida de esta nueva franquicia para añadir nuevas funcionalidades al juego, que se encuentra ya en la recta final de su producción. Un auténtica mezcla de géneros en el que se pretende dar la libertad para volar por grandes mapeados y quilos de acción al más puro estilo Gears of War. Después de más de dos años desde su primera aparición, Dark Void inicia la cuenta atrás para su despegue el próximo mes de enero. Y ya muestra todas sus cartas para el juego que saldrá en PC, Playstation 3 y Xbox 360.
No es sencillo intentar clasificar la nueva propuesta de Capcom. Su original propuesta, en la que permite luchar y moverse tanto por tierra como por aire gracias al jetpack unido al protagonista principal, abre un abanico de posibilidades enorme a los desarrolladores de cara a diseñar el desarrollo de la aventura. Acción en tercera persona con todos los elementos clásicos de la presente generación, como el sistema de cobertura popularizado con Gears of War, y un arcade de aviación todo en uno. Will, el humano que deberá enfrentarse a la raza alienígena The Watchers, no echará en falta ningún elemento para cumplir con su objetivo.
Capcom ha arrojado un poco más de luz respecto a la trama principal de Dark Void, gracias a las novedades presentadas en éste último tramo de año. El protagonista de esta nueva aventura se encuentra en medio de un mundo extraño habitado por estos robots mutantes mencionados anteriormente. A pesar de la dificultad de la puesta en escena, Will no es el único humano presente en Void, el planeta en el que transcurre la acción. Aquí aparece la figura de Nikola Tesla, una de las cabezas visibles del reducto de humanos que lucha contra los alienígenas y quién ha diseñado el jetpack que acompañará durante toda la aventura al protagonista principal. Otra de las creaciones de Tesla es un vehículo de rescate para conseguir escapar del hostil planeta. Y ahí empieza la acción.
Ark es una de las últimas esperanzas de los humanos que se encuentran en Void, dónde Will ha ido a parar (como ya se contó en las primeras fases del desarrollo del juego) después de pasar por encima del triángulo de las Bermudas. La acción empieza con el ataque de los Watchers al vehículo diseñado por Tesla. Es entonces cuando Will sube a lomos de un avión para iniciar su particular cruzada aérea con los alienígenas. Todo en un nivel que se convierte en una síntesis de lo que ofrece Dark Void. Nos explicamos.
Durante esta primera toma de contacto inicial se puede comprobar cada uno de los estados de batalla que presenta la aventura de Capcom. En este inicio, la lucha aérea transcurre con fluidez y éxito. Los creadores de Crimson Skies son también los encargados del desarrollo de esta nueva franquicia, y los movimientos en el cielo para terminar con todos los enemigos responden a la perfección. Además, contamos con la particularidad del protagonista, que con su jetpack puede abandonar el avión propio cuando se encuentre en llamas para mantenerse en la zona de batalla e intentar acabar y robar otros vehículos aéreos de la flota enemiga.
La inspiración en Gears of War es clara y evidente. Después de completar con éxito la primera fase de esta misión inicial, donde los desarrolladores (por experiencia e historial) juegan con ventaja, la acción pasa a llevarse a cabo a ras de suelo. En ese momento Will mostrará todas sus tácticas de combate, conocidas a lo largo de la presente generación en muchos otros juegos. El protagonista puede cubrirse y disparar por encima o por los lados. Cuenta con un arsenal variado, desde armas propias de los humanos hasta otras más avanzadas y que son creación de los Watchers, así como la posibilidad de ataques secundarios como granadas. O golpes cuerpo a cuerpo.
Will puede atacar con sus propios puños. La secuencia es sencilla como si de un golpe de culata de la arma de turno se tratara (un solo botón) pero la puesta en escena es más gratificante, debido en parte a que no se trata de asestar un golpe mortal y repetitivo, si no que puede dar un golpe para luego ejecutar el enemigo. Efectista visualmente aunque el resultado, en el fondo, sea el mismo que en otros juegos del género. Y sin llegar a la posibilidad de combos que por ejemplo tiene la saga Uncharted. Una de las ventajas que tiene el protagonista de Dark Void respecto otros grandes héroes del género como Marcus Fenix o Nathan Drake es el jetpack. Éste da un plus de ventaja a Will, ya que en cualquier momento puede usarlo para cambiar la situación de combate y poder buscar una ubicación mejor para acabar con las hordas enemigas.
Dark Void también contará, como en los grandes juegos de Capcom, con la presencia de enormes enemigos finales a los que derrotar siguiendo algunos patrones. En este sentido, se cierra el círculo de todo lo que ofrece la nueva propuesta de la compañía nipona con la presencia de este tipo de enemigos de final de fase, en los que hay Quick Time Events que sirven para realizar momentos cinematográficos y acabar con los enemigos todavía más peligrosos.