Batman: Arkham Asylum
- PlataformaPS393609PC9
- GéneroAcción, Aventura
- DesarrolladorRocksteady Studios
- Lanzamiento28/08/2009 (PS3, 360)18/09/2009 (PC)
- TextoEspañol
- VocesEspañol
- EditorEidos Interactive
El Regreso del Caballero Oscuro
Batman, uno de los tres pilares icónicos del mundo de las viñetas, recibe su mejor juego lanzado hasta la fecha, equivalente en formato interactivo a Batman: The Dark Knight Returns en los cómics o El Caballero Oscuro en el cine. El Asilo Arkham, hogar de los más peligrosos y dementes criminales, nos espera.
'Pero yo no quiero estar entre locos', señaló Alicia. 'Oh, no puedes evitarlo', dijo el gato. 'Aquí todos estamos locos. Yo estoy loco. Tú estás loca ' '¿Cómo sabes que estoy loca?', preguntó Alicia. 'Debes estarlo', dijo el gato. 'De otra forma no habrías venido aquí.'- Alicia en el País de las Maravillas, de Lewis Carroll.
En 1920, después de la muerte de su madre desquiciada, el brillante psiquiatra Amadeus Arkham empezó a convertir su casa ancestral en un hospital para el tratamiento de enfermos mentales. No sospechaba que había puesto en movimiento una cadena de eventos de pesadilla, de graves consecuencias. Más de medio siglo después, el Asilo Arkham para Criminales Dementes es un lugar de corredores tenebrosos y sombras opresivas. Una casa salida de un mal sueño. Un acertijo de piedra y madera, que siempre ha estado sin resolver. Durante años, los enemigos de Batman, dementes y deformes, han estado prisioneros dentro de estos muros claustrofóbicos. En celdas acolchadas y sótanos oscuros, se han cobijado y hecho planes, mientras sueñan con el día en que se han de levantar para dominar al mundo de la razón.
La madre de Amadeus Arkham y su peculiar forma de alimentarse |
Ese día ha llegado. Es el primero de abril, y los lunáticos se han apoderado del asilo. Guiados por Joker, lanzan un reto terrible contra Batman, el único hombre responsable del cautiverio de todos ellos. En una competencia martirizante de astucia contra sus peores enemigos, Batman debe descender hasta el corazón de la oscuridad, enfrentar sus mayores miedos y aprender la verdad de su propia experiencia o sufrir por la demencia de los demás. '¿Miedo? Batman no le teme a nada', asegura el Hombre Murciélago. 'Pero yo sí tengo miedo', se presta a añadir. 'Temo que Joker tenga razón respecto a mí. A veces yo cuestiono la racionalidad de mis actos. Y temo que al atravesar las rejas de este asilo cuando entre a Arkham y las puertas se cierren tras de mí sea como llegar a casa.'
Los dos párrafos que acabáis de leer pueden servir como perfecta introducción a uno de los mejores cómics de la historia del Hombre Murciélago, Batman: Arkham Asylum; de hecho, dichos párrafos (así como algunas citas que salpican el presente análisis) han sido extraídos de la mencionada obra. Creado en 1989 por Grant Morrison (guión) y Dave Mckean (dibujo), Arkham Asylum no está considerado como el mejor cómic del Caballero Oscuro (ese honor pertenece a The Dark Knight Returns, de Frank Miller), pero sí es unánimemente aclamado como el más oscuro, retorcido y terrorífico de todos. Ahora, 20 años después, nos llega un videojuego con idéntico nombre, similar punto de partida y mismo escenario. Pero no nos confundamos. Batman: Arkham Asylum, el videojuego, no es una adaptación a formato interactivo de Batman: Arkham Asylum, el cómic. Eso sí, a lo largo de la aventura que nos disponemos a afrontar se nos ofrecerán no pocos guiños a dicha obra. Y no será la única en ser homenajeada. Batman: Arkham Asylum (Demostración Descargable para PC) reúne en un único videojuego lo mejor de los 70 años de historia del personaje, dando como resultado no sólo el mejor título que el Hombre Murciélago ha protagonizado hasta la fecha, sino también el mejor juego de superhéroes de todos los tiempos.
El extremo cuidado puesto en el desarrollo de esta obra es evidente en todos y cada uno de sus apartados. De su guión se ha encargado Paul Dini, productor y escritor de la fenomenal trilogía de series de animación sobre Batman (Batman The Animated Series, The New Batman Adventures y Batman Beyond) emitidas a lo largo de diez años, desde 1992 a 2002, ganadoras de varios premios Emmy (el propio Paul Dini conserva en su vitrina cinco de ellos). Los principales actores de doblaje de dichas series (Kevin Conroy como Batman, Mark Hamill -eterno Luke Skywalker- como Joker y Arleen Sorkin como Harley Quinn, a lo que hay que sumar la aparición de Ron Perlman -Hellboy- como Bane) han puesto voz en las versiones del juego aparecidas en países de habla inglesa. Como broche final, el estudio Wildstorm, propiedad de DC Cómics (compañía a su vez propietaria de Batman), se ha encargado de los sorprendentes y en muchos casos incluso sobrecogedores diseños de personajes (ojo a Killer Croc o el Espantapájaros).
Tal derroche de talento ha sido plenamente aprovechado por Rocksteady, estudio encargado del desarrollo del presente videojuego, implantándolo en una absorbente y variada mecánica, engalanando la mezcla resultante con un fenomenal apartado gráfico repleto de todo lujo de detalles en el que el ya más que familiar Unreal Engine 3 luce mejor aspecto que nunca, sobre todo en la versión para ordenador, que ha llegado a las tiendas semanas después. Las expectativas y el hype que rodeaban a Batman: Arkham Asylum durante su etapa de desarrollo estaban por las nubes, más aún tras la cancelación del proyecto auspiciado por Pandemic que pretendía llevar la película El Caballero Oscuro hasta nuestras consolas. Al fin tenemos el juego en nuestras manos, y podemos clamar a los cuatro vientos que ha cumplido con denostada solvencia todo lo que se esperaba de él. Damas y caballeros, con todos ustedes Batman: Arkham Asylum, juego que desde ya debe ser considerado el equivalente en formato interactivo a Batman: The Dark Knight Returns en los cómics o El Caballero Oscuro en el cine.
La casa de la locura
'Ahora debes sentirte indefenso, supongo. Esta casa hace cosas con la mente. ¿Sabes? A veces A veces creo que el asilo es una cabeza. Estamos dentro de una gran cabeza, y existimos porque nos sueña. Quizás es tu cabeza, Batman. Y Arkham es un espejo. Nosotros somos tú.'- Jervis Tetch, también conocido como Sombrerero Loco, ofreciendo su particular versión de qué es Arkham.
Todo aquel aficionado a Batman que posea un mínimo conocimiento sobre el personaje sabe sin duda que buena parte del panteón de enemigos del Hombre Murciélago poseen una característica en común: están locos, desquiciados, trastornados, perturbados, pasados de vueltas Obviamente el más claro ejemplo de ello lo encontramos en Joker, la principal némesis del Caballero Oscuro, ya que, como suele decirse, en el país de los ciegos el tuerto es el rey. Por ello, no es de extrañar que el lugar donde Batman encierra a los criminales que atrapa en sus patrullas nocturnas se encuentre lejos de ser una cárcel. El Asilo Elizabeth Arkham para Criminales Dementes es en realidad un sanatorio mental, un manicomio, una gigantesca casa de la locura entre cuyas paredes la demencia, el delirio y el caos campan a sus anchas. Los muros desconchados cubiertos de sangre seca y retorcidas inscripciones grabadas únicamente con las uñas, supuestos galimatías sin sentido que tal vez sí, tal vez no, oculten en el interior de cada palabra descolocada y aislada del resto los insondables misterios del universo; los lúgubres, tenebrosos y vacíos pasillos que tienen la podredumbre como calzado y una hilera de parpadeantes y sucias bombillas a modo de tocado; las innumerables puertas tras las que se esconden todas y cada una de las miserias que el ser humano es capaz de engendrar Todo ello nos advierte de que Arkham no es ninguna broma.
Batman: Arkham Asylum comienza con el final de una nueva partida en el eterno juego en el que Batman y Joker llevan décadas participando. El Payaso del Crimen escapa de Arkham, siembra el caos en Gotham, mata a alguna que otra víctima inocente antes de que el Caballero Oscuro logre atraparlo, y entonces es devuelto a su fría y sucia celda en Arkham, lugar del que no tardará mucho en volver a escapar para que este eterno juego del gato y el ratón comience de nuevo. Sin embargo, esta vez es distinto. Joker se rindió en cuanto vio aparecer a Batman, sin entablar combate alguno; y es que el también llamado Agente del Caos ha decidido que está cansado del papel de ratón, por lo que inicia una revuelta en el sanatorio mental, liberando a los presos al tiempo que aísla en su interior al Caballero Oscuro, el comisario Gordon y los funcionarios que se encargan del mantenimiento y vigilancia de las inquietantes instalaciones. Ahora Joker es el gato, y piensa dar caza a Batman al tiempo que se afana en quebrar la ya de por sí inestable salud mental del Hombre Murciélago.
A partir de aquí comienza una absorbente y sobrecogedora aventura dotada de un guión excepcional, en el que destaca sobre todo el cuidado y respeto con el que han sido retratados todos los personajes. Se nota que Paul Dini conoce a la perfección a los participantes en este drama, subrayando lo que funciona de ellos al tiempo que desecha lo que no. Pero ésta es sólo la primera de una larga lista de virtudes entre las que se encuentra la propia mecánica de Arkham Asylum. Son varios géneros los que se mezclan a la hora de construir la jugabilidad del título que nos ocupa: lucha, infiltración, exploración e investigación. La lucha se desarrolla al más puro estilo beat 'em up, recordando a los grandes clásicos de dicha disciplina gracias a la sencillez de su mecánica (sólo será necesario el uso de tres botones), lo directo de los combates (el sistema se basa en atacar, bloquear y contraatacar) y la eficacia de su resolución. Dicho sistema lleva por nombre freeflow, y la llave para dominarlo es saber calcular el timing correcto a la hora de bloquear, golpear o aturdir a los enemigos que no hemos podido golpear en un primer momento.
Así, atacaremos en la dirección en que mantengamos pulsado el stick analógico izquierdo, mientras nuestros enemigos no dudarán en rodearnos para tratar de abalanzarse sobre nosotros desde múltiples ángulos. Pero el superior entrenamiento del Caballero Oscuro en un sinfín de disciplinas marciales le permitirá bloquear cualquier ataque venga de donde venga, siempre que pulsemos a tiempo el botón correspondiente, para posteriormente pasar a desencadenar sobre el adversario toda una sinfonía de dolor en forma de huesos rotos y dientes saltando por los aires. Eso sí, tal y como hemos mencionado, el sistema de lucha de Batman: Arkham Asylum está lejos de asimilarse a un machacabotones al uso. Pulsando los botones de ataque repetidamente y sin orden ni concierto no llegaremos a ningún sitio, dado que el sistema de combos y contras requiere saber cómo y cuándo pasar tanto a la ofensiva como a la defensiva.
Las secciones de infiltración, completamente necesarias cuando la opción de combate directo al encararnos con enemigos fuertemente armados se convierte en un suicidio (Batman, por muchas mallas, máscara y capa que vista, es un humano carente de superpoderes, por lo que cualquier arma de fuego puede acabar con él en un instante), nos permitirán acechar a los adversarios desde las sombras o sobre alturas que nos brindarán un gran campo de visión del entorno sin correr el riesgo de ser localizados. Deberemos medir bien nuestros movimientos, averiguando qué enemigos son los más peligrosos (y por tanto los que deberemos eliminar primero) mediante nuestra visión de detective, la cual resaltará adversarios y elementos interactivos del escenario aunque éstos se oculten tras gruesas paredes.
Tras trazar un minucioso plan de ataque, pasaremos a abatir criminales uno a uno mientras observamos con satisfacción cómo el pánico va adueñándose de nuestros contrincantes al no saber qué les está tumbando. Esta mecánica de infiltración y eliminación posee no pocas reminiscencias con Batman Begins, el videojuego basado en la película homónima, aunque el sistema en Batman: Arkham Asylum es mucho más variado y satisfactorio. Descolgarnos desde altas gárgolas para atrapar en volandas a un enemigo, hacer saltar paredes por los aires para eliminar varios criminales a la vez, colocar trampas que los precipitarán al abismo todo será posible. Eso sí, las secciones de infiltración pueden llegar a ser frustrantes en los momentos de mayor dificultad, debido a que en ocasiones el control no es todo lo preciso que sería deseable cuando la rapidez es esencial para alcanzar la victoria.
Nuestra maestría a la hora de combatir o usar la infiltración para eliminar objetivos nos permitirá acumular puntos de experiencia, necesarios para aumentar nuestra salud, adquirir nuevos movimientos de ataque y mejorar las armas de nuestro arsenal, las cuales usaremos tanto para combatir a los enemigos como para sobrevivir al inhóspito entorno que es el Asilo Arkham, un gigantesco complejo formado por seis grandes edificios que podremos explorar a placer. Y es que el Caballero Oscuro, como no podía ser de otra manera, se moverá con denostada agilidad por el inmenso entorno. La capa le permite planear, por lo que podremos descender desde cualquier altura sin sufrir el menor daño, y el garfio posee un amplio rango de alcance, permitiéndonos ascender y encaramarnos a cualquier sitio por muy alto o lejano que se encuentre. En general, la aventura da la impresión de ser un pequeño sandbox que, si bien no deja de ser lineal a la hora de seguir la historia, nos ofrece la suficiente libertad para movernos y hacer lo que nos venga en gana.
Eso sí, muchas habitaciones están bloqueadas, siendo en su mayoría las más interesantes de visitar, por lo que deberemos ingeniárnoslas pirateando paneles de seguridad, o usar directamente el gel explosivo para derribar paredes y así acceder a los secretos que dichas estancias esconden. La investigación, el cuarto y último elemento implementado en la jugabilidad de Arkham Asylum, será esencial para desvelar dichos secretos. La visión de detective no solo nos permite detectar enemigos y advertirnos de su grado de peligrosidad, ya que también podremos usarla para localizar al aterrorizado personal del asilo o escanear el entorno para rastrear pistas que nos permitan continuar hacia el siguiente objetivo. Todos los elementos importantes quedarán resaltados con esta particular visión infrarroja que Batman lleva acoplada a su máscara, convirtiéndose en una herramienta de gran utilidad. Eso sí, en muchas ocasiones facilita en demasía el encontrar pistas, asideros o salidas ocultas en sistemas de ventilación, al tiempo que nos informa en todo momento de la mejor forma de atacar al enemigo en las secciones de infiltración. Nos encontramos ante uno de los pequeños lunares del juego, y es que habría sido deseable limitar de algún modo la visión de detective para dar al jugador más desafíos que afrontar.
Joker también cuenta con una visión de detective, aunque algo menos sofisticada que la de Batman |
Y ya para terminar con la investigación, no podemos dejar de mencionar el soberbio sistema de puzles y acertijos (nada más y nada menos que 240 en total) que nos acompañará a lo largo y ancho de la aventura. Enigma, a través de nuestro canal de comunicación, se encargará de retarnos por medio de absorbentes puzles visuales de cada vez mayor dificultad, que en ocasiones requerirán echar mano de los conocimientos poseídos por el jugador acerca del batuniverso. La resolución de dichos acertijos es uno de los principales motivos para engancharnos al juego, dado que nos permitirán desbloquear nuevos niveles en el modo desafío, fichas de personajes, cintas en las que el personal del sanatorio entrevista a los más peligrosos internos allí confinados, e incluso mensajes del mismísimo Amadeus Arkham, fundador del asilo, en los que narrará la trágica historia del sanatorio mental en una clara alusión al comic de Grant Morrison en el que el juego se inspira. Es precisamente este material desbloqueable el que hace hincapié en los valores de producción del título. Se nota de calle que en Rocksteady son fans acérrimos de todo lo que rodea al Hombre Murciélago, ya que las cintas de entrevistas y fichas de personajes están repletas de todo tipo de detalles. Desde el título, número y fecha de salida del cómic donde apareció por primera vez el personaje en cuestión hasta un pequeño resumen a modo de biografía, todo está ahí para goce y disfrute del usuario y fan del Caballero Oscuro.
Bienvenido al manicomio
'Debo contener a las presencias que rondan por estos cuartos y escaleras estrechas. Las rodearé con barras, muros y cercas electrificadas, y rezaré para que nunca se liberen. Soy la novia del dragón, el hijo de la viuda. Alas de cuero me cubren. Ya veo la virtud de la locura, pues este país no conoce ninguna ley o atadura. Compadezco a las pobres sombras, encerradas en esa prisión Euclidiana que es la cordura.'- Amadeus Arkham, fundador del Asilo Elizabeth Arkham para Criminales Dementes, tras pasar a convertirse en un paciente más de su propio sanatorio mental.
Como mencionamos más atrás, Batman: Arkham Asylum es un juego que destaca sobre todo por la poderosa y turbadora presencia de los personajes que lo pueblan, o más bien podría decirse de los personajes encerrados en él. Sin embargo, los combates contra jefes finales, en los que nos enfrentaremos a enemigos clásicos del Hombre Murciélago como Bane, Killer Croc o Hiedra Venenosa, no han sido implementados todo lo bien que sería deseable. Son enfrentamientos excesivamente contextualizados, con poca o nula variedad de acción, en los que sólo deberemos limitarnos a seguir sus patrones de ataque para vencerlos. El único adversario que realmente logrará sorprendernos (y de qué manera) será el Espantapájaros, el cual ha recibido un tratamiento excepcional. Sus apariciones y acciones son lo mejor del juego, así que dejaremos que descubráis por vosotros mismos las sorpresas que el personaje nos tendrá reservadas. Eso sí, os daremos una pista: cada vez que el Espantapájaros haga acto de presencia será inevitable pensar en cierto personaje inolvidable de la saga Metal Gear, el cual ocultaba su semblante tras una máscara de gas. En lo referente a enemigos estándar, por desgracia encontramos poca variedad. Todos parecen ser gemelos, y prácticamente solo se diferenciarán por las armas que portan. Los movimientos de los personajes adquieren un mayor realismo y una mayor versatilidad en la versión para PC frente a la de consolas gracias a la utilización de los gráficos de Ageia.
Completar la aventura principal nos llevará unas diez horas de juego, siendo otro de los puntos flacos de Batman: Arkham Asylum. Puede parecer una duración aceptable para un título de estas características, pero el juego es tan absorbente y apasionante que uno desearía que llegara a durar al menos cien horas. Eso sí, los acertijos de Enigma y el Modo Desafío alargarán la experiencia algo más, lo cual es muy de agradecer. Sin embargo, ello no logra paliar la sensación final de haber disfrutado de un juego relativamente corto, algo por otro lado inevitable al tener en cuenta que acabamos de vivir una de las mejores experiencias que nuestra querida afición nos ha brindado a lo largo del presente año.
El citado Modo Desafío nos ofrece un buen número de niveles aislados, en los que deberemos eliminar enemigos a base de golpes o usando la infiltración. La dificultad será cada vez mayor, y el premio a obtener consistirá en diversas medallas y la posibilidad de subir nuestras puntuaciones a las clasificaciones online creadas a tal efecto. Muchos de estos niveles se desbloquean a medida que avanzamos en la aventura principal, mientras otros se ofrecerán en un futuro como contenido descargable.
Entrando en el apartado visual, no podemos más que alabar el trabajo de los grafistas de Rocksteady, quienes han exprimido a fondo el motor Unreal Engine 3, firmando uno de los mejores usos que se recuerdan a una de las herramientas más utilizadas (por no decir la que más) de la presente generación. La versatilidad del UE3 está fuera de toda duda, y precisamente buena prueba de ello es este Batman: Arkham Asylum, visualmente impactante en todo momento. La fluidez del juego alcanza su máximo apogeo en equipos de gama alta, y el texturizado general es de gran nivel. La atención al detalle se ha llevado hasta sus últimas consecuencias, por medio de unos escenarios que retratan a la perfección la arquitectura, antigüedad, inmensidad, podredumbre y dejadez del complejo Arkham. Cada una de las habitaciones, pasillos, sótanos y grandes salas del sanatorio mental invitan a que nos detengamos a admirar su horripilante belleza, la cual logrará ponernos los pelos de punta en más de una ocasión, poniéndose al servicio de una cámara que se porta de forma brillante en casi todo momento. Camillas sucias y ensangrentadas cubiertas de correas, paredes en las que los reclusos han dejado testimonio de su locura por medio de escalofriantes pintadas realizadas con métodos no menos turbadores, jaulas capaces de poner los pelos de punta al mismísimo Hannibal Lecter En definitiva, el lugar más lúgubre y aterrador de Gotham ha sido retratado tal y como debe ser. Amadeus Arkham estaría orgulloso del resultado.
Los modelados de personajes también han sido trabajados hasta el extremo, desde el carácter principal hasta el último y más desquiciado de los reclusos confinados en el sanatorio mental. Batman luce mejor aspecto que nunca, con un traje a medio camino entre armadura corporal y el disfraz de licra característico de los superhéroes. Mención especial a su capa, espléndidamente animada y recreada, con una física que emula a la perfección su peso y elasticidad. La tecnología Phsyx Ageia mejora más si cabe el acabado técnico del juego, ofreciendo movimientos suaves y realistas en la versión para PC sobre todo en los combates cuerpo a cuerpo y en los elementos interactivos del escenario. Otro aspecto interesante y exclusivo de la versión para ordenador es que es compatible con la tecnología 3D de NVIDIA, compañía que ha apostado de lleno por la obra de Rocksteady. Además, a medida que el juego avanza, los cortes y magulladuras serán cada vez más visibles en la vestimenta de Batman, otra prueba más de que la atención al detalle por parte de Rocksteady casi ralla en la obsesión. Desde luego, los diseños de Wildstorm (el Joker de Batman: Arkham Asylum es clavadito al dibujado por Jim Lee, jefazo de dicho estudio, en los cómics del Hombre Murciélago) no podían haber sido mejor recreados en el juego. Eso sí, las complexiones hipermusculadas abundarán por doquier, lo que no sienta demasiado bien a personajes como el comisario Gordon, quien dará la impresión de haber estado desayunando tortitas de esteroides durante los dos últimos meses.
Pasemos al apartado sonoro. Como apuntamos en la introducción al presente análisis, la versión de habla inglesa ha contado con unos actores de doblaje de auténtico lujo, recayendo los papeles principales en los encargados de poner voz a la trilogía de series de animación sobre el Caballero Oscuro que tan buen sabor de boca dejaron a los aficionados al Hombre Murciélago. Pero claro, dicho doblaje no habría tenido ningún valor para el aficionado español que no controlara con solvencia la lengua de Shakespeare. Afortunadamente, Eidos ha llevado a cabo un fenomenal trabajo de localización al castellano, en el que han participado algunos de los mejores actores de doblaje de este país, entre los que se encuentra Claudio Serrano en el papel de Batman (también dobla al Hombre Murciélago en Batman Begins y El Caballero Oscuro, por lo que su voz os sonará más que familiar) y José Padilla, toda una institución en el mundo del doblaje español (mencionar como curiosidad que fue el encargado de doblar a Mickey en Kingdom Hearts II, ya que es la voz habitual en nuestro país del ratón de Disney), en el papel de Joker.
El trabajo de sincronización labial es también bastante notable y se mantiene intacto en la versión de ordenador, aunque hay momentos contados en los que patina, ya que veremos a los personajes mover sus labios sin decir una sola palabra. En definitiva, una soberbia localización al castellano, que nada tiene que envidiar a la anglosajona. Todo un detalle por parte de Eidos. En cuanto a la música, los elegidos para componer la BSO de Arkham Asylum han sido Nick Arundel y Ron Fish (quien es conocido entre los aficionados a los videojuegos por formar parte del equipo de compositores que ponen música a la saga God of War). El resultado es notable, dado que la banda sonora será un agradable acompañante durante toda la aventura, aunque se echa de menos algo de épica en momentos puntuales, así como temas concretos dedicados en exclusiva a personajes como Batman o el Joker.
Excelente
Un título referente en su género, que destaca por encima de sus competidores y que disfrutarás de principio a fin, seguramente varias veces. Un juego destinado a convertirse en clásico con el paso de los años. Cómpralo sin pestañear.