Un auténtico tesoro

Item: Metroid Prime Trilogy
Rating: 9

Samus vuelve y lo hace por la puerta grande. Nintendo ha decidido reeditar las serie Prime, una de las más aclamadas de los últimos años, en un único paquete que garantiza más de 80 horas de juego, cientos de misterios y, lo que es más importante, una trama tan interesante como adictiva que ningún aficionado debería dejar escapar. La mejor forma de comenzar esta nueva temporada en un regalo principalmente destinado para aquellos jugadores que no tuvieron tiempo para descubrir la historia de esta heroína virtual. Nuevos controles y pocas novedades en una trilogía de ensueño.

Will van Dijk

Actualizado a 10 de marzo de 2012 14:15 CET

Samus está de moda. La aparición de una nueva entrega original en la franquicia que abandera la atractiva protagonista ha propiciado que Nintendo, en una inteligente salida comercial, haya decidido publicar las tres últimas aventuras de la heroína en un mismo pack. Siendo más específicos, la trilogía desarrollada por Retro Studios que todavía hoy es considerada una de las más importantes de la pasada generación, entendiendo Corruption como el broche de oro que debutaba en Wii hace aproximadamente dos años. En todo este tiempo no ha habido un solo videojuego capaz de rivalizar con la calidad que atesora Prime. A estas alturas sobra decir que gran parte del éxito que ha cosechado la serie en la última década tiene mucho que ver con el trabajo del estudio norteamericano. Era difícil portar el mundo bidimensional que tan buenas críticas había recibido a lo largo de su historia aprovechando la potencia de Game Cube, aunque por fortuna el resultado no pudo haber sido más gratificante.

La historia cuenta que en Nintendo 64 ya se sufrió lo indecible para tratar de devolver a Samus a la palestra de la actualidad. Ninguno de los productores de la franquicia encontró la vía adecuada para que el tan deseado cambio de dimensión tuviese lugar. Bien fuese por falta de potencia o sencillamente por dejar descansar a la franquicia, la compañía japonesa tardó casi una década en volver a presentar una aventura que realmente ofreciese un argumento bien elaborado, requisito indispensable en la actualidad para cualquier juego en primera persona que se precie. A lo expuesto hay que añadir la presencia de Retro Studios, el primer grupo occidental que tomaba las riendas de la serie, muy a pesar de Yoshio Sakamoto, que tras la muerte de Gunpei Yokoi había ido perdiendo progresivamente la batuta de la producción.

Al estudio habitual de la serie se le encomendó la parte tradicional que conocemos por las portátiles, con Fusion y Zero Mission como exponentes icónicos del trabajo de R&D1. Los entresijos de este estudio, así como de la época anterior a las 16Bits eran explicados meticulosamente en el reciente artículo que publicaba esta Casa a modo de retrospectiva, por lo que desde él se puede acceder a toda la información relevante que atañe a este periodo. El que viene relacionado con la serie Prime comienza ya en el nuevo siglo, concretamente en el año 2002, centrándose fundamentalmente en otorgar una trama coherente con el resto de adaptaciones que habían aparecido en el mercado hasta la fecha. Los chicos de Retro crearon un mundo que supura la ambientación espacial de la franquicia por los cuatro costados, con la única diferencia de que esta vez toca vivir la aventura desde los ojos de la heroína, ya no desde la lejanía que suponía el motor gráfico en 2D.

Bienvenidos a Tallon
Precisamente uno de los motivos que empujaron a Nintendo a apostar por la publicación de esta trilogía en un mismo paquete, amén de la anodina aceptación que ha recibido la serie New Play Control en Japón -a la que originalmente pertenecen las dos primeras aventuras- , se encuentra en la necesidad de presentar una historia con pies y cabeza, que no requiera un gasto económico notable. Es evidente que también supone una inteligente forma de lanzar la franquicia otra vez al mercado, al éxito, al boca a boca de los aficionados que desde hace algún tiempo habían centrado su mirada en otras series. En cualquier caso, haciendo alusión al nexo temporal que sigue cada aventura de la heroína, la subsaga Prime comienza justo al finalizar el Metroid original de NES para finalizar justo antes de Metroid II: Return of Samus.

Curiosamente son los anuncios publicitarios los que han generado cierta confusión respecto a esta información. Algunos medios aseguraban que la historia de Metroid Prime tenía lugar a raíz de la destrucción de Zebes. De hecho, se aseguraba que el meteorito que aparece en esta aventura es un fragmento del susodicho planeta, una teoría que hasta la fecha sigue en el aire a falta de alguna confirmación oficial. Sea cual sea el lapso en el que se quiera incluir Prime, lo único que sabemos a ciencia cierta es que supuso una oportunidad de oro para que Samus conociese más sobre su pasado, o más concretamente sobre la raza que le otorgó el Power Suit que ha caracterizado, entre otros muchos elementos, la personalidad de la cazatesoros. Sobra decir que existe un factor común en la ambientación de las tres aventuras, cuya representación va tomando paulatinamente contrastes más oscuros, cada vez más centrados en la personalidad de la protagonista.

En Metroid Prime Trilogy tenemos ocasión de conocer las distintas localizaciones hacia las que se dirige Samus, la exploración que sigue realizando a las órdenes de las Galaxia Federal que, por un motivo u otro, fuerza a la heroína a acudir en una misión aparentemente suicida por las condiciones en las que se desarrolla. El mayor acierto de Retro Studios, además de planificar una trilogía que sólo sería aceptada tras las buenas críticas recibidas por parte de la prensa especializada, fue el combinar los elementos más importantes de las aventuras en 2D sin menospreciar las novedades que por fuerza mayor debía incluir la jugabilidad. Para sorpresa del público, el resultado fue sencillamente loable, convirtiendo a Metroid Prime en el juego mejor valorado de la pasada generación según páginas prestigiosas del calibre de Metacritic o Gamerankings.

Si por algo se caracteriza la subsaga es por su peculiar forma de abordar el universo Metroid, basando la acción en el HUD del que dispone la protagonista en todo momento. Capaz de hacer un completo registro de todos los elementos que rodean el mundo en el que se encuentra, fue una de las bases del éxito al seguir invitando a los jugadores a disputar una y otra vez la misma aventura hasta exprimir el 100 % de los recursos que el jugador podía obtener durante la exploración. Del mismo modo un mapa acompañaba en todo momento indicando groso modo la dirección en la que seguir caminando para poder descubrir los secretos que esconde el argumento. Es, en resumidas cuentas, una evolución en toda regla que también tiene mucho que ver con el aspecto gráfico y sonoro del producto. Sin duda alguna, Retro Studios entendió que la única forma de obtener cierto prestigio por esta obra era cuidar hasta la saciedad todos y cada uno de sus detalles, y efectivamente así fue.

En cuanto respecta al plano tecnológico, esta conversión no aporta excesivas novedades al paquete original. Se ha mejorado ligeramente la apariencia gráfica, añadiendo el popular efecto light bloom a los escenarios y, por ende, también a la mayoría de las texturas. De esta forma se suaviza la apariencia de los mapeados más grandes, donde el equipo técnico se encontró alguna que otra dificultad para hacer que el juego luciese un aspecto digno en su conversión a Wii. Ya pudimos dar buena cuenta de este hecho al probar por primera vez la adaptación NPC que aparecía en Japón hace unos meses, si bien el motor gráfico sigue estando a las altura de las circunstancias, sin ralentizaciones ni problemas de peso a tener en cuenta.

¿Novedades?
En la línea de lo comentado anteriormente, es obvio que el paquete -en forma de DVD9, de esos que dañan terriblemente la lente de la consola- centra su atención en los dos primeros títulos de la franquicia. Así pues, Metroid Prime 2 sigue la línea de su antecesor en todo lo que respecta a los aspectos jugables. Se mejorado ligeramente la jugabilidad, que esta vez pasa directamente por el control tradicional de los shooters de Wii. El nunchuk permite desplazar a la heroína, el wiimote apuntar, disparar e incluso modificar el visor para obtener información útil. Cada botón secundario del mando cumple una función determinada. El sistema no es especialmente intuitivo, aunque todo aquel que haya disfrutado de Corruption puede hacerse una idea de lo que va a encontrar en Trilogy.

Por suerte el sistema de control no es el único añadido de peso que tener en cuenta -si bien sí el más importante-. También se ha incluido la tradicional opción widescreen, que permite ver la acción a pantalla completa haciendo uso de las nuevas tecnologías, así como determinados puntos que se han corregido en la jugabilidad de sendas entregas. La dificultad es uno de los elementos, por poner un ejemplo, donde más se ha incidido. Metroid Prime 2 presentaba algunos defectos en este sentido que en su día fueron acusados por los aficionados, así como también determinados defectos en el plano gráfico que se han corregido. En la línea del resto de reediciones que aparecen en Wii en los últimos tiempos con el sello de Nintendo, hay poco que se pueda acusar en cuanto a novedades se refiere.

En última instancia también cabe destacar la presencia de un modo multijugador que permite jugar a cuatro bandas, aunque no hay ni rastro de la tan deseada infraestructura que facilite el poder disputar unas partidas con un jugador de cualquier parte del globo. La única forma de poder hacer uso del multijugador pasa por el tradicional sistema adhoc con cuatro mandos al unísono. Como ya comentábamos anteriormente es de agradecer que se haya incluido esta opción, pero no deja de ser un mero consuelo ante la ausencia de la modalidad online que tantas veces se ha reclamado por parte de los aficionados.

De algún modo esta sensación se recompensa con la edición especial que podemos adquirir en cualquier tienda especializada, otro dato que habla elocuentemente sobre el origen de este pack, que no deja de ser un regalo a los aficionados que no tuvieron ocasión en su día de disfrutar de esta trilogía. Así, todo usuario que se decida por abonar los 50€ que cuesta el videojuego se llevará a casa una edición especial, pensada para coleccionistas, que viene acompañada por un libro repleto de artes conceptuales, ideal para exponer en cada para fardar ante la visita de algunos amigos. Es más que suficiente para justificar la compra de un pack que ofrece más de 90 horas de juego a bote pronto, que ya en su día garantizaban una media de sobresaliente en los análisis de los medios especializados.

Excelente

Un título referente en su género, que destaca por encima de sus competidores y que disfrutarás de principio a fin, seguramente varias veces. Un juego destinado a convertirse en clásico con el paso de los años. Cómpralo sin pestañear.