[GC] Star Wars: The Old Republic, Impresiones
Le echamos un ojo al tercer título de BioWare que ha mostrado en Alemania; el nuevo MMO basado en el universo Star Wars. Por lo visto, parece determinado a superar los logros de Galaxies.
De los tres títulos que se ha traído BioWare a Colonia, hay dos de los que se había hablado mucho con anterioridad. Tanto Dragon Age como Mass Effect 2 habían sido el centro de muchas miradas, y su lanzamiento, ya cercano, propicia que el fluir de información sea constante. Pero de Star Wars: The Old Republic no había más que unos pocos datos, demasiado escasos para lo que los usuarios y, sobre todo, los amantes de la franquicia esperan. La licencia de por sí ya genera mucha expectación, pero el hecho de estar directamente relacionado con los excelentes Caballeros de la Antigua República le ponen el listón demasiado alto antes siquiera de empezar la competición.
No obstante, BioWare está acostumbrada a trabajar con esta presión, sobre todo si son ellos mismos los que se la buscan intencionadamente. Les gustan los grandes retos, el lograr superarse a sí mismos y sorprender al jugador rompiendo con todo cuanto se haya visto hasta la fecha; y con Star Wars: The Old Republic se han vuelto a salir con la suya, revolucionando el género de los MMORPG y llevándolo al terreno que mejor domina BioWare, el de los argumentos grandes y épicos. Así es, pese a tratarse de un título multijugador online, The Old Republic tendrá como base una férrea línea argumental, que nos llevará a distintas misiones pero siempre con la sensación de estar creando nuestra propia leyenda intergaláctica y viendo cómo el mundo se ve afectado por las decisiones que tomemos.
La acción se ambienta unos tres mil años antes de las películas; el tráiler del juego nos muestra un ataque Sith a un templo Jedi, una secuencia espectacular en la que somos testigos del llamado saqueo de Coruscant. El templo acaba reducido a cenizas y los Sith abandonan triunfantes el lugar. Esta secuencia tiene más historia de lo que el tráiler nos llega a mostrar, y a lo largo de los próximos meses se irán ofertando diversos cómics y otros tráilers en los que se irá profundizando en los sucesos que desencadenaron en el saqueo. La historia ha sido siempre un elemento clave en los títulos de Blizzard, y en The Old Republic, pese a que muchos no esperaban demasiado en este aspecto, tendremos una línea argumental intensa y cargada de giros y sorpresas constantes.
Seremos nosotros mismos el eje central de esa historia, ya que nuestras acciones irán desencadenando nuevas situaciones y el mundo evolucionará de acuerdo a nuestro comportamiento. Una clara muestra de la importancia que se le da a crear esta ambientación es el hecho de que el juego estará cargado de secuencias de vídeo y conversaciones completamente dobladas, tanto los personajes secundarios como los que creemos nosotros. Además, por lo que hemos podido ver en esta demostración, la calidad de las voces está fuera de toda duda, con un equipo de actores de doblaje (en inglés, claro) que consiguen poner su granito de arena a la hora de crear una ambientación digna de la franquicia.
Durante las conversaciones, deberemos tomar decisiones que afectarán el devenir de la partida; puede ser cuestión de una conversación informal, decidir la forma en la que queremos saludar a nuestros nuevos compañeros, o incluso tomar la difícil decisión de si matar o no a un capitán de una nave que incumplió una orden. El árbol de diálogo es similar al de Mass Effect, y según nuestra respuesta el juego avanzará por uno u otro camino. En caso de que estemos trabajando en grupo y vaya con nosotros algún compañero (no en vano esto es un MMORPG), las decisiones cruciales se decidirán por votación de la mayoría. Pese a que pueda ser algo complejo de explicar este denso sistema con palabras, podemos asegurar que, visto en funcionamiento, funciona.
Lo primero que deberemos hacer, como es lógico, será crear nuestro personaje, y para ello tendremos a nuestra disposición diversas clases. En Alemania se han mostrado tres, aunque habrá más en la versión final. Como es lógico, cada una de las clases tiene sus propias características, armas y habilidades, y propician una jugabilidad completamente diferente. El primero que se nos muestra es el cazarrecompensas, que tendrá una motivación personal para actuar. Su especialidad es, principalmente, el combate a larga distancia, con blasters y disparos eléctricos que dejan en shock a los enemigos; pero también se defiende a media distancia, con lanzallamas y otros objetos similares.
Otra de las clases es el contrabandista, al más puro estilo Han Solo. Esta comparación directa es la mejor definición del tipo de personaje que seremos, ya que nos comportaremos igual que Han en las películas. De por sí, un contrabandista elude la confrontación directa siempre y cuando le sea posible. Tenemos armas de larga distancia, pero muy distinta al Blaster del cazarrecompensas, y su principal baza será la posibilidad de utilizar distintas coberturas, como piedras o árboles. En el cuerpo a cuerpo también es capaz de defenderse, aunque a su manera, con trucos sucios: patada en la entrepierna para dejar fuera de juego al enemigo y salir huyendo hacia el escondite más próximo.
Por último, vimos la clase de caballero Sith, que a diferencia de los otros dos, se centra sobre todo en el combate cuerpo a cuerpo, gracias a su sable de luz. Sus habilidades de combate le suelen convertir en un objetivo fácil para los ataques enemigos, pero también hay que decir que es muy ágil y capaz de enfrentarse a varios rivales al mismo tiempo, con hasta tres rodeándole. Destacar también que todas las clases serán diferentes a nivel argumental: tendrán distintos puntos de inicio, diferentes objetivos, e historias y misiones personalizadas. Si, por ejemplo, queremos cambiar de clase y volver a empezar desde el principio, todo será completamente nuevo para nosotros, y ni tan siquiera se repetirán las misiones que hagamos.
Como no podía ser menos, las características habituales de un MMORPG se mantienen, con la barra de acciones posibles en la parte inferior, el acceso al inventario, la recolección de objetos de los cadáveres de los enemigos, PVP, guilds, intercambio de objetos entre jugadores Pero todavía es muy pronto para todo eso, y por el momento hemos podido disfrutar de un pequeño nivel con un personaje de la clase Sith. Estamos en una nave espacial, cuyo capitán ha desobedecido una orden, y llega el momento que comentamos anteriormente en el que podemos elegir matarle o dejarle vivir. Durante la presentación, y a votación del público, se opta por ejecutar al mandamás de la nave.
Las consecuencias son, ante todo, un total y completo desorden en la cubierta de mando, donde intentaremos hacernos oír cuando la nave sufre el ataque de una flota enemiga. No tendremos mucho éxito en nuestras pretensiones, y deberemos luchar por abrirnos camino hasta la parte afectada por el ataque para detener la llegada de tropas. Posteriormente, cuando pudimos probar esta sección del juego, optamos por perdonarle la vida al capitán, y cuando tiene lugar el ataque todo transcurre de forma más relajada: el hombre mantiene la cordura de la tripulación ante el ataque, y nos ahorraremos muchos problemas de cara a llegar a la zona afectada.
En ambos casos, ahora toca combatir, y The Old Republic es una delicia en este aspecto. Con una interfaz similar a la de muchos MMORPG, usaremos el ratón para mover la cámara y seleccionar el objetivo, las teclas A, S, D y W para movernos, y los números para utilizar el ataque cuyo icono está asociado a un número concreto en la parte inferior de la pantalla. El Sith que controlamos tenía, en ese momento de su historia, un ataque normal con el sable láser, un ataque fuerte, un ataque en área, un salto de fuerza (para llegar rápidamente a la altura del enemigo si estamos a una determinada distancia de él), un ataque final (ensartando al enemigo con el sable láser), y un agarre de fuerza (para ahogarle). La variación entre todas las posibilidades de combate es básica para utilizar lo que más convenga a cada situación si queremos salir airosos.
La mayoría de los enemigos son stormtroopers normales, pero en algún momento nos deberemos enfrentar a un padawan de Jedi y a un experto Jedi. La diferencia entre enemigos es abismal, y estos rivales se antojan muy duros y con una habilidad que nos puede llegar a superar en ciertos aspectos; la estrategia es importante en estos casos, no basta con atacar a ciegas, es preciso tener un plan en todo momento. Como muestra para el sistema de recogida de objetos de los enemigos vencidos, nos hacemos con un segundo sable láser. A partir de ese momento, y pese a mantener los mismos ataques, nuestra forma de combatir cambia de forma radical, volviéndose todavía más espectacular y acrobática, eliminando a los enemigos con mayor facilidad.
Este pequeño aperitivo no ha hecho sino dejarnos con ganas de más. En el momento en el que nos dijeron que la demo había llegado a su fin, tuvimos la sensación de que todavía faltaba mucho bueno por venir. Con un buen acabado técnico (la estética está más próxima a la reciente animación 3D de Star Wars que a las películas) y algunos detalles excelentes, The Old Republic es un juego tremendamente divertido, con un argumento intenso que irá adaptándose a nuestras elecciones, e infinidad de posibilidades para crear nuestra propia historia. Queda mucho por ver todavía de este juego de cara a conocer sus verdaderas posibilidades, pero la primera toma de contacto no podría haber sido mejor.
- Acción
- RPG
Star Wars: The Old Republic, un MMORPG a cargo de Bioware y Electronic Arts, es el único juego online multijugador masivo free-to-play que te sitúa en el centro de tu propia historia dentro de la saga Star Wars. Juega como Jedi, Sith, cazarrecompensas o como otro de los muchos roles emblemáticos de Star Wars; y explora una galaxia muy, muy lejana 3000 años antes de las películas clásicas. Conviértete en protagonista de tu propia aventura de Star Wars y elige tu camino por el Lado Luminoso o el Lado Oscuro de la Fuerza.