[GC] Diablo III, Impresiones

La Blizzcon no ha servido sólo para presentar la nueva expansión de World of Warcraft, sino como marco para el anuncio de un nuevo tipo de personaje en Diablo III. Te descubrimos quién es y cómo funciona en combate.

Hace unos años, cuando internet no era tan accesible y buena parte de la gente debía desplazarse a cyber-cafés a mirar el correo, era fácil encontrarse con un grupo de adolescentes que iban al mismo sitio a hacer algo que poco o nada tenía que ver con aquello. El MSN ni siquiera era una herramienta del día a día cuando varios juegos se instalaron en este tipo de recintos como los 'reyes' en sus respectivos campos. Raro era el día en que no se viese a un grupo de amigos disputar una partida a Age of Empires, jugar un rato a Counter Strike o, cómo no, ir al mundo de las vacas de Diablo II o matar a Mephisto para conseguir objetos mágicos.

Diablo II, aunque principalmente gracias a su expansión Lord of Destruction, marcó un punto y a parte no sólo en la historia del género, sino a nivel de crear una sociabilidad basada en el intercambio y compartir, en la unión, en la creencia en un equipo. Blizzard lo ha sabido siempre y se ha aprovechado de ello, ofreciendo gratuitamente acceso a BATTLE.NET, unos servidores propios donde Diablo II y D2LoD pueden jugarse online con otras personas.

Pero ya ha llovido mucho desde aquel segundo juego, así que era hora de darle un descanso anunciando Diablo III. Tras infinidad de peticiones de fans, por fin lo confirmaron hace más o menos un año, apostando por la continuidad por encima de la innovación. Como se suele decir, 'si algo no está roto, no lo arregles'. Es un principio básico y no le falta razón. D2 funciona a la perfección, engancha y es profundo. La base de Diablo III se mantiene, pues, exactamente igual: el interfaz es parecido, varios de los personajes son los mismos, etcétera. ¿Qué han cambiando? Los detalles. Lo que hace grande a un juego.

Apenas unos 20 minutos más tarde, se nos ofreció la posibilidad de probar una demo del juego -la segunda a la que le echamos el guante en lo que llevamos la semana- con este personaje, descubriendo sus habilidades y viendo cómo funciona en el campo de combate. La sensación fue fantástica: sus técnicas están perfectamente adaptadas al universo de Diablo, contando con diferentes magias de ataque y alguna otra que se mantiene activa en todo momento. La demo estaba preparada para comenzar en una sección desértica, con el personaje en nivel 10 y ya algunas técnicas seleccionadas.

No creemos que sea necesario explicar cómo funciona Diablo III, pues casi todo el mundo ha probado la segunda parte. Por si acaso, podríamos hablar de él como un RPG de acción en el que avanzamos por un escenario abierto, acabando con enemigos en tiempo real , todo en vista aérea. Nos movemos entre zonas, que van desde escenarios hasta ciudades, utilizando un sistema de misiones que permite cierta flexibilidad.

Diablo III no ha cambiado para nada, y esto ha sido uno de los argumentos que más se le ha criticado a Blizzard, al igual que ha sucedido con StarCraft II, obedeciendo parece ser, a un concepto claro dentro del estudio californiano. A pesar de que la demo estaba 'capada', con la subida de atributos y la asignación de puntos de habilidad automatizadas, pudimos comprobar cómo la técnica especial del monje, una especie de bola de energía, era capaz de generar un gran daño y causar un estado alterado en el enemigo. Su segunda habilidad le permite invocar un rayo que golpea a varios monstruos de forma simultanea. El contacto con el personaje es, como ya se ha dicho, positivo. Es ágil, tiene una potencia bastante elevada y sus magias son, al menos las que hemos visto, realmente útiles.

Lamentablemente, Diablo 3 aún no tiene fecha de lanzamiento para ningún territorio. La beta que hemos podido probar era bastante sólida, presentando un acabado gráfico más que correcto -aunque lejos de ser revolucionario-, un exquisito gusto por el detalle y un notable diseño de personajes. Es muy pronto para emitir un juicio justo en base a lo poco que hemos podido probar, pero por ahora, las cosas parecen bastante claras: estamos ante Diablo 2 con mejoras y nuevos personajes. ¿Suficiente? Para nosotros, sí.