[GC] Need for Speed: NiTRO, Impresiones
Velocidad desde otra perspectiva, la que hace eco de la vertiente arcade que ha caracterizo siempre a esta franquicia. Electronic Arts no se olvida de la edición de Wii y NDS de NiTRO, la apuesta de la compañía por una jugabilidad que se abre directamente al jugador sin necesidad de experiencia alguna en el género. Volvemos a probar la sensación de adrenalina que conocíamos por primera vez en Londres hace unas pocas semanas, esta vez centrándonos en la modalidad Eliminación de este interesante producto. Estas navidades toca quemar rueda al más puro estilo tuning.
Velocidad desde otra perspectiva, la que hace eco de la vertiente arcade que ha caracterizo siempre a esta franquicia. Electronic Arts no se olvida de la edición de Wii y NDS de NiTRO, la apuesta de la compañía por una jugabilidad que se abre directamente al jugador sin necesidad de experiencia alguna en el género. Volvemos a probar la sensación de adrenalina que conocíamos por primera vez en Londres hace unas pocas semanas, esta vez centrándonos en la faceta multijugador de este interesante producto. Estas navidades toca quemar rueda al más puro estilo tuning.
Parece que a EA Montreal no se le caen los anillos a la hora de destacar qué es lo mejor que esconde su producto más importante para esta temporada. A ellos les corresponde la siempre difícil tarea de adaptar una franquicia que ha pegado un bajón de calidad considerable en la nueva generación a dos consolas que se han menospreciado tradicionalmente en este sector, por incomprensible que parezca. Una bombilla se encendía en la compañía canadiense cuando a alguien se le ocurrió la posibilidad de crear una subsaga alternativa a la línea principal que al menos se centrase en exprimir las virtudes de sendas plataformas.
Toda la expectación que rodeaba al lanzamiento de este título ha ido creciendo tras el primer contacto que teníamos ocasión de tener con el título en Londres, durante la presentación del catálogo de la compañía para esta temporada. NiTRO era uno de los que contaban con mayor atención del público por su peculiar propuesta: explotar la vertiente arcade de la franquicia sin dejar de lado la capacidad técnica de sendas consolas. Si SHiFT se ha pasado a la simulación pura y dura, su hermano menor es prácticamente todo lo contrario. Tanto es así que la demo que se presentaba durante el Gamescom que tiene lugar en Colonia, Alemania, apenas se molesta en mostrar novedades al uso, centrando toda la atención en el aspecto offline.
No obstante, antes de comenzar el recurrido visual por el juego hubo ocasión de conocer algo más de información sobre su desarrollo, que sigue avanzando viento en popa para cumplir la fecha de lanzamiento que se ha fijado para finales de año. En esta ocasión el circuito elegido era Rio de Janeiro, nunca antes mostrado ante el público. La tendencia en nuevamente la de tomar un coche cualquiera para recorrer las calles de la ciudad a toda velocidad, evitando por todos los medios que ningún otro competidor nos supere. Para ello contamos con varios métodos de trabajo, desde empujarles durante su adelantamiento pasado por la utilización de un turbo -que otorga el sobrenombre a este título- para terminar en la salvaje explosión de gasolina que se produce a medida que el nitroso quema sus últimas naves.
La lista de coches está conformada por los siguientes automóviles; Chevrolet Camaro, Subaru Impreza WRX, Mitsubishi Lancer Evolution, Nissan 370 Z, Shelby GT500, y Audi TT Coupe. Era un VW Beetle el encargado de mostrar en tiempo real todas las modificaciones que los jugadores podrán realizar a sus coches, aunque todavía queda la promesa de contenido que por el momento no se ha mostrado con el fin de que los usuarios se sorprendan tras adquirir la versión final del juego. De las cuatro ciudades que estarán disponibles en la edición final, Cairo, Madrid, Singapur y Rio de Janeiro, sólo la última quedaba por ser presentada oficialmente en una demostración de esta índole. Aprovechamos el momento para centrar la atención en el motor gráfico, que muestra una impáctate puesta de sol con el consiguiente tono cálido que esto conlleva.
Una vez superamos esta presentación rápida pasamos al segundo puerto, donde descubrimos qué aspecto luce el modo Eliminación ya mencionado anteriormente. Aquí nos volvemos a encontrar con el mismo contenido de la demostración original, si bien el motor gráfico ha mejorado considerablemente, así como las sensaciones que transmite el control de los vehículos, mucho más ajustado a la capacidad del wiimote. Recordamos que existen varios estilos de conducción en función de los gustos de cada jugador, que en su momento tendremos ocasión de comentar a fondo. El que se marca por defecto invita al jugador a conducir con una mano, rotando el mando hacia la dirección a la que queremos que se dirija el coche en cuestión que estemos manejando.
A medida que avanzamos por el circuito descubrimos una vez más los elementos que definitivamente van a caracterizar esta entrega. Edificios altos, interiores de ciudades que muestran un aspecto alternativo, muy colorido. La sensación de velocidad está perfectamente integrada gracias a haber obtenido los tan ansiados 60 frames por segundo, sin que una ralentización moleste al tomar una curva o con varios coches compitiendo en la misma pantalla. Hay que tener en cuenta que no basta con saber manejar el coche hasta que crucemos la línea de meta en primera posición; también hay que lidiar con la Inteligencia Artificial rival, que hará todo lo que esté en su mano para alejarnos de la victoria.
Gran parte de culpa de este hecho la tiene la ingente cantidad de power-ups que recogemos durante la carrera. Derrapar es la única vía para rellenar la barra del nitro, obtener una llave inglesa es esencial para que la carrocería del coche se recupere por completo, recuperando con ello la velocidad punta y su consiguiente capacidad de manejo. Es francamente complicado aprender a mantener el coche siempre sobre la calzada sin perder el control en una curva cerrada, pero lo cierto es que a poco de comenzar a jugar se despierta ese habitual gusanillo que siempre hace acto de presencia en los títulos arcade. Dan ganas de seguir jugando, aunque por desgracia no es posible. El tiempo de hacer boca con lo que ofrece el juego termina casi tan rápido como la demostración en sí.
La edición portátil ha mejorado considerablemente la jugabilidad, aunque en el resto de apartados sigue luciendo exactamente el mismo aspecto. Lo que realmente importa en este petit avis de NiTRO es que EA Montreal sigue por el camino adecuado para convertir esta nueva vertiente de la franquicia en un valor real que no ha de ser menospreciada por los aficionados al género de la conducción. Si todo sigue el curso previsto, en pocas semanas podremos ofrecer una primera valoración del juego con la versión definitiva, que como era de esperar ofrecerá muchos más alicientes que los que han ocupado este texto informativo.
- Conducción