Blur, Impresiones
Los chicos de Bizarre Creations se han cansado de la realidad. De los giros precisos y los circuitos realistas. Con Blur la diversión es lo primero y para conseguir habrá que hacer los que tengamos que hacer Aunque desafíe las leyes de la física.
Los chicos de Bizarre Creations se han cansado de la realidad. De los giros precisos y los circuitos realistas. Con Blur la diversión es lo primero y para conseguir habrá que hacer los que tengamos que hacer Aunque desafíe las leyes de la física.
En la vieja ciudad portuaria de Liverpool no hay sólo museos de los Beatles, tabernas de dudosa reputación y españoles que juegan al fútbol. También hay un estudio de desarrollo de fama mundial que hace no demasiado tiempo fue adquirido por Activision-Blizzard. Hablamos de la gente de Bizarre Creations, responsables de la saga Project Gotham Racing para Xbox 360. Desde el anuncio de aquella adquisición poco se sabía de sus próximos proyectos. Hace no demasiado se anunció su nuevo proyecto Blur, un arcade que mezcla sabiamente detalles de su anterior obra y de un clásico del videojuego: Mario Kart. En su momento se habló también de un juego de carreras basado en la licencia de James Bond, que desde ya confirmamos que se estaba desarrollando, pero fue pospuesto hasta la finalización de este proyecto.
De esta manera tenemos a los maestros de la velocidad de Bizarre trabajando única y exclusivamente en el título que nos ocupa. Buen presagio. Y más cuando empezamos a conocer las cifras y datos que maneja. El mejor ejemplo son los 70 coches reales que incluirá (desde superdeportivos hasta SUVs o incluso utilitarios) y los 14 entornos diferentes para las pistas, todos ellos basados en localizaciones existentes, incluida la ciudad condal para al menos una de las pruebas.
Pero como nos comentó Martin Chudley, director del estudio, Blur ha sido creado para entretener desde el momento cero. Para conseguirlo se han introducido varios toques arcade que le hacen mucho más atractivo y accesible para el gran público. El más obvio es la mecánica de potenciadores incluida, muy similar a la que mostró hace más de una década el legendario Mario Kart. Es decir, cada carrera comienza como cualquier otra, hablando de un juego del género de las cuatro ruedas, pero a partir del séptimo segundo de prueba se activan una serie de power-ups que sirven como armas para nuestros coches.
Así al pasar sobre los iconos correspondientes se añadirán a nuestro arsenal ciertas armas y triquiñuelas que nos servirán para dar cera' a nuestros rivales en la pista. En este momento se están estudiando cual es la combinación perfecta de estas. De momento están los típicos nitros, misiles, pulsos electromagnéticos La variedad promete ser bastante amplia, aunque de momento no es posible dar una cifra definitiva. Para aquellos que no saben elegir que mejora llevar, conforme avancemos podremos incluso aumentar el número de estas activas hasta una cifra de tres. Esto permitirá combinar ataques, aumentando exponencialmente las posibilidades en carrera. En nuestra conversación con el ya citado Martin Chudley, nos confirmo que parte de su intención era hacer un juego de lucha con coches. Peculiar al menos.
Respecto al sistema de control, prácticamente se mantiene lo visto en Project Gotham Racing. Es decir, habrá que frenar en las curvas, apurar frenadas y conocer bien los circuitos. La diferencia es que esta vez ni los rivales se separarán en exceso de nosotros en el caso de que bordemos cada una de las vueltas, ni viceversa. Tanto quieren mantener el interés que hasta se han incluido objetivos secundarios para cada una de las carreras (acaba con X enemigos, adelanta tantas veces, llega antes de tal o cual piloto). Cosas de tratar de mantener la diversión a toda costa que puede que no acaben de gustar a algunos aficionados a la velocidad.
En el plano técnico vemos como cumple con solvencia, pero sin destacar especialmente. La culpa en este caso es del motor gráfico que han usado, exactamente el mismo que se vio en Project Gotham Racing 4, pero con algunas mejoras lógicas. Las físicas ahora son más realistas y espectaculares, igual que el sistema de deformación de los coches, pero nada que no pudiéramos atisbar en su anterior juego. La mayor novedad es el gran trabajo artístico realizado, que hace uso intensivo de los graffitis de luz para casi todo. Las señales en carrera están proyectadas sobre las paredes, las armas que cogemos usan la misma técnica Todo en Blur tiene un look peculiar, entre moderno y hortera.
Esta vena de modernismo llega incluso con la presentación general del juego, que aprovecha el estilo visual de algunas de las redes sociales más famosas (Facebook, Twitter ). Así iremos agregando amigos a nuestra red conforme ganemos carreras y estos nos invitarán a distintos eventos e incluso nos hablarán como si estuviéramos en un chat. Lo que consigue Bizarre con esto es eliminar cualquier linealidad en el argumento principal, además de servir como interfaz perfecto para el extraordinario apartado multijugador del que dispondrá.
En él disputaremos carreras con 20 jugadores simultáneos (los mismos que en todas las carreras de los modos para un jugador) independientemente de la versión del juego que tengamos metida en la consola. Las normas para cada una de estas pruebas están fijadas por los propios jugadores, y la variedad de estilos abrumará a propios y extraños. Por poner un ejemplo, en Project Gotham Racing 4 la comunidad de jugadores creó un juego del gato y el ratón. Ahora estará incluido en Blur. Los jugadores se irán uniendo en grupos con gustos parecidos para ir entrando en las distintas listas de juego. Además, conforme vayan evolucionando los gustos de los usuarios de Blur, se irán modificando, añadiendo o eliminando nuevas modalidades de juego.
Por lo que hemos visto y probado, parece que Blur va a sentar un precedente, haciendo honor a los juegos en los que se mira (Project Gotham Racing 4 y Mario Kart). No queda tanto tiempo para poder verlo en las tiendas, ya que está previsto para este mismo 2009, y teniendo en cuenta que sólo puede ir a mejor habrá que seguir de cerca a esta nueva creación de los que son casi el sexto Beatle de Liverpool, los chicos de Bizarre Creations.
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