[E3] Splinter Cell: Conviction

Nació a la sombra de Metal Gear Solid y consiguió hacerse un nombre en el género de la acción táctica. Splinter Cell vuelve a la actualidad con Conviction, un regreso por todo lo alto del Sam Fisher más brutal que se ha visto nunca, en una misión de venganza en la que hará todo lo posible para descubrir al asesino de su hija. Con motivo del E3, Ubisoft ha mostrado cómo será el regreso de Fisher a la actualidad... y ha sorprendido. Te lo descubrimos.

2008 fue el año de Solid Snake, la reconfirmación, el cierre final de un ciclo, la claurusa de una saga que ha llevado los juegos de acción en tercera persona a un nuevo nivel, readaptando los conceptos que vagamente se habían introducido en títulos previos para convertir la infiltración en, prácticamente, un subgénero. De los muchos 'clones' que surgieron a raíz del sublime Metal Gear Solid que Hideo Kojima creó en 1999, probablemente el que mayor acogida ha tenido entre crítica y público ha sido Splinter Cell, una franquicia de Ubisoft que apareció entre las sombras para convertirse en una sorpresa. Inició su andadura en Xbox (en una exclusiva temporal) y pronto saltó a PlayStation 2.

Cuatro entregas avalan a una franquicia que estaba llamada a ser de las más importantes de la presente generación de consolas. Double Agent, el primer título de la serie para la 'next-gen', poseía muchísimas virtudes que hacían esperar con muchas ganas la siguiente aventura de Sam Fisher, Conviction, anunciada en 2007 y… caída en el olvido. Con motivo del E3, Ubisoft ha decidido mostrar el progreso que se ha realizado en el juego y las cosas no pueden pintar mejor: cada cambio conceptual con respecto a las ideas mostradas hace dos años, ha sido para bien. Para muy bien.

Conviction nos presenta el lado más salvaje de Fisher. Ya fuera de la organización gubernamental Third Echelon, Sam Fisher continúa su historia de venganza, la que comenzó en Double Agent cuando descubrió que su hija había sido asesinada. Los años han pasado pero el protagonista se mantiene en plena forma, consumido por la venganza y habiendo olvidado todas las buenas formas: directo al grano, con la brutalidad en mente. Sólo busca respuestas, a un culpable, y llegará hasta el fondo del asunto sea por las buenas o por las malas.

La demo que se ha mostrado en Los Ángeles deja bien a las claras cómo se las gasta el 'nuevo' Sam Fisher. La fase comienza con el protagonista en un baño, hablando con un tipo que al parecer tiene información importante. No quiere hablar, así que Sam se las ingenia para sacarle las palabras por las malas: podemos coger al objetivo y golpearle de varias formas, aplastar su cabeza contra un urinario, romper un cristal con ella, pegarle patadas, puñetazos, etcétera. Todo por llevar a buen puerto el interrogatorio. Esto será clave en Conviction y por lo que hemos podido ver, recuerda bastante al fantástico e infravalorado The Punisher, sin escatimar en sangre ni brutalidad a la hora de mostrar la acción.

Este nuevo sistema de movimientos, bautizado como Mark and Execute (marca y ejecuta), servirá exactamente para lo que indica su nombre: seleccionar a un enemigo e ir realizando las acciones que prefiramos. No sólo se utilizará en los interrogatorios, sino en todo el juego en sí. Uno de los ejemplos vistos en la demo implica que podemos disparar a un foco de luz, lo que genera que el enemigo que esté debajo reaccione de forma natural y se alerte ante la situación. La IA de Conviction parece ser espectacular, generándose decisiones en tiempo real en base a cómo juguemos en el papel de Fisher.

Pero no es el único cambio de Conviction. Ya no encontramos escenarios limitados, sino que movemos al protagonista por un entorno más o menos abierto, una especie de sandbox (como Assassin's Creed, pero más limitado), pudiendo interactuar con la gente que camina por la calle de varias formas. En la demo, podía verse cómo Fisher caminaba por una calzada al lado del mar. En cierto momento, Sam podía ponerse en el borde y coger a un personaje que pasaba por la calle, tirándolo al agua en tiempo real y sin ningún tipo de problema. La forma en la que actuaremos será decisión de cada jugador: podremos ir a lo loco, pero a la hora de la verdad generar estrategias será clave para poder avanzar sin problema, por ejemplo, pensando qué enemigo puede ser más importante eliminar de un grupo en lugar de entrar a lo loco en una sala y liarse a pegar tiros.

Fisher también ha adquirido nuevas habilidades. A pesar de ser mucho mayor, sus habilidades de infiltración no sólo no se han oxidado, sino que están potenciadas al extremo. Ya no camina lentamente, sino que se mueve entre las sombras con una facilidad y agilidad sobrehumanas, realizando presas y utilizando el armamento como un verdadero veterano. Esto es un punto a favor: a pesar de que se mantiene la infiltración, se ha agilizado lo suficiente como para que no resulte tedioso a la hora de ir avanzando, sin caer siempre en el mismo esquema de avanzar-esconderse-matar.

Los combates cuerpo a cuerpo siguen estando presentes en el desarrollo, integrados perfectamente en la nueva mecánica de Mark and Execute. Fisher realizará el estilo Krav Maga, el sistema de defensa de la armada israelí, un arte marcial cuya filosofía es que 'el fin justifica los medios'. Con esta mentalidad, Fisher es capaz de realizar agarres y otro tipo de técnicas de forma rápida y sencilla, con un único botón y alternando las acciones entre los golpes físicos y el uso de arma blanca, como un cuchillo. Según se pudo ver en la demo, Sam también podrá coger a un enemigo como escudo humano y avanzar con él para cubrirse de los disparos de sus atacantes.

Conviction está llamado a convertirse en uno de los juegos de acción más impactantes de este año. Visualmente es rompedor, presentando unos entornos detalladísimos y unos modelados espectaculares, con especial mención a los efectos de luz completamente dinámicos y que reaccionan al entorno de forma realista. En la demo, había varios proyectores que superponían a los cuerpos, de la misma forma que sucede cuando una persona se pone frente a un proyector y la imagen se pone sobre su cuerpo. Las físicas de los cuerpos parecen además bastante buenas.

Un tono mucho más oscuro de lo habitual, un héroe desatado en la búsqueda de venganza, recordando bastante a la vendetta de Frank Castle tanto en su forma de llevarla a cabo como por su aspecto físico, y un sistema de juego renovado completamente son algunas de las bases de Conviction, la quinta entrega de una saga que parece que definitivamente evolucionará este próximo otoño en Xbox 360. Con reminiscencias a la serie 24 y recordando especialmente a las películas de Bourne, la nueva aventura de Fisher tiene un aspecto inmejorable. Dos años de incertidumbre que han servido para remozar una franquicia que debía pegar un cambio y, parece ser, lo ha conseguido.