Thunder Force VI: Legend of the Wings
- PlataformaPS27
- GéneroAcción
- DesarrolladorTechnosoft
El regreso de un clásico
La franquicia Thunder Force se pone al día con una nueva entrega para PlayStation 2. Su vitalidad se mantiene intacta, en un juego que sabe a poco pero que deja muy buen sabor de boca al jugador. Eso sí, por el momento, sólo a los jugadores nipones.
PlayStation One recibió el que parecía ser el último título de la saga, Thunder Force V - Perfect System, una versión mejorada del mismo juego que meses antes viera la luz en Sega Saturn. Con la desaparición de Techno Soft, nadie se esperaba que diez años después una nueva entrega, que promete no ser la última, volviese a la palestra. Lo más sorprendente de todo es que en plena vorágine next-gen lo haga en PS2. Puede que a muchos jugadores este título no les diga nada. Pero en su momento, allá por mediados de los noventa, Thunder Force copaba las portadas de las revistas de video juegos tanto como cualquier otra saga de renombre.
Pasan cuatro años desde aquel lanzamiento hasta que Techno Soft decide desempolvar el título y lanzar Thunder Force II para el Sharp x68000 (la respuesta nipona al Amiga) con un más que decente pero reducido port para la consola de 16-bit de Sega, Mega Drive, en el año 1989. La buena acogida en el mercado occidental (principalmente en el americano, pues el juego no fue lanzado en Europa), junto con el hecho de formar parte del primerizo catálogo de Mega Drive y las excelentes críticas de la prensa, hicieron que la saga se ligara a la consola de Sega. El juego seguía manteniendo aspectos del primigenio Thunder Force, pero esta vez se había optado por el scroll horizontal, marcado por el tremendo éxito del momento, R-Type.
Además es con esta entrega con la que la banda sonora comienza comienza a acercarse a la vertiente del rock, con una Techno Soft que comienza a sacar lo mejor del dispositivo de audio de la consola de 16-bit. Otros de los aspectos clásicos de la saga que se introducen es el CRAW (esa especie de armas esféricas que giran en torno a nuestra nave, añadiendo a la vez que un grado de defensa un mayor poderío de ataque) y esas pequeñas y encantadoras ralentizaciones que se han convertido en la marca de la casa con el paso del tiempo.
Viendo el éxito conseguido con TFII, Techno Soft aprovecha el momento y a finales de 1990 lanza la siguiente entrega. Thunder Force III fue el juego que lanzó la saga al éxito rotundo y que puso su nombre en boca de todos. Con un sistema de juego y entidad propia consolidados, Thunder Force III cautiva a los aficionados con unos detallados e impresionantes gráficos para la época, acompañado de una dificultad increíble y una banda sonora acorde con el ritmo frenético del juego. El juego tuvo el éxito suficiente como para ser merecedor de una versión arcade, Thunder Force AC, co-producido por Sega. Un port de este arcade fue a su vez lanzado en SNES bajo el nombre Thunder Spirit. Este título reinventa la pantalla de selección de curso de niveles, y aportando dos fases completamente nuevas.
En 1992 la franquicia cierra sus puertas en la era de los 16-bit con el lanzamiento de Thunder Force IV, llevando a la Mega Drive a sus límites (y un poco más allá si cabe). Este juego cuenta con una de las más impactantes intros que se hayan visto en un shoot'em up. Haciendo gala de un impresionante apartado artístico y una banda sonora de lujo como nunca antes se había oído. La dificultad había aumentado algo más desde la anterior entrega si es que ya de por sí era posible. Algo que convertía el juego en un reto para cualquiera. Aunque los jugadores más veteranos se acordarán que poniendo las vidas a 0 en el menú de opciones, pasabas a contar con 99 en el juego. Uno de esos huevos de pascua, trucos, que los llamábamos por estas tierras, que tanto se echan de menos en los juegos de hoy en día. En Europa, el juego fue un auténtico blockbuster.
Siguiendo fiel a Sega, Thunder Force V llega a Saturn en 1997 (una versión mejorada saldría a la venta en PlayStation bajo el título Thunder Force V: Perfect System). El sistema de juego había cambiado un poco con la modificación del sistema CRAW y el retoque de la naves, además de que argumentalmente, se retoma la trama de Thunder Force IV y se sitúa la historia en un nuevo mundo, nuestro Sistema Solar. Pero lo más importante a destacar de este juego es que, impulsado por el cambio de la industria de pasar de las 2D a las 3D, el poco poderío de Saturn no ayuda demasiado al título, el cual no luce nada bien.
A finales del año 2000 Techno Soft vuelve a dar señales de vida con un video con el que posiblemente fuese la intro del Thunder Force VI para Dreamcast. En él podíamos ver de nuevo a la nave protagonista de Thunder Force IV, la Fire Leo 04. Unos gráficos mejores que nunca acompañados de un poderoso riff de guitarra, parecían devolverle a la saga todos los elementos clásicos de antaño, dejando de lado lo acontecido en la última entrega.
Pero a pesar de todo, el que era el proyecto Thunder Force VI murió al mismo tiempo que Sega terminaba con la vida de Dreamcast. Techno Soft cesó su actividad en 2001, y la mayoría de sus integrantes pasaron a formar parte del departamento de desarrollo de máquinas de pachinko de Sega. Una de las más importantes compañías del mundo de las 2D fallecía en pleno auge de la era 3D. Pronto otras compañías como Data East, Compile o un poco más tarde, SNK seguirían su mismo camino.
Como prueba del desarrollo de este juego fue el lanzamiento de su banda sonora bajo el título Broken Thunder: Project Thunder Force VI a finales de 2001 por el compositor principal de la saga y del equipo de Techno Soft, Hyakutaro Tsukumo bajo el sello discográfico japonés, Noise. Diez años después, nuevamente bajo el amparo de Sega, y con nombre de 21 Techno Soft, Tetsu Okano (Sega Gaga, Gunstar Heroes Future) reúne a un grupo de programadores fanáticos todos ellos de la serie, para traer de nuevo a la vida a esta mítica saga. Ahora sí, ¡es el momento de Thunder Force VI!
Al comienzo de nuestra aventura nos pondremos a las manos de la Phoenix, la nave de la anterior entrega. Nuestra misión es defender la Tierra del ataque Orn. Antes de comenzar nuestra aventura, seleccionaremos el orden de los tres primeros planetas como en las entregas más clásicas. Una de las cosas que más nos chocan, es que este juego sigue al 100% los patrones de la vieja escuela. En un principio, el sistema de juego es muy similar al utilizado en Thunder Force V. Es más, el entorno gráfico de pantalla es muy similar aunque menos tosco.
Pero por otra parte, a pesar del rango libre, se recupera los sistemas CRAW de juego. Una vez vayamos completando el juego en los diferentes niveles de dificultad iremos desbloqueando nuevas naves, Syrenx y Rynex (basada esta en la nave protagonista de Thunder Force IV), modelos de anteriores entregas y con características de control y armas completamente diferentes. Esto provocará que además ya no sólo el nivel de dificultad marque la complejidad del juego. Obviamente no será lo mismo jugar con la Phoenix y sus sistema de ataque de rango libre que con la Rynex.
El nuevo sistema de Overpowed se caracteriza por la presencia de una barra compuesta de seis contenedores en la parte inferior izquierda de nuestra pantalla. Esta barra se irá llenando a medida que destruimos enemigos. Una vez eliminados, éstos liberan una bola de energía color verde que será absorbida por nuestra nave. Cada vez que un marcador se rellena, podremos utilizarlo pulsando el botón de círculo para echar mano del ataque especial del arma que tengamos seleccionada. Cada arma de cada nave, tiene su ataque especial diferente. Lo más importante de todo es que podremos utilizar más de un contenedor para conseguir un ataque más efectivo.
Precisamente, pulsando círculo varias veces seguidas conseguiremos un ataque más poderoso y a la vez visualmente más impactante. Estos especiales son muy efectivos; de hecho, a veces resultan demasiado efectivos, sobre todo contra los jefes finales, lo que le resta dificultad al juego, hasta el punto de que los jefes finales pasan a ser nada más que enemigos algo más grandes y bonitos (como puede pasar si usamos el especial del arma sword de la nave Rynex contra el jefe de la 3º fase, la estrella marina). Sin embargo este sistema de ataque tiene sus inconvenientes; 1º que la velocidad de nuestra nave disminuirá; 2º que no podremos cambiar de arma mientras lo usemos y 3º que el ataque estará activo mientras no se consuma el (o los) contenedor de energía que estemos utilizando.
Lo que resulta atractivo del juego es que no simula ser como un juego de la vieja escuela. Es que, sencillamente, lo es. Es difícil de explicar, pero cuando jugamos, da la sensación de que se trata de un juego de antaño con la potencia visual de hoy en día. Es un sentimiento extraño. Te invade la sensación de estar jugando un remake o una emulación de un juego clásico descargado del servicio de pago de una consola más actual, como bien podría ser Xbox Live o Playstation Network.
El juego es rápido y vertiginoso, exactamente igual que los antiguos, pero esta vez da la sensación de que todo esto ya lo hemos jugado antes. Se echan en falta zonas más tranquilas, de transición, dentro de cada nivel. Es como si todo siguiera el caudaloso curso de un río. Además tenemos que tener en cuenta que al ser una versión NTSC, corre a 60 fps lo que lo hace mucho más rápido a pesar de las típicas relentizaciones marca de la casa. Cambiar de armas y la velocidad de la nave es muy accesible y fácil desde la configuración de botones. Lo más importante a resaltar es que además de que gráficamente es muy bueno, corre a 60 fps con fluidez, y pese a las ralentizaciones que se producen en momentos en el que la pantalla se llena de enemigos, continúa siendo jugable. Son similares a las relentizaciones que se daban en Thunder Force IV, pero menos frecuentes.
Como ya comentamos antes, los decorados juegan un papel importante en lo que a aspecto visual se refiere, haciéndose en algunas fases elementos partícipes del juego. Sencillamente pasan de ser el típico elemento pasivo, que nos alegra la vista al pasar por la fase, a convertirse en un personaje más del juego. Las animaciones de los jefes finales están muy bien trabajadas, se nota que se han cuidado las texturas que lucen. La transformación del jefe final de la 4ª fase es sencillamente impresionante. Y es cuando comenzamos a plantearnos el hecho de que, por la cantidad de referencias a los anteriores juegos de la saga, Thunder Force VI es más que un pequeño tributo a su propia saga, es un tributo a los shoot'em up preferidos de los programadores.
La banda sonora, aún a pesar de que no todos los compositores principales de Techno Soft están presentes, sigue siendo puro Thunder Force. Claramente hay un predominio de temas rockeros aunque se cuele algún que otro tema en una línea más discordante, tipo 'techno new age', que presagian lo desconocido. Una mezcla de esto lo podemos comprobar en la secuencia de inicio, una melodía que en su conjunto es encantadora, marcada por los cambios de ritmo, como la calma que precede a la tormenta. Por otra parte, los efectos sonoros están muy trabajados; las voces, de gran calidad por momentos, suenan claras y las explosiones van algo más allá, especialmente si tenemos activada la vibración del mando.
El salto de fácil a normal en el nivel de dificultad se nota bastante. No es un cambio brusco pero sí lo suficiente como para hacernos morir a la primera de cambio. Lo mismo ocurre al dar el salto de normal a difícil, pero esta vez, podemos decir que nos encontramos con el juego que todo el mundo esperaba desde un principio. Además el nivel de dificultad se recrudece si jugamos con el modelo de nave Rynex, la nave clásica, que desbloquearemos una vez pasemos el juego en nivel normal. El modo Maniac nos hará saltar más de una vez del sillón, y de no saber en qué zona de la pantalla situarse en el momento justo, moriremos a las primeras de cambio.
Un aliciente para aumentar la duración del juego será el Neo Mode, donde sólo podemos interceptar disparos enemigos con cierto tipo de armas. El Neo Mode no es fácil de conseguir ni terminar. Y además de todo esto, por si no fuera poco, contaremos con un modo Time Attack, que obviamente, deberemos desbloquear para poder jugar. Pero a pesar de su facilidad y duración, este juego tiene muchas horas de diversión que ofrecer. Para desbloquear todo lo que Thunder Force VI nos ofrece tendremos que pasar el juego en cada nivel de dificultad y con cada una de las naves. Lo que significa nos lo tendremos que recorrer de "pe a pa" para desbloquearlo por completo.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.