Sonic Unleashed
- PlataformaWii7
- GéneroPlataformas
- DesarrolladorSonic Team
- Lanzamiento28/11/2008
- EditorSEGA
La bestia interior
Sonic regresa a Wii y al resto de plataformas con un título que guarda gran parte de la magia de las primeras andanzas del erizo. Plataformas, acción y mucha, mucha velocidad son la marca característica de esta nueva entrega, que encuentra en Wii su mejor exponente e invita a compañar desde el Wiimando y el Nunchuk a la mascota de Sega en su aventura más bestia.
Lo tuvimos con nosotros en Mario y Sonic en los Juegos Olímpicos, hizo un particular cameo en Super Smash Bros Brawl y hasta ha protagonizado uno de los primeros juegos de la consola, en Sonic y Los Anillos Secretos, aunque también ha aparecido en algún que otro juego de Wii. Pero no ha sido hasta Unleashed donde Sonic se ha convertido en el verdadero protagonista de una aventura grande y decente, con el peso que la mascota azul necesitaba y una puesta en escena a la altura del espectáculo al que nos tiene acostumbrados.
Han pasado casi 20 años desde que este emblemático erizo azul hicieras sus primeras apariciones en Mega Drive y Master Sistem. Unleashed quiere rememorar la época y nos presta momentos en desplazamiento horizontal que bien nos recordarán a aquellos maravillosos años a los más veteranos. Mezclando las plataformas arcade, la acción simplista y pequeñas dosis de exploración y puzzles, Sonic Unleashed es uno de los mejores juegos del personaje de los últimos años, y en Nintendo Wii ha sabido funcionar.
Tras su catastrófico paso por las plataformas de nueva generación con Sonic The Hedgehog, ahora vuelve buscando su sitio, aquel que perdió tras los Sonic Adventure. Y es que a esta versión para Wii se le nota a leguas ser un port de la de las plataformas de nueva generación, Xbox 360 y PlayStation 3. Gráficamente no es exactamente igual que la de PS2, donde también ha salido, por lo que, en cuanto a su apartado técnico, se encuentra a medio camino entre ambas generaciones, más cercana a la pasada, claro.
Pero tenemos la misma historia, los mismos personajes, y hasta los mismos vídeos. Sonic Unleashed para Wii es una versión recortada y capada gráficamente, en inteligencia artificial y en físicas del título homónimo de PS3 y 360. Recorremos los mismos niveles, damos los mismos saltos y nos enfrentamos a las mismas criaturas, aunque dando una peor experiencia a nuestra vista. Este recorte técnico ya lo hemos visto en muchos otros títulos de Nintendo Wii, y lo mejor de todo es que apenas pesa a su jugabilidad.
Y lo que pesa es por aparecer menos enemigos en pantalla, por estar más visibles los elementos con los que interactuar... Pero, como era de esperar, el modo de control es el otro gran punto diferenciador. Manteniendo un manejo clásico, con el Wiimote y el Nunchuk, se han implementado movimientos para ciertas acciones, una de ellas principal, que son los mamporros de Sonic-bestia. Hablaremos después de ello, cuando tratemos en profundidad su manejo y posibilidades.
La nueva criatura
Es su innovación, Sonic ahora puede convertirse en una peluda bestia gracias a la luz de la luna. Como tal hombre lobo, a nuestro amigo le sale vello por todo el cuerpo y desarrolla sus músculos y estiramientos. Todo se debe a Eggman, que ha vuelto a probar sus esperimentos con el erizo y de paso ha fragmentado La Tierra, volviendo locos a todos sus habitantes. Desde este pilar argumental arranca Sonic Unleashed, con un espectacular vídeo de Robotnik contra Sonic, finalizando con la victoria del primero y la conversión a bestia del segundo.
La fragmentación del planeta en varias zonas la encontraremos también en el juego, que está siempre fragmentado entre dos estilos muy diferenciados y explícitamente encuadrados: las fases de velocidad, y las fases de acción. El elemento plataformero permanece en ambas, pero en las segundas se perderá bastante en pos de los continuos combates contra decenas de criaturas, muy parecidas entre sí. Esto hace que, si preferimos uno de los dos tipos de fases, estaremos todo el rato deseando que se acabe el tipo que menos nos gusta para disfrutar con el otro, que, a muy seguro, serán las fases de velocidad, el punto fuerte del juego.
Se aprecia que ya los desarrolladores previeron que los momentos de acción (con Sonic-bestia) serían más pesados y gustarían menos, pues hay un tratamiento a los niveles de velocidad como de premio, como niveles divertidos frente a los lentos y más aburridillos. Y es que realmente llega a ser así cuando se ha avanzado en el juego. Uno de los puntos negativos de Unleashed es su repetitividad, más clara aún en los niveles de acción. No hay una contundente variedad de enemigos o situaciones, y todo se reduce a no parar de golpear monstruos por un camino prefijado para abrir la siguiente puerta que nos deje avanzar por ese camino. Esto se intercala con algún que otro sencillo puzzle y momentos de exploración, con grandes superficies que recorrer o varios caminos disponibles a la vez.
Muchos viejos conocidos volverán a hacer su aparición junto a personajes nuevos, como el primer amigo que encontrará Sonic. Tails aparece más adelante y otros que no desvelaremos pero que ya imaginaréis. Juntos, irán en busca de Eggman para descubrir qué está pasando, volando en el Tornado 1 de Tails y recorriendo todo tipo de mágicos lugares, todo ellos muy vistosos y con un acabado estético sensacional y sugerente.
La historia se nos contará con vídeos CGI y diálogos con personajes de todo tipo, habitantes de los distintos pueblos, sacerdotes mágicos, o los protagonistas entre sí. Esta parte de diálogos se podría haber eliminado completamente, pues sólo sirven para narrarnos la historia y nos obligará a hacer clic en todos los elementos disponibles de cada nuevo pueblo al que lleguemos, que lo veremos desde arriba con símbolos con los que interactuar para que algún ciudadano nos cuente algo. Muy sencillo e innecesario.
Mundo mágico
Uno de los puntos que más nos ha gustado de Unleashed en todas sus versiones es su apartado artístico. Ciudades con toques oníricos, templos colosales cargados de ornamentación, selvas frondosas, construcciones antiguas... un mundo variado y lleno de accidentados terrenos por los que correr a toda velocidad con nuestro azulado amigo, o su versión grisácea y peluda. Los escenarios, por tanto, están bien realizados, con todos sus elementos tridimensionales y un buen acabado estético.
Sin embargo, tenemos que hablar de un motor gráfico que no es todo lo sólido que querríamos. Las cámaras a veces fallan, las texturas son sólidas y hay una especie de difuminado constante, que se aprecia más aún cuando vamos a toda velocidad, aunque, por otro lado, ayuda a aumentar la sensación de ir corriendo. Los personajes están bien modelados, dentro de las capacidades de Wii, igual que sus animaciones, fluídas y creíbles.
No obstante, en este sentido, recomendamos la versión de PlayStation 3 o Xbox 360 para los que dispongan de alguna de ellas y Wii. Gráficamente es más preciosista en estas plataformas y será más impactante ver a Sonic recorriendo las grandes ciudades, que en Wii parecen pueblitos muchas veces. Además, la inteligencia artificial y las físicas funcionan mejor en aquellas versiones, algo que en esta versión se queda bastante por debajo y es un punto en su contra, sobre todo en lo que respecta a la IA de los enemigos, bastante floja e incoerente.
Una decepción ha sido su apartado sonoro. Los efectos de sonido son muy limitados y versátiles. Las voces, que se mantienen en su inglés original, son las habituales de la saga, algo que gustará a los fieles del Sonic tridimensional. Nos hubiera encantado que las músicas también permanecieran, o que al menos mantuvieran el nivel de calidad que hemos escuchado en las anteriores entregas, pero tenemos que decir que no. La banda sonora de este Sonic Unleashed olvida los temas rock y pegadizos para dejarnos melodías poco memorables, anodinas y sólo funcionales.
Contaremos con subitítulos en todos y cada uno de los vídeos, al igual que en las instrucciones de los completos tutoriales y los momentos de diálogo. Como siempre, hay cierto sentido del humor en todo momento, y las apariciones de los personajes ya conocidos buscan ser lo más sorpresivas posibles. El altavoz del Wiimote estará emitiendo sonido en muchos momentos, aunque no haya tampoco aquí una variedad considerable.
Correr, pegar y mover el Wiimote
El manejo de Sonic Unleashed y su planteamiento en general son un acierto. En relación a Sonic y Los Anillos Secretos, exclusivo de Wii, controlar al erizo ha ganado muchos enteros. Lo manejaremos con el joystick del Nunchuk y saltaremos con A. interactuaremos con objetos y nos moveremos rápido con el gatillo B, atacaremos o nos dirigiremos directamente contra el objetivo (ya sea un muelle, una barandilla o un enemigo) con un golpe de Wiimote y nos agachamos con Z. A partir de aquí, todas las opciones y técnicas irán en aumento.
Como decimos, alternaremos las fases de lucha y plataformas con las de velocidad y plataformas. Las segundas gustarán más, por su espectacularidad y su mecánica arcade y de reflejos. Como decíamos al principio, los niveles de acción son lentos y monótonos, consistiendo únicamente en avanzar y derribar enemigos. Aquí el control cambia y moviendo Wiimote y Nunchuk haremos a Sonic-bestia dar golpes con uno y otro brazo, pudiendo hacer combos y golpes especiales.
Una agradable sorpresa ha sido que el nuevo Sonic peludo irá subiendo de nivel a medida que derrote enemigos y consiga puntos. Además de mejorar sus niveles de salud y golpes especiales, podrá aprender nuevos combos, realizar ataques más potentes o hasta accder a nuevas zonas con movimientos mejorados. El Sonic normal no mejora sus atributos, lo que refuerza la extraña sensación de estar jugando simultáneamente a dos juegos distintos, uno de acción y del Sonic clásico.
Para abrir niveles y puertas nos encontraremos con un sistema de emblemas. Según con qué clasificación acabemos las fases obtendremos uno, dos o tres de estos emblemas redondos. Los hay solares y lunares, y cada uno abre unas puertas determinadas.en los distintos tempos que recorreremos, que no son los mundos en sí sino parte de ellos, pues éstos se representan mediante una vista general desde arriba.
Las fases de velocidad entremezclan de manera muy adecuada carreras desde detrás del personaje, en scroll lateral y con cámaras fijas o móviles. Además de los míticos loopings, barras que grindar y vertiginosos saltos y rampas, encontraremos todo tipo de obstáculos como tubos por los que deslizarnos, paredes que subir corriendo... No hay demasiados enemigos, y los que hay sirven más bien para trazarnos caminos alternativos. Los anillos que cojamos rellenarán nuestro indicador de potencia, que nos permitirá dar acelerones y hacer ataques especiales. Pese a la velocidad, tendremos que estar muy atentos a los items, pues hay objetos ocultos e imágenes que desbloquear y ver después en la galería de extras.
Esto último añade un toque de exploración al juego que se agradece sobre todo en los niveles de acción, quitándo así algo de repetición de situaciones y monotonía a los combates. Uno de los causantes de eta monotonía es la escasa variedad de enemigos y sus similares formas de actuar. Parece ser que Eggman sigue liderando ejércitos de robots tontos, con unos patrones demasiado marcados y sencillos. Esta sensación se mantiene ante los jefes finales, tampoco muy difíciles. El juego al completo mantiene una dificultad suave, que no sacará de quicio a nadie.
Su duración tampoco es un aspecto a considerarle. Unas 12 ó 15 horas durará la aventura principal, que apenas es rejugable salvo por su invitacióin a conseguir todos los objetos ocultos. Es cierto que acabarlo al 100% será un reto para cualquiera, pues supone tener una calificación de S en todos los niveles y todas las medallas y objetos escondidos. No obstante, algún otro modo de juego o alguna opción multijugador le hubieran sentado bastante bien.
Conclusiones
La nueva carrera de Sonic ha llegado a Wii con muy buen pie. Desde su última aparición estelar en la plataforma, Sonic y Los Anillos Secretos, no habíamos tenido un juego del estilo, que cada vez está siendo más exclusivo del personaje. Hay algunos errores que se podrían haber pulido y que ya veremos si en el resto de versiones se han eliminado ya que son aspectos méramente técnicos como la poca inteligencia artificial de los enemigos o una apariencia gráfica algo borrosa.
No obstante, hay otros revalones que no ha podido esquivar. No presenta más modos de juego que el Historia, su banda sonora es sólo aceptable y llega a resultar monótono a las 4 ó 5 horas de juego. Por suerte, su sistema de control está perfectamente adaptado al Wiimote y funciona a las mil maravillas, perdiéndose la sensación de locura que propiciaban algunos Sonic anteriores. La puesta en escena más espectacular vuelve a correr a cargo del erizo insignia de Sega, una nueva invitación a correr y golpear alternadamente, como si tuviéramos dos juegos en uno y los intercálaramos.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.