La mejor liga del mundo

Nota: Pese a las pantallas en inglés, el juego está completamente en español.

La portátil de Sony recibe, un año más, el manager futbolístico más completo e interesante del marcado. Entrega tras entrega, el juego estrella de Sports Interactive ha ido cobrando forma y convirtiéndose en una alternativa idónea para los amantes del fútbol que quieran desarrollar sus habilidades al frente de un equipo en cualquier lugar. Cada vez más completo y explotando con acierto la potencia técnica de la PSP, Football Manager Handheld 2009 es, con diferencia, la mejor entrega hasta la fecha, ya que pese a partir de la misma base, sabe bien los puntos a mejorar y perfeccionar para alcanzar cotas mucho más elevadas dentro del género.

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Sports Interactive ha aprendido de las experiencias previas para pulir los detalles que requerían revisión, y arriesgarse a introducir características que parecían reservadas al mundo del PC. Lejos de la profundidad de las versiones mayores, la entrega para PSP es mucho más directa y sencilla, intentando alcanzar otro tipo de metas. Se trata de un completo gestor futbolístico con un estilo minimalista, en el que lejos de grandes y eternos menús y opciones, nos veremos limitados a acciones más concretas. De este modo, el título consigue llegar con mayor facilidad a todo tipo de público, no sólo aquellos aficionados del fútbol con importantes conocimientos del deporte rey.

Sin duda, los expertos echarán en falta opciones y posibilidades a la hora de definir a su equipo y, sobre todo, el dibujo que sus jugadores formarán en el campo; pero los neófitos agradecerán sin duda un juego sencillo a la par que completo, que ofrece incontables horas de diversión y llega a mantener al usuario pegado a la pantalla de su portátil. Además, en la entrega de este año, se han introducido representaciones de los partidos con las clásicas 'chapas' que se han convertido en la seña de identidad de la franquicia.

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Quitando esa ausencia de licencia, que se solventa sin demasiados problemas con nombres alternativos, las competiciones de dichos países, así como todos los equipos que las integran, están representados de forma muy completa, tanto en su diseño, reglas y Copas, como en la composición de todas las plantillas. Como siempre, y de forma casi inevitable al manejar una base de datos tan extensa dentro de un mundo en constante movimiento de jugadores, es posible encontrar pequeños errores, como jugadores que ya no están en ese equipo, o algunos fichajes que no están reflejados en el título pese a haber tenido lugar en la realidad. Habrá que prestar atención a dicho detalle para no confiarnos si creemos conocer nuestra plantilla, por si luego nos topamos con que tenemos un delantero de menos, por ejemplo.

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El equipo que elijamos nos aceptará como entrenadores de forma inmediata, aunque sean de la talla de Manchester United, Real Madrid o Barcelona. Este es, como siempre, el camino fácil hacia la gloria, y el verdadero reto estará en hacernos con las riendas de un equipo modesto y conseguir abrirnos camino a base de sufrimiento y elaborados planteamientos en cada partido que disputemos. Llevar a un segunda B a ser el campeón de la Champions es uno de los atractivos de este juego, aunque cada usuario tendrá total libertad para marcarse sus propios objetivos y prioridades; eso sí, teniendo siempre en cuenta lo que la directiva espera de él, para no toparse antes de tiempo con un despido inesperado.

Los objetivos de la directiva serán muy distintos de unos equipos a otros, y dependerán mucho de las condiciones económicas, históricas y sociales de cada entidad. Se fijarán al principio de cada temporada, y tendremos que ceñirnos a ellos o bien compensar un fracaso con un éxito por otro lado. Afortunadamente, en esta ocasión, la directiva no será tan exigente como en anteriores entregas, y su confianza será más realista y acorde a muchos más factores que tan sólo un par de derrotas seguidas.

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Por supuesto, como empezamos nuestra labor en la pretemporada, tenemos tiempo de sobra que conseguir algunos refuerzos. Esto no siempre es fácil, ya que las negociaciones pueden resultar duras, y tal vez el equipo acepte el traspaso pero el jugador no desee venir a nuestro equipo, pudiendo realizar nuevas ofertas para intentar lograr nuestro objetivo. Desgraciadamente, si psicológicamente un jugador no quiere, por mucho dinero que le ofrezcamos, no siempre acaba cediendo. En este aspecto, será muy importante la clasificación, la división o los objetivos que tenga nuestro equipo: es decir, por ejemplo, aunque tengamos el dinero, Messi no querrá jugar en segunda división.

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El componer un equipo para los partidos será el momento más delicado del juego. No será lo mismo meter a un jugador en una posición u otra, ya que sólo darán lo máximo de su capacidad en sus posiciones naturales. Eso sí, en esta ocasión los jugadores mostrarán una mayor disposición a adaptarse a otras zonas, y en caso de emergencia, un medio centro puede hacer una buena labor como delantero, por ejemplo. De hecho, la mayoría de nuestros goles no los marcarán los principales artilleros, como solía ser habitual, sino que cualquiera podrá hacer un tanto, acorde a las jugadas más elaboradas que trazará la máquina.

Igual de importante será definir nuestras tácticas. Podremos utilizar una de las formaciones predefinidas, como los clásicos 4-4-2 o 3-5-3, o bien elaborar nuestro propio dibujo táctico, recolocando algunas de las posiciones; será posible guardar hasta diez tácticas personalizadas. También se podrán definir otros parámetros como la mentalidad del equipo, el tipo de pases y entradas que queremos que realicen, seleccionar un capitán, etcétera. Sin duda, cuenta con una importante profundidad que lo acerca un poco más a lo que ofertan las versiones mayores.

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Ya a un nivel más personalizado, podremos darles órdenes a nuestros jugadores, de tipos variados, que determinarán el tipo de juego que queremos que desarrollen (pase, aguantar balón, tiros lejanos, marcajes, entradas…). Para terminar este repaso de los aspectos técnicos de creación de equipo, destacar la excelente opción de enviar ojeadores a todo el mundo para que investiguen y recomienden a los mejores jugadores que se encuentren.

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Resulta algo extraño el hecho de que para entrar a nuestra pantalla de tácticas, el botón para entrar varía según juguemos en casa (cuadrado) o fuera (círculo). Una situación extraña que acarrea desde siempre la franquicia, y que seguimos creyendo que sería más cómodo limitarlo a un botón. De todos modos, se agradece el poder tener completas posibilidades de modificar todos y cada uno de los aspectos del equipo, al igual que lo haríamos antes del encuentro. Libertad total para recomponer el equipo, el dibujo táctico, hacer cambios (pudiendo ver distintas estadísticas para saber cómo están rindiendo nuestros jugadores), etcétera.

Pese a las numerosas opciones que tenemos, hay que reconocer que si el equipo funciona, pocos cambios deberemos hacer a nuestras tácticas y equipos base, por lo que en ocasiones el juego puede resultar algo soso. Eso sí, afortunadamente el infortunio irá de la mano de los buenos resultados, y no tardarán en llegar las lesiones, de diversa gravedad, para nuestros jugadores más importantes, obligándonos a rediseñar el equipo. De este modo, además de abrazar el realismo del fútbol, se consigue mantener al jugador en tensión constante buscando soluciones para los problemas constantes a los que se enfrentará.

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Se trata de un juego que consigue mantener al jugador pegado a la consola durante horas con suma facilidad. Esa responsabilidad sobre nuestro equipo, sobre todo si es nuestra escuadra favorita de la realidad o sentimos simpatía hacia ella, nos mete mucho en nuestro papel. Eso sí, los expertos notarán la excesiva sencillez de la que hace gala el título, debido a las limitaciones tácticas y, sobre todo, a la facilidad con la que se consiguen objetivos e incluso retos mayores. Con un mínimo de conocimientos de fútbol y de planificación, se podrán lograr grandes cosas sin demasiados problemas.

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