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Premier Manager 2009

Premier Manager 2009

Manager modesto

Zoo Digital vuelve a la carga con su manager de gestión futbolística. Premier Manager 2009 nos permite dirigir la trayectoria de un club a elegir entre seis de las principales ligas europeas. Toma el sillón de gerencia y controla todos los parámetros de tu equipo. Dirigiendo el cotarro.

Los juegos de gestión de fútbol siguen apareciendo temporada tras temporada como complemento a los habituales títulos de simulación. A la espera del lanzamiento de FIFA Manager, por parte de EA y su habitual contrincante, Football Manager de Sports Interactive, nos llega la actualización de Premier Manager, por parte de Zoo. Siendo como son unos habituales en el género, el título de este año no presenta excesivas novedades y hablamos ya de la decimocuarta iteración de la franquicia. Para los que no lo conozcan, se trata de un título de gestión futbolística de aspecto muy arcade, lo que hace que empezar a jugar sea casi inmediato y no haya que pasar horas leyendo interminables parrafadas sobre los menús.

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El punto de partida nos permite crear nuestro perfil, elegir nuestra nacionalidad y seleccionar un equipo de entre seis ligas diferentes: Inglaterra, Escocia, Francia, Alemania, Italia y España. Cada liga posee sus divisiones inferiores, por lo que el volumen total asciende a unos 500 clubes, eso si, sin licencias oficiales. Veremos por tanto como el Real Madrid se denomina simplemente Madrid, el F.C Barcelona será simplemente Barcelona, y no veremos los escudos oficiales por ninguna parte. Sin embargo, los jugadores si que cuentan, en su mayoría, con el nombre real y sus iniciales. Choca ver en algunos casos como se han simplificado estos nombres, dejando por ejemplo a Victor Valdes como simplemente Victor.


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Gráficos

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El apartado visual de Premier Manager no destaca por su brillantez, aunque cumple con su cometido con solvencia. Uno de los puntos más destacables del título es la facilidad que ofrece al usuario para acceder a los diversos menús con tan solo un par de clicks. A pesar de que el número de ventanas de gestión es elevado, la estructura de las mismas, así como la posibilidad de situar opciones favoritas, agiliza mucho el proceso de navegación. Para cerrar con nota este apartado, el menú accesible desde la rueda del ratón o la barra espaciadora nos ofrece las opciones de gestión ubicadas en un mismo panel de control. De esta forma, si queremos consultar cualquier aspecto del club, se su personal o cualquier otra opción, tan solo tendremos que emplear un par de segundos hasta llegar a ella.

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El acabado de los menús, como decíamos, es bastante arcade, huyendo de la masificación de opciones que encontramos en otros simuladores. También hay menos aspectos que controlar que en sus competidores, puesto que no podremos actuar sobre algunos aspectos económicos como la elección de patrocinador. De cualquier forma, los menos versados en este tipo de juegos agradecerán el directo estilo de juego, muy enfocado a avanzar días y días mientras se huye de cargar al jugador de un abultadísimo catálogo de decisiones por tomar. Durante los partidos, una ventana nos mostrará el desarrollo de los mismos, utilizando el clásico sistema de círculos que actúan simulando el movimiento de los jugadores y el balón.


En lo negativo, el título carece inexplicablemente de cualquier tipo de parámetro de ajuste gráfico, haciendo que no se pueda disfrutar a pantalla completa, ni seleccionar la resolución directamente.Desconocemos el porqué de esta dejadez en cuanto a las opciones visuales, pero resulta una decisión polémica a todas luces. Para adaptar el juego a nuestro monitor deberemos arrastrar la ventana y redimensionarla al tamaño que deseemos. Nos ha chocado bastante que el sistema gráfico deba configurarse de esta manera, pero en ningún lugar existe una pestaña de opciones gráficas para ser manipuladas a nuestro antojo.

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Música y Sonido FX

El repertorio sonoro de Premier Manager destaca por carecer por completo de banda sonora alguna. Ni una canción de fondo, ni siquiera una breve melodía de tema principal, nada de nada. Lo único que escuchamos desde el momento en que el juego se inicia son los sonidos dedicados a la selección de los menús. Estos sonidos, que tampoco brillan por su carácter espectacular, simplemente cumplen su labor, quedando el repertorio sonoro totalmente falto de algo más. Desde luego, una mínima selección de temas musicales hubiera ayudado algo a la ambientación, que flojea por completo. Un punto negro bastante importante e incomprensible en un juego que sale al mercado en el año en el que nos encontramos.

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Jugabilidad

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Tras crear nuestro perfil y elegir club, llegamos a la pantalla de control del equipo, con numerosos accesos directos en el lateral derecho de la misma. Estos accesos directos aparecerán remarcados con una exclamación cuando existan avisos que leer en los diferentes aspectos. Será aquí donde nos enteremos de las ofertas de otros clubes por nuestros jugadores, o donde el presidente nos envíe mensajes para establecer reuniones. Nuestro papel será el de manager deportivo, por lo que tendremos la figura del máximo mandatario por encima, y él será el que en última instancia apruebe o revoque nuestras decisiones extradeportivas.

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Como responsables del club podremos atender a un gran número de decisiones que cubren las meramente deportivas como establecer tácticas de juego, realizar las alineaciones, o establecer los patrones de entrenamiento de la plantilla. También podremos tomar las riendas del fisioterapeuta del grupo, para establecer dietas, ordenar sesiones de relajación o citas con el psicólogo. Por supuesto, contaremos con personal encargado de estas labores, de forma que estos aspectos se podrán automatizar, aunque por nuestra experiencia, encargarse de ello resulta una decisión mucho más interesante y efectiva.

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El ritmo de juego se estructura en días, que iremos avanzando mediante los controles correspondientes. Cada día podremos tomar todas las decisiones que queramos, y se actualizarán los tablones de noticias, los mensajes que los distintos efectivos de nuestro cuerpo técnico nos envían o las listas de jugadores transferibles, por ejemplo. La sensación es la de que el entorno del fútbol mundial realmente cambia día a día, y además no lo hace girando a nuestro alrededor. Los clubes ficharán jugadores, disputarán sus partidos y el mercado irá cambiando dinámicamente, según avancen los meses.


Las plantillas están actualizadas a la temporada actual, aunque los nombres de los personajes del cuerpo técnico no se parecen ni remotamente a los reales. Nuestros empleados tienen una completa ficha técnica que nos indica su nivel de experiencia -que va mejorando según pasa el tiempo- su fidelidad al club, además de sus datos económicos y de rendimiento en la presente campaña. Mejorar la eficiencia de este personal y motivarlos a seguir con nosotros también es una labor de la que deberemos encargarnos por el bien del equipo. Por supuesto, si no se sienten bien en el club nos lo harán saber, así como nos darán información de cualquier problema deportivo o extradeportivo que pueda surgir, siempre dentro de sus competencias.


Las relaciones con los distintos personajes y entidades se realiza por medio de diálogos en los que podremos elegir siempre entre varias opciones. Resulta una mecánica bastante interesante, puesto que podremos llevar las conversaciones por el lado que más nos interese en cada momento. Por ejemplo, si el presidente nos pregunta que tal vemos la temporada podremos optar por un enfoque conservador, aprovechar la ocasión para pedir refuerzos o simplemente declarar que vamos a por todas. Este estilo de conversaciones aporta un punto de profundidad a las conversaciones tanto con personal como con clubes, puesto que también se utiliza en las negociaciones de traspasos y demás acuerdos que dependen directamente de nosotros.



A nivel táctico y de plantilla, podemos elegir diferentes tipos de entrenamiento para los jugadores de diferentes posiciones. Las cualidades de los jugadores se valoran tanto numéricamente como con habilidades. Cada uno poseerá un conjunto diferente de ellas, y cada habilidad poseerá diferentes grados entre uno y ocho. Así, podremos trabajar las habilidades innatas de cada uno para convertirlos en fuera de serie en algún aspecto concreto, como puede ser la posesión de balón, el pase largo, el disparo a puerta, los desmarques sin balón o los tiros libres. El interfaz facilita mucho la labor en este aspecto y resulta muy intuitivo para acceder a todas estas opciones cómodamente.


5

Mejorable

Puede tener elementos aceptables y entretener, pero en general es una experiencia que no dejará huella. Sólo recomendable en caso de sequía de este género de juegos.