Pasamos una velada con el equipo de Epic y el modo multijugador de Gears of War 2. En total ocho modos de juego que van desde el tradicional Warzone o King of the Hill hasta el Horde, presentado hoy, en el que el objetivo es sobrevivir a oleadas Locust.
Tras la conferencia de hoy en el Convention Center, Microsoft ha cerrado su día grande esta noche con una sesión informal de Gears of War 2 en todos sus modos multijugador; Warzone, Submision, Wingman, Execution, Guardian, Annex, King of the hill y Horde. El primero y el último han sido los que más han ocupado nuestro tiempo. The Horde ha sido anunciado esta mañana durante la conferencia de Xbox 360 de boca de su director creativo. Básicamente toma la idea de un survival de cualquier beat'em up y la aplica a las convenciones de Gears of War. A lo largo de un escenario debemos superar diversas zonas divididas por checkpoints en equipos de uno hasta cinco jugadores, sobreviviendo a oleadas Locust gradualmente más numerosas y poderosas.
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Una vez terminado el checkpoint se hace balance de los enemigos eliminados por cada jugador, así como los puntos de equipo conseguidos y bonificadores de las fases sobrevividas sin morir. Horde requiere un estilo de juego táctico y coordinado en equipo, porque dependiendo del checkpoint, los Locust aparecen desde posiciones diferentes y con estrategias diferentes; habrá avanzadillas, infantería, francotiradores y fuerza bruta con los Boomer en una nueva faceta, como carniceros, con casco, escudo y machete. En estas partidas hemos podido ver nuevos enemigos, como una especie de perros bomba, Grunts Hammerhead -con un casco muy chulo- y un poderoso fanático Locust, tan alto y estilozado como rápido e inteligente.
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Los escenarios que jugamos fueron Avalanche, un refugio nevado, un remake del Gridlock del GOW original, River y un entorno urbano con un inmenso cráter en medio. En todos ellos la acción discurría en alturas diferentes. Si morimos, podemos ser resucitados por nuestro compañero dentro de un espacio de tiempo razonable que se puede configurar antes de comenzar la partida, pero si finalmente se acaba muriendo, es posible recorrer el escenario con una cámara libre llamada Ghost, capturando screenshots de cualquier lugar del campo de batalla simplemente pulsando B. Por cierto, que ahora Gears of War 2 incluirá un sistema de matchmaking similar al de Halo 3.
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La personalización de nuestro COG ha mejorado ligeramente con respecto al primer GOW; ahora es posible configurar el arma básica que portamos al entrar la partida -rifle de asalto Lancer o el Hammerbust Locust-, así como escoger varios modelados aunque en esta versión que hemos probado aparecen los mismos que en la primera parte. Hemos visto también algunas de las nuevas armas, las varias pistolas, como la Medusa o la nueva versión de la Boltok, el escudo que se puede usar junto a una de ellas, el lanzallamas, un mortero lanzamisiles y granadas de gas tóxico.
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Los duelos con las motosierras del Lancer han aportado incertidumbre a esos momentos en los que siempre ganaba el primero que acercaba la hoja al rival. Ahora dependen de la cantidad de pulsaciones de botón B que se hacen, y la verdad es que son bastante más justos, pero pueden buscarse ayudas, ya que los compañeros pueden disparar al oponente para darnos ventaja en el enfrentamiento. Los duelos únicamente se producen si ambos soldados se encuentran cara a cara, si uno embiste con la motosierra por detrás al otro, éste estará automáticamente muerto y mutilado.
En cuanto al resto de modos, Guardian es una variante del Assassination del primer Gears of War donde se debe proteger al VIP del equipo y el objetivo es asesinar al del rival, Wingman, como su nombre puede dejar entrever, es un modo en el que jugamos junto a un compañero por parejas contra otros cuatro equipos de dos, todos contra todos, Submission es de los más divertidos, ya que dos equipos compiten por atrapar y someter a un rehén, transportándolo a una posición marcada en el mapa. Warzone es el más típico, un simple Deathmatch por equipos similar al de la precuela, al igual que el Annex añadido en el contenido descargable, ahora diferenciado de un mucho más tradicional King of the Hill.
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El punto divertido de la sesión lo pusieron John Di Maggio y Carlos Ferro, voces americanas de Marcus Fénix y Dominic Santiago, que se acercaron gritando "Take cover!" mientras jugábamos nuestra partida. También pudimos ver el tráiler de presentación del juego y el final de la demo que esta mañana ha hecho Blezinski, que termina con la frase "si ellos pueden conducirlo, ¿por qué no nosotros?" aludiendo Marcus a la posibilidad de conducir un Brumak. El jueves se lo preguntaremos a Cliff a ver qué pasa.
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