Gears of War 2, Impresiones
Ha sido sin lugar a dudas el título central del May Showcase de San Francisco. Tras el primer vídeo in-game publicado el sábado pasado, Cliff B. nos enseña durante media hora el espectacular arranque de Gears of War 2 con el nivel The Assault. Sin duda el título clave para Xbox 360 en este año.
Ha sido sin lugar a dudas el título central del May Showcase de San Francisco. Tras el primer vídeo in-game publicado el sábado pasado, Cliff B. nos enseña durante media hora el espectacular arranque de Gears of War 2 con el nivel The Assault. Sin duda el título clave para Xbox 360 en este año.
A puerta cerrada, y bajo la atenta mirada de Peter Molyneaux, uno de los jóvenes talentos de la industria del videojuego esperaba con el pad entre las manos. Cliff Blezinski, director artístico y de diseño de Epic Games lo tenía todo listo para la demo de Gears of War 2 que iba a realizar ante ocho periodistas. Pese a la acertada incorporación de Kudo Tsunoda como general manager de Gears of War, Cliff no ha perdido ni un gramo de peso específico dentro del proyecto. Esta ha sido la segunda vez que le hemos visto en dos días. Anteriormente le vimos el pasado sábado presentando el primer vídeo del título, el que mostraba el espectacular nivel del asalto. Su demo de hoy se ha centrado en ampliar esa breve experiencia mostrada, repasando al milímetro todas sus posibilidades.
Todo ha comenzado con un repaso a la historia de la serie, que en esta segunda entrega ambientada 6 meses después de los acontecimientos de Gears of War, se vuelve más oscura, con mayores nexos personales, a una escala más amplia y con inesperados giros de guión. GOW 2 retrata un escenario bastante desafortunado para los humanos; con la llegada del invierno los Locust han contraatacado con una ofensiva a gran escala y han conseguido arrinconar a la humanidad en una única ciudad fortaleza, Desento, imposible de penetrar por su localización. Pese a ello, los Locust han tomado las ciudades cercanas rodeándola, y preparando un ataque coordinado que hundiría la ciudad en el subsuelo. Las fuerzas COG, entre las que por supuesto se encuentra el escuadrón Delta capitaneado por Marcus Phoenix, deben impedirlo.
The Assault comienza con un numeroso convoy COG, compuesto por un contingente de los helicópteros que ya aparecían en el primer GOW y un grupo de Derricks -ese vehículo pesado presentado el sábado-, atravesando un un paso montañoso, con abundante vegetación. La fotografía del paisaje, tanto en las breves cinemáticas como en la acción, está muy cuidada, ofreciendo un cálido atardecer muy bien retratado con unos efectos de luz tremendamente realistas. De repente los Locust interceptan el convoy, derribando a los helicópteros mediante un bombardero antiaéreo de Morteros Nemacyst. En medio de la espectacular secuencia, con el estruendo de las explosiones y entre los helicópteros precipitándose desde el cielo, tomamos control de Marcus.
El primero de los objetivos es evitar que el fugo de mortero impacte en el Derrick que transporta a los Delta. Esto básicamente se realiza con la escopeta recortada y esperando pacientemente a que el proyectil, que es biológico como todo el arsenal Locust, esté lo suficientemente cerca en su trayectoria descendente para poder hacerlo explotar en medio del aire sin impactar en el vehículo.
Esta primera escena muestra muy bien la escala a la que se va a mover esta secuela. El propio Kudo Tsunoda nos lo comentaba minutos antes; "la acción en Gears of War 2 se eleva a un nivel más masivo, con batallas con enemigos más grandes, en mayor número, con vehículos de varios tipos en situaciones mucho más abiertas. Los detractores no podrán criticar que la experiencia que ofrece GOW son únicamente tiroteos a cubierto bajo columnas y piedras". Y tras haber visto este nivel al completo, no podemos estar más deacuerdo en el salto de escala: comparando ambos, Gears of War seguía más la incursión de un único escuadrón dentro de un conflicto del que no se tenía una idea global, en cambio GOW 2 nos pone dentro de una batalla a gran escala donde existe un sentido de pertenencia a un ejército que se enfrenta a otro ejército. En este sentido, se han desarrollado nuevos personajes, con diferentes roles y de diferentes escuadrones, con bastantes líneas de diálogo, ya sean de la evolución de la batalla o de comentarios a nivel personal.
Tras superar esta parte el convoy COG, bastante reducido en número tras la primera embestida Locust, sigue su curso, esta vez descendiendo por la montaña a toda velocidad, hasta que el Derrick de los Delta acaba atascado en un barrizal. Mientras uno de los nuevos personajes, Dizzy, conductor del vehículo que transporta a Marcus y compañía, intenta sacarlo del bloqueo, el escuadrón debe proteger su débil posición ante la posibilidad de un ataque Locust. Como no podía ser de otro modo, esto acaba sucediendo, y varios agujeros de emergencia aparecen en frente del camión. El segundo objetivo consiste lógicamente, en defender el Derrick.
Aquí podemos ver cómo los enemigos utilizan diferentes rutinas en la IA, coordinándose para atacarnos desde el frente, apostillados, flanqueándonos o desplazándose a terrenos elevados para abrir fuego desde esa posición. Además, reciben apoyo desde artillería con los Nemacyst. Tras eliminarlos y cerrar los agujeros con granadas, el vehiculo se prosigue la marcha por un frondoso bosque, derribando árboles a su paso. Después del ataque, el convoy está compuesto ahora por únicamente cuatro Derricks.
La intensidad, lejos de descender, va en aumento gradual. El siguiente momento álgido sucede en una llanura, con el terreno quebrado, señal de infestación Locust, algo que Marcus hace notar. Seguidamente, irrumpen en escena y desde un agujero distante, más de 40 Locust y un gigantesco Brumak, que tenía el honor de ser el enemigo más temido de todo Gears of War. Según dice Blezinski, en GOW 2 no será así ni mucho menos, ya que hay criaturas más monstruosamente abominables esperándonos.
Este ataque es una lección de táctica Locust; mientras el Brumack capta la atención de los Derricks que abren fuego contra él, el poblado grupo de infantería intenta asaltar uno de los camiones. Están equipados con ganchos y con ellos comienzan a ascender a su parte superior. Desde la distancia, y entre tus propios proyectiles y los misiles del Brumak, puedes ver cómo finalmente han eliminado al escuadrón del cuarto Derrick y que ahora se han hecho con su control y planean embestirte con él. Dejando al Brumak, que parece entretenido con los dos equipos COG restantes, la atención pasa al combate de los dos Derricks; el nuestro y el que ahora controlan los Locust.
En una emocionante persecución no exenta de embestidas, abordajes y fuego cruzado, el objetivo es eliminar al conductor enemigo. No es tan fácil como parece porque la cabina del Derrick está blindada y ninguna de las armas puede hacer mella en ella. Dizzy sugiere embestirle y romper el cristal a base de golpes, algo que acaba funcionando. Antes de eso algunos Locust consiguen saltar a tu vehículo y es necesario eliminarlos cuerpo a cuerpo con la motosierra del Lancer, que ahora ofrece la posibilidad de duelos -se deciden pulsando repetidamente el botón B- así como ejecuciones más violentas, seccionando torsos, cabezas, miembros y hasta de forma ascendente desde los genitales hacia el tronco.
Para evitar que los enemigos suban al vehículo es necesario derribar los ganchos que lanzan y que usan para escalarla. Contar con un Locust de escudo -escudo enemigo, como se le ha bautizado a la maniobra- ayuda a no recibir impactos del intenso fuego. Cliff comentaba que cada Locust absorbe una cantidad lógica de proyectiles tras la cual deja de ser útil, así como si les alcanza una explosión, reventando el cuerpo o perdiendo los brazos, por ejemplo. También se han confirmado nuevas ejecuciones al margen de la ya vista de romper el cuello.
La escena termina con el camión enemigo precipitándose al vacío antes de cruzar un puente. Pero cuando parece que todo ha terminado, dos Brumak aparecen en escena. Gracias al refuerzo de un tanque COG -un vehículo que también se podrá controlar- uno de los gigantescos Locust cae inerte tras varios obuses de su cañón. La acción sigue a un ritmo frenético, sin descanso alguno. Hasta el mismo Cliff debe emplearse a fondo para mantener a a raya el avance de las tropas Locust.
Subiendo todavía más el listón, la situación se complica con la brusca entrada de un Corpser, otro de los enemigos más impactantes de la primera parte con esa apariencia arácnida. Lo combates durante unos segundos, haciéndolo retroceder, pero contraataca, engullendo bajo tierra a uno de los otros Derricks en una escena aterradora y que siempre el desconcierto. El nivel concluye con Marcus empleando el cañón del vehículo para literalmente reventar la cabeza del único Brumak que sigue en pie, tal y como se muestra en los últimos segundos del tráiler.
En lo visual, y a pesar de que se ha empleado el mismo motor gráfico, existen claros avances en el empleo de esta versión revisada del Unreal Engine 3. No cabía otra posibilidad de los creadores de este motor gráfico casi universal, en la consola de nueva generación que mejor uso hace de él. Los nuevos efectos gráficos incluyen sombras dinámicas, iluminación mejorada, capacidad para renderizar cientos de enemigos, entornos destructibles, efectos climatológicos, objetos fluidos y ambient occlusion, además que ahora las localizaciones serán más variadas y con más énfasis en retatar las vistas.
La impresión general que nos queda y que fue algo que empezamos a sospechar tras ver el vídeo lanzado el sábado es que Gears of War 2 va a dotar de una mayor envergadura a la experiencia de la primera parte. Efectivamente, como nos comentaba Tsunoda, la sensación es que Marcus y el escuadrón Delta forman parte de un ejército que toma parte en una batalla, con enfrentamientos numerosos al margen de las operaciones quirúrgicas que se vieron en el pasado, aunque éstas también sean una parte importante de la jugabilidad de la secuela. El contenido se ha visto aumentado en todos los niveles; más enemigos, más armas, nuevas situaciones, personajes debutantes, el doble de horas de juego y una historia más oscura y consistente.
Cliff no quiso entrar en detalles respecto al multijugador de Gears of War 2, ni en las nuevas adiciones competitivas, ni en el cooperativo, que todavía espera confirmación de si finalmente soportará 4 jugadores de forma simultánea, doblando lo visto en el primer Gears of War. Si las credenciales de la primera parte ya eran suficientes para generar suficiente hype, la presencia de Cliff B y Kudo Tsunoda llevando ambos las riendas del proyecto, lo hacen todavía cobrar más entidad. En el E3 tendremos nueva información del título.
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