Lost Planet: Extreme Condition
Acción de vieja escuela
Después de su debut en 360 y su paso por PC, Lost Planet llega a PS3 es una impecable conversión que proporcionará a los usuarios de la consola de Sony la posibilidad de jugar a uno de los títulos más recientes de la compañía de Osaka.
Lost Planet es un juego muy peculiar dentro de lo que han sido los comienzos de la andadura de esta generación. Dotado de unos gráficos muy vistosos, e incluso impresionantes en algunos momentos, parecía una prueba notable de que una nueva consola de nueva generación como 360 era capaz de desplegar una espectacularidad visual como nunca antes se había visto en una consola. Pero a la misma vez, también demostraba que los gráficos de 'nueva generación' no tenían necesidad de acompañar a una jugabilidad igual de innovadora.
Obviamente, cuando uno es un seguidor habitual del mundo de los videojuegos y realiza un cambio de plataforma a una superior, espera encontrar cosas distintas más allá del salto gráfico que se puede esperar: nuevas mecánicas, nuevos conceptos, nuevas ideas que hagan uso de ese potencial tecnológico que una nueva máquina ofrece. De hecho, una de las críticas más habituales a los títulos sumergidos en la vorágine de esos tumultuosos cambios generaciones es la de: 'no aporta nada con respecto a lo ya visto en anteriores máquinas'.
Acción de vieja escuela
En el caso de Lost Planet, la frase cobra sentido con toda su fuerza: no aporta prácticamente nada con respecto a muchos de los títulos que se pudieron jugar en Playstation 2, Xbox o Gamecube; es más, no aporta prácticamente nada al género de la acción en tercera persona, manteniendo un esquema y planteamientos que no se alejan demasiado de cualquier juego de acción 2D de la época de las 8 o 16 bits: avance lineal, multitud de armas, vehículos extra diseminados por el nivel y monstruos gigantes de final de pantalla que hay que superar como prueba última para poder seguir adelante. Una fórmula bien establecida y sobradamente usada que parece ajena a todos los avances realizados en la creación de mundos virtuales en estos años.
Si bien ese estancamiento en una estructura clásica suele ser un aspecto claramente negativo, ya que se puede interpretar como un falta de capacidad del estudio por innovar por ejemplo, lo cierto es que es al cabo de unas horas cuando el jugador se da cuenta de que este título de Capcom no innova porque no lo pretende e incluso no lo necesita. La idea anterior sobre sus similitudes con los títulos de acción tipo Contra o Bionic Commando cobra sentido ya que el espíritu y el desarrollo es extremadamente similar. La compañía de Osaka decidió que si bien quería innovar con Dead Rising, un título que no se parece a nada de la anterior generación, con Lost Planet querían concentrarse en una fórmula más clásica y centrada: la de acción sin descanso, aunque sin renunciar a hacer un título con personalidad propia.
El protagonista es Wayne Holden, un amnésico piloto de Vital Suits. Estas máquinas constituyen uno de los elementos centrales de Lost Planet ya que el combate se desarrolla tanto a pie como montado en esos mecha fuertemente acorazados y equipados con armas pesadas. A pesar de su aparente torpeza, sus propulsores también les otorgan una gran movilidad por el escenario, aunque hay que tener en cuenta las diferentes prestaciones que tienen los diferentes tipos de vehículos que te puedes encontrar a lo largo del juego, ya que no todos los Vital Suits son lo mismo.
La acción se desarrolla usando diferentes tipos de cámara en tercera persona, desde una más lejana, a la ya utilizada por Capcom en Resident Evil 4 y que se ha convertido en toda una referencia para los juegos de acción en tercera persona. La estructura es muy predecible y no tiene nada reseñable, ya que se limita a una sucesión de niveles de gran tamaño salpicados de escenas cinemáticas y coronados por los 'jefes finales' clásicos, pero que en este juego alcanzan una proporción realmente inimaginable.
Mechas contra insectos gigantes
Wayne por sí sólo puede defenderse por sí mismo. Cuenta con diferentes tipos de armas como ametralladoras, escopetas o granadas, e incluso puede cargar con armas pesadas propias de Vital Suits, aunque su movimiento queda mermado por el peso de éstas. El tipo de combate que se libran en este juego es variado, ya que hay momentos en los que hay que pelear contra otros humanos -incluyendo otros Vital Suits- o bien enfrentarse a los Krydd en sus diferentes formas, ya que algunos de ellos se organizan en forma de enjambre mientras que otros de su especie son auténticos colosos acorazados que necesitan tanto potencia de fuego como buenos reflejos para esquivar sus acometidas.
Afortunadamente, los niveles son normalmente claros y bastante lineales por lo que no hay riesgo de perderse, aunque esa no sea la mejor fórmula de crear entornos interesantes. Wayne tiene un gancho extensible que puede utilizarse para escalar muros. Lo que proporciona cierta verticalidad al diseño de niveles, pero los muros invisibles y la extrema linealidad de los mismos resulta un tanto sosa, pese a que son escenarios considerablemente grandes.
La apoteósis de los jefes finales
Este buen hacer de Capcom, que se espande a otros elementos del juego, hace que Lost Planet se mantenga a una altura digna pese a lo que ha llovido con respecto a la fecha del lanzamiento original. Lost Planet no está a la altura técnica de algunos de los juegos recientes en PS3 y no puede compararse visualmente con juegos de la talla de Uncharted, Assasin's Creed o Ratchet & Clank, pero a pesar de ello donde la tecnología no llega sí llega el estilo y el buen hacer d eunos buenos diseñadores gráficos, que hacen del D.N.E IIIun lugar con personalidad propia, en cuyas estepas heladas y ciudades abandonadas se puede encontrar sensación de desasosiego, en claro contraste con la acción sin descanso de la que se hace gala aquí.
El modo multijugador de Lost Planet también es una buena alternativa a la misión principal y además en esta versión para PS3 se incluyes todos los mapas extras incorporados a través de descarga por Live!, por lo que esta versión para la consola de Sony presenta un buen pack de mapas que se combinan bien con los cuatro modos de juego online disponibles. La otra novedad, un tanto superficial pero siempre simpática, es la de ofrecer diferentes modelos alternativos a los de Wayne, entre los que se incluye a Frank West de Dead Rising, Mega Man, Joe y la atractiva pirata Luke.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.