Un mini-Diablo a bajo precio

Cuando pensamos en un RPG de acción en vista aérea es fácil recordar Diablo, una maravilla que Blizzard firmó hace unos cuantos años y que amplió con su secuela, Diablo II, uno de los inmortales títulos multijugador de PC y que, aún hoy, siguen estando superpoblados por usuarios con ansias de demostrar su valía. Rol auténtico embutido en un sistema de juego arcade, de avanzar y matar, deudor del no menos magnífico Gaunlet.

Desde este último, han sido decenas de juegos los que han intentado copiar su mecánica. Ya no sólo en 2D, sino también en el mundo poligonal con exponentes más dignos que otros. Arkadian Warriors es el último en sumarse a este 'género', un mini-Diablo, o casi mejor un mini-Champions of Norrath, una variante lanzada por Sony en PS2 no hace demasiado tiempo.

Su desarrolladora, los chilenos de Wanako Games, creadores de una de las joyitas del Xbox Live Arcade, el shooter Assault Heroes, ha conseguido un par de cosas bastante complicadas en este Arkadian Warriors: la primera es que, pese a estar ante un título bastante repetitivo, no llegue a cansar en exceso. La segunda es lograr un apartado gráfico bastante potable, al nivel de los juegos de PSP o los primeros de Xbox. Y todo en un espacio reducido de 100 MB.

El argumento del juego es bastante nimio: hace muchos años, varios animales bajaron a al planeta transformados en seres humanos para combatir a Gorgon, un villano que amenazaba con destruirlo. Cuando se logró la paz, volvieron a los cielos para dejar a la humanidad seguir su vida con normalidad. Pero ahora que el mal ha vuelto, la diosa Artemisa baja de nuevo a la tierra y tras elegir un guerrero -nada menos que nosotros- decide convertirnos en su brazo ejecutor, el que liberará de nuevo el mundo.

Jugabilidad
La mejor forma de resumirlo es: 'otro clon de Diablo'. Nada más empezar, tenemos que crearnos un personaje entre tres disponibles: un guerrero, el históricamente personaje fuerte, con una gran defensa pero no excesiva agilidad; un arquero, capaz de atacar desde lejos a costa de una potencia física inferior a la del anterior; o una bella hechicera capaz de realizar todo tipo de conjuros mágicos.

Cada uno de ellos cuenta con habilidades propias que iremos aprendiendo a medida subamos de nivel, siendo el máximo nivel 20. La forma de utilizarlas es asignándolas al botón B mediante un sistema bastante sencillo deudor de los títulos de PC, dividido en capas para el inventario, las estadísticas, equipamiento… las habilidades, además, van potenciándose con el uso y volviéndose más poderosas, por lo que a medida que el personaje progrese, también lo harán sus técnicas.

Esto es esencial, y en realidad todo el juego mantiene una jugabilidad que todos a groso modo conocemos de otros productos. Por ejemplo, para aceptar las misiones moveremos a nuestro personaje por una pequeña ciudad, hablando con los NPCs -que aparecen con una ! en la cabeza, como en Diablo II-, del mismo modo que podremos ir a la tienda para comprar/vender material.

El desarrollo del juego es por misiones, 25 en total en las cuales la variedad no es especialmente amplia pero que tampoco se hacen demasiado cansinas. Por ejemplo, la primera consiste en acabar con un determinado número de jabalís salvajes, y más adelante encontraremos otra de estructura similar, pero cambiando a dicho animal por serpientes venenosas; o variaciones más leves, como recoger colas de escorpión tras acabar con ellos.

Otras misiones consistirán en destrozar elementos clave de un escenario -como gorgonas-, u obtener un objeto robado por los monstruos, como una muñeca para una niña pequeña o una forja para un aldeano. Sí, como en Diablo II. De todas formas, las mejores misiones son en las que al final aguarda un jefe de final de nivel que nos triplica en tamaño: desde un jabalí gigante hasta una pareja de cíclopes gemelos. Sus patrones de ataque están lejos de los de los grandes del género, eso sí.

Siendo un juego de Xbox 360 era de esperar que incorporase un modo multijugador, y así es. Assault Heroes, al anterior título de Wanako, tenía unos servidores ciertamente estables y era fácil jugar cooperativamente sin mayor problema a través de la red. En el caso de Arkadian Warriors, localizar a un compañero -online- es difícil, y más complicado aún es conseguir jugar con fluidez: hay tirones de lag bastante pronunciados y en ocasiones los personajes van a saltos.

Apartados técnicos
Como se decía al principio, Arkadian Warriors cuenta con un apartado técnico realmente bueno. Unos modelados 3D que nada tienen que envidiar a los de los primeros juegos de Xbox, con una carga poligonal más que decente para lo que podría exigirse, y unos fondos que únicamente adolecen de acabar cansando por ser bastante parecidos. Si descontamos esto, estamos ante un juego que luce bastante bien, aún sin contar con un estilo estilizado y apostar por el look super deformed. La BSO brilla por su ausencia y los FX no son nada del otro mundo.