Pro Evolution Soccer 2008

Un año más Pro Evolution Soccer vuelve, en este caso en un segundo intento de lograr ser el mejor juego de fútbol de Nintendo DS. Aún faltan algunos días para que salga a la venta en nuestro país, pero hemos podido probar la versión japonesa y os contamos nuestras impresiones.

La franquicia futbolística de Konami no ha tenido demasiada fortuna en su última entrega para la nueva generación, ofreciendo un producto con novedades claramente insuficientes y gráficos que no cumplen con la potencia de las máquinas donde se mueve. Mejor suerte ha tenido la versión de PS2, posiblemente en su última visita a esta consola.

Las portátiles han tenido que esperar un poco más, pero en pocos días saldrá a la venta tanto para PSP como para DS. Mientras que en la consola de Sony se trata de una conversión desde PlayStation 2, DS recibirá una versión totalmente personalizada. Hemos tenido ocasión de dar nuestros primeros chutes a "World Soccer Winning Eleven DS - Goal x Goal!", es decir, la versión japonesa del juego, como aperitivo de lo que veremos en nuestro país.

Gráficamente se sigue viendo muy similar a la entrega del año pasado, con unos modelados no muy detallados y un tanto toscos. La mayor novedad en este apartado es la casi total ausencia de ralentizaciones que tuvimos que sufrir en PES 6, aunque en momentos muy puntuales siguen haciendo acto de presencia, normalmente en jugadas a balón parado donde un mayor número de jugadores se junta en pantalla.

En cuanto al sonido, la versión japonesa no cuenta con comentarios y, aunque no está aún confirmado del todo, lo mismo sucederá con la europea. Sólo se oirá gritar "gol" cuando logremos marcar en la portería contraria. Por tanto, el griterío de los aficionados será nuestra única compañía durante los encuentros.

La jugabilidad se ha refinado y lo primero que notaremos es que ya no existe esa sensación de "pelota de playa", con una respuesta del balón más realista, aunque esto ya se corrigió en parte el año anterior en la adaptación a nuestro continente de la versión nipona.

De hecho, lo más curioso de todo es que el esquema de control de FIFA 08 en DS llamado "Arcade" es el que utiliza el título de la competencia. Aunque esto no pase de anéctoda, lo cierto es que es factible cober un único jugador, recorrerse todo el campo, plantarse ante la portería y marcar. Resulta incluso más fácil que buscar una jugada con pases.

La I.A. de los rivales no ofrece demasiada complicación en casi ningún nivel de dificultad, lo que ayuda un poco a esta sensación de que no hay simulación por ningún sitio. No tiene por qué ser malo, en el FIFA no lo es y Real Football, de Ubi, casi presume de ello, pero choca que sigan esta línea siendo un PES teniendo precedentes en los 32 y 64 bits de títulos de fútbol como los ISS Pro.

Eso sí, hay un aspecto en el que sí se asemeja a sus hermanos mayores: las posibilidades de configuración del equipo, que hacen buen uso de la pantalla táctil para marcar la táctica. Durante los partidos también tendremos un cierto control mediante la pantalla inferior.

En cuanto a modos de juego, sigue siendo muy completo, aunque la lista de los mismos podría variar de aquí a que salga en nuestro país, ya que las versiones japonesa y europea suelen guardar ciertas diferencias. Destaca, sin duda, el juego en línea, en el cual fue pionero el año pasado. En esta entrega se podrán disputar partidos a cuatro con dos por cada bando.

En definitiva, Winning Eleven ha profundizado en Nintendo DS este año por la misma vía que abrió el anterior. En pocos días conoceremos la versión europea del juego y veremos si se corresponde con los cambios hechos en la japonesa.