Desde que Microsoft mostrara por primera vez su Xbox 360, en el E3 2005, ha seguido una línea de actuación muy clara en lo que se refiere a las conferencias del E3: centrarse en el presente. La empresa de Redmond ha evitado todo lo posible realizar anuncios de títulos cuyo desarrollo se puede extender años, o mostrar vídeos "sospechosos" en los que no esté claro si se está viendo un juego real o una secuencia prerenderizada. Esa postura tiene sus ventajas, especialmente el de aparecer ante el público con una postura honesta, centrada en promocionar los títulos que aparecerán en algunos meses, sin trampa ni cartón. La desventaja radica en la poca capacidad para sorprender en el evento, ya que casi todos los juegos mostrados suelen ser sobradamente conocidos.
Si por algo es conocido el E3 es por sus grandes noticias, anuncios rompedores que quedan grabados a fuego en la memoria de los fans por muchos años. ¿Quién no recuerda el "tatuaje" de GTA IV en el brazo Peter Moore el pasado año?. En cambio este año, Microsoft ha decidido no hacer nada de eso en esta conferencia, centrándose de lleno en lo que considera que es ahora mismo su principal baza para ganar más penetración: su catálogo de juegos para los próximos meses.
Razones no le faltan. A lo largo de la hora y media de conferencia se han podido ver una línea extremadamente sólida de contenido de todo tipo: éxitos seguros como GTA IV, Halo 3 o Madden; apuestas tremendamente prometedoras como Lost Odyssey, Mass Effect, Assasin's Creed, Rock Band, Project Gotham Racing 4 o Call of Duty 4; más juegos arcade, con títulos clásicos o nuevos; un incremento del contenido audiovisual, que llegará finalmente a Europa a finales de año en forma de películas descargables en HD; juegos orientados al público mayoritario como el trivial de películas Scene It? o al infantil/juvenil como Viva Piñata: Band of Animals... La consola tiene una línea de lanzamientos impecable de aquí a finales de año y esa es la baza que quiere jugar Peter Moore y su equipo, muy loable, pero echo en falta una vistazo al futuro y ese gran anuncio que suele dar a este tipo de conferencias su propia personalidad -para bien o para mal-
El equipo de Microsoft Games parece confiado y muy seguro de su máquina y de la posición avanzada frente a PS3 que ocupa en el mercado americano. Cuenta con los juegos adecuados para arrasar en las tiendas norteamericanas en los próximos meses y no hay ningún pero que poner a su futuro catálogo, aunque habrá que comprobar cómo responde el mercado a algunas de las ofertas como Scene It? o Band of Animals, ya que la consola tiene una imagen muy arraigada de ser una máquina para aficionados dedicados y con cierta tendencia a los shooters. Microsoft quiere y necesita más que eso para llegar a las salas de estar de más familias y por ello no es de extrañar que aborde activamente ese frente en el que Wii está arrasando.
En cuanto a los juegos vistos, aunque sólo sean secuencias de vídeo y demostraciones jugables cortas, son suficientes para comprobar que se está ante títulos de mucho peso y con fantásticos valores de producción. Halo 3 ha tenido una exposición muy notable y espectacular, Call of Duty 4 ha sorprendido con su nivel jugable en las inmediaciones de Chernobyl, Lost Odyssey tenía un aspecto magnífico, al igual que Mass Effect. También nos quedamos con algunos aspectos impresionantes de Assasin's Creed, aunque es obvio que hay otros aspectos que mejorar en el código actual... sí, la conferencia de Microsoft ha sido altamente satisfactoria y exquisitamente presentada, pero no ha sido sorprendente.
Y es aquí cuando regresamos a la importancia de sorprender en un E3. Hace dos años, un vídeo de Killzone 2 en una conferencia de SCE levantaba todo tipo de suspicacias ante la evidencia de que no era una demostración en tiempo real. Hoy, en la presentación del juego en tiempo real, ha resultado que lo visto en ese vídeo ha demostrado ser una realidad con la que Guerrilla y SCE han sorprendido a propios y extraños, mostrando un nivel jugable tan intenso y espectacular como el mostrado en esa recordada conferencia, poniendo el listón muy, muy alto a nivel técnico.
A efectos prácticos, puede que importe poco en el cómputo general de las ventas y el dominio del mercado, pero a efectos mediáticos, especialmente con una prensa tan especializada y entusiasta como la que se reúne en el E3, Sony ha dado un buen golpe de efecto. En unas horas continuará escribiéndose el guión de esta novela llamada E3 con la conferencia de Nintendo. ¿Serán capaces de sorprender?