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God of War II: The Colossus Battle, Impresiones

Kratos, como el nuevo Dios de la Guerra, presta ayuda a sus fieles en el asedio a Rodas. Atenea, furiosa, le priva de sus poderes y los asigna al Coloso que salvaguarda la ciudad para que le castigue por su desaire al Olimpo. Nos enfrentamos a él en esta demo de próxima aparición en el mercado.

Kratos, como el nuevo Dios de la Guerra, presta ayuda a sus fieles en el asedio a Rodas. Atenea, furiosa, le priva de sus poderes y los asigna al Coloso que salvaguarda la ciudad para que le castigue por su desaire al Olimpo. Nos enfrentamos a él en esta demo de próxima aparición en el mercado. 

Como ya se anunció hace un par de semanas, Sony planea lanzar a principios de este mes y en el mercado americano una versión prueba de God of War II, uno de los últimos grandes títulos del catálogo de PlayStation 2. Hemos tenido acceso a esa demo, bautizada The Colossus Battle, y que contiene un nivel que en poco más de veinte minutos, mezcla lo mejor de God of War junto a lo surgido del fructífero intercambio de ideas que Cory Balrog confesó haber mantenido con Fumito Ueda, director de Shadow of the Colossus.

God of War II: Divine Retribution (PlayStation 2)

El juego comienza con Kratos sentado en el trono del Dios de la Guerra, revestido en su armadura y con dos esclavas a sus pies, pero pronto algo interrumpe su reposo. Se dirige al estanque donde observa el devenir del mundo de los mortales y descubre que un guerrero espartano implora su gloriosa ayuda para salir victorioso en el asedio a la ciudad de Rodas como venganza en su nombre. Ironías del destino. Kratos acepta la plegaria y se dispone a abandonar el Olimpo y descender hasta la tierra de los que antes fueron sus semejantes. En su camino se topa con Atenea, aquella que le tendió la mano en la odisea que todavía como mortal, enfrentó a Kratos con Ares. La diosa le pide que no intervenga en Rodas, recordándole su origen humano y batallas pasadas, pero ofendido, el ex-general espartano le responde con un desaire. "No te debo nada".

God of War II: Divine Retribution (PlayStation 2)
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Una vez en Rodas, Kratos, en su gigantesca forma de dios arrasa la muralla, permitiendo la entrada de las tropas, pero algo se tuerce. Atenea le priva de sus poderes como deidad y los otorga al protector de la ciudad: el Coloso de Rodas. Mientras una de las siete maravillas del mundo antiguo toma vida, el Dios de la Guerra sufre una regresión a su forma mortal, lo cual provoca que una legión de soldados le pierda el respeto y se abalance sobre él intentando matarle.

God of War II: Divine Retribution (PlayStation 2)

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God of War II: Divine Retribution (PlayStation 2)

Es en esta parte cuando tomamos control de Kratos, utilizando las espadas de Atenea, todavía a su máximo nivel, para eliminar a la multitud de soldados que vendrán a nuestro encuentro, en el interior de un edificio. Mientras vamos desenterrando los combos que ya empleamos en la primera parte, variantes aéreas incluidas, así como los movimientos más brutales de Kratos -como agarrar al enemigo del cuello y atravesarlo repetidamente con la espada en el abdomen-, el Coloso de Rodas, impaciente, no puede resistirse a participar en la lucha; desde el exterior realiza varias embestidas contra el edificio, que se resiente.

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God of War II: Divine Retribution (PlayStation 2)

Finalmente, tras acabar con la mayoría de los enemigos y recoger los orbes rojos, el resto de soldados huye, aterrados al comprobar que Kratos conserva muchas de sus legendarias habilidades. El anti-héroe avanza hasta intentar alcanzar los balcones del edificio por un largo pasillo que el Coloso atraviesa lanzando un puñetazo. Segundos después ambos guerreros se encuentran cara a cara.

God of War II: Divine Retribution (PlayStation 2)

En clara desventaja y mientras eliminamos a varias oledas de tropas, debemos esquivar los contundentes golpes de la estatua animada -que nos lanzará cadáveres de soldados enemigos a puñados- mientras contraatacamos. Cuando conseguimos dañarle, queda en un estado de letargo que debemos aprovechar para rápidamente activar una catapulta apuntándola contra su cabeza y seguidamente, lanzar a Kratos cual proyectil, para que inicie una de las conocidas y brutales secuencias interactivas que llevan asociadas en God of War los ataques a los enemigos finales. Pulsando triángulo y círculo a demanda, Kratos cortará las mejillas de perfil griego del Coloso y rematará clavando sus sagradas hojas en uno de sus ojos, dejándole tuerto. En la angustia provocada por su dolor, el gigante lanza a Kratos con violencia, incrustándolo en el interior de un balneario.

God of War II: Divine Retribution (PlayStation 2)

La estancia ofrece una pequeña tregua. Después de sumergirnos, superar obstáculos balanceándonos con las cadenas y trepar un muro para salir de nuevo a las calles de la ciudad -no sin intentar ser aplastados por el pie de nuestro desproporcionado enemigo-, tiene lugar el segundo asalto, esta vez en el puerto de Rodas, con el coloso sumergido hasta el pecho en las aguas.

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La solución vuelve a ser la misma; esquivar los golpes mediante el stick derecho, con el que Kratos realiza una rápida voltereta y contraatacar. Siguiendo esta fórmula el enemigo se dolerá, gritará de dolor y en respuesta mostrará un nuevo ataque muy difícil de esquivar; golpear a la vez y con los dos puños, el suelo. Aprendiendo a esquivarlo no tendremos problema en volver a hacerle perder las fuerzas, quedando exahusto sobre el puerto. Ese será el momento de acercarnos a él, presionar círculo e iniciar otro combo-secuencia interactiva: Kratos clava sus cadenas en su brazo, lo hace impactar contra la pared, lo escala y corta la cara del Coloso sin tregua. Repitiendo la operación conseguiremos dejarlo al borde de la muerte, algo que se aprecia por la cantidad de heridas que luce su cuerpo y por su paso renqueante. Aún así, es capaz de volver a lanzar a Kratos por los aires, impactando esta vez en un laberíntico templo que exigirá resolver un puzzle para progresar.

God of War II: Divine Retribution (PlayStation 2)
God of War II: Divine Retribution (PlayStation 2)

El reto es sencillo, utilizar un pedestal para activar interruptores que levanten las verjas que obstruyen nuestro paso. Con un poco de ingenio y dándole una patada al pedestal para que alcance su objtivo, seguiremos adelante, hasta topar con un grupo de soldados que precede al fin de la demo; cuando alcanzamos una de las ventanas del edificio, un gigantesco ojo aparece en ella, al golpearlo, el Coloso responde con violencia, en lo que parece acaba demoliendo parte del edificio. Y decimos parece porque la demo acaba en ese preciso instante, invitándonos a disfrutar con "el principio del fin" el próximo mes de marzo.

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God of War II: Divine Retribution (PlayStation 2)

Aunque ya hemos podido ver en movimiento este God of War II -en el E3 y en nuestra visita a los estudios de Sony Santa Mónica- no deja de impresionar lo fluido que resulta el apartado gráfico, moviéndose a 60 frames por segundo, con cantidad de efectos en pantalla, enemigos y detalle en los escenarios. Parece que Cory Balrog tenía razón cuando apuntaba a que intentaban exprimir todavía más la potencia de PS2 mediante "trucos" técnicos que les hicieran ahorrar recursos y poder así aumentar el resultado visual.

God of War II: Divine Retribution (PlayStation 2)
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En el terreno jugable, y explorando los menús del título hemos podido conocer los nombres de varios objetos mágicos que tomarán un papel importante en esta secuela; las seis Urnas -de las Gorgonas, Gaia, Olimpo, Prometeo, Poseidón y del Destino- y hechizos mágicos como la Furia de Poseidón, que se activan mediante L2 y siembra la pantalla de electricidad, impactando a todos los enemigos con mayor o menos daño -dependiendo del número de pulsaciones del botón círculo que realice el jugador-.

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También se han dejado ver diversos extras, enmarcados dentro de la sección Tesoros, que enumera -sin posibilidad de desbloquear o acceder como es lógico- el Hall of Titans, un reto de siete pruebas, la Arena of Fates, se intuye que un modo donde se puede combatir bajo las reglas dictadas por el jugador, y el ya adelantado modo Titán, un nivel de dificultad extraordinaria que supera al modo Dios del primer GOW y siete nuevos trajes para Kratos, entre los que se incluyen armaduras, clásicos y hasta de mujer. El disco también incluye un making of titulado 'Road to E3' en el que se aprecia desde dentro como fue el proceso de puesta a punto de la versión demo que se mostró en la feria de Los Angeles.

God of War II: Divine Retribution (PlayStation 2)

En Europa también podremos disfrutar de esta demo, ya que las palabras de Cory Balrog en su blog han sido refrendadas por Sony España a MeriStation. La tendremos aquí, seguramente durante el mes de marzo. Y es que parece que God of War II llegará a territorios PAL en abril, lanzándose esta un mes antes. Será una gran oportunidad para que todos los usuarios de PS2 comprueben con sus propios ojos el excepcional nivel que atesora este regreso de Kratos, un auténtico Dios para muchos jugadores.

God of War II: Divine Retribution (PlayStation 2)
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God of War II: Divine Retribution

  • PS2
  • Acción

Kratos, nuevo Dios de la Guerra, pierde el favor del Olimpo y es repudiado por Zeus. Renunciando a rendirse, el espartano inicia un viaje para cambiar su destino y saciar su venganza con la brutalidad que le caracteriza.

Carátula de God of War II: Divine Retribution
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