Vuelve el Mago del Skate

Tras lucirse en PlayStation 2 y Xbox 360, la octava entrega de la saga de Neversoft se adapta a los particulares circuitos de la consola portátil de Sony con un claro objetivo: ser tan entretenido como lo eran sus versiones mayores. ¿Lo habrá conseguido?

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Tony Hawk's Project 8 para PSP es básicamente el mismo juego que ya vimos hace unas semanas en las consolas de sobremesa pero ajustado a las limitaciones de la máquina, esto es, con los necesarios ajustes en el control y en el apartado técnico.

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El hilo argumental del juego sigue siendo el mismo: tras llegar a la ciudad, Tony Hawk manda un mensaje por televisión en el que anuncia estar buscando a los 8 mejores skaters de la zona. Nosotros, como de costumbre en este tipo de juegos, empezamos siendo unos novatos, y a base de superar misiones y pruebas por la ciudad aumentamos nuestra habilidad mientras a su vez escalamos puestos en el Top 200 de los skaters participantes.

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Aún habiendo sufrido notables recortes, Project 8 sigue ofreciendo un interesante apartado gráfico también en la portátil de Sony (las capturas que acompañan este texto son las correspondientes a la versión PS2 del juego). Sorprende el tamaño de los personajes, así como sus animaciones y la fluidez general con la que se mueve el amplio entorno. Aún así, es en el ámbito de las textuas donde más se ha tenido que 'capar' esta versión: éstas son más sosas y simples que en las anteriores versiones, un problema por suerte solventado con la ayuda de una viva e intensa paleta de colores.

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Teniendo en cuenta que tanto la banda sonora del juego como los efectos sonoros se han trasladado intactos de las versiones mayores al UMD, podemos decir que en líneas generales el apartado técnico de Tony Hawk's Project 8 está a un altísimo nivel.

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Es sin embargo en el terreno jugable donde más han sufrido los chicos de Neversoft a la hora de trasladar el juego original a PlayStation Portable. Principalmente por el interesante añadido que ha incorporado la octava entrega de la saga: el "Nail the Trick".

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En las versiones mayores, podíamos activar durante las misiones un modo a cámara lenta (al más puro estilo Matrix, sí) en el que pasábamos a controlar las dos piernas de nuestro skater usando los dos sticks analógicos del mando. De ese modo, podíamos realizar piruetas de lo más exageradas con suma facilidad. Sin embargo, ahora, y por culpa otra vez del stick analógico derecho en la consola portátil, se ha tenido que readaptar el control haciéndolo mucho menos intuitivo y bastante más complicado.

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Se mantienen los mismos modos de juego, aunque para PSP se ha habilitado un modo multijugador para red local (ningún tipo de soporte por internet, lamentablemente) para hasta 4 jugadores con más de una decena de minijuegos distintos. Lo cierto es que algunos son realmente divertidos, como las carreras de obstáculos, las competiciones de graffiti o Elimiskate, una variante de juego en la que se va eliminando al jugador con menos puntuación pasado un determinado intérvalo de tiempo. Lo difícil, una vez más, es coincidir con 4 amigos que dispongan del juego y tengan tantas ganas de 'viciar' como nosotros.