Xyanide Resurrection Impresiones

Sí, Gradius Collection fue un desquite muy interesante en la primera hornada de juegos para PSP, pero se echaba de menos un shooter de los de toda la vida programado desde cero para la consola portátil, y por fin parece que va a llegar y además programado en Europa. Sus creadores prometen grandes dosis de acción e innovación mezcladas con el sabor clásico de los juegos de los noventa.

Echando la vista atrás, lo más parecido que se haya visto en consola (al margen de su propio antecesor) alguna es el genial Lylat Wars de Nintendo 64. La misma mecánica de juego de naves en totales tres dimensiones y con una libertad de movimiento semicompleta, es decir, el jugador se mueve en cualquier eje del espacio pero no puede escapar ni por arriba ni por abajo. En términos matemáticos, 360 grados en el eje de ordenadas y 90 grados en el de abcisas. Esto limita la libertad pero aumenta la jugabilidad y la sensación de verse acosado.

La demo proporcionada por los desarrolladores permite disfrutar de tres niveles de un total de quince que llevará la versión definitiva. En ellos se puede observar una técnica que sus responsables aseguran es revolucionaria en el segmento de las portátiles: mezclar fondos prerrenderizados con formas en tres dimensiones. ¿El resultado? Una amalgama de efectos nunca antes vistos en una portátil, un motor de juego sólido y una visión bastante acertada aunque requiera de tiempo para hacerse con el control.

"Se puede observar una técnica que sus responsables aseguran es revolucionaria en el segmento de las portátiles. ¿El resultado? Una amalgama de efectos nunca antes vistos en una portátil, un motor de juego sólido y una visión bastante acertada"

Control que por otro lado se antoja algo duro. El hecho de situar la acción en tres dimensiones y la cámara justo detrás de la nave lo asemeja mucho a un juego de coches y las naves enemigas que vienen por detrás sólo pueden ser detectadas gracias a mensajes en pantalla que cuesta ver. Pero claro, es una portátil y es un entorno poligonal, la situación está bien resuelta aunque costará seguro echar más de una partida para sentirse cómodo. Como colofón a su "especial manejo", resulta imposible parametrizar en la configuración el comportamiento del stick analógico y, guste o no, subir la palanca hace subir el morro de la nave.

Gráficamente "Xyanide Resurrection" es simplemente espectacular. la PSP sigue asombrando con la calidad de los entornos de los juegos, no hay ni por asomo ralentización alguna a pesar de que en determinados momentos la cifra de enemigos en pantalla es importante. Trasparencias, zoom, rotaciones, explosiones, lo típico de un "mata-mata" pero en completas 3D y con un colorido muy llamativo y acertado. Los enemigos finales, a falta de la confirmación en la distribución comercial, prometen dosis de frenetismo.

El juego en sí posee ciertas diferencias con el mencionado Lylat Wars. En esta ocasión existe la posibilidad de ampliar el armamento de la nave a medida que se superan fases y se gana dinero. Los equipamientos van desde escudos defensivos hasta misiles y bombas, pasando por un imán que recoge del espacio pequeñas células energéticas que recomponen la maltrecha embarcación o un generador de agujeros negros. Todo un acierto que permite enfocar una partida desde posiciones más ofensivas o meramente defensivas en función de las habilidades otorgadas al vehículo espacial.

Los dos botones superiores (L y R) sirven para virar más rápidamente y la nave cuenta con una mirilla que puede fijar un objetivo manteniendo un botón pulsado. Se pueden llevar hasta seis bombas y por suerte son necesarios varios impactos para perder una vida, dado que no existen los típicos "power ups" de otros matamarcianos con los que sí se puede mejorar la potencia de fuego o los escudos de la nave.

"Existe la posibilidad de ampliar el armamento de la nave a medida que se superan fases y se gana dinero. Los equipamientos van desde escudos defensivos hasta misiles y bombas."

Si técnicamente el producto apunta buenas maneras, en el apartado jugable aún faltan por pulir ciertas cosas. Hay muchos elementos condensados en la pequeña pantalla: mensajes, radar, enemigos... resulta algo confuso. De igual manera el desarrollo de cada fase tampoco está muy claro. Hay que derrotar a todas las naves enemigas indicadas por el radar y entonces hace acto de presencia el enemigo final. Demasiado insulso, al menos sería interesante un buen argumento.

Tampoco ha quedado claro si se podrá salvar partida en medio del modo historia. Las fases no son extremadamente largas, pero cada partida requiere su tiempo y eso en una portátil es vital. El sistema de avance es idéntico al de juegos como OutRun o R-Type (escogiendo camino tras eliminar a cada enemigo final), lo cual permite realizar diferentes recorridos para acabar el juego. Como premio además se desbloquearán diseños y dibujos de una pequeña galería extra.

Deja un buen sabor de boca, a pesar de las limitaciones propias de una consola reducida parece que va a ser muy divertido y visualmente supera a todo lo visto en juegos de este tipo. Para quienes la hayan disfrutado, recuerda mucho a la última fase del Starfox Adventures. A pesar de que sus creadores afirman que recoge el espíritu de los clásicos hay cierta diferencia entre este y otros más o menos contemporáneos como Ikaruga o R-Type Final, hechos también en 3D pero con scroll puramente horizontal o vertical.

El producto completo contará con un apartado multijugador en red (WI-FI) pero la competición se limitará a contrastar cuál de los dos usuarios participantes destruye más enemigos en pantalla. Las opciones de juego individuales serán el modo historia, el "partida rápida" útil para practicar cada escenario y el "time attack", luchando contra el tiempo y los enemigos. Son los modos de juego típicos del género al que pertenece "Xyanide".