Buen debut con el Wiimando

No fue hasta septiembre de este mismo año cuando Nintendo anunció por fin el precio y fecha de su nueva consola en los tres territorios principales, Japón, EE.UU. y Europa. Una de las informaciones clave que se extrajo de dos de los tres eventos, fue el hecho de que Wii no llegaría sola a los hogares americanos ni nacionales, sino que vendría acompañada de un título que hasta la fecha había sido la insignia para mostrar las grandes posibilidades de llegar a los jugadores no habituales.

Wii Sports reúne cinco deportes en uno solo y sigue una clara fórmula: simple, sencillo, directo y divertido. Sin complicaciones, sin necesidad de practicar mucho ni dedicarle horas y horas, basta con coger el mando y moverlo intuitivamente como lo haríamos en cualquiera de las modalidades incluidas.

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Pero hay más de lo que parece a primera vista, pese a que se busca la facilidad, los perseverantes tendrán premio. Diversos efectos en los diferentes deportes o varios modos de juego que no se conocían como definitivos harán acto de presencia en la versión final que vendrá en la caja de la consola a partir del 9 de diciembre.

Wii Sports (Nintendo Wii)

Gráficamente también se sigue el mismo camino. El juego es bonito y no trata de ser fotorrealista como Virtua Tennis 5 o Tiger Woods 2007, por lo que en ese sentido cumple. Modelados escasos, buenas texturas, pero pocos detalles o efectos reseñables y poco más se puede mencionar, salvo la iluminación. Es un juego simplemente agradable a la vista y que desde luego no pretende exprimir todo el potencial de la consola.

Hay algunas voces para cuando terminamos una actividad o una partida con diferentes mensajes del tipo "¡bien!", "¡lo conseguiste!" y similares. Desgraciadamente, no han sido dobladas y nos llegarán en perfecto inglés, pero suponen una parte mínima del juego y aunque no se tenga idea de la lengua de Shakespeare no habrá ningún problema.

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En este sentido, la opción individual se queda un poco escasa de posibilidades y por ello se han incluido dos modos más de juego. El primero de ellos sirve para practicar y mejorar nuestras habilidades por medio de quince minijuegos distintos, tres por deporte, en los que nos proponen diversos retos como acertar en una diana jugando al tenis, acercarnos al green desde posiciones diferentes en golf, golpear donde nos indique nuestro entrenador en boxeo, hacer pleno en una creciente cantidad de bolos que puede llegar a cerca de un centenar o tratar de hacer veinte Home Run.

En general, son pruebas relativamente complejas que pueden dar mucho de sí al suponer un reto el tratar de conseguir buenas puntuaciones. Es posible saber si un récord personal es realmente bueno o no porque recibimos una medalla por ello de modo similar a como sucede en Big Brain Academy. Y quizá os preguntéis la razón de mencionar este título a estas alturas en este análisis cuando las medallas no son una exclusividad suya. Bien, todo tiene su explicación.

La gran sorpresa de Wii Sports y una característica que no se confirmó hasta hace poco es la inclusión de un modo de entrenamiento al estilo Brain Training de modo que practiquemos un poco cada día. Podemos ver nuestra evolución en un gráfico circular similar al que aparecía en Big Brain Academy, pero cambiando habilidades como memoria o cálculo por agilidad y rapidez.

Wii Sports (Nintendo Wii)

Las pruebas que nos ofrecen para calcular nuestra puntuación son similares o idénticas a los minijuegos del modo práctica y siempre se nos plantean en cadena una tras otra a modo de examen. Esto quiere decir que, cada día que accedemos al entrenamiento, recibimos una calificación.

Estas son las opciones generales que comparten todos los deportes incluidos, pero cada uno de ellos cuenta con diversos matices a tener en cuenta por separado, por lo que pasamos a detallarlos uno por uno.

Los partidos son siempre a dobles en el modo normal y nosotros controlamos a ambos miembros de nuestro equipo, aunque en ningún momento podemos moverlos directamente sino que son ellos los que van hacia la pelota, dejándonos la única responsabilidad de golpear en el momento exacto.

Para sacar, hay que levantar el mando hacia arriba como si estuviéramos lanzado la bola y posteriormente hacer un gesto de golpearla hacia abajo. El juego entiende ciertos efectos predefinidos según cómo movamos el mando (de arriba a abajo, haciéndolo descender rápidamente, etc.) de modo que la bola varíe su trayectoria y pueda convertirse, por ejemplo, en un globo o en una bola rápida.

Es uno de los deportes en los que más cuesta ver que somos nosotros los que controlamos la acción, puesto que, además de no poder mover a nuestros personajes, es difícil discernir si realmente tenemos forma de decidir hacia qué lado va la pelota según cuándo y cómo la golpeemos.

Wii Sports (Nintendo Wii)

El movimiento del bate es muy fiel a como lo hacemos con el mando y casi podría afirmarse que lo plasma idéntico, tanto si lo tenemos arriba, como abajo, como si lo giramos o lo balanceamos atrás y hacia adelante o cualquier otro gesto que hagamos. Así que para batear no sólo hay que buscar el momento exacto, algo realmente difícil, sino que es necesario hacerlo a la altura correcta.

Si nos toca lanzar la pelota, entran varios factores en juego. En primer lugar, y como es de suponer, la trayectoria y la fuerza con la que movemos la mano tiene su plasmación en la dirección y velocidad de la pelota. Pero además, con un botón y la cruceta podemos aplicar diferentes efectos para desconcertar al rival. El trabajo de lanzador es bastante más sencillo y en un sólo partido nos podemos convertir en unos expertos.

Los elementos típicos de un campo de golf están presentes, como bunkers, árboles, zonas de hierba elevada o lagos, entre otros. Esto, por supuesto, tiene su impacto en el juego, puesto que tendremos que utilizar palos y golpes diferentes si estamos en el green o si estamos dentro de un búnker.

Para realizar un golpeo, tenemos que hacer un movimiento similar al real, siendo además muy recomendable en lugar de intentar mover sólo la muñeca, puesto que con los brazos tenemos un pulso mayor y conseguimos más precisión en la fuerza que queremos emplear.

En la esquina superior derecha tenemos un minimapa donde podemos ver una línea recta de hacia dónde irá la bola en principio sin tener en cuenta cuestiones como el desnivel o el aire. Ésta se encuentra dividida en cuatro secciones para indicar en qué punto caería la bola con cualquiera de esos cuatro niveles de intensidad. Y de este modo, hemos de medir la fuerza con la que queremos golpear para así mandar la pelota donde buscamos observando la altura que alcanza la barra de potencia. Para golpear es necesario pulsar el botón A, ya que de no hacerlo únicamente practicamos, algo útil para calcular mejor la fuerza y si nos pasamos la pelota sale desviada hacia un lado.

Si estamos en el green, la cosa cambia ligeramente, puesto que el indicador de potencia aparece directamente en el escenario en tres dimensiones y, pulsando un botón, el campo se colorea con distintas tonalidades de verde según la altura y así podemos estudiar la inclinación y elegir mejor hacia dónde enviar la pelota.

Aunque si queremos jugar bien del todo, existe la posibilidad de mover nuestor personaje de derecha a izquierda en la pista y también de girarlo, aunque la interfaz para realizar estas acciones es algo confusa. Afortunadamente, se ha incluido una opción de acercar la cámara de modo que podamos ver mejor hacia dónde enviamos la bola si conseguimos hacerlo en línea recta.

Es posible atacar y cubrirse a distintas alturas, según bajemos o subamos los mandos y también si los ponemos delante nuestro o a los lados. Podemos ensañarnos con su estómago inclinando los mandos hacia adelante y moviéndolos en esa dirección o ponerlos en vertical para noquearlo de un golpe en la cabeza.

Hay algunos movimientos especiales que pueden quitar más vida, por lo que conviene practicar para poder conocerlos todos. Tras dejar en el suelo a un contrario, o si nos lo hacen a nosotros, pasan los clásicos diez segundos en los que puede leventarse o no, aunque esto parece haberse implementado de modo que lo haga aleatoriamente, pues en algunas ocasiones podemos dejar a un rival en la lona diez veces y perder nosotros finalmente en nuestra primera caída.

Es el minijuego que más cansa y con el que más ejercicio haremos sin duda alguna, sobre todo con un amigo, ya que la inteligencia artifical del rival es bastante baja y podemos dejarlo fuera de combate con facilidad.

Se trata de uno de los elementos más importantes del juego y lo que permitirá que sigamos usándolo meses después de haber adquirido nuestra consola, pues las risas y un buen rato simplemente poniéndolo con familiares o conocidos están totalmente asegurados.

En tenis se puede jugar a dos, controlando cada jugador a dos personajes, o a cuatro, yendo entonces por parejas. Boxeo es uno contra uno y para que no haya confusiones con cuál es nuestra derecha o izquierda, la pantalla se divide en dos y representa ambas vistas en primera persona. Béisbol también es uno contra uno y se disputa un partido completo, por lo que los dos participantes actúan tanto de lanzadores como de bateadores. Finalmente, tanto bolos como golf son lógicamente por turnos y permiten hasta cuatro personas, anotando en cada ronda la puntuación de cada una.

No nos atrevemos a emitir una recomendación, ya que el juego llegará a todo el mundo, pero tendría que estar a un precio realmente bajo dado lo que ofrece. Sin embargo, es un potencial rey de la diversión en reuniones con nuestros amigos y resulta perfecto para introducir a nuestros padres u otros familiares o allegados en esto de los videojuegos, ya que no requiere experiencia previa.

A los aficionados habituales, les resultará algo pobre en posibilidades. Le faltan cosas como mover a los jugadores en tenis o un mayor control sobre el equipo en béisbol, ya que todo resulta demasiado automatizado. Afortunadamente, el uso de ciertos efectos según el movimiento de la mano abre las puertas a futuros títulos deportivos que se presenten más serios y realistas.

Queremos remarcar un pequeño punto negativo pero que deseamos enfatizar y es el hecho de que no se incluyan voces en nuestro idioma, teniendo en cuenta que hay muy pocas frases habladas y apenas habría supuesto problema el introducirlas en español. Esperemos que no se convierta en costumbre y la mayor capacidad de los discos en Wii respecto a GameCube permita tener siempre el sonido doblado.

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