Canal Foto, Impresiones
La apuesta de Nintendo por los canales en su nueva consola es cuanto mejor sorprende. De momento, hemos probado uno de los primeros, el Canal Foto. Retocar el brillo, añadir objetos, e incluso jugar con ella. ¿Qué posibilidades reales ofrece la edición fotográfica en Wii?
La apuesta de Nintendo por los canales en su nueva consola es cuanto mejor sorprende. De momento, hemos probado uno de los primeros, el Canal Foto. Retocar el brillo, añadir objetos, e incluso jugar con ella. ¿Qué posibilidades ofrece la edición fotográfica en Wii?
A falta de que dé comienzo en Europa el pistoletazo de salida a los canales que hacen uso de las posibilidades online de la máquina y vayamos disfrutando de ellos poco a poco, empezamos con uno de los que trae integrados la consola. El Canal Foto permite transferir cualquier tipo de fotografía desde una tarjeta SD o algún dispositivo compatible por el puerto USB y empezar a trabajar con ella.
La previsualización en miniatura permite muchas modificaciones. Podemos cambiar el tamaño de esta miniatura y poner todas las fotos en tres columnas o en cincuenta, siquieremos. Con el sólo uso del mando y los botones + y - decidimos el tamaño oportuno de este menú. La opción de ver como diapositivas está dispone si lo que queremos es mostrarles a nuestros amigos o familiares las fotos que tengamos almacenadas en la tarjeta SD.
Dentro de cada foto, podemos realizar modificaciones básicas. Cambiarlo el grado de brillo hasta en nueve posiciones, realizarle el negativo, ponerla en blanco y negro o aplicar tinta china. Si decidimos guardar los cambios, el original se modifica definitivamente, sin vuelta atrás, así que sed cautos.
La otra opción, muy parecido al clásico Paint consiste en recortar, dibujar y pegar algunos clip-arts a la foto. Por ejemplo, si recortamos un cuadrado con el mando y acercamos el mando a la pantalla, éste aumenta de tamaño, y por supuesto disminuye si lo vamos alejando. Girarlo también se hace con la mano. Inclinamos un poco hacia la derecha y ese mismo movimiento lo sigue el recorte. Intuitivo y cómodo, pese a lo limitado de sus opciones.
El detalle curioso viene con la posibilidad de jugar con la imagen, y hacer hasta un puzzle de 24 piezas. Cogemos una foto de nuestros familiares, pareja o compañeros de piso y los retamos a ver quien consigue reordenarlo en el menor tiempo posible. Tan sencillo como parece, pero podremos pasar un buen rato viendo como nos parten literalmente la cara en veinticuatro trozos.