Dead Rising, Impresiones

Capcom se ha cansado de convencionalismos. Su último título nos mete en el objetivo de un paparazzi sin escrúpulos atrapado en medio de la oleada zombie que ha invadido un centro comercial. Con su beta final en nuestro poder, te contamos cómo se sobrevive a las primeras 24 de estas 72 infernales y largas horas.

Enviado especial al infierno

Dead Rising (Xbox 360)

Si existe una compañía de videojuegos con un dominio de zombies y muertos vivientes equiparable al del maestro George A. Romero, esa es Capcom. En esta ocasión, lejos de emplear a estas criaturas de ultratumba en un Resident Evil, la compañía japonesa bajo la mano firme de uno de sus productores estrella, Keiji Inafune, ha tenido la irreverencia de meternos en lo que es casi una película que sigue el cliché definido por Romero. No faltan sangre, vísceras putrefactas, víctimas inocentes masacradas, humor negro, violencia y sobre todo gore, mucho gore.

Dead Rising ha sido un título que hemos seguido mucho desde MeriStation, de hecho es uno de los favoritos en la redacción. A principios de mes Capcom nos facilitó la versión preeliminar y europea -sin censurar- del título, pudiendo completarlo y explorar los numerosísimos detalles que la demo disponible en el Bazar Xbox Live, a pesar de su complejidad, ha dejado todavía sin desvelar. El presente texto, por deseo expreso de la compañía, únicamente se centrará en las primeras 24 horas de las 72 que consta el juego, intentando no desvelar muchísimas de las sorpresas que este soberbio título guarda en su interior y que podremos revelar a partir del 8 de septiembre.

Dead Rising (Xbox 360)

Dead Rising (Xbox 360)

Frank West, uno de los reporteros gráficos freelance más caradura y con menos escrúpulos del periodismo actual recibe un chivatazo. Algo está pasando en la pequeña localidad de Vilamette. Parece que sus ciudadanos se están movilizando, se han echado a las calles y el caos y el desorden se apodera de la ciudad, cercada por el ejército. Pero Frank, que ha cubierto guerras y conflictos mucho más sonados, no piensa perder la exclusiva. A bordo de un helicóptero, se prepara para burlar los controles y acceder al interior.

Dead Rising (Xbox 360)

Desde el aire es capaz de ver, a una distancia considerable, cómo los que antaño eran pacíficos ciudadanos ahora se han vuelto violentos, produciéndose linchamientos, incendios y derribo de vehículos. Mientras tiene ocasión de tomar las primeras instantáneas con su potente cámara digital -algo que sirve a modo de intro interactiva, aprendiendo los controles del objetivo-  Frank intuye que algo no va bien; esa forma de andar, espástica y escasamente coordinada resulta muy extraña y sospechosa.

Sin poder profundizar más en este punto, el reportero acaba en el tejado del centro comercial de la aburrida ciudad, el único divertimento que los vecinos de esta ciudad de la américa profunda pueden permitirse. Una vez allí, un extraño joven llamado Carlito -que se revelará como uno de los implicados en el incidente- confirma que se trata de zombies, los muertos se han alzado y han convertido la ciudad en un infierno. El centro comercial es el último bastión y miles de putrefactos y fétidos seres lo asedian....

Dead Rising (Xbox 360)

Dead Rising (Xbox 360)

El protagonista logra llegar hasta la puerta principal del Park Plaza, encontrándose con que los últimos supervivientes del ataque zombie han utilizado el centro comercial para perpetrarse. Esto no ha pasado desapercibido para los seres de ultratumba, que arremeten contra la entrada intentando tener acceso al interior, aunque una débil barricada los mantiene a raya. Aquí es donde tomamos por fin control del protagonista. 

Nuestro primer objetivo es ayudar a reforzar la barricada, para lo que intentaremos utilizar bancos, estanterías, cajas y cualquier otro objeto. Pero no llegaremos a poder ayudar. La desafortunada crisis de histeria que sufre una ancianita, lanzándose desesperada al exterior en busca de su caniche Maddonna -ya convertido en zombie-, causa una fisura en la improvisada muralla, permitiendo que miles de zombies accedan al interior en una auténtica tromba putrefacta.

Dead Rising (Xbox 360)

El resultado es devastador. Las doce personas que acompañan a Frank caen muertas, devoradas o desmembradas con nosotros como testigos en primera persona. Tal masacre será la ocasión perfecta para poner en práctica las habilidades que hemos aprendido respecto al manejo de la cámara digital -que se activa con L1, tiene un potente zoom y dispara sus instantáneas con X.

Dead Rising (Xbox 360)

Dead Rising (Xbox 360)

Hay que estar hecho de una pasta especial para poder retratar tal atrocidad mientras está sucediendo, pero Frank es un paparazzi muy comprometido con su trabajo y el mundo debe saber los horrores que en estas paredes están sucediendo. Retratar situaciones lo más variadas posible nos llevará a sumar puntos de experiencia con los que subiremos de nivel y adquiriremos nuevas habilidades. La temática de las fotos se clasifica según género; drama, horror, brutalidad, cómicas e incluso eróticas.

Para poder sumar puntos debemos seguir unos criterios definidos antes de tomar la fotografía. Primero, buscar fotos de grupo lo más numerosos posible, hasta la masificación, ya que cada zombie que aparezca en la foto sumará un extra.Y segundo, utilizar nuestro buen olfato periodístico, o en su detrimento, estar presente al indicador que aparece en lugares llamativos avisándonos de su valor.

Dead Rising (Xbox 360)

Dead Rising (Xbox 360)

A lo largo de nuestras 72 horas en Willamette nos hemos topado con situaciones de todo tipo; desde las carnicerías más gore a los actos humanitarios más loables a platónicos reencuentros de enamorados, escenas subidas de tono como una agente de policía lesbiana friccionando su porra contra una joven maniatada o simpáticas como un zombie conduciendo un carrito de la compra. Eso sí, la batería de la cámara no es eterna, y se agotará, pero podremos reemplazarla yendo a la tienda correspondiente y sirviéndonos baterías de repuesto nosotros mismos.

Volviendo al hilo de los acontecimientos, nuestro invasor de la intimidad favorito consigue abrirse paso hasta la sala de control. Una vez llega, la puerta se acaba soldando, impediendo la salida o entrada excepto por los conductos de ventilación. Ellos serán nuestro salvoconducto a la azotea del edificio, desde la que podremos acceder a uno de los almacenes y de ahí, a la galería oeste del centro comercial.

Dead Rising (Xbox 360)

A partir de este punto, Dead Rising muestra su planteamiento en tiempo real. No es tan minucioso como sucede en 24 ya que los segundos pasan más deprisa que en la realidad, pero los acontecimientos tienen un curso al que nosotros debemos adaptarnos. Mediante su reloj, que lista los sucesos de las próximas horas en forma de misiones, Frank podrá decidir en cuáles intervenir, exceptuando los que componen la trama principal, asociados en forma de 8 casos más una conclusión y divididos en varios episodios.

Las misiones son muy numerosas y divertidas, aunque tienen el mismo denominador común: el rescate de supervivientes. Mediante un dispositivo inalámbrico parecido a un walkie talkie, el conserje del centro nos avisará de quienes están en peligro y dónde encontrarlos. Seleccionando su correspondiente misión, habilitaremos una flecha guía que nos marcará el camino a seguir por el brutalmente gigantesco escenario hasta alcanzar el objetivo.

Dead Rising (Xbox 360)

Dead Rising (Xbox 360)

Como decíamos antes, todos los eventos suceden en una distribución horaria fija, por lo que varios sucesos pueden darse a la vez o solaparse por muy pocos minutos, teniendo que elegir a dónde acudir. Esto nos planteará situaciones complicadas, ya sea desde el punto de vista moral -bastante poco probable- o del beneficio obtenido a cambio. Una vez nos personamos en el lugar de los hechos y resolvemos la papeleta rescatando al desvalido, comienza la segunda parte de la misión; trasladarlo a lugar seguro, la sala de control en el punto más recóndito del mapa.

Aunque lo más probable es que el rescatado muera o acabe convertido en no muerto por su estúpida IA -quizá motivada por ser presa del pánico-, podemos utilizar algunos movimientos para guiarlo; darle voces, marcar un lugar al que deberá desplazarse e incluso llevarlo de la mano o cargárnoslo a la espalda, sólo en el caso de las señoritas estos últimos. Por cumplir las misiones se nos recompensará con más puntos de experiencia. Y es que el sistema que se ha empleado parece extraído de un RPG. Frank puede ver aumentado su catálogo de golpes y movimientos, con nuevos ataques, presas y maniobras evasivas, aunque también puede crecer su salud y la capacidad de almacenaje de su inventario, algo fundamental.

Dead Rising (Xbox 360)

Dead Rising (Xbox 360)

Antes mencionábamos que el centro comercial es un lugar gigantesco, y eso lleva implícito una cantidad ingente de tiendas de todo tipo. Capcom ha cuidado muchísmo la faceta de personalización y conforme avanzamos en la aventura tendremos la oportunidad de vestir a nuestro personaje con la ropa y complementos que encontrará en las tiendas que vaya descubriendo.Gafas de sol, zapatos, zapatillas, ropa deportiva, mallas, camisas, trajes de cuero, vestidos de mujer, pantalones de niño, gorras, cascos -donde Inafune ha homenajeado a Megaman- y un catálogo de vestuario enfocado a la carcajada fácil y a hacer del ridículo algo con lo que convivir mientras aniquilamos zombies.

Dead Rising (Xbox 360)

Dead Rising (Xbox 360)

Estamos hablando de personas que debido al desborde de la situación, han acabado perdiendo el norte, enloqueciendo, sin poder distinguir el bien del mal y que serán protagonistas de las situaciones más surrealistas y psicopáticas. A nivel jugable se les ha enfocado como jefes finales, muy difíciles de batir, lo que incrementa su carisma.

Dead Rising (Xbox 360)

Podremos toparnos con veteranos de Vietnam que pasan el tiempo destripando y decapitando zombies para colgar sus restos del techo, encargados de supermercado armados con un carrito repleto de cuchillos y armas de filo para evitar a los saqueadores, oficiales de policía lesbianas que secuestra mujeres para abusar de ellas porra mediante, convictos a bordo de un jeep con ametralladoras, una familia de francotiradores, un payaso equipado con sierras eléctricas triste porque los niños se han ido, y hasta según se ha podido ver en las pantallas, escuadrones al completo de soldados SWAT.

No muertos, el pan nuestro de cada día

Dead Rising (Xbox 360)

A pesar de los decisivos pero escasos enemigos humanos que encontraremos, el pan nuestro de cada día serán los miles de zombies con los que conviviremos y que infestan el Villamette Park Plaza. Gráficamente no se alejan demasiado del estereotipo de Resident Evil, aún más es inconfundible su origen común. Los diseños son variados, los hay de muchos tipos, aunque tras unas buenas horas de juego acumuladas es inevitable comenzar a ver repeticiones. Pero en lo que respecta a la sensación de masa heterogénea en apariencia, pero homogénea en reacciones y comportamiento, está bien conseguida.

Dead Rising (Xbox 360)

La IA se fundamenta en dos grandes pilares, el primero es la sed de carne humana que lleva sus impulsos a moverse allá donde estemos, como si nos olfateasen cual tiburón tras la sangre, y a abalanzarse a nuestro cuello cuando estemos a una distancia pruedencial. El segundo rasgo distintivo es la estupidez más manifiesta que les llevará a verse envueltos en las más absurdas de las situaciones como precipitarse desde lo alto de un andamio, darse un baño en el lago del parque, permanecer bobos frente a las luces de las salas de cine o comerse sus propias extremidades y pasear desmembrados minutos más tarde.

En lo que respecta a los patrones de ataque, como podéis esperar, son bastante erráticos y carentes de toda táctica, es decir, se basan únicamente en la superioridad numérica para hacernos sucumbir. Esto es especialmente peligroso cuando el tamaño de la horda sobrepasa ciertas cantidades, en las que no podremos dar a basto a eliminarlos -todas las armas se rompen al cabo de ciertos impactos-. Pero como reza el manual de todo muerto viviente, la noche potencia sus habilidades. Durante el día son criaturas molestas, pero simpáticas, pero por la noche, sus ojos se iluminan de un color rojizo y se multiplica su poder: son más veloces, aguantan más impactos antes de perecer y nos producen más daño.

Dead Rising (Xbox 360)

Dead Rising (Xbox 360)

Dead Rising (Xbox 360)

Desde armas de fuego como pistolas, recortadas, ametralladoras, uzis o rifles de francotirador, pasando por el filo de cuchillos de carnicero, katanas, espadas a dos manos, la contundencia de vigas de madera, varas, martillos, bates de baseball hasta el simbolismo de sierras eléctricas y la versatilidad de sillas, mesas, sombrillas, estanterias, balones, peluches gigantes, latas de refresco, cortadoras de césped, macetas o máquinas de chicles. Cualquier cosa vale.

Dead Rising (Xbox 360)

Para reponer nuestra vitalidad podremos utilizar un catálogo casi tan amplio de víveres. Botellas de zumo, fruta, palomitas, barritas de chocolate, refrescos, botellas de vino, carne cruda, verduras, pizzas, barras de pan y hasta congelados. Todo sea para que Frank mantenga su salud y no acabe mordiendo el polvo. Los víveres pueden encontrarse esparcidos por el escenario, muy racionados y en el supermercado, aunque éste está totalmente rebosante de no muertos. Decir también que los personajes a los que rescatamos tendrán comida para su uso personal y si la tomamos en pos de ayudarlos, podemos encontrarnos con desatar su ira. 

A nivel visual nos encontramos un título completo, que invierte la mayor parte de sus energías en reproducir cientos de zombies autónomos en pantalla sin sufrir ralentizaciones gracias a la tecnología desarrollada por Capcom. Este es su punto más destacable, contemplar cómo la pantalla está a rebosar de enemigos cada uno obedeciendo a sus propios impulsos. El resto mantiene un nivel de corrección exigible a la nueva generación, pero tampoco llega a sobresalir, quizás las recreaciones faciales en los primeros planos de las cinemáticas, que revelan expresividad.

Dead Rising (Xbox 360)

Dead Rising (Xbox 360)

Dead Rising es un juego difícil. Por lo paralítico y torpe que puedan parecer los muertos vivientes es demasiado sencillo acabar con un bocado en el cuello a las primeras de cambio, y eso cuando estamos hablando de miles y miles de no muertos atestando cada rincón del escenario, y de que el protagonista comienza con apenas 3 puntos de salud, se torna una complicación manifiesta. Tampoco colabora en esto el hecho de que los puntos de guardado -sofás donde pegar una cabezadita o un baño donde echar una meadilla- estén increíblemente distanciados.

Lo peor es que nos encontramos con un juego que castiga el error y cada vez que muramos nos veremos obligados a cargar la partida desde el último punto de control, perdiendo objetos, experiencia y misiones completadas que hayamos realizado hasta el momento. Puede que no suene demasiado diferente a lo que predican la mayoría de los títulos, pero cuando la muerte es algo con lo que se flirtea de forma tan constate como en Dead Rising y eso supone perder de 30 a 45 minutos, no hace ninguna gracia.

Dead Rising (Xbox 360)

Por ahora nos ha parecido un título de notable alto, una propuesta innovadora de una mecánica que no se desvía mucho de lo que podría ser un GTA ambientado en un centro comercial invadido por zombies. La deferencia que ha tenido Capcom lanzando una versión demo un mes antes que el título desembarque en Europa tendría que ser suficiente para averiguar a cada comprador potencial si este estilo de juego tan personal, le convence. En caso afirmativo, preparáos a vivir una auténtica película de zombies.

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