El lanzamiento de Shinobido Imashime se producirá en septiembre dentro de nuestras fronteras, aunque en MeriStation disponemos de una primera beta en formato PAL. Hemos podido descubrir nuevas posibilidades que no dudamos en detallaros a continuación.
La política llega al mundo ninja
Tras nuestras primeras impresiones con la versión japonesa, quedamos gratamente sorprendidos de cómo se había llevado el mundo de los ninjas a la mecánica de Shinobido Imashime. Pese a pecar de una gran similitud con otros juegos como los de la serie Tenchu, el título de Acquire ofrece cosas interesantes. Una de ellas es la de incluir a nuestro protagonista en una compleja trama política, en la cual estaremos seriamente involucrados.
Asimismo, algunas posibilidades de juego se han visto potenciadas con la traducción a nuestro idioma. El ampliar nuestros conocimientos mediante los tutoriales es algo remarcable e importante, sobre todo cuando debamos afrontar los retos más interesantes de las misiones. Conocer toda la información sobre la tarea a realizar es algo vital en un juego donde la mayoría del tiempo deberemos guiarnos mediante una brújula y nuestra intuición.
El hecho de disponer del juego en japonés no nos había permitido descubrir todos los matices de este rebuscado y profundo desarrollo. En cambio ahora, versión PAL mediante, nos hemos puesto manos a la obra para desentrañar el interesante sistema de juego de Shinobido Imashime.
Encárgate de las tareas
Como ya habíamos comentado, la trama gira alrededor del ninja Goh cuya situación al inicio es desesperada. Tras sufrir un acontecimiento todavía desconocido, nuestro protagonista carece de recuerdos sobre su pasado, aunque no se ha olvidado de cómo utilizar sus artes ninja. El avance del juego conlleva el ir recuperando trozos de la memoria de Goh, encerrados en lo que se ha denominado fragmentos de alma.
Estos fragmentos se encuentran custodiados por determinados personajes -a menudo muy poderosos- de la trama. En algún momento deberemos enfrentarnos a ellos y arrebatárselos, aunque seremos nosotros los que decidamos cuando y cómo queremos afrontar estas situaciones. El sistema de misiones nos permite elegir las tareas a realizar día tras día, sin ningún tipo de límite, salvo el número de ellas que se nos ofrece en cada momento. Por supuesto, cada misión se asocia con los intereses de una de las tres facciones en conflicto.
Las relaciones con estas facciones son el punto clave sobre el que girará la historia de Goh, y en el que tendremos control total y absoluto. De hecho, seremos nosotros los que ayudaremos directamente a que las facciones evolucionen y obtengan nuevas armas y técnicas de combate. El robar los planos de un nuevo artefacto de un clan, puede ser la clave para que el que los recibe consiga un importante avance. Todo este entramado se nos detallaren una serie de gráficas, que muestran los progresos tecnológicos y de recursos que cada grupo ha conseguido hasta el momento.
Guerreros sin lealtad
Estas posibilidades nos permiten comportarnos tal y como lo hicieron los ninjas en la historia japonesa, sirviendo de mercenarios al señor que más nos interese en cada momento. La realización correcta de las tareas nos acarreará una mejora en las relaciones con el clan al que hayamos servido, así como un empeoramiento con las otras dos. El hecho de no poder repetir una misión salvo si guardamos antes de hacerla y volvemos a cargar la partida, se convierte en un aliciente para esforzarnos en las misiones más jugosas a nivel económico.
También debemos valorar si el clan al que servimos en cada momento tiene la oportunidad de ofrecernos las gemas del alma, o si posee alguna información sobre ellas. Todas estas variantes conforman un apartado jugable muy atrayente y que consigue introducir totalmente al jugador en la trama. Por si fuera poco, en las escenas intermedias nos irán llegando cartas a nuestra guarida. Estas cartas provendrán de diversos remitentes y serán desde amenazas a consejos o nuevos contratos. En algunas de ellas se nos mandarán objetos para nuestro jardín o personajes que nos ayuden a defender nuestra casa.
El conseguir la máxima confianza de los clanes conllevará cumplir desafiantes retos, de forma que cuanta mejor relación tengamos con un bando, se nos encargarán tareas mayores. Esto hace que en el progreso del juego notemos un cierto salto en cuanto a la dificultad de las misiones que se nos ofrecen en cada momento. Puede darse el caso de que tengamos varias misiones de una facción con altísimo nivel de dificultad al tiempo que un clan sin apenas relación nos ofrece tareas de lo más sencillas.
Decora tu casa
El jardín es uno de los elementos más curiosos de Shinobido Imashime y con el que más hemos podido profundizar al disponer de los textos en castellano No sólo nos permitirá tener un campo de prácticas permanente y acondicionado tal y como queramos en cada momento, si no que además hace de defensa contra los invasores que nos asaltarán periódicamente. Estos asaltos los perpetrarán pequeñas huestes de bárbaros que vienen a robarnos los objetos que tengamos en el inventario de casa. Deberemos llevar cuidado por que si consiguen su objetivo pueden hacer que nos duela el bolsillo.
La inclusión de esta opción responde a una inteligente maniobra por parte de Acquire que ha conseguido mezclar perfectamente las posibilidades de un entorno personalizado con el desarrollo de la trama. Con esto se ha integrado el editor de escenarios del que dispone el juego dentro del propio desarrollo normal del título. Así se incita a cualquier jugador a experimentar con el diseño de mapeados antes de dar el salto a diseñar misiones completas. Una buena forma de ahorrar tiempo de aprendizaje a todo aquel que quiera sacarle el jugo al editor.
Las posibilidades de decoración del jardín son muy elevadas, ya que permite la modificación casi total del escenario, añadiendo trampas, elementos de vegetación, fosos e incluso personajes. Los elementos de decoración se podrán adquirir directamente en la tienda o venir como regalo en una carta, en cualquier caso, pasarán a engrosar la lista de objetos disponibles para nuestro pequeño rincón de juegos.
Ayudas necesarias
Es remarcable el uso de video tutoriales para hacernos desarrollar nuevos talentos con los protagonistas. Estas secuencias cortas vendrán también como cartas y se nos explicarán métodos de infiltración, de asesinato y de ataque y defensa. Quizá hemos hechado en falta que se nos detallen las pulsaciones de botón necesarias para ejecutar cada tipo de movimiento. Esto es algo que se nota cuando intentamos realizar una muerte con sigilo de frente a un enemigo que nos ve y quedamos enzarzados en un forcejeo del que no hay una forma clara de escapar.
A pesar de estos pequeños detalles que faltan, las ayudas son suficientes, aunque cuesta hacerse con el control del personaje. La gran cantidad de maniobras posibles requerirá que invirtamos cierto tiempo en nuestro jardín antes de aventurarnos en cualquier misión. Del mismo modo, embarcarnos en una tarea sin planificarla previamente será algo carente de sentido. Deberemos visitar la tienda frecuentemente para reponer nuestro inventario y elegir el más adecuado en función del tipo de tarea objetivo.
El ejemplo más evidente de esto es el de comprar artículos que produzcan grandes daños para una misión de aniquilación o invertir en distracciones si lo que pretendemos es pasar desapercibidos. El uso de objetos es imprescindible en cualquier momento, ya que pronto nos daremos cuenta que afrontar las situaciones cara a cara nos llevará a perecer una y otra vez. Shinobido obliga a pensar como un ninja, y es algo que se agradece enormemente.
Apartado técnico modesto
La versión japonesa de Shinobido Imashime nos dejo con cierta incertidumbre en cuanto a si el acabado gráfico sería el definitivo. A pesar de que en conjunto presenta una buena ambientación, hay ciertos detalles que esperábamos se puliesen de cara a su lanzamiento europeo. En la versión a la que hemos podido acceder siguen existiendo estos defectos gráficos, que ya parecen definitivos.
El clipping es el mayor de ellos, a pesar de que se ha intentado que la física de los cuerpos sea lo mejor posible. Objetos que se fusionan con la tierra y desaparecen, espadas que atraviesan paredes y pies que pueden cruzar muros. Son pequeños detalles que no influyen en la jugabilidad, pero que dejan su marca en el nivel visual del juego.
Afortunadamente, si el juego puede presumir de algo es de poseer cualidades más allá de lo que se ve en pantalla, aunque pulir este apartado algo más no le hubiera hecho ningún mal. Una trama interesante, y una jugabilidad que incita a seguir son sus mejores razones para convencer a los aficionados. Por lo visto hasta ahora, promete ser un buen juego para los que gusten de la temática ninja.