Mundial de Fútbol Meristation 2006

¡Se inaugura el Mundial!
El fútbol es así... Alegría, tristeza, emociones a raudales... El Mundial de Fútbol conjuga todos esos sentimientos y más aún. Algunos de ellos los habréis vivido a través de la pantalla... ¿Qué tal rememorar viejos tiempos en el Mundial de Meristation?

Saludos cordiales, amigos lectores. El Mundial de Fútbol ha comenzado... y no me refiero sólo al de Alemania 2006, sino al que vuestra web favorita acoge entre píxeles y polígonos varios. Un Mundial en el que, como si de auténticos partidos se tratase, viviremos y disfrutaremos a la par que trataremos de deciros todo lo bueno y malo de estos juegos. Como por ejemplo, lo que me gusta a mí un buen FIFA y no sé a cuál enfrentarlo... ¿eh, amigo Pedja?

Saludos a todos. Pues sí, claro que te gusta un buen partidito al FIFA, porque cuando se trata de jugar al fútbol puro y duro, o sea, al Pro Evolution, la verdad es que no das la talla...

Pues fíjate que la clasificación en la liga online de PES 5 no dice precisamente eso, Jesús... ¡a ver quién está más arriba! Pero negar las virtudes de la serie de Electronic Arts cuando hemos disfrutado tanto de esta saga... Sí, puede ser que las últimas ediciones no hayan sido precisamente las mejores, con lo alucinante que era la edición del 2003...

Tienes razón, Spidey. El caso es que en los últimos años el nivel de estos dos colosos se ha estancado un poco. Tanto FIFA como PES parecen haber llegado a su límite creativo, al menos en lo que respecta a esta generación que ya toca a su fin. Con lo que nos gusta a nosotros jugar a viejos clásicos, ¿verdad?

No nos dejemos a ninguno en la estacada y demos caña. Los nuestros no pasan de cuartos, pero aquí en Meri vamos a ver buenos partidos de verdad. Goleadas gloriosas, reñidos empates, jugadas para la historia... ¿Quién empieza, tú o yo?

De acuerdo, chaval. Dejo que comiences tú con ese par de clásicos que tanto te gustan. Además, creo que son de tu época, viejo. ¡Que comience el Mundial!

PELE'S SOCCER vs NASL SOCCER
Dos clásicos frente a frente... Dos de los mejores juegos de los viejos tiempos. Dos amigos para lo bueno y para lo malo. ¿Quién ganará?

Tiempos antiguos fueron mejores... Bueno, no me hagáis caso. Un perro viejo como yo no tiene otra cosa que decir esto constantemente, a pesar de que los juegos que os presentamos en esta página puedan parecer más espartanos que algunas pinturas rupestres. No en vano, hablamos de las mismísimas raíces del mundo del videojuego, habiendo escogido para ello dos cartuchos pertenecientes a dos sistemas radicalmente diferentes e igualmente similares: Atari 2600 e Intellivision, con Pele's Soccer y NASL Soccer como sus respectivos representantes. Algo así como poner al propio Pelé y a Maradona en el terreno de juego.

Para empezar, el cartucho de Pelé para la más veterana de las consolas fue todo un éxito de ventas. Si bien llegó a salir en diferentes encarnaciones (como 'Soccer' a secas, por parte de Sears, y como 'Championship Soccer' por la propia Atari), fue cuando al decidirse adquirir los derechos de imagen de la estrella brasileña acertaron de pleno para venderlo estupendamente. Y es que hasta Pelé era tremendamente popular en un país como Estados Unidos, donde nuestro fútbol apenas era conocido.

El programa de Steve Wright en sí era básico como él sólo, pero como no podía ser de otra manea, presentaba muchas de las premisas que, con el tiempo, se irían haciendo habituales en los arcades de fútbol. Así, ejercíamos control sobre un equipo de tres jugadores (que básicamente eran esferas con patas de un solo color, rojo o azul) que se movían simultáneamente en formación. Los guardametas se movían solos, tratando de seguir la trayectoria del cuadrado balón.

Simple como él sólo, ya presentaba un modo versus de lo más competente. Por increíble que pueda parecer, Pele's Soccer es a día de hoy sumamente divertido, pudiéndonos dar a lo tonto unos vicios que ya quisieran muchos de los lanzamientos actuales (por aquí todavía saltamos al ver los simpáticos fuegos artificiales que se lanzaban por cada gol). Y es que, Pelé es Pelé...

Por su parte, Mattel lanzó en 1979 para la añorada Intellivision un magnífico ejemplo de la maestría del equipo de programación que desarrollaba para esta consola. NASL Soccer era y es una obra maestra, capaz de divertir como el que más a la par de mostrar un apartado técnico a todas luces sorprendente, máxime teniendo en cuenta la época en la que nos encontramos.

Años después también hizo acto de aparición para Atari 2600, pero la versión original se come con patatas a la aparecida en la VCS. Y es que Kevin Miller desarrolló en pocos bytes un ejercicio artesanal en el que se recogían casi todas las vicisitudes del fútbol: corners, saques de puerta, de banda... De primera mano, NSL Soccer es un goleador nato que deja en evidencia al juego de Pelé si lo vemos de refilón.

Con un desarrollo que requería estrategia, habilidad y toda la concentración de los jugadores; y un apartado técnico sobresaliente, NASL Soccer se erige como una de las piedras angulares del género, auténtica pieza de coleccionista que destila magia a raudales. Un cartucho atemporal, sin duda, como otros clásicos a la usanza de Electronic Football para la más que curiosa Videopac de Philips.

Como Pele's Soccer, por supuesto. Dos juegos que golean y golean, pero se dan la mano y deciden irse a los vestuarios antes de acabar el partido. Son los mejores, pero creen que es mejor dar paso a la juventud. Un aplauso y sigamos con otras dos estrellas, como por ejemplo bien pueden ser Match Day 2 y Konami's Soccer.

TEHKAN WORLD CUP vs TECMO WORLD CUP 90
Nuestro segundo encuentro nos lleva a los salones recreativos de los ochenta. Dos juegos que compartían muchas cosas, pero sobre todo una en concreto: la cantidad de monedas de 25 pesetas que nos hicieron gastar.

Corría el año 1985 y se preparaba un nuevo evento Mundial de fútbol, concretamente Méjico 86. Ocasión inmejorable para lanzar un arcade que aprovechara el tirón y moviera a las masas. Tehkan World Cup llega a los salones recreativos y logra poner a todo el mundo de acuerdo en una cosa: el juego engancha, y de qué manera.

La perspectiva cenital del arcade logra dar una buena perspectiva de lo que ocurre en el juego, mientras que el terreno de juego está impregnado de buenos detalles: vallas de publicidad, público, fotógrafos... Una buena puesta en escena que acaba por quedar en segundo plano ante el sencillo control que propone el juego: un joystick de 8 direcciones y un solo botón de disparo.

¿Y qué más? Pues queda lo esencial, la trepidante fórmula jugable que encandilaba desde la primera partida. El delantero coge el balón e inicia un terrorífico slalom dejando tirado a todos los defensas que le salen al paso, lanzando un chutazo que el portero no atrapa y que llega incluso a romper las redes de la portería. Entonces es cuando nos damos cuenta de que estamos realmente ante un clásico.

Así pues, Tekhan World Cup posee un tridente ofensivo para echarse a temblar: un ritmo endiablado de juego, un fácil y efectivo sistema de potencia de tiro y una amplia gama de remates, voleas y cabezazos. Pero el tiempo pasa, Tehkan se transforma en Tecmo y a finales de la década de los ochenta, la compañía vuelve a apostar por dar el pelotazo en los salones arcade. Se avecina un nuevo mundial, esta vez en Italia.

Tecmo World Cup 90 vuelve a apostar por el juego directo, aunque el tempo del partido es más lento. Se opta por una vista lateral y por aumentar el número de botones: uno para el disparo raso y otro para el bombeo de balón. También crece peligrosamente el juego sucio: entradas a ras de césped, patadas e incluso derechazos serán de la partida, mientras que el árbitro hace la vista gorda en la mayoría de las ocasiones.

Echarse una partidita al Tecmo World Cup 90 nos hace recordar a la gente agolpada en torno a la máquina esperando su turno y viendo al colega de turno jugar. Sin embargo, lo más sorprendente viene cuando analizamos el legado que nos dejó Tecmo World Cup 90. Y no me refiero a la gran cantidad de versiones distintas del mismo juego, sino del esquema jugable -vista lateral, juego directo y árbitro 'permisivo'- copiado hasta la saciedad en decenas de arcades futboleros, siendo quizá el más famoso el Football Champ de Taito.

En definitiva, un partido entre Tehkan World Cup y Tecmo World Cup 90 sería lo más parecido a un amistoso entre colegas, ya que son de la misma familia. El resultado más probable de este fratricidio sería un empate a cuatro goles al término del tiempo reglamentario y una prórroga donde se alzara con la victoria el juego de Tehkan, ya que a los del World Cup 90 no les quedarían suficientes jugadores... ¡los han expulsado a todos! Si es que ya lo dice Cantona... ¡Joga Bonito! En fin, yo le paso el micro a Spidey mientras echo otra monedita de cinco duros...

Match Day 2 VS Konami's Soccer
Dos auténticos mitos frente a frente. El primero, conocido por ser el abanderado del buen fútbol en los ordenadores de 8 bits. El otro, aún estando en un solo sistema, por representar la alta calidad de los productos de Konami en el MSX. Sea como sea, duelo de titanes.

Hablar de Match Day 2 es hablar, inevitablemente, de su primera entrega. Y por ende, de Jon Ritman. El creador de maravillas tales como Head Over Heels o Batman, como buen forofo del fútbol inglés que es, dio vida a un revolucionario videojuego que, sin duda, marcó un antes y un después en la edad de oro de los ordenadores de 8 bits. De hecho, es fácil encontrar a día de hoy gente que todavía disfruta de los emocionantes partidos del primer Match Day.

Pero su continuación pasó a otra dimensión. La tremebunda calidad de Match Day 2 ya se dejaba entrever a través de la magnífica carátula de Bob Wakelin. Y en sí, el juego, a pesar de llevar en sus hombros la carga de ser más lento que el logopeda de Aznar, transmitía la poderosa fuerza de una jugabilidad sin igual. La increíble novedad de poder jugar un apasionante partido de dos jugadores humanos contra la computadora no eclipsaba el vicio que representaba el juego en todas y cada una de sus facetas.

Mostrando una perspectiva más que familiar a día de hoy, los encuentros de Match Day 2 ponían cara a cara dos equipos de seis futbolistas en medio de una intensidad difícil de ver en próximos títulos deportivos. Los correctísimos gráficos estaban acompañados de una ambientación sonora sin igual, cuyo público animaba al máximo en pos de luchar contra la rocosa IA del rival computerizado. Por su parte, los futbolistas chutaban más o menos fuerte dependiendo de lo que indicase la barra de potencia puesta para tal fin, aparte de tener la posibilidad de saltar y rematar de cabeza, algo bastante sorprendente para la época. Igualmente, los guardametas eran capaces de hacer unas palomitas verdaderamente asombrosas, totalmente controladas por el jugador.

Qué vicios, amigos… ¡qué vicios! Claramente, Match Day 2 se podría coronar como el auténtico rey del fútbol en los ordenadores de 8 bits, habiendo dejado una herencia más que evidente en otros clásicos menos populares pero igualmente notables, como el genial Emilyn Huges Internacional Soccer en Amiga o los divertidos Kick Off 3 y secuelas. La huella de Jon Ritman fue profunda, y ni siquiera su silencioso paso por el fútbol en las consolas de 32 bits (con Match Day 3) fue capaz de empañar los mitos de antaño. Así que, en Spectrum, Amstrad CPC, Commodore 64 y MSX, Match Day 2 era el rey. O casi… En el último sistema citado, el Standard MSX, la corona estaba más que disputada por un clásico de la casa: Konami's Soccer.

También conocido como Konami's Football, el título estrella de la compañía de cara a su catálogo deportivo para el ordenador nipón respondía, al menos en apariencias, a un esquema bastante similar al presentado por Ritman en sus juegos de fútbol. Pero claro, ya técnicamente el cartucho de Konami dejaba muy atrás al juego de Ocean, donde su versión MSX provenía de un port directo desde el Spectrum. Con todo, Konami's Soccer superaba tanto en diseño como en colorido a los Match Day 2 de Amstrad CPC y Commodore 64, aprovechando el potencial de los MSX de primera generación como sólo la compañía japonesa sabía hacer.

Ya metiéndonos de lleno en el desarrollo de los partidos, se hace evidente que el ritmo de los encuentros es mucho más frenético que en los dos Match Day. ¡Y ruidoso! Konami, en su buen hacer, llenó el cartucho de melodías festivas marca de la casa y sonidos de calidad, donde no se dejaba de escuchar en momento alguno el bote del balón o las alegrías de las parábolas de este. El público, sin sonar de forma constante y épica como en Match Day 2, tronaba a tope cuando uno de los dos equipos encajaba gol.

La metodología lúdica del de Konami es calcada a la de la recreativa arcade Exciting Soccer. Sólo cambia la perspectiva, que en el cartucho de MSX es la misma que en Match Day, pero el sistema de juego es exacto. Esto es, aún existiendo bastante libertad en la acción, los pases se veían limitados al tener que ir de forma obligatoria hacia el jugador al que la computadora, por cercanía normalmente, seleccione como recepcionista. Si bien no siempre suele caer a los pies (y hay que anticiparse para recogerlo), el ritmo que otorga este sistema es alarmantemente frenético y convierte los duelos entre jugadores en un absorbente reto de precisión, donde las entradas para robar la pelota sustituyen los constantes rebotes entre balón y futbolistas del Match Day.

Los chuts a portería se hacían dejando pulsado el disparo, yendo el balón directo a la meta. Por distancia, puede que se quede corto, pero en la medida apropiada, encajaremos el gol mediante una flechita que recorre verticalmente la portería, y se parará al pulsar el botón. El mismo sistema de Exciting Soccer, y bastante inteligente, todo hay que decirlo. Los porteros también son controlados por el jugador, pudiendo lanzarlo hacia un lado u otro para estirar las posibilidades de parada.

Como curiosidad, no puedo dejar de citar lo divertido que era ver que todos los futbolistas eran algo así como clones del Mario de Nintendo, todos regordotes con bigote. Aunque algunos rubios parecían más bien la versión celulítica de Schuster… Con todo, Konami's Soccer es un juego magnífico, ideal a día de hoy para viciarse en plan retro, puesto que conserva la misma jugabilidad de antaño. Cabe citar que se trata del primer programa basado en el deporte rey de la compañía que hoy nos deleita con Pro Evolution Soccer, lo cual ya es decir. Por el mero hecho de vivir una historia pura y dura dentro de lo que es el mundo de los videojuegos, ya merece saborear las mieles de Konami's Soccer. Y por supuesto, de Match Day 2, otra auténtica joya de la corona.

Y es que la cosa no puede quedar de otra manera que en empate. Muchos goles por un lado y por otro, porque en ambos equipos hay calidad a raudales. Cinco a cinco, señores… Con toda esta emoción, continuamos con el siguiente partido, pasándole el micro a mi compañero Jesús, que va a hablar de dos representantes españoles del género.

EMILIO BUTRAGUEÑO FÚTBOL vs MICHEL FÚTBOL MASTER
Los dos jugadores más carismáticos de la Quinta del Buitre compartían protagonismo tanto en el Real Madrid como en la Selección. Pero lo mejor fue vivir el duelo entre sus respectivos videojuegos.

Si seguimos viajando en el DeLorean y nos paramos a finales de los 80, asistiremos al duelo futbolístico más sonado de la época. Allá por 1988, Emilio Butragueño Fútbol (Topo Soft) fue el juego más vendido en España con más de cien mil copias. Tal éxito hizo que Dinamic decidiera contraatacar un año después contratando a su compañero de club y selección, Miguel González ‘Michel'. Así nació Michel Fútbol Master.

Ya tenemos el partido organizado, así que demos el pitido inicial. Emilio Butragueño Fútbol nos presentaba un partido entre dos equipos, el rojo y el blanco; en éste último jugaba de delantero centro el Buitre, que se distinguía por ser rubio. No en vano, si nuestra estrella marcaba, el programa se encargaba de proclamar a los cuatro vientos '¡Gol de Butragueño!'. Y todo hay que decirlo, el rubio jugador fue el mejor jugador de la denominada Quinta del Buitre, que para eso llevaba su nombre.

Por su parte, Michel Fútbol Master pone en liza un campeonato entre ocho importantes selecciones, con nombres reales y todo. Esta opción le otorgaba mucha más variedad que al juego de Topo Soft, donde sólo existían dos equipos. Pero llegada la hora de la verdad, Míchel expone un juego más rápido y fluido, donde el tempo de partido se controla mediante una eficaz barra de potencia. Dicha barra permitía efectuar pases cortos, bombeados o fuertes disparos.

Pasemos de nuevo al Buitre. El juego de Topo -programado por Animagic- que se "inspiraba", por así decirlo, en la recreativa Tehkan World Cup, ofrecía un partido mucho más pausado, demasiado lento en ocasiones. En él también era posible controlar la potencia del disparo, aunque de forma menos precisa, ya que no existía ningún tipo de medidor. Aún así, el aspecto gráfico era imponente. Buenas animaciones y un genial diseño de jugadores que superaban con contundencia al Michel.

Bien, bien... llegamos al descanso. Se presumía un duro partido y así está siendo, con un empate a 1 al final de la primera parte. Pero atención, porque el segundo tiempo viene cargado de cambios. Y es que Michel Fútbol Master guardaba una importante baza en el banquillo, el Super Skills. ¿Qué es eso? Ni más ni menos que una sesión completa de entrenamientos con el 8 del Madrid, donde debíamos driblar conos, hacer pataditas con el balón y ensayar el tiro a puerta desde balón parado.

Michel cobra ventaja en el marcador gracias a su carga de entrenamiento, pero para ser justos, hay que dar la posibilidad al Buitre de contraatacar. Como ya sabéis, Emilio Butragueño Fútbol salió al mercado un año antes que Michel, así que Topo preparó una segunda parte que compitiera con el juego de Dinamic. Lo que hicieron fue adaptar dos juegos de Gremlin Graphics patrocinados por Gary Lineker; bueno, adaptar... le cambiaron el nombre y poco más.

Tales sustituciones han cambiado el rumbo de nuestro partido. Emilio Butragueño 2 resultó ser una gran decepción, puesto que el susodicho Gary Lineker era bastante mediocre. La carga de entrenamientos -estrategia de Topo Soft para hacer frente al Michel en todos los sentidos- era bastante pesada, convirtiéndose en un puro machacateclas, mientras que el partido ofrecía unos gráficos peores que los de su predecesor y un medidor de potencia que congelaba el partido cuando la dejábamos pulsada. Todo un despropósito.

Míchel Fútbol Master cobra ventaja en el marcador, tanto por los fallos de su rival como por sus grandes virtudes. Y es que detalles como las voces digitalizadas de la versión PC, o que los jugadores pudieran quedar K.O. si chocaban contra el poste de la portería hacían del Michel un juego ganador.

Escuchamos el silbato del árbitro... ¡se acabó el encuentro! Michel se impone por 3-1 al Buitre en un partido irrepetible. Qué tiempos, donde Michel centraba y Butragueño remataba a gol. Sin embargo, ahora uno de ellos intenta entrenar y el otro hace de director general adjunto. Sin duda, los tiempos han cambiado. Y devuelvo la conexión al señor Spidey. Adelante, chaval.

KICK OFF 2 vs SENSIBLE SOCCER
Parecidos de lejos, similares para el joystick y compartiendo 'Amiga'. Con dos 'mister' de la talla de Dino Dini y Jon Hare, el mejor Kick Off y el pequeño Sensi se ven las caras de forma definitiva.

Pocos conocían el nombre de Anco antes de Kick Off. Para una compañía algo pobre en sus lanzamientos, todo cambió al haber apoyado a la obra magna de Dino Dini, uno de esos magos de la programación que anteponen ante todo la jugabilidad. Así, Kick Off vio la luz sorprendiendo a propios y extraños a través de una aparente sencillez que, nada más lejos de la realidad, otorgaba al juego una libertad de acción inusitada en el género.

Los gráficos de Steve Screech no aprovechaban lo más mínimo de máquinas como el Atari ST o Amiga, lo cual echó en un principio para atrás a más de uno, y propició fáciles conversiones a Spectrum, Amstrad o Commodore 64. Por supuesto, conseguir la rapidez y la agilidad de las versiones 16 bits no fue fácil, tal y como se pudo comprobar a tenor de los discretos resultados. Con todo, Kick Off comenzó a forjar su leyenda.

Un año después, Dino Dini concibió el que para muchos es el mejor juego de fútbol habido y por haber: Kick Off 2. Menudo golazo por toda la escuadra... El nuevo lanzamiento de Anco mejoraba todos y cada uno de los apartados del original, aunque a primera vista pareciera similar. Pero sí, se mejoraban los apartados técnicos, era más ágil y técnico, y las reacciones de los jugadores conjugadas con la IA de la computadora convertían al presente título en un juego imbatible.

Y mira que era duro... Porque Kick Off 2 era rocoso de controlar, complicadísimo de dominar. Nada de balones pegados al pie ni rutinas de gol... Kick Off 2 ofrecía las mismas bondades de su predecesor pero redondeándolas a tope: Anco había publicado el juego perfecto. Fútbol de verdad, del que era casi imposible contactar el balón con una chilena o regatear a tres tíos seguidos sólo estaba al alcance de los mejores. Una maravilla para hardcore gamers.

Sus ampliaciones no hicieron más que mejorar el producto, con discos como Kick Off Final Whistle o Kick Off Return to Europe, que añadían nuevos equipos, pulían la IA y aportaban toques técnicos como un mejor sonido o divertidos añadidos de ambientación. Una pena que el nombre de Kick Off se viese relegado a la mediocridad al coger Steve Screech el testigo de la programación ante el abandono de Dino Dini, dando lugar a nuevas secuelas que, si bien eran divertidas, gozaban de una carencia total del encanto de antaño. De todos modos, el señor Dini sacó en otra compañía (Virgin) el brutal Goal!, también conocido como Dino Dini's Soccer. Totalmente digno del nombre de su realizador.

Dos años después del lanzamiento de Kick Off 2, una veterana casa cogía el testigo del espíritu jugable que tratamos en esta página. Habiendo programado joyas como Wizball o Megalomania, Sensible Software puso toda la carne en el asador para presentar un producto muy parecido a la obra de Dino Dini, pero adaptándola con mejores gráficos y ofreciendo una metodología lúdica más apta para todos los públicos.

Así pues, Sensible Soccer no era ni la mitad de complicado que Kick Off. Si bien ambos jugos se controlaban con un solo botón (mando direccional aparte, por supuesto), el viejo Sensi era mucho más arcade, más frenético en su acción, y los goles llovían como churros. Se sacrifica en gran medida el realismo de Kick Off a favor de proporcionar un título que en absoluto desesperaba, como bien podía hacer su 'rival' a los menos pacientes.

En Sensi veíamos unos futbolistas pequeñajos a más no poder, pero sus animaciones superaban en gran medida a las de Kick Off. La ambientación, tanto en términos gráficos como sonoros, eran superiores en gran medida, y la sencillez y espectacularidad de sus partidos pronto convencieron a todos los 'amigueros' del mundo.

Pronto aparecieron las secuelas, llegando también el juego a las consolas de 16 bits. Sensible World of Soccer consiguió un gran éxito en PC, mientras que los usuarios de Megadrive se rindieron ante sus virtudes lúdicas. Campeonatos multitudinarios, ampliaciones por parte de los jugones... Vicio por doquier que, de forma oficial, llegó hasta la última edición puesta a la venta allá por 1996.

Posteriores versiones a las oficiales de Sensible Software oscurecieron el nombre de la saga, pero a día de hoy podemos encontrar en las tiendas un nuevo Sensible Soccer que a buen seguro enamorará a los incondicionales del deporte rey. Así, entre Kick Off 2 y Sensible Soccer, nos encontramos un empate de los que hacen historia, ya que han sido dos contendientes de muy alto nivel. Con todo, un servidor se queda con la magia del juego de Dino Dini, algo así como el Maradona del videojuego. Veamos si mi compañero Jesús elige bien entre los orígenes de ISS y Fifa...

INTERNATIONAL SUPERSTAR SOCCER vs FIFA INTERNATIONAL SOCCER
Toda saga tiene un comienzo. Hace mucho, mucho tiempo -bueno, unos doce años- tuvo lugar un partido crucial para las épocas venideras. Hoy se cuelga el cartel de 'No hay billetes'.

Quizá los más jóvenes del lugar no sepan que la rivalidad actual futbolística entre Konami y EA Sports viene de lejos. Es posible que muchos de los que hoy participan en los foros PES vs FIFA no hayan vivido los precedentes de tales sagas. Probablemente, muy probablemente, hoy reviviremos uno de los partidos más importantes de la historia de los videojuegos. Que salten al campo International Superstar Soccer y FIFA International Soccer.

Por aquel entonces, allá por 1993, EA Sports lanzó un juego de fútbol para Megadrive. Desde el mismo día del estreno, FIFA International Soccer se convirtió en objeto de codicia por todo aquel que no poseía la 16 bits de SEGA. Y es que echar un primer vistazo a lo que nos mostraba era estar lo más cerca posible de una retransmisión deportiva. Seguir el transcurso del partido desde aquella perspectiva isométrica, escuchar tal variedad de cánticos de la ruidosa afición y contemplar un gol por la escuadra mientras el portero se estiraba inútilmente... ningún amante del fútbol había visto algo igual en un sistema de ocio electrónico.

Si bien el aspecto gráfico era intachable, la jugabilidad del primer FIFA arrojaba luces y sombras. En principio, el control era bastante más complejo de lo habitual, ya que cada uno de los tres botones del gamepad tenía asociado una acción diferente, ya fuese pasar, bombear o disparar el balón. La precisión que exigía el juego se alejaba bastante del típico arcade de la época, haciendo posible una amplia gama de jugadas.

Sin embargo, el FIFA original exhibía ciertos automatismos en el transcurso del juego. La física del balón era bastante buena para la época, aunque en demasiadas ocasiones el juego completaba la jugada por nosotros. ¡Gol! ¡Impresionante cabezazo en plancha al fondo de las mallas! Pues sí, golazo, pero era la máquina quien decidía si el jugador se tiraba de cabeza o no. Vamos, que no eras tú quien había marcado.

Con todo, FIFA incluía un buen compendio de ligas y copas de todo tipo, protagonizando un gran éxito de ventas. Se consolidaba el comienzo de una prolífica saga que llega hasta nuestros días... pero llega 1994, y Konami decide mover el balón.

Y no de cualquier manera, no. La compañía japonesa se vuelca con Super Nintendo y programa Perfect Eleven, o como lo conocemos por aquí, International Superstar Soccer. En Japón arrasaba en ventas, mientras que los españolitos babeábamos con los previews de las revistas de la época. Pero cuando llegó a Europa redefinió el concepto de videojuego de fútbol. Así de claro.

Jugar a ISS en el cerebro de la bestia proporcionaba muchas sensaciones. Asombro, ante la maestría de las animaciones de aquellos enormes jugadores. Satisfacción, puesto que su sistema de juego podía ser asimilado desde el principio, pero necesitaba tiempo para ser dominado. Pero por encima de todo, tensión y piques inenarrables en el modo de dos jugadores.

Y aunque es justo reconocerle errores como la excesiva rigidez a la hora de correr con el balón o la ausencia de licencias de jugadores, lo cierto es que se reconocían a estrellas como Roberto Baggio por su coleta o Valderrama y su melena leonina. ISS nos dejó toda una colección de golazos, regates y paradones que aún siguen en mi retina doce años después.

Solo era el comienzo, ya que Konami continuó la saga en Super Nintendo con una edición Deluxe aún mejor; luego vinieron entregas para Playstation, Nintendo 64 y Playstation 2. Curiosamente, la denominación ISS iba perdiendo fuelle poco a poco, mientras ganaba enteros la simulación total y la coletilla ‘Evolution', derivando en el PES actual.

ISS y FIFA International Soccer destilaban calidad. Indudablemente eran muy distintos, pero su importancia fue capital en la historia del videojuego. Un partido virtual entre estos dos colosos sería complicado de emular, pero lo que está claro es que sería un encuentro con muchos goles. Por ello, el resultado final refleja un épico empate a 3, donde el único ganador ha sido el espectáculo y, por supuesto, todos los amantes del balompié digital. ¡Esto no para! Ahora toma el relevo Spidey, que visita los salones recreativos. Adelante, compañero.

SUPER SIDEKICKS vs VIRTUA STRIKER
Las dos dimensiones chocan de bruces con los modernos polígonos. Los reyes del píxel se enfrentan a los pioneros de los arcades tridimensionales. Neo Geo vs las placas Model o Naomi... ¡espectáculo garantizado!

Si bien Sega nunca ha demostrado en sus años mozos una predilección por el fútbol en los salones recreativos, la siempre espectacular SNK ya comenzó sus primeros pasos por el césped allá por el año 1988. El nombre de su estreno futbolístico era Fighting Soccer, y recogía el testigo formulado por World Cup Tehkan pero en plan embrutecido, algo que era marca de la casa. Seguro que muchos recuerdan este título por la conversión a los 8 bits que editó Activision.

Ya dentro del poderoso hardware de la consola Neo Geo, SNK demostró que podía hacer algo bueno con el deporte rey a través del alucinante Soccer Brawl, una versión futurista y divertidísima del fútbol. Viendo el éxito resultante, SNK decidió lanzar un año después uno de los cartuchos más emblemáticos de la compañía de Osaka: Super Sidekicks. Balompié en estado puro, modernizando a tope el estilo de clásicos como Football Champ o Tecmo World Cup '90, con los usuales excesos técnicos de la casa.

Por supuesto, en su versión para arcade recreativo Super Sidekicks barrió. Y como no podía ser de otra forma, SNK se puso las pilas para hacer de su secuela un título abrumadoramente impactante. Arcade de tomo y lomo cuya espectacularidad saltaba a la vista, al explotar de forma sensacional las vicisitudes de las dos dimensiones. Hermosos píxeles y un ritmo de juego clásico y frenético aportaba al país un desgaste creciente de monedas de veinticinco pesetas.

Con todo, Super Sidekicks 3 no supuso tanto como su predecesor. Y es que las novedades no terminaron de cuajar, aportanto tan poco que apenas era fácil distinguir a uno del otro. Evidentemente, la calidad seguía siendo gigantesca, con un '100 Megashock' repleto de zooms, sonidos explosivos y calidad lúdica de garantía. Al igual que sus continuaciones, Ultimate 11 y Neo Geo Cup 98, que con pequeñas actualizaciones y enriquecimiento de detalles colmaron las ansias de los usuarios de estas consolas.

El mismo año de Super Sidekicks 2, Sega sorprendió a propios y extraños con la puesta en escena de Virtua Striker, un arcade futbolero que corría sobre la placa Model 2, la misma que movía los sorprendentes Virtua Fighter 2 o Daytona USA. La reacción de los jugadores al ver el juego en acción era casi siempre la misma... ¡la de una mandíbula completamente desencajada!

Salvo en lo tecnológico, Virtua Striker no llegaba a aportar nada demasiado sorprendente. Al ser un arcade recreativo, todo seguía con las mismas premisas lúdicas de toda la vida... sólo que bajo un manto tecnológico a todas luces sorprendente. Prácticamente sin innovar en nada salvo en lo técnico, Sega siguió asombrando al personal con Virtua Striker 2, a través de la placa Naomi (que proporcionó una perfecta conversión a Dreamcast). A pesar de todo, muchos detractores se cebaban en lo reiterativo del desarrollo de los partidos y en la excesiva inercia de los jugadores.

Los errores apenas se subsanaron con Virtua Striker 3, que también pudimos jugar en Nintendo Gamecube. Con todo, los usuarios con ganas de buenos gráficos (la placa Model 3 todavía resulta sorprendente) y ganas de piques sencillos pueden apostar por él.

En marcha está Virtua Striker 4, pero... ¿seguirá siendo el mismo arcade de siempre? ¿Madrugarán sus jugadores y aportarán algo sustancialmente jugoso como para olvidar sus antecesores? De un modo u otro, por ahora salen victoriosos del terreno de juego los hombres de SNK. Super Sidekicks es más 'retro', pero también sabe divertir a la par que sorprender al personal. Un sólo gol de distancia y por la mínima. ¿Cómo va tu poligonal partido, compañero?

SEGA WORLDWIDE SOCCER 97 vs INTERNATIONAL SUPERSTAR SOCCER 64
En esta ocasión se enfrentan dos juegos que vieron la luz en dos consolas bien distintas: la Sega Saturn y la Nintendo 64. No te pierdas el partido en riguroso directo.

Aunque Sega Saturn tuvo una vida bastante corta dentro del panorama de los videojuegos, lo cierto es que pudo disfrutar de un buen puñado de joyas lúdicas. En este encuentro participará una de ellas, Sega Worldwide Soccer 97 -WWS 97 de aquí en adelante-. El simulador programado por Sega Sports se tendrá que enfrentar a International Superstar Soccer 64 -ISS 64 de aquí en adelante-, la primera entrega de la saga que salió para Nintendo 64. Sin más preámbulos, me dispongo a radiar en vivo y en directo todo el partido, a ver si le quito el puesto a Manolo Lama. O a Iñaki Cano.

El saque de centro es para el videojuego de Saturn. Con un amplio dominio de las cámaras -permitía jugar desde vistas horizontales y verticales con todo tipo de zooms-, los jugadores de WWS 97 se desenvuelven con soltura en el terreno de juego y practican un juego lento pero seguro, con toques precisos. Desbordando con una espectacular bicicleta, se plantan ante la portería y chutan con efecto apuntando a la escuadra. Golazo. Telarañas limpias... era una gozada practicar el tiro con rosca en WWS 97.

Turno de ISS 64. Konami hizo de este cartucho el máximo exponente de la vertiente arcade, todo aderezado con unos gráficos de auténtico lujo que exprimían al máximo el hardware de la consola. Si antes hemos asistido a la demostración de puntería de WWS97, el pupilo de Konami pone en liza su juego rápido al primer toque y es capaz de plantarse solo ante el portero en pocos segundos. El delantero hace la vaselina más real que yo haya visto en un videojuego pero ¡diablos! el portero contrario salta tres metros al estilo Goku y despeja el balón. Y es que en WWS 97 se mezclaban realismo y ficción con mucha homogeneidad...

Acaba la primera parte y los jugadores enfilan el túnel de vestuarios con 1-0 a favor de WWS97. Nadie duda de que estamos ante dos grandes juegos, entre otras cosas, porque si fueran malos no los habríamos enfrentado hoy. ISS 64 se siente dañado en su orgullo y apela a la furia hispan... eh, perdón, nipona; invocando el espíritu de Oliver Atom, deciden lanzarse en tromba hacia la meta contraria.

Entonces sucede algo increíble: los delanteros de ISS 64 lanzan una y otra vez desde lejos, y descubren el punto débil del rival: el portero. Que sí, que no he tomado nada raro. El mismo portero que antes saltaba hasta el infinito, es capaz de hacer la estatua y recibir un gol tras otro. Los de Konami, que no son tontos, aprovechan este bug para remontar y golear a su rival, que no puede hacer nada ante tal avalancha.

¡Fin del partido! ISS 64 logra una aplastante victoria por 4 a 1 ante un desmoralizado WWS 97, quizá consciente de que no han elegido la mejor consola para hacer su debut. Aún así, hay que reconocer que se pasaban muy buenos ratos con el simulador de Sega Sports gracias a su libertad de juego... pero ciertos fallitos te hacían dudar más que Hamlet rellenando la BonoLoto.

Por su parte, poco más que decir de ISS 64... conservaba toda la adicción y jugabilidad de la versión Super Nintendo, pero con un nivel técnico insuperable para la época. El ritmo de partido del mejor arcade y una gama de posibles jugadas digna del mejor simulador. Un justo ganador de un partido que ya acaba, pero solamente para dar paso al siguiente. Os dejo con Spidey de nuevo, y ya sabéis: ¡esto es fútbol!

CLUB FOOTBALL vs ESTO ES FÚTBOL
Abultados presupuestos y gigantescas dosis de publicidad no hacen grande a un juego. O tal vez sí... Pero en un complicado mercado como este que nos ocupa, Codemasters y Sony Computer han tenido una mala temporada.

Por si alguno no lo sabe, cuando nos referimos a la serie Club Football lo hacemos a esos juegos que salieron no hace mucho abanderados por un equipo de fútbol en concreto, como bien fueron Real Madrid Club Football o FC Barcelona Club Football. Lanzamientos de Codemasters que trataban de hacerse un hueco entre el apretado panorama futbolístico que había (y hay) en Playstation 2, Xbox y PC.

Con dos ediciones en el mercado, la última de ellas lanzada el pasado año, Club Football vio reducidas sus ventas prácticamente a los forofos más acérrimos de los equipos que llevaban en portada. Por supuesto, a un seguidor del Español o del Atlético de Madrid muy poca gracia le podía hacer adquirir uno de estos juegos… y es que la calidad que atesoraban tampoco incitaba mucho a ello, máxime cuando Pro Evolution Soccer o FIFA se tornaban como propuestas más sugerentes.

En todo caso, la concepción técnica de Club Football se antojaba excelente. Aún a día de hoy, la última edición del juego posee unos notables gráficos que muy poco tienen que envidiar a los cracks del género, y todo en general transcurre con una fluidez que, en ocasiones, hace palidecer las fluctuaciones de los más nuevos FIFA. Por desgracia, este programa acoplaba en su sistema fallos de bulto típicos de lo que es una primera incursión en el género, errores sobre todo referentes a términos jugables.

Los balones tenían una física errática, los pases parecían cañonazos, y los goles venían marcados por una serie de incómodas rutinas que acababan con cualquier tipo de improvisación a la hora de hacer jugadas. A pesar de todo, se manejaba bastante bien (con unos controles exactos a los de Pro Evolution Soccer) y podía llegar a divertir con sus interesantes opciones. Una pena que Codemasters no decidiera seguir con estos juegos, ya que el paso del tiempo habría deparado, a buen seguro, un contendiente de calidad a los clásicos de siempre.

Por su parte, Sony nunca ha querido perder su pequeña parcelita lúdica en esto del fútbol. Su producto vende, a pesar de quedar relegado en el gran olimpo que es la estantería si lo comparamos con otros juegos de fútbol más profundos. Y es que Sony lleva empujando los Esto es Fútbol para Playstation 2 desde mucho antes de que se llamasen así, ya que esta serie comenzó en los primeros tiempos de PsOne, con los Adidas Power Soccer que lanzaba Psygnosis antes de ser engullida del todo por la maquinaria empresarial de la factoría nipona.

Curiosamente, los Esto es Fútbol no llaman la atención por nada en especial. Para muchos, son juegos anodinos y sin carácter, pero no cabe duda de que, una vez a los mandos, resulta divertido y se lo pasa uno muy bien. Su metodología jugable es claramente arcade, y los goles llueven como churros a través de rápidas jugadas. Es preciso y sin claras lagunas de jugabilidad, con un estilo que perfectamente tendría cabida en los salones recreativos.

Esto es Fútbol, aparte de contar en sus carátulas con estrellas como Fernando Torres (en la última edición del 2005), presenta también una fidedigna representación de los jugadores, pudiendo aparte incluir nuestro rostro a través de una sencilla utilidad vía Eye Toy. Otro detalle de lo más particular y resultón ya dentro del terreno de juego es la posibilidad de tirarnos a la piscina para simular falta, matiz que algunos ya pudimos disfrutar en una añeja edición de FIFA. Por lo demás, esta obra de Sony se mueve fantásticamente bien, 60 imágenes por segundo constantes y con un cuidado espectáculo visual.

Así… ¿con cuál de estos dos se puede quedar uno? ¿Club Football o Esto es Fútbol? Cada uno tiene sus virtudes y sus defectos, y a día de hoy claramente no pueden competir con los grandes del género. De todos modos, y a pesar de que a día de hoy no ganarán ningún mundial, un servidor se queda con Esto es Fútbol… por ser más ágil y divertido que el de Codemasters, título el cual incita poco a jugar. Y de eso se trata, amigos… 0 a 1 para los de Sony, Jesús.

A por ellos... Oe!
Esta serie de versus creo que habrán dado a conocer algunos de los clásicos del deporte rey, ¿verdad, amigo Pedja?

Yo diría que no nos hemos olvidado de ningún clásico, aunque a buen seguro que nuestros lectores tendrán en el recuerdo muchos más.

Y lo que ha de venir, Jesús... Juegos de inminente aparición como Pro Evolution Soccer 6 prometen desbordar al personal. Al menos esa es la impresión que me da el apalizarte con su versión japonesa, Winning Eleven 10.

Va a ser que no entiendo muy bien los caracteres japoneses. Bueno, para un partido que me ganas... Porque anda que no hemos jugado a todo tipo de soccer-games...

¿Has probado el nuevo Sensible Soccer? De simulador poco, no sé qué pensarán los fans de PES o de FIFA... Pero el juego es genial, tan divertido como el de los viejos tiempos.

Sin duda, colega. Se nota que somos de la vieja escuela. Siempre viene bien para rememorar aquellos partidazos en el Amiga.... Con todo, ya es hora de que nuevos títulos salten a la palestra. Pinta bien el World Football Climax, ¿no crees?

Sí, curioso sí que resulta este título de Sega. Aunque es algo descarado copiando vilmente los controles y el estilo del juego de Konami, pero apunta buenas maneras, a pesar de quedarse cortito.

Bueno, Spidey. Yo creo que por hoy ya está bien de fútbol. Es hora de dar por terminado este Mundial, y de comenzar a animar a España. Un cordial saludo a todos los que han disfrutado con este artículo, y hasta la próxima.

Pefecto, Jesusito... ¡Que descanses! Un servidor también se quita las botas y se despide de todos nuestros lectores, a la espera de que España, nuestra selección, nos dé algún día una alegría.