¡A bailar con las manos!

Hace un par de meses os adelantábamos en unas pequeñas impresiones nuestra primera toma de contacto con el juego musical de Ignition Entertaiment. Ahora llega el turno del análisis de este nuevo título basado en la interacción de Eye Toy con un planteamiento muy cercano al de los juegos de baile como es el caso de los Dance Dance Revolution.

El concepto de juego de Rhythmic Star es muy simple: mantener el ritmo de la música  presionando a golpe de mano el lugar exacto de la pantalla dónde golpean las estrellas que irán desfilando por la pantalla, ni más ni menos. Planteamiento que veremos en los 3 modos de juego que acompañan al título y es que, como veremos más adelante, ofrece poca variedad al menos en lo que se refiere a la jugabilidad.

Gráficos

Técnicamente el juego es bastante pobre, no sólo durante el desarrollo de las fases sino  que también la presentación de los menús por los que nos moveremos es bastante sosa, aunque intuitiva. Centrándonos más en el juego en sí y como todo título basado en Eye Toy, decir que el protagonista absoluto es el propio jugador reflejado en la pantalla, adornado con variados efectos y objetos bidimensionales con un carácter propio de dibujo animado.

La pantalla la podemos dividir en tres zonas colocadas una sobre otra. En cada una habrá dos estrellas del mismo color: una para la mano izquierda y otra para la derecha. En ambos extremos nos encontramos con dos columnas por las que irán descendiendo estrellas de los tres colores posibles, aunque también nos encontraremos con pacmans y fantasmas de colores (para algo Namco está detrás del título). Poco más podemos destacar del apartado visual, que como podéis ver es muy simple.

Según avancemos en el juego podremos desbloquear objetos 2D para modificar nuestra apariencia: labios, pelucas, bigotes, etc. Aunque pueda parecer interesante, el resultado es bastante pobre, ya que se sitúan en unas coordenadas fijas y tendremos que ser nosotros quienes nos coloquemos para que todo quede "bonito".

Modos de juego

TRES. La nómina de modos asciende exclusivamente a tres, lo peor es que serán idénticos salvando alguna que otra diferencia. El modo normal que nos enfrentará a un total de 25 canciones de muy variada temática, el modo "Mano a mano" que es un multijugador hasta para jugadores, aunque tristemente no de manera simultánea, ni siquiera dos, y un ultimo modo de Supervivencia en el que tendremos que resistir fases una tras otra (similar a los survivals de lucha). Y en efecto, no hay más. La variedad brilla por su ausencia.

Jugabilidad

Todos los modos de juego tienen en común el mismo concepto de juego. A ambos extremos de la pantalla irán descendiendo estrellas de colores, cuando lleguen a la parte inferior se desplazaran a la posición correspondiente de la pantalla (que siempre es fija). Si acertamos a golpear en el momento exacto, no solo aumentaremos puntos sino que daremos marcha a la canción. Es decir, que la letra de la canción sólo aumentará si acertamos  a golpear a la estrella, en caso contrario escucharemos la melodía de fondo.

Y salvo que hay hasta cuatro niveles distintos de dificultad poco más os podemos contar, porque no alberga más de lo ya mencionado. Ganaría puntos si las estrellas que tenemos que golpear se movieran por el escenario o incluir algún modo de juego que aprovechara el concepto jugable, pero tristemente no es así.