Gradius Portable

Conocido como Gradius Portable en oriente y Gradius Collection en occidente, el caso es que a muy pocos aficionados a los videojuegos les es desconocido que un port de cinco de los seis juegos disponibles de la saga han sido reeditados para PSP por Konami, en pos de ofrecer no sólo la oportunidad de volver a disfrutarlos a aquellos que no compraron los originales en su día, sino también para introducir un género algo olvidado a las nuevas generaciones, más dadas a juegos en 3D en los que muchas veces premian otros elementos muy distintos a la jugabilidad.

En cualquier caso, tras una serie de pequeños e inoportunos retrasos el juego vio finalmente la luz en Japón el pasado nueve de febrero, recibiendo buenísimas críticas y una acogida excelentes. Era de esperar que un juego que reúne los mejores exponentes de una saga tan importante como fue Gradius no pasase desapercibido en el mercado. No es para menos, dado el nivel del mismo y el contenido que ofrece.

Cinco en uno

Dicho contenido es el siguiente; Gradius I, Gradius II, Gradius III, Gradius IV y Gradius Gaiden, exclusivo en Japón hasta el momento, haciendo especial énfasis en los dos primeros como ya explicaremos a posteriori. Y aunque en un principio pueda parecer una simple colección de juegos clásicos, hay que tener muy en cuenta que los dos primeros estaban descatalogados, Gaiden se puede considerar como original en nuestras tierras y, por supuesto, el atractivo que supone disfrutar de un 'mata marcianos' en una portátil.

Sin embargo nunca esta de más recordar que cada nuevo aporte en la serie ha supuesto un avance en la misma. Así, Gradius I supuso, como ya mentamos anteriormente, una revolución en el género, mientras que su continuación mejoraría gráfica y sonoramente, además de aportar algo más de duración y los casi consecuentes nuevos enemigos, enemigos finales más grandes, un juego de mayor duración...

Gradius III fue un mundo aparte, pues su dificultad le restaba muchos alicientes, al menos para los que no estaban adecuados al sistema. Pese a esto se consideró una fiel continuación, suficiente para las necesidades de los aficionados.

Gradius Gaiden, que como ya avanzábamos no había salido hasta el momento de Japón por motivos supuestamente económicos, es 'ese' original de Gradius Collection que apareció en PSOne  n verano de 1997. Aportaba un motor gráfico distinto para la saga, con las mejoras supuestas de una consola de mayor capacidad que las que hasta ese día había conocido la serie. Gradius IV fue otro cantar; criticado por muchos, querido por tantos, es quizás el que menos lanzas a favor consiguió partir. Las pocas novedades que contenía, un apartado gráfico algo demacrado y una dificultad dispar le hacían perder sus principales atractivos.

No nos olvidamos tampoco de Gradius V, que en apariencia se ha dejado de lado por dos posibles hipótesis; la consola no podría mover el motor del que nos hicimos eco en PS2, o porque se piensa lanzar por separado dado el éxito del mismo. No se han confirmado ninguna de las dos posibilidades, aunque con lo presente tampoco se antoja realmente necesario. 

Las novedades

No vale la pena mencionar que, ajustándonos a la actualidad, estos Gradius ofrecerán la posibilidad de guardar la partida en cualquier momento, pantallas de pause que las primeras versiones no ofrecían etc. Sí que es importante resaltar que las novedades no son tales con respecto a los packs 'deluxe' que Konami ha ido lanzando para PSOne, PS2 o incluso GBA. Las mejoras se han realizado a partir de las versiones originales.

Éstas se centran fundamentalmente en las dos primeras entregas de la saga, que por su situación cronológica y plataforma en la que aparecieron son algo más complicadas de adaptar que las restantes, más a la par de lo que los nuevos tiempos andan exigiendo. Dicha dificultad radica en la pantalla ancha de la consola, para la que estos dos han sido programados con una opción que nos permite elegir entre el modo de vista original - 4:3 - o el de la PSP, 16:9.

En los restantes tres juegos el problema del port se ve subsanado de otra manera y sin la opción de cambiar el tamaño de la pantalla; mediante un modo 'sin zoom' que nos permite ampliar la vista original y apreciar todos los elementos con un menor tamaño, a mayor velocidad y con distinta calidad gráfica. Este sistema puede pecar de minimizar en demasía los elementos en pantalla, confundiendo algo el mapa del juego.

El control no ha de suponer un especial problema aquí pues en su origen fueron concebidos para un pad digital. Sin embargo, en el caso de los siguientes Gradius, aparece un pequeño desperfecto con el susodicho control, acrecentado por la pobreza del que la portátil de Sony posee.

Además de estas novedades la inclusión de un mayor número de 'power-ups' y ayudas para los jugadores menos experimentados salvarán algo la dificultad por la que siempre se han caracterizado estos juegos.

Una vuelta al pasado 

Tal es la dificultad, que Konami nos recompensará al conseguir terminar cada uno de los juegos con varias galerías de los mismos y los vídeos originales de aquellos que han aparecido para las consolas de 32bits y superiores. También se incluyen los vídeos que se han ido realizando para las versiones 'deluxe' o packs. No sabemos aún si es aliciente suficiente para el quebradero de cabeza que siempre ha supuesto Gradius III.

Pero de lo que no cabe duda es que Konami se ha esforzado en sacar un pack especial de una saga especial en un momento en el que PSP agradece novedades en su repertorio, ajenas a esos juegos de PSOne que ya nos conocemos de memoria. Aunque realmente no sea ni un género nuevo ni tampoco una idea poco frecuente, lo cierto es que gracias a lo olvidado que esta éste la colección de cinco juegos de 'mata marcianos' en una consola que hasta el momento no disfruta ni de uno es más que aceptable.

No tiene este Gradius Collection una fecha de salida en Europa, aunque no sería de extrañar que Konami se decidiese a importarlo por aquí dado el éxito que está obteniendo. Sólo podemos cruzar los dedos y esperar que esto ocurra, a ser posible, cuanto antes mejor.