Advent Rising

Descubre Advent Rising en movimiento en este vídeo.

Advent Rising es una de esas eternas promesas que en los últimos tiempos se suceden con inusitada frecuencia. Cuando el producto que nos ocupa fue anunciado allá por 2003, Majesco (su productora) evidenció sus intenciónes de convertirlo en el estandarte comercial de la compañía, al no ocultar la ambiciosa pretensión de transformar la prometedora creación de GlyphX en su boom mediático, requerido  para situar su nombre juanto al de los más reputados colosos de la industria.

Dicho y hecho: Majesco no escatimó medios a la hora de costear el desarrollo de Advent Rising (prestando gran parte de su logística a los chicos de Glyphx), y además, contribuyó a que su nombre comenzara a ser un asiduo en el vocabulario de prensa y usuarios al hacer pública la participación del célebre novelista Orson Scott Card (autor de diversos Best Seller de ciencia ficción, entre los que cabe destacar la serie "El juego de Ender"), quien cumpliría las veces de co-guionista del título, lo cual provocó que Advent Rising captara la atención de una ingente cantidad de espectadores, maravillados ante la perspectiva de jugar a un título con el influjo del popular autor norteamericano tras parte de su línea argumental. Entonces, comenzaron a gestarse el hype y las expectativas

Pero no todos los buenos augurios que un producto evoca acaban por materializarse satisfaciendo las expectativas depositadas por los creadores del mismo. Esto es una norma escrita en toda expresión artística: Kevin Costner jamás logró amortizar los dólares invertidos en "Waterworld", severamente fustigada por el público en lo que a cifras respecta, Anthony Burgess vió como sus novelas más apreciadas por si mismo eran ignoradas por la crítica literaria -aún omnubilada con su Naranja Mecánica-, y Van Gogh vivió en sus indignadas carnes lo que -según él era- la infravaloración de su obra por parte de los aficionados al arte, que solo supieron prestarle atención cuando este se cortó una oreja. Una situación similar (aunque con evidentes matices) ha vivido Majesco en los últimos tiempos.

Majesco, en un loable -aunque temerario- intento por expandir la marca tiró la casa por la ventana confirmando su apuesta en productos de gran potencial, aunque llevados a cabo por estudios precoces. Los resultados tras la incursión de estos títulos (con Advent Rising a la cabeza) a nivel comercial fueron ciertamente desalentadores. De modo que, en vista del paupérrimo panorama, Vivendi Universal (distribuidora de Majesco en Europa) decidió reconsiderar los acuerdos de distribución sobre los títulos de la productora, dejando en el aire la salida del título que nos ocupa entre otros. Así pues, y a pesar de que los norteamericanos pueden adquirir su copia de Advent Rising desde mayo y junio (en Xbox y PC respectivamente), los europeos ni siquiera hemos conocido una fecha definitiva hasta que finalmente THQ se hizo con los derechos de distribución sobre catorce títulos de Majesco.

La pluma al servicio del medio audiovisual

A la hora de avanzar las cualidades de un título, el hecho de que este lleve ocho meses a la venta en un mercado ajeno otorga la licencia de poder hablar de él con un reducido margen de error, con cierta seguridad. En base a esto, podemos afirmar que la línea argumental de Advent Rising será, a todas luces, su característica más destacada, además de su mejor recurso de márketing. Y es que si por algo se ha hablado de la producción que nos ocupa es por su -a pirori- elaborada trama, de lo que en gran medida es culpable el arriba citado Orson Scott Card. Y es que el autor "El juego de Ender", en un trabajo conjunto con los chicos de GlyphX ha logrado trasladar al guión del título todas las cualidades que han convertido a sus novelas en éxitos de ventas, apoyándose en una sólida trama de ciencia ficción digna de una superproducción hollywoodiense.

Cabe destacar que Advent Rising no es sino la primera entrega de una trilogía que, hipoteticamente, Majesco cerrará a lo largo de la  recién iniciada nueva generación de consolas, además de en PSP. A pesar de esto, los detractores de los finales prematuros, abiertos, o de mero enganche con su confirmada secuela podrán respirar tranquilos, ya que a pesar de estar intrínsecamente ligado con sus dos secuelas, este capítulo inicial será autoconcluyente, es decir, la narración terminará con un final definido; no será necesario jugar a la segunda ni a la tercera entrega para conocer el desenlace de la primera, aunque las tres guardan una relación entre sí.

En una épica aventura interplanetal en la que el planeta Tierra ya es historia, el ser humano es un elemento histórico, místico y distinguido, un objeto de culto entre la mayoría de razas alienígenas, muchas de las cuales buscan los últimos indicios de humanidad por el universo, alentadas por una milenaria creencia que le atribuía al ser humano la divina capacidad de unir a todas las razas, creando una armonía galáctica. Pero, como habreis podido suponer, en virtud de esta misma doctrina, otras tantas razas (menos benévolas) desean a toda costa la destrucción de los últimos vestigios humanos.

Y aquí es donde comenzarán nuestras vivencias. Encarnaremos a Giddeon Wyeth, un piloto que habita una clásica plataforma espacial en la que lleva a cabo una apacible existencia con su hermano mayor y piloto de mayor experiencia. El transcurso de los hechos se precipitará cuando los Aurelian irrumpan en Edumea (nuestro planeta) para advertir a los humanos acerca de la terrible amenaza que sobre los últimos restos de la especie se cierne, y que se materialazará en forma de hordas de Seekers (Los Buscadores), quienes buscan erradicar la llave hacia la paz galáctica que tanto predica la leyenda. De esta forma, nos veremos envueltos en una trama de lujo, con giros argumentales y una puesta en escena igualmente espectacular, en la que nuestro protagonista, tras diversos sucesos catastróficos, se verá continuamente abocado a una muerte de la que tendrá que huir.

El desarrollo de Advent Rising sigue los patrones marcados por los clásicos títulos de acción en tercera persona. Aunque su argumento dista de los arquetipos más clásicos dentro del género, lo cierto es que podríamos achacarle a Advent Rising su condición de ser un tanto "genérico" conceptualmente hablando, pues el desarrollo de la acción no destacará por tener un planteamiento o distribución aparente (en este aspecto, se tratará de un mata-mata en toda regla, para que nos entendamos), incluso podríamos afirmar que en lo que a nuestros objetivos a cumplir sobre el escenario respecta, el título que nos abarca guarda cierto parecido con "Halo", "Quake" o "Doom", pues avanzar y eliminar será la premisa. Así pues, el mayor atractivo de Advent Rising no serán sus abundantes batallas, (que conformarán una mecánica de juego avanza-y-destruye que puede tornarse repetitiva), sino el amplio abanico de opciones con el que contaremoss para desenvolvernos en ellas. O lo que es lo mismo: las amplia oferta para salir ilesos de un combate (y no la cantidad o intensidad) será el aspecto positivo de su desarrollo.

¿A qué nos referimos con extactitud? En Advent Rising -a pesar de ostentar un desarrollo de shooter en tercera persona-, no será el uso de armas de fuego (si bien este será el vital en las afrentas multitudinarias) su principal elemento distintivo, sino el arsenal de poderes psíquicos de los que dispondremos, cuyo potencial podremos ir ampliando con el uso, otorgándole al título de marras un tinte de RPG similar a "Fable" o "Morrowind", pues será nuestro estilo de juego el que determinará los puntos fuertes y débiles de nuestro protagonista a la hora de plantear una ofensiva. Este plantel de habilidades, que asciende a seis, incluirá algunas como el clásico "Bullet Time", heredado en primera instancia de "The Matrix", y posteriormente aplicado con éxito en contrastados títulos como el soberbio "Max Payne". Además de este movimiento slo-mo, la telekinesis, curación, posesión, confusión y habilidades acrobáticas (que permitirán caminar por las paredes y realizar piruetas y saltos imposibles) completan el elenco de poderes.

Cabe destacar una cualidad con la que contará Advent Rising, una virguería narrativa que perfectamente podríamos haber acompañado junto a su descripción argumental (pues afecta a su historia en gran medida, y en ella, una vez más, queda patente la presencia de William Scott en el título de marras). Tal y como sucede en algunas novelas, llegaremos a determinados momentos del juego que servirán como punto de inflexión en el desarrollo del título, ya que la decisión que tomemos marcará el devenir de la historia, así como las escenas cinemáticas que presenciaremos e incluso el rumbo de su final. Por ejemplo, durante el primer cuarto de hora de partida, llegará un momento en el que nuestra nave será interceptada por Los Buscadores, y nuestro hermano resultará gravemente herido. Entonces, deberemos elegir entre huir con nuestro maltrecho hermano o buscar a nuestra prometida para salvarla a ella, decisión que comenzará a definir nuestro camino.

El ámbito sonoro, sin embargo, gozará de una espectacularidad épica, conformando uno de los mejores apartados musicales de los últimos tiempos en título alguno, tal y como ya reflejó la crítica estadounidense cuando Advent Rising hizo su incursión en los comercios. Hasta 70 piezas orquestales forman la BSO, mientras que los efectos sonoros y voces, compatibles con Dolby Digital 5.1 no deslucen el resultado general del ámbito musical, redondeando un apartado que, dada su calidad, ya ha sido compilado y comercializado en forma de álbum.