Land of the Dead

De sobra son conocidas las pésimas adaptaciones a videojuego desde la gran pantalla. Estos títulos que aprovechan el tirón comercial de la película que los apadrina, suelen tener alguna oportunidad de no caer en la mediocridad cuando no siguen a pies juntillas el guión cinematográfico y no ven la luz al tiempo que lo hace su homónimo cinematográfico. Land of The dead cumple estos dos requisitos, y aún así pasará a ser recordado como uno de los peores títulos de la presente generación.

El videojuego poco tiene que ver con la película que le da nombre. El argumento tiene un protagonista totalmente distinto y sólo comparte con ésta la ambientación y los muertos vivientes que pueblan los escenarios donde transcurre la aventura. De primeras la idea de Land of The Dead resulta bastante atractiva: un shooter con tintes de aventura y survival con el sello de George A. Romero, seguro que los fans de los Survival Horrors están frontándose las manos. No obstante, cuando se enciende la consola y se introduce el DVD en la bandeja, uno se da cuenta que el proyecto no ha caído en las mejores manos.

Gráficos horribles, inteligencia artificial nula, sonido pésimo, jugabilidad exasperante y ambientación poco inspirada son sólo algunos de los muchos defectos que encontramos al juego. Y encima Land of the Dead sale para una consola, Xbox, que no está precisamente falta de buenos shooters.

No entra por los ojos...

Vayamos por partes. Son muchas las cosas que podríamos decir de los gráficos y muy pocas de ellas serían buenas. Su aspecto es demasiado cuadriculado y la carga poligonal es bastante baja. En su aspecto, este juego nos recuerda mucho a un juego de PSX, y eso, hablando de Xbox no es algo precisamente halagüeño. Las texturas por su parte no tienen una gran calidad, y en muchas ocasiones creeremos que es imposible que este compacto esté mancillando nuestra videoconsola, más aún después de haber probado maravillas como Halo 2 o Far Cry Instincts.

Si todo esto no fuera poco, sufriremos defectos como popping, veremos a nuestros enemigos atravesar paredes y suelos y el escenario se creará subitamente a escasos metros de donde nos encontramos. Vamos, que los diseñadores y grafistas de este juego no son precisamente profesionales de primera fila.

Además, y para tirar definitivamente por tierra el trabajo de los chicos de Brainbox Games, el juego no va precisamente a sesenta cuadros por segundo, tampoco a treinta, y muchas veces baja alarmantemente de esta cifra dando tirones y forzando el motor gráfico del juego. Es increíble ver lo que algunos programadores pueden hacer con esta consola viendo el resultado que otros han conseguido con el mismo hardware. Todo esto provoca

Nuestros enemigos serán hordas de zombis. Su aspecto gráfico es sencillamente penoso. En un primer momento creeremos que hay una gran variedad de ellos, pero cuando lleguemos a la tercera fase veremos que ésto es poco más que una ilusión. Muchas veces los muertos vivientes se quedarán quietos esperando que les volemos la cabeza. Sabemos por las películas que la inteligencia de estos seres es más bien baja, pero no hasta ese punto. Cuando acabemos con ellos desaparecerán inmediatamente en el momento en el que giremos nuestra vista.

En definitiva, tanto los escenarios, como los enemigos y la ambientación podríamos calificarlos como poco inspirados, y esto es un eufemismo. Aún así algún efecto gráfico se salva del desastroso apartado gráfico como por ejemplo la deslumbradora luz del sol en algunas de las fases.Todo "este derroche gráfico" va acompañado de unas músicas que lo mejor que podemos decir de ellas es que pasan desapercibidas y unos FX que dan pena. Si pensamos que el sonido es una parte fundamental para aterrorizarnos en un survival horror, podemos imaginarnos que el resultado puede llegar a ser terrible...

La jugabilidad no mejora

Land of the Dead podría ser uno de esos casos donde la jugabilidad hace que todos los demás defectos queden olvidados, pero no es así. El juego es repetitivo hasta la saciedad y muchas veces entraremos en cólera al ver que el mando no responde como nosotros quisiéramos.

Nos quedaremos enganchados en las esquinas, nuestro protagonista no disparará cuando pulsemos el botón hasta unos segundos después en gran parte de las ocasiones y la acción se basará en avanzar por laberintos con un solo camino posible y matar a unos enemigos cuya escasa inteligencia artificial nos lo pondrá muy fácil. En conclusión, exasperante.

Como ya hemos comentado la inteligencia artificial de los enemigos es nula y lo único que tendremos que hacer será retroceder unos pasos cuando les veamos bastante cerca, lo cual no nos supondrá ningún reto. Al menos el juego es suficientemente largo y se ha añadido un modo de juego a través de Xbox Live para aumentar la duración de este título. Lo difícil será encontrara a alguien que esté conectado a la red de Microsoft y que haya caído en el error de comprar este juego.

Land of the Dead tiene pinta de convertirse en uno de los videojuegos más absurdos que han salido para esta generación. Un título que en materia gráfica es digno de la primogénita PlayStation y que en cuanto a su jugabilidad puede llegar a irritarnos extremadamente.

Los escenarios en los que transcurre la acción son horribles y la escasa inteligencia artificial de los enemigos que en muchas ocasiones no nos perseguirán hasta que nosotros no les hayamos volado la tapa de los sesos nos exasperará. Ni siquiera la siempre atrayente temática de zombies puede salvar un juego que hace aguas por todas partes. En definitiva, mucho tiene que mejorar este juego para que no se convierta en un título del que escapar, y viendo que ya ha salido en el mercado americano, lo dudamos mucho. Una pena, ya que la película de Romero puede dar para mucho más.