Un año más, llega el simulador de esquí más realista del mercado, con la licencia de los campeones del mundo y de las principales pistas del mundo. Demuestra que eres el mejor del mundo con Ski Racing...
Esta personalización nos permite seleccionar diversas características del personaje. Empezando por su cara, luego deberemos atribuirle una nacionalidad (en esta ocasión sí que podremos seleccionar nuestro país), la forma física, el temperamento, el grado de habilidad que queremos que tenga, que se reparte entre diversos parámetros, y por supuesto el nombre. No es un sistema de creación complicado, y su simpleza lo hace muy asequible. Algunas elecciones están bloqueadas en un principio.
Ski Racing 2006 (PC, PS2)
Ski Racing 2006 (PC, PS2)
Free Run, por su parte, se subdivide en otras tres nuevas categorías: Training, Replay Chase y Play As a Pro. Poco que decir hay de la primera, que supone elegir una pista cualquiera, con las condiciones que deseemos, y practicar con total libertad y sin ningún tipo de presión. La segunda nos ofrece la posibilidad de correr contra un fantasma guardado de una partida anterior.
Ski Racing 2006 (PC, PS2)
Play as a Pro, por su parte, nos permite jugar con uno de los doce esquiadores que participan oficialmente en esta copa del mundo. Todos ellos traen una completa ficha personal con su andadura en esta competición y las disciplinas en las que participan. Las diferencias técnicas entre ellos son más que evidentes y están muy bien calibradas, aunque el eterno campeón Hermann Maier es el mejor con diferencia.
Ski Racing 2006 (PC, PS2)
Y llegamos al modo estrella, la World Cup. Un modo largo y extenso que nos ofrece un recorrido a través de todas las modalidades del juego y de un gran número de pistas. A pesar de que es posible elegir las modalidades en las que se quiere competir, la gracia del juego radica en disputar todas las competiciones y demostrar nuestra habilidad en todas ellas.
Ski Racing 2006 (PC, PS2)
Este modo resulta muy completo, ya que aparte de mostrársenos a modo de calendario el recorrido por las pistas del mundo, indicándonos la fecha y el lugar, podremos acceder a una clasificación completa de las competiciones. Además, tendremos también retos de los sponsor a través de los cuales se irán desbloqueando nuevos retos y objetos con los cuales podremos modificar el aspecto de nuestro esquiador.
Ski Racing 2006 (PC, PS2)
Las disciplinas que componen el juego son: downhill (con 10 pistas), súper G (6 pistas), slalom (12 pistas) y slalom gigante (9 pistas). La variedad entre las pistas, pese a no ser especialmente significativa desde un punto de vista gráfico, se deja notar en cuanto a curvas, detalles de los fondos y la reproducción de algunas peculiaridades de estas pistas, como la ratonera de Kitzbuehel.
Además, también es posible crear nuestras propias pistas con un editor de eventos bastante interesante, que nos permite montar nuestro propio recorrido en una pista ya existente. De este modo, se alarga la vida del juego casi de forma ilimitada, aunque hay que tener bastante paciencia para conseguir crear un buen recorrido, probando una y otra vez a ver cómo nos está quedando.
Ski Racing 2006 (PC, PS2)
Ski Racing 2006 (PC, PS2)
Ski Racing 2006 (PC, PS2)
Ski Racing 2006 (PC, PS2)
Además, responden perfectamente a los mandos de control, por lo que una vez que hemos llegado a dominar un poco el juego, el personaje recorrerá las pistas con la fluidez que le queramos introducir, dando la impresión de estar ante cualquier campeón del mundo dando su habitual recital. La vida del título es tan larga como se la quiera hacer, ya que los aficionados a este deporte seguirán intentando mejorar sus tiempos una y otra vez.
Ski Racing 2006 (PC, PS2)
En el apartado sonoro, poco que comentar, escasas melodías, pero que resultan relajantes y acordes con el tema invernal del juego, y unos efectos de sonido del público en las pistas que a veces puede llegar a cansar, pero que está bien trabajado.
7
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.