A todo gas...

Tras muchas polémicas, incluidas las suscitadas en nuestros foros y que han traído de cabeza a algunos moderadores, llega al mercado Asphalt 2, secuela del popular arcade de carreras de Gameloft, probablemente los mejores exponentes desarrollando software para N-Gage.

Con un buen puñado de novedades de serie, en MeriStation hemos hecho un seguimiento especial a este arcade de conducción. Si quieres saber más sobre el juego te instamos a leer el avance  y las primeras impresiones que publicamos en su día.

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g r á f i c o s

En ocasiones es obvio que las limitaciones de una máquina comienzan a aparecer, si bien no es tan fácil discernir si el problema reside en el hardware o en un software mal optimizado. El caso es que N-Gage nos ha ofrecido espectáculos visuales del calibre de ONE, pero sin embargo en los títulos de carreras, donde la carga poligonal es masiva y continua en tiempo real, la máquina comienza a resentirse.

En el caso de Asphalt 2 hay algunos fallos gráficos que ahondan en el problema y dejan vislumbrar las limitaciones que tarde o temprano tienen que aparecer en cualquier dispositivo de ocio electrónico. En el caso de esta segunda entrega del arcade de Gameloft, el remozado engine gráfico intenta exprimir al máximo las capacidades de N-Gage con un resultado muchas veces funesto.

Obviamente, a nivel gráfico esta segunda entrega supera a su precuela con creces. Mayor carga poligonal en los coches, mejor sensación de velocidad , efectos de luces notables y una tasa de frames constante y sin caídas. Sin embargo se han sacrificado varios aspectos. El primero el tráfico, menor de lo que debiera en un título de conducción. Segundo, los escenarios, menos detallados y con un clipping notorio. Y tercero, consecuencia del punto dos, una distancia de horizonte mínima que hace que seguir algunos trazados sea una tarea ciega.

Esto obliga a patearse los circuitos más veces de las necesarias para conocer al dedillo el trazado y aprovechar las oportunidades que nos presta para usar el nuevo triple turbo, aunque en algunos momentos no seamos capaces de vislumbrar hacia donde va la curva que tenemos delante. Además, se nota que nuestra portátil sufre para mover todo lo que hay en pantalla y aunque no son ralentizaciones, como en algunos otros casos, parece que la pantalla tiembla, como si no cupiera todo en ella. Además del 'tembleque' que han añadido los programadores cuando usamos los turbos, no muy agradable por cierto.

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A pesar de estos fallos, Asphalt 2 es uno de los mejores títulos a nivel visual de N-Gage. Hay que resaltar la sensación de velocidad en todas las vistas disponibles, las excelentes repeticiones o las mejoras en el modelado de los vehículos. No obstante, está lejos de la perfección deseada y nos queda esa duda razonable de qué es lo que falla, si el hardware o el software.

m ú s i c a   y   s o n i d o   F X

Aunque en un principio se dijo que sería el príncipe neoyorquino de la electrónica quien pusiera la nota en la banda sonora del juego, al final no será Moby quien nos deleite con sus temas. En su lugar, la música también es electrónica pero de un corte más industrial, más duro, girando hacia el techno y el drum'n bass. Los amantes de estos géneros disfrutarán de ella. En cuanto a los efectos sonoros, nada destacable en especial, solamente un ruido de motor demasiado elevado y que agradeceremos bajar su nivel en el menú de opciones para no acabar con los tímpanos destrozados.

j u g a b i l i d a d

Asphalt 2 ha crecido mucho respecto a su antecesor en el tiempo, ese que posteriormente pasó a ser versionado para la última portátil de Nintendo. Este nuevo título de Gameloft pasar por incluir más opciones que el anterior, muchos más circuitos (uno de los principales defectos de la primera parte), nuevos y entretenidos modos de juego y, por supuesto, un buen puñado de licencias de vehículos reales, incluyendo por primera vez motocicletas.

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El resultado es que, a nivel jugable, es bastante superior al anterior, sobre todo por la vida que le dan las modalidades arcade. Los modos persecución y eliminación son de lo mejor de la tarjeta; en el primero de ellos debemos bien interpretar el papel de policía que persigue a los malos y que debe sacarlos a empellones del trazado (al estilo Burnout) o bien el papel de delincuente que debe resistir las acometidas de los agentes del orden. En cuanto al modo Eliminación, conseguimos puntos según el número de vehículos rivales que conseguimos retirar de la pista.

Otra de las mejoras incluidas es el completo garaje, donde podemos modificar a nuestro antojo los vehículos adquiridos y en el que pasaremos unos buenos ratos dejando niquelados nuestros carros. Podemos añadir turbos, cambiar transmisiones, suspensiones, neumáticos, modificar frenos y tubos de escape, añadir turbos, quitar peso o añadir kits deportivos, incluirles llantas y neones... Además, el número de vehículos se ha visto incrementado sustancialmente incluyendo marcas de renombre como son Aston Martin, Cadillac, Chevrolet, Confederate, Dodge, Ducati, Ecosse, Hummer, Husrvarna, Infiniti, Kawasaki, Lamborghini, Mercedes, Mini, Mitsubishi, Nissan, Pontiac, Saleen, Shelby, Subaru, Triumph, TVR y Volkswagen. Lo mejor de todo es que además de deportivos podremos conducir motocicletas, todo terrenos, vehículos policiales, sedanes, roadsters...

En la pista

Uno de los principales problemas del primer Asphalt era el escaso número de circuitos disponibles. Para esta ocasión se ha aumentado el número de ciudades y de pruebas del modo carrera, denominado Evolution. Podremos visitar lugares del mundo al más puro estilo City Travel, como San Francisco, Paris, Los Angeles, Tokyo, Río de Janeiro, New York, Miami, Cuba, Londres, un aeropuerto de Colombia, Las Vegas, la zona muerta de Ucrania, Hong Kong, Bagdad y el hogar de George W. Bush, Texas.

Cuando comencemos a correr notaremos las nuevas aportaciones de Asphalt 2: podemos encadenar tres nitros seguidos para alcanzar un bestial pico de potencia con el que hacer volar a nuestros rivales; también la presencia policial, quienes detectarán nuestras fechorías o bien nuestras velocidades en el radar y tratarán de darnos captura, con el descenso de puntuación y la pérdida de tiempo que ello implica. Ahora en la carretera encontramos más potenciadores (nitros) y multitud de símbolos del dólar con los que podremos adquirir mejoras en el garaje o comprar nuevos vehículos.

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Pero el cambio fundamental reside en la inclusión de algunas de las opciones jugables que Burnout ha dado a los arcades de velocidad. Tendremos que echar a rivales de la pista y el juego lo valorará positivamente; además de competir en velocidad tendremos que ser hábiles para sacar a los rivales de la pista y que no hagan lo propio con nosotros, a la vez que tendremos que evitar el acoso policial. Sin embargo, la pesadez gráfica hace que Asphalt 2 no sea tan jugable como debiera, básicamente porque el engine sufre de lo lindo y el efecto de vibración de la pantalla juega en su contra, sino también porque muchas veces es difícil ver donde están los rivales, hacia donde van las curvas o incluso maniobrar. Tal vez con mayor potencia, una mejor optimización o con un pad analógico se hubieran solucionado tales dislates, pero esto es lo que hay y, ciertamente, tampoco está tan mal.

Para acabar comentar que a través del portal N-Gage Arena podemos competir en las carreras fantasma, a la vez que podemos acceder a un ranking mundial y al foro del juego para conversar con otros aficionados. Y si hablamos de redes locales, la conexión bluetooth nos permite, en esta ocasión y para fortuna de los que tengan amigos con quien competir, que hasta cuatro personas pueden jugar de forma individual o por equipos contra el resto. Un gran acierto en éste y en todos los títulos de la portátil finlandesa.

c o n c l u s i o n e s

Asphalt 2 es un juego largo, entretenido, con un gran número de modalidades de juego, buenos gráficos y que, ciertamente, supera con creces a su antecesor en la 'saga'. Dista de ser el juego perfecto y a nivel jugable tiene algunos fallos que impiden disfrutar al máximo de la velocidad que se ha intentado implementar. A pesar de ello, es uno de los mejores, si no el mejor, arcade de carreras de N-Gage. Una máquina portátil que, dicho sea de paso, tal vez no sea la mejor para enseñar las virtudes de los juegos de velocidad.

l o   m e j o r

l o   p e o r