Adéntrate en el lado oscuro

Sin embargo, Gale of Darkness es el primer juego de Pokémon para estas plataformas que puede considerarse de un estilo similar a los aparecidos en Game Boy. No obstante, aunque el desarrollo es bastante similar, algunos elementos han sido modificados no haciendo este título idéntico a las versiones para portátil.

Tras ello, parecía que la paz había vuelto a la región de Orre. Pero un extraño suceso ha turbado la tranquilidad de este lugar. Al parecer un enorme Lugia aparecido de la nada ha robado un enorme buque y se lo ha llevado levitando. Nadie sabe qué explicación puede tener este hecho.

Nosotros encarnamos el papel de un joven entrenador que posee un Eevee y vive en un laboratorio junto a su madre y su hermana pequeña. Allí están investigando una manera de purificar a los Pokémon Oscuros para volverlos a la normalidad de manera que pueda hacerse con varios a la vez.

Pronto nos vemos obligados a ponernos manos a la obra pues una banda de maleantes ataca el complejo para secuestra al director del mismo. Debemos intentar atajar sus perversas intenciones y averiguar qué pretenden hacer.

Con una atrayente historia, lo más importante en este juego es el guión que posee, pues en esta ocasión nuestro objetivo no es convertirnos en un maestro y lograr vencer en ninguna liga, sino seguir los acontecimientos que van ocurriendo y desentrañar los misterios que se esconden en esta nueva tentativa de apoderarse del mundo.

La misma está contada de una forma un tanto cómica pese a lo intrigante que resulta y se presenta de una manera muy agradable, con un buen número de cinemáticas realizadas con el motor del juego.

Las texturas tienen muy buena calidad y definición sobretodo en los escenarios, siendo algo más planas en los personajes. La iluminación es muy adecuada y los modelados están suficientemente conseguidos para el propósito de este juego, pese a que tampoco es muy grande el número de polígonos presentes en pantalla.

El estilo puede recordar a algunos tebeos manga con un diseño de las personas muy cómico y exagerado tanto en su forma como en sus animaciones resultando muy divertido.

Los combates se muestran de forma similar a como ya lo hacían en Stadium o Colosseum, poniendo a los Pokémon frente a frente lanzándose los distintos ataques. Aquí es donde el despliegue técnico es mayor y más elaborado con multitud de efectos de luces y similares, aunque a la larga tienden a hacerse repetitivos, lo cual ya ocurre en las versiones para portátil.

Mientras que durante las batallas se hace un buen uso de las cámaras para representar la acción aunque de forma automática, en la vista normal únicamente disponemos de una situada en posición isométrica que no podemos girar ni cambiar de altura, lo cual impide que en ocasiones podamos ver con facilidad algunos objetos o caminos.

En general el acabado gráfico del juego es satisfactorio y es un buen acercamiento de la saga por fin a las tres dimensiones proporcionando unos tiempos de carga muy bajos en general.

No exiten voces para los diálogos que son todos leídos y las de las criaturas son prácticamente idénticas a las ya escuchadas en las versiones de Game Boy Advance. Pese a que podría entenderse como un homenaje, se ha desaprovechado una gran ocasión para cambiarlas por las que están presentes en la serie de televisión. ¿Quién no prefiere oír al lanzar un impactrueno en lugar de un chirrido algo como "Pika Pikachuuuuu"?

Los efectos durante los combates, al igual que en el apartado gráfico, tienden a hacerse repetitivos y en ocasiones interrumpen la música de fondo, como cuando se aprende un nuevo ataque.

Si vas a afrontar tu primera aventura Pokémon no debes preocuparte, un simulador situado en el laboratorio con distintas misiones hace las veces de tutorial para que puedas aprender poco a poco. Nos pone ante situaciones distintas para que veamos cómo resolverlas en cada caso y así incrementar nuestra habilidad como entrenadores.

Como ya hemos comentado, Pokémon XD es el primer título de esta saga comparable a las distintas versiones de Game Boy, pero que a su vez introduce una serie de cambios en el sistema de juego. A primera vista, las modificaciones más evidentes son la posibilidad de viajar de un lugar a otro y la casi total ausencia de Pokémon salvajes.

Todos los que hemos probado alguna entrega de esta serie hemos tenido que viajar de un pueblo a otro a través de prados, cuevas, mar e incluso buceando. En esta ocasión se ha eliminado esta situación pues ahora el marchar de una población a otra se hace de forma automática accediendo a un mapa al salir de cada localización. Una pequeña animación muestra a nuestro protagonista viajando en moto y eso es todo lo que podemos conocer del paisaje de Orre.

Eliminando esta opción, queda claramente reducida la posibilidad de encontrar Pokémon salvajes. Y de hecho, esta región resultan tan inhóspita que sólo pueden ser hallados en puntos muy concretos. En estos lugares podemos situar algo de cebo para atraerlos y tratar de capturarlos cuando aparezcan. Dependiendo de en cuál nos encontremos aparecen criaturas de un tipo o de otro.

Otro elemento a tener en cuenta ahora es que ya no tenemos libre acceso a todos los sitios. En cualquier otra versión siempre podíamos acceder a cualquier ciudad o aldea siguiendo las rutas prefijadas y la única limitación podía ser el necesitar una Máquina Oculta para abrirnos paso. Pero en todo momento conocíamos el mapa al completo y qué caminos podíamos seguir. En Gale of Darkness, sólo a medida que vamos avanzando en el juego, vamos desbloqueando localizaciones.

A grandes rasgos éstas serían las principales diferencias, unidas al hecho de la ausencia de una liga, que podemos encontrar entre este título y las versiones para portátil. Aunque no son las únicas, el resto son meros matices que no resultan fundamentales pues no se altera apenas la experiencia original, mientras que muchas otras características se mantienen intactas, como los Centros Pokémon o las tiendas.

En cualquier Pokémon para portátil, al cruzarnos ante los ojos de una persona ésta nos retaba directamente, pero ello sólo sucedía en las distintas rutas, mientras que en las poblaciones generalmente podíamos sentirnos seguros salvo casos excepcionales. Ahora únicamente visitamos ciudades, por lo que para poder mantener este sistema de enfrentamientos las batallas han de producirse en ellas.

En la mayoría de ocasiones somos invitados a pelear o podemos preguntar nosotros, dándonos la opción de decidir si aceptar o no. En el resto los combates se inician automáticamente, bien al cruzarnos con nuestro oponente al modo clásico, o bien apareciendo de la nada cuando nos hallamos en una base enemiga.

Casi todos los combates son dos contra dos excepto en contadas ocasiones o cuando intentamos capturar un Pokémon salvaje, aunque únicamente contra un mismo entrenador, y no contra dos a la vez, característica recienmente añadida a Esmeralda.

Al escasear los entrenadores disponibles, un alto porcentaje nos permite luchar contra ellos infinitas veces para así poder seguir subiendo nuestra experiencia. Además, hay varias competiciones a las que podemos acceder a modo de minitorneos, también parecidas a las de la última edición para Advance.

La interfaz del juego es muy sencilla y toma ventaja del mayor número de botones que posee el mando de Game Cube, resultando muy familiar para cualquiera que ya haya disfrutado de algún juego de Pokémon.

Tenemos a nuestra disposición un nuevo dispositivo que puede ser considerado una evolución del Pokénav aparecido en Rubí y Zafiro llamado P*DA, Pokémon Digital Assitant. Con él tenemos acceso a varias funciones muy útiles. En primer lugar hace las veces de Pokédex pues guarda los datos de las criaturas a las que nos hemos enfrentado e incluso confrontarlos contra otros Pokémon.

También permite recibir correos electrónicos y nos avisa cuando un Pokémon salvaje ha picado en nuestro cebo. Cuanta más cantidad de cebo ponemos más tiempo permanece allí para darnos tiempo a llegar independientemente de donde nos encontremos.

El menú de nuestros Pokémon es mucho más completo incluyendo mucha más información que puede ser de gran ayuda como por ejemplo contra qué tipo es más fuerte un ataque de los que ya conocen. Una potente herramienta para todo buen entrenador que se precie de serlo.

En una batalla es fácil identificar cuándo nos enfrentamos a un Pokémon Oscuro pues automáticamente se activa un escáner que nos lo indica de un modo visual envuelto en un aura púrpura. Nuestro objetivo no es vencerlos sino tratar de rescatarlos de las garras de esta organización maléfica.

Muchos de los que hemos jugado a alguna de las entregas de Game Boy probablemente alguna vez hemos intentado, aunque fuera sólo por curiosidad, capturar un Pokémon de algún entrenador, y el juego nos lo ha impedido. En Pokémon XD por fin podemos hacer realidad nuestros perversos y ocultos deseos de robar a otras personas.

Junto al escáner nos es entregado un dispositivo que puede atrapar Pokémon Oscuros de nuestros enemigos. El modo es muy similar a cuando intentamos hacernos con uno salvaje, pues hay que debilitarlo, muchas veces también cambiarle el estado paralizándolo, durmiéndolo, envenándolo, etc., y a continuación lanzarle una Pokéball.

Si tenemos éxito pasa a ser de nuestra propiedad uniéndose a nuestro equipo o siendo enviado al PC si no tenemos espacio suficiente. Pero rápidamente notamos que sus características no son las usuales.

El tipo original que tuviera no es tenido en cuenta mientras se halla en ese estado y su naturaleza permanece desconocida. Al principio únicamente conoce dos ataques de clase oscura, generalmente uno ofensivo y otro que reduce alguna habilidad, que son muy efectivos contra el resto de Pokémon.

En lugar de la experiencia acumulada aparece una barra similar en la que podemos apreciar cuánto hemos avanzado para poder abrir de nuevo el corazón del Pokémon. Mientras lo mantenemos con nosotros y no guardado en el ordenador el indicador va bajando poco a poco. Otras acciones como enviarlo a combatir o darle masajes ayudan a que caiga más rápidamente. Y cuando por fin llega a cero somos avisados por nuestra P*DA.

Pero no todo acaba ahí, es el momento de limpiar su alma. Al principio únicamente podemos realizar esta acción en un santuario de una pequeña aldea de la montaña, pero según avanzamos en la historia las investigaciones del laboratorio llegan a buen puerto creando la Cámara Purificadora.

En esta sala virtual podemos situar hasta nueve Pokémon simultáneamente para devolverlos a la normalidad. Por suerte esta máquina puede ser accedida desde los PCs para poder realizar esta labor desde cualquier lugar.

Es posible introducir en ella Pokémon cuyos corazones aún no se hayan abierto del todo y así no tener que llevarlos con nosotros. Su funcionamiento es algo complejo empleando también nuestras criaturas sanas y tiene en cuenta bastantes variables para determinar, entre otras cosas, cuánto tiempo tarda cada proceso, por lo que tendremos que probar varias configuraciones según el tipo que introduzcamos.

Los Pokémon Oscuros incrementan su experiencia y van aprendiendo nuevos ataques sin que nosotros podamos controlarlos. Una vez se ha terminado su purificación podemos conocer cuántos puntos han acumulado subiendo los niveles que sea necesario y olvidan su habilidades oscuras para hacer hueco a otras nuevas.

Estos seres pueden sufrir el llamado modo inverso, que genera distintos males para ellas. A cada turno durante una batalla se golpean ligeramente a sí mismas aunque pueden seguir atacando y no las puede curar con objetos como antídotos o pociones. Esta afección no puede ser eliminada en los Centros Pokémon pese a que en ellos sí restuaran su salud.

Al prácticamente eliminar la presencia de criaturas salvajes también se ha retirado la función de escapar del menú de batalla. En su lugar se ha situado un botón de llamada que permite devolver el sentido a los Pokémon Oscuros que se hallan en modo inverso y de este modo curarlos. Además tiene otras utilidades secundarias como despertar a un Pokémon dormido o aumentarle la precisión.

La única manera de poder jugar con dos mandos de Game Cube es accediendo al modo Batalla Rápida en el que no podemos escoger los Pokémon que queremos utilizar siendo estos elegidos aleatoriamente. También se puede jugar contra la CPU.

En esta opción el control cambia de forma drástica sin razón aparente realizándose de un modo nada intuitivo y muy alejado del tradicional, mediante el uso de la palanca analógica C y la cruceta y sin emplear ningún botón más.

Si queremos tener más opciones de configuración existe la batalla en grupo, pero por desgracia para ello sólo podemos usar un mando de Game Cube necesitando cada jugador adicional, hasta cuatro, una Game Boy Advance/SP y alguna de las entregas de Pokémon para esta consola.

También es posible intercambiar Pokémon entre las distintas versiones salvo que estos sean aún Oscuros. Esta conexión no se puede realizar con Nintendo DS ni, al menos por el momento, con Game Boy Micro, aunque es posible que en un futuro aparezca un cable compatible.

De todos modos es posible que los más aficionados aún no queden saciados del todo de un primer Pokémon tridimensional, ya que habría sido genial poder recorrer paisajes abiertos con la tecnología de Game Cube. Habrá que esperar por tanto a ver qué nos aportan las próximas entregas de Nintendo DS.

La interfaz está muy bien diseñada y resulta muy cómoda y los datos que tenemos al alcance en todo momento resultan muy útiles. En este sentido se ha mejorado la experiencia de los títulos para Game Boy haciéndola mucho más completa.

El modo multijugador por desgracia se ha quedado escaso, ya que si no tenemos al menos una Advance junto a algún juego compatible con esta consola y los cables necesarios apenas tenemos opciones para elegir.

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