Guerra fría. Casi tanto como el juego...

Observa Cold War en movimiento en este vídeo.

Y la saturación viene por títulos que no llegan a un nivel más o menos notable. Títulos que hemos visto tanto en consolas como en compatibles, y salvando casos de gran calidad como la saga de nuestro calvo favorito "Hitman", no hay otros productos que le hagan sombra a Snake y a Sam Fisher. En esto estamos cuando Dreamcatcher nos presenta "Cold War", un nuevo juego de aventuras y sigilo para PC y XBOX. En principio no había nada que nos llamara la atención, pero ser obra de los creadores del estupendo arcade "Painkiller" ya nos decía algo más, y además a favor.

La historia nos pone en la piel de Matthew Carter, periodista freelance que realiza un viaje a Moscú para investigar una historia que le podría dar el Pulitzer en la que se mezcla la presidencia estadounidense y el KGB, pero de repente es culpado de intento de asesinato, privado de todas sus pertenencias e introducido en una cárcel de la KGB, donde le esperan los peores momentos de su vida. Sin embargo, Matthew hará gala de todas sus dotes de infiltración y sigilo -como todo buen periodista (?)- para escapar y destapar el entramado político que se había encontrado. Una historia de traición, envidias, espionaje y secretos que tiene como fondo una historia real -el caso de Chernobyl, que también utilizará el título STALKER- llena de dramatismo y sin final feliz.

Si a algún título le saca parecido, éste es a Splinter Cell. Tanto en mecánica, como en cámaras utilizadas o en movimientos -aunque en menor medida ya que Matt Carter sólo puede hacer movimientos de correr y agacharse, los demás son movimientos contextuales-. Sin embargo, Cold War es un tanto 'artificial' en las situaciones, ya que no es muy lógico que un periodista se dedique a dejar fuera de servicio a los guardias o a invadir un lugar oficial así como así. No es un agente de la NSA, pero por sus dotes lo parece. No hay algo raro?

Desde luego, la fama de estos personajes antes nombrados de los juegos de UbiSoft o Konami es demasiado grande para Carter, que aunque pretenda ser el inicio de una saga le falta mucho para llegar al nivel de mitificación que tienen Fisher y principalmente Snake. Quizás esta pueda ser la base para un siguiente 'Cold War 2' que sí aproveche en profundidad todo lo que puede dar de sí, pero el juego que nos ocupa pincha, y bien. Queréis saber en qué? Adelante...

Como decíamos, el diseño de los menús es bastante soso, plano y sin ningún punto que le confiera personalidad. Las opciones tanto jugables como de visualización son las típicas. Nada que resaltar, pero tampoco con ausencias notables. Las cinemáticas en su mayoría se apoyan en escenas generadas con cel shaded, al más puro estilo "XIII". Están bien diseñadas, pero se echa en falta más calidad en su planificación y reproducción.

En cuanto al motor grafico en sí, nos encontramos con un engine suave y fluido, pero que tampoco destaca en ningún apartado en concreto, ya que tanto el diseño de niveles, como el texturizado o modelado no le obligan a esforzarse. Los personajes no desentonan, ya que sus proporciones son buenas, pero en movimiento es donde se nota que le falta trabajo. Resaltar que se ha abusado hasta el límite del "blur" en todas y cada una de las fases. Este efecto, utilizado de forma sabia puede dar una espectacularidad única, pero si se abusa de él acaba cansando de forma clara.

Las animaciones de los personajes son rígidas y robóticas en general, pero será en la transición entre ellas donde se verán más sus defectos. La forma de correr de Carter deja un poco que desear, no se nota tensión en su forma de moverse como debería ser al encontrarse casi el 100% del juego encubierto y en las sombras. Los NPC tampoco están mucho mejor, es más, su acabado es inferior al del protagonista, se mueven todos iguales y tienen un texturizado similar por zonas, incluso facial.

Los efectos de luces y sombras no desentonan en ningún momento, ayudando perfectamente a ambientar cada escenario de forma más que buena. Falla la proyección de sombras en general, pero los objetos de los entornos están bastante cuidados. El texturizado es bastante bueno en general, pero algunas texturas son muy borrosas y desequilibran el buen nivel general del juego.

La gestión de partículas se lleva la palma en este juego, mostrando unos efectos atmosféricos, polvo y fuego de buen nivel. En este sentido destacar la calidad alcanzada con el visor de rayos X, mostrándonos los entornos y los personajes de forma efectista, además de unos esqueletos muy bien realizados que se verán al utilizar ese ítem. Los efectos de disparos y elementos interactivos tampoco desmerecen del resto, pero estamos hablando de algo que ya hemos visto mejor en otros juegos, con lo cual no encontramos mucho que despunte en este juego con respecto a los demás.

Los ítems y armas del juego no tienen un mal acabado, y su reproducción de fuego está bastante bien conseguida. Encontraremos mucha variedad de elementos y objetos que nos pueden hacer falta para fabricar otros ítems, aunque las animaciones al recogerlos dejan algo que desear. Sin embargo, lo que no acaba de cuajar es el diseño de los personajes. Tanto Matt como los demás protagonistas del juego no despiertan interés. Su diseño es neutro, lo cual para un juego basado en una historia donde se le da importancia a los protagonistas es malo.

En resumen, un buen apartado gráfico que acaba cansando por el efecto 'blur' tan acusado que se aprecia continuamente. Los modelados de los personajes no son malos, y los escenarios son variados y tienen un nivel de diseño decente, aunque el texturizado deja algo que desear en algunas fases y las animaciones podían estar bastante mejor.

M ú s i c a  .-
Sinceramente, el tema principal del título no está mal, pero algunas pistas desentonan, porque no dan la sensación de encontrarnos ante un título del género de aventuras. Parece que nos encontramos ante la banda sonora de un título de plataformas, sin carga "seria" y sin tensión que sí logran transmitir otros temas. Esperábamos una banda sonora orquestal con mucha intensidad, como corresponde al género, pero el resultado dista bastante de eso. No transmite la tensión propia de la aventura.

S o n i d o    F X  .-
Los FX de sonido no desentonan, y la verdad es que la ambientación sonora no desmerece, pero se echa en falta más variedad de detalles y de sonidos. Por ejemplo, le juego es "mudo" a la hora de asestarle un golpe a los enemigos por la espalda -es decir, ni se oye el golpe, ni se queja el enemigo, ni se oye cuando cae su cuerpo-, los sonidos de las armas no están mal, pero se echa en falta más detalle en los samplers que le confiera realismo. Las voces están en inglés, aunque su interpretación es bastante decente. Pasable.

J u g a b i l i d a d  .-
Cold War quiere hacerle frente a Splinter Cell, Hitman o Metal Gear. Sin embargo, se queda en "quiero y no puedo". Tanto los personajes como la historia, niveles, IA, posibilidades de acción e ítems se quedan por debajo de los títulos expuestos. Quedamos con la sensación de haber jugado a este juego hace tiempo, sobre todo por la saturacion de "clichés" típicos del género. Un jugón empedernido reconocerá situaciones de otros juegos. Eso pasa en muchos, pero la sobreexposición que encontramos aquí es demasiado abultada.

Matthew Carter se mueve de forma parecida a Sam Fisher, incluso el movimiento agachado es casi idéntico. Los ítems a utilizar, como las armas, nos ayudarán a superar los niveles si los utilizamos bien. Sin embargo, en Cold War falla sobre todo el diseño de niveles, muy llano, sin posibilidades que se salgan de lo lógico o de lo que se nos ocurra a primera vista. La jugabilidad está limitada por la linealidad de los escenarios, algo que juega en su contra. No estamos hablando de que sea un mal juego, porque no lo es, pero la facilidad de superar la mayoría de los entornos es demasiado obvia.

La IA de los enemigos tampoco está muy optimizada, y la mayoría se mueven de forma robótica, siguen su ruta al dedillo y en tiempos exactamente iguales. Sólo algo muy llamativo hará que se salgan de su posición. La acción de chasquear los dedos es la respuesta al homónimo de Sam Fisher o de Snake, pero su utilización resulta muy limitada por que, sencillamente, no hace falta. Destacar que puede llegar a ser frustrante porque los momentos en que nos descubren serán muy rápidos, y con uno o dos disparos pueden mandarnos a freir viento. Para ello se ha incluído un guardado rápido, pero repetir una zona varias veces por el simple hecho de que no hay fluidez y facilidad para el jugón en los momentos de acción, ya sea para disparar o para esconderse, puede ser frustrante.

La cámara de fotos es el único elemento -junto al visor de rayos X acoplada a ella- que puede darle algo de "alegría" al juego, aunque este elemento ya lo hemos visto en otros juegos como "Beyond Good and Evil" o el propio "Metal Gear Solid 2". Su utilización es estrictamente puntual, y la posibilidad de tener libertad para utilizarla con extras, objetos y demás es el punto fuerte de este ítem, aunque en realidad este ítem tan práctico para localizar a los enemigos se hace menos imprescindible a medida que avanza la aventura, y lo utilizaremos unicamente como localizador.

A lo largo de las fases encontramos también mini-juegos esporádicos, pero el peso de la jugabilidad la lleva el sigilo. Tendremos como en Splinter Cell un indicador de luminosidad, para saber cuándo estamos en la más absoluta oscuridad o cuándo en una zona donde seamos visibles. Para estes casos, el visor de rayos X incluído en la cámara es de mucha utilidad, porque hay zonas con bastantes enemigos -más en la versión PC que en la de XBOX, aunque sin mucha diferencia-.

Aparte del modo de juego principal, también tendremos otros basados en las mismas fases de la trama, en los que tendremos que completar los niveles en un tiempo determinado, otro en el que no pueden detectarnos, y otro en el que no podemos matar a ningún enemigo. La verdad, estos minijuegos pueden ser algo interesantes a corto plazo, pero repetir el mismo nivel con los mismos enemigos una y otra vez no es algo que haréis de buena gana.

Un punto que utilizan mucho estos juegos es el basado en la mecánica de utilización de ítems para superar pruebas y eliminar a los enemigos. En Cold War tendremos que aprender técnicas de utilización de ítems para mezclaros y conseguir elementos utilizables. Por ejemplo, balas de plástico para dormir a los enemigos, cloroformo, tirachinas,... algunos elementos son poco "serios" (¿un tirachinas???), pero la necesidad de aprender las técnicas para montarlos nos obligará a explorar los escenarios de forma exhaustiva. Las carpetas donde están los puntos de técnica están repartidos por los escenarios, y esos puntos se irán gastando según vayamos utilizándolos. Con lo cual será necesario decidir en qué gastar esos puntos de forma coherente y con respecto al uso que le podamos dar en ese escenario en particular.

Sin embargo, y aunque afecta a la jugabilidad, casi lo mejor del juego es el interés que puede despertar la historia, que se nos va desgranando entre fase y fase. Los diferentes escenarios del juego (el Kremlin, una prisión de la KGB,...) también ayudan y son variados (interiores opresivos y exteriores amplios), pero todo el juego destila la sensación de que le falta 'algo', y ese algo es la existencia de novedades reseñables. No es un mal juego, de hecho los fans del género hasta lo encontrarán curioso, pero su calidad global no llega a alcanzar el nivel de los grandes por la falta de interés que despierta su jugabilidad, que no su historia.

C o n c l u s i ó n  .-
Cold War es un buen intento de dar aire nuevo al género, pero se queda en lo mismo de siempre. Coge características de otros juegos -sobre todo de Splinter Cell-, lo adereza con una historia nueva y que a priori resulta atractiva, un apartado gráfico decente, algún minijuego y listo. Sin embargo, los usuarios tendrán la sensación de algo "ya visto"; no presenta nada realmente nuevo, y se queda a distancia de otros títulos como el de Sam Fisher, Hitman o Metal Gear. La IA tampoco está muy trabajada, el diseño de niveles es bastante simple y la jugabilidad está muy exprimida a estas alturas sin presentar nada nuevo. Curioso, pero prescindible.

L o   m e j o r  .-
- La historia
- El visor de rayos X
- Algún momento bastante emocionante
- La mecánica de puntos para aprender a mezclar ítems
- El apartado gráfico está bastante apañado

L o   p e o r  .-
- La sensación de jugar a algo "ya visto"
- Protagonistas sin personalidad
- Diseño de niveles bastante plano
- IA mejorable
- Abuso del efecto blur durante el juego. Cansa mucho