Maestro de la fibra de vidrio

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Rockstar son los padrinos de lo que hoy en día podemos llamar juegos de "ciudad abierta". Era el sueño de muchos viejos jugones, conducir por una ciudad libremente, disputando carreras allí donde los rivales aparecían. Midnight Club Street Racing nació de esa idea y proclamó lo que se podría llegar a conseguir con trabajo duro. Pasó el tiempo, y volvieron a contraatacar con Midnight Club 2, un juego mucho más completo, más rápido, con más opciones y con modo online. Pero con algunas deficiencias técnicas que ensombrecían sus buenas intenciones. Sin embargo, se daba una vuelta a la saga con más fuerza y como no podría ser de otra forma se unía al mundo del tuning para conseguir la evolución de las carreras ilegales nocturnas. Midnight Club 3, en adelante MC 3, viene de la mano de DUB, la prestigiosa revista de tuning. Hay 2 comunidades de corredores que son los que se compran un coche y luego dedican dinero y esfuerzo en modificarlo a su gusto, y los que prefieren invertir todo su dinero en un coche que de por si ya sea de prestaciones elevadas. DUB no se casa con ninguna de las dos opciones, más bien proclama que por muy bueno que sea un coche, siempre se puede mejorar. Y eso pareció gustarle a los chicos de Rockstar porque no solo han conseguido la licencia de 60 vehículos entre coche y motos y bastantes marcas reconocidas de fabricantes de piezas, sino que llevan el logo de DUB y se permiten el lujo de tunear desde una chooper hasta un Saleen S7. Con su rival más directo fijado en el conocido título de EA, Need For Speed: Underground 2, MC 3 consta de más opciones de modificación técnicas aunque es un poco más pobre en las modificaciones visuales. No llegamos a tener el rico sistema de vinilos por capas ni la decoración de maleteros, pero podemos crear pegatinas a medida y crear nuestra propia placa de matrícula. Sin embargo, tanto el número como los tipos de vehículos, MC 3 se lleva el gato al agua, y es que ningún juego antes se a atrevido a tunear tanto un Chevy Impala del 64 como una Aprilia. GráficosPosiblemente el apartado más flojo de MC 3 pueden ser sus gráficos. A simple vista y comparando con otros juegos de carreras andan un poco escasos de calidad. Pero si nos ponemos a observar todo el conjunto vemos que realmente sacan partido al potencial de la consola. Las ciudades son bastante amplias y están rellenas de un sinfín de detalles. Existen gran cantidad de atajos que no figuran en el mapa, se pueden atravesar edificios, barcos, saltar por encima de autopistas o correr sobre las azoteas. Y todo ello con una gran diversidad de texturas que hacen que no existan 2 calles iguales en todo el mapa. Las ciudades además están repletas de tráfico, mucho más que en NFS:U2, y elementos que se pueden romper y destrozar, con sus consecuentes efectos de luces y chispas. Incluso podemos encontrarnos desprevenidos transeúntes que huirán rápidamente al ver nuestra temeraria forma de conducir (tranquilos que no conseguiréis atropellar nunca a nadie). Destacar los efectos climatológicos de lluvia y niebla, así como diferentes iluminaciones según la hora del día, como ocurren en su compañero de estudio GTA: Vice City. Los vehículos están bien detallados y teniendo en cuenta la cantidad de opciones de personalización que tienen, el acabado es bastante destacable. Los diferentes tipos de pinturas que se le pueden dar al coche crean diferenciados efectos de reflejos y existen detalles como poder crear pegatinas cromadas que enriquecen el conjunto. Sin embargo, en general el aspecto sigue siendo que a los coches le faltan texturas de mayor calidad y le sobran dientes de sierra. Hay que destacar que si bien los coches se destrozan, el efecto queda lejos de ser realista y pasa por añadir efectos de ralladuras en la pintura según se dañe el coche. Llegados a un punto se romperán los cristales y se deformarán algunas piezas, pero nada destacable. Técnicamente no es que el motor gráfico no este optimizado, ya que en carrera nos movemos a tal velocidad que da igual si las texturas son de baja calidad. De hecho si nos paramos bruscamente y nos fijamos en el escenario, veremos como las texturas de baja calidad se sustituyen por otras más visibles, como puede ocurrir en juegos como Fable. SonidoTendremos una gran lista de canciones, en gran parte de corte rapero como suele coincidir en los juegos de tuning. Es una lástima para los amantes del techno ya que su antecesor contaba posiblemente con la mejor banda sonora de su estilo que se ha puesto en un juego, al menos en mi humilde opinión. Sin embargo, ahora la música es más comercial y llega mejor a todos los públicos. Dentro de las 103 canciones hay un poco de todo para que no nos cansemos de escuchar música de calidad, con intérpretes como The Martian, The Ratt Pakk, Marilyn Manson, Sean Paul, E-Sassin, Calyx, M.I.A. y un largo etcétera. Los efectos sonoros quizás no son tan acertados, en especial el sonido del motor que llega a ser demasiado monótono para los oídos tras unas cuantas carreras, además de que el volumen por defecto no nos deja escuchar la música de fondo. Tampoco no deja de ser curioso el que los coches parecen traer de serie válvulas de escape, con lo que nada más comenzar una partida podemos imaginarnos dentro de la película The Fast & The Furious con solo subir un par de marchas. Al menos podremos disfrutar de diferente sonido según el tubo de escape y la potencia del motor aunque añadir algunos efectos de fondo, como los gritos de la gente de la calle que nos esquiva con sorprendentes reflejos, hubiese ganado puntos. JugabilidadComo ya habréis podido imaginar a estas alturas, estamos ante un juego puramente arcade, que une la vieja jugabilidad de la saga Midnight Club con las nuevas opciones del mundo tuning. Y tal como ya pasara en el primer MC, el modo "carrera" se basa en ir dando vueltas por la ciudad por la noche en busca de carreras ilegales. En este punto se parece bastante a NFS:U2 pero con diferentes matices. Para empezar la tendremos 3 ciudades: San Diego, Detroit y Atlanta. Quizás la suma de las tres ciudades sea más o menos como la densa ciudad de NFS:U2, pero al ser tres escenarios diferentes están mejor detalladas. Sólo tendremos un garaje al que ir para realizar todo el tuning del coche, tanto mecánico como visual. Los coches oponentes ahora están quietos en un punto esperando a que lleguemos, aunque tras retarlos hay que seguirles hasta el punto de inicio de las carreras. Hay que ganar diferentes carreras contra el mismo contrincante antes de conseguir batirle. También tenemos las carreras de Club. Cada coche pertenece a una categoría, como puede ser Tuner, Muscle Car, Truck, etc. Y se necesita un coche de la categoría adecuada para acceder a sus carreras de club, por lo que no nos libramos de conducir cada tipo de coche. Los torneos son posiblemente las pruebas más difíciles, ya que constan de varias carreras seguidas y como podréis notar, el juego es difícil. No lo es tanto como MC 2 pero algunas carreras hay que repetirlas bastantes veces antes de optar a la victoria. Y es que un salto mal tomado o equivocarse de calle en un giro puede llegar a remontarse si se tiene suficiente tiempo, pero a veces significa perder la carrera, y eso en un torneo puede significar volver a empezar todo de nuevo. Por suerte también contamos con carreras opcionales que nos permitirán ganar dinero para mejorar los coches, y aunque no ganemos una carrera, quedar entre los 3 primeros ya nos reportará algo de beneficio. La ciudadQue la ciudad sea abierta implica que las carreras también lo son. El sistema es el mismo que en los anteriores Midnight Club. Un haz luminoso nos indica donde hay un checkpoint que debemos atravesar. Dicho checkpoint tiene una flecha que nos indica la dirección del siguiente. Un pequeño mapa nos indica la posición de los dos siguiente checkpoints para que podamos calcular el mejor recorrido y una flecha nos indica su dirección para no perderlos de vista. Hay incluso carreras donde se nos revelan todos los checkpoints a la vez y los puedes pasar en el orden que quieras. A partir de aquí da lo mismo cómo llegues e influye mucho el que nos conozcamos la ciudad para encontrar los mil y un atajos posibles para rascar esas décimas que necesitamos para ganar una carrera. La climatología que tenemos mientras damos vueltas por la ciudad nos debe servir para saber elegir qué carrera realizar porque si esta lloviendo, puede no ser una buena idea ponerse a carrera una carrera de clubs por ejemplo. También debemos tener en cuenta que la ciudad tiene policía, que nos perseguirá si nos detecta hacer el loco y que pueden llegar a ser molestos en algunas ocasiones, ya que siempre corren algo más que nuestro coche y la única forma de despistarlos temporalmente es hacerlos chocar contra algo antes de que ellos nos saquen de la carretera. ConducciónYa he comentado que el juego es arcade, que es rápido y que va bastante suave. Esto último puede que le haya iluminado la cara a algún sufrido jugador de MC 2, ya que su conducción era brusca y en muchas ocasiones, resultaba poco menos que exasperante. Ahora la física no es que sea mucho más real, pero deja conducir mucho más. El freno por ejemplo tiene un uso bastante limitado ya que en ocasiones sale más a cuenta tomar las curvas derrapando con el freno de mano, o simplemente dejarse estrellar contra los edificios que total, no vamos a tener que pagar la factura del chapista. Los choques contra el trafico y mobiliario urbano nos frena, pero no es determinante excepto en puntuales ocasiones. Depende del tipo de vehículo la conducción varía. Un tuner nos puede servir para correr a altas velocidades pero es vulnerable a golpearse, mientras que si llevamos un Hummer iremos más lentos pero poco nos importará lo que haya por delante. Llevar una moto es más difícil ya que un golpe mal dado y volaremos sobre el duro asfalto. También son mucho más ágiles de llevar y nos permiten ir por sitios por donde los coche no pueden, por lo que las carreras mixtas siempre son divertidas. Sin embargo, la conducción no solo es acelerar, frenar y girar. En MC 3 existen varios elementos más. Tenemos los turbos, tanto los dos de óxido nitroso como el de rebufo, que se llena tras estar unos segundos tras un coche y nos permite adelantar al rival de forma fulminante. También tenemos el desplazamiento de peso. Llevando una moto su uso es sencillo, desplaza al motorista para que se pliegue en las curvas y tomarlas mucho más cerradas, o simplemente nos permite hacer caballitos e invertidos para lucirnos un poco. En coches la cosa es un poco más espectacular ya que nos permite poner el coche a 2 ruedas, una forma curiosa de conducir pero práctica para esquivar coches dentro de una autopista repleta de tráfico. Por último tenemos una novedad, los movimientos especiales. Existen tres que podemos activar siempre que conduzcamos un tiempo sin chocar y rellenemos la barra de habilidad. Zone provoca un Slow Motion que permite esquivar a los coches o tomar una curva determinada fácilmente. Agro nos permite arrasar con todo lo que hay por delante como si fuéramos un rinoceronte descontrolado. Roar provoca que todo lo que nos rodea salga volando por los aires, tanto enemigos como tráfico y puede representar un arma de doble filo si obstaculizamos la vía. Saber usar cada movimiento especial en su justo momento es difícil, pero nos puede servir de gran ayuda en las carreras. Arcade y OnlineComo complemento, no solo tenemos el modo "carrera", que de por si ya es bastante largo. El modo arcade permite realizar carreras rápidas, pero con un pequeño añadido de ítems como son el disruptor, el hielo o el paro, como si de una carrera al estilo de los Mario Kart y similares fuese. El modo online nos permite jugar hasta 8 jugadores a la vez. Rockstar nos permite crear en sus filas a Clubs de corredores, como si de clanes se trataran, para poder disputar los torneos por Internet. Una de las opciones más preciadas que tenia el antecesor MC 2 para la comunidad online era la posibilidad de crear tus propios circuitos, insertando los checkpoints deseados en los puntos de la ciudad definidos en el orden que se quiera, con lo que se consiguen tantos circuitos como imaginación tengan los usuarios. Una vez configurados los parámetros de climatología, hora del día, tipo de carrera, etc. Tenemos un circuito listo para poder usar en cualquier partida online. ConclusiónMidnight Club se revela como una saga de alto nivel, y pone en jaque a juegos de la talla de Need For Speed: Undeground. Cuando la cultura de tuning esta en pleno apogeo y los juegos se están haciendo eco de ella, solo los títulos realmente buenos sobresalen, y MC 3 es uno de ellos. Rockstar ha trabajado para conseguir un compacto que supera a sus antecesores en todos los sentidos y que a bien seguro que los tuners que no disponen de suficiente dinero como para modificar un Cadillac disfrutarán de unas buenas carreras repletas de adrenalina. Lo mejor Las opciones de tuning Largo y entretenido El editor de circuitos Lo peor Apartado técnico algo mejorable Ligeramente difícil en ocasiones

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