Blades of Thunder llega a Game Boy Advance para intentar revivir el antaño exitoso género de la simulación de helicópteros. Sin embargo, en una primera toma de contacto, se dejan ver todas las carencias de este título que no llegará a destacar en ninguna estantería.
Llega a Game Boy Advance un juego de un género poco explotado. Vuelve la acción bélica a los mandos de un helicóptero, género que gozó de gran éxito hace bastantes años de la mano de la saga 'Strike', de una calidad tal que la hizo pasar a los anales de la historia de los videojuegos.
Blades of Thunder (GameBoy)
Los años han pasado, y no se han visto grandes títulos en ese campo, algo que los aficionados añoran. Son muchos los simuladores que ven la luz en nuestros días, pero ninguno mantiene la esencia clásica de aquellos grandes juegos. En un intento por solventar esa sequía, llega Blades of Thunder a la portatil de Nintendo, un juego que apunta alto, pero puede que se quede a medio camino.
Blades of Thunder (GameBoy)
Blades of Thunder (GameBoy)
El argumento nos sitúa a los mandos del helicóptero con el fin de acabar con una red terrorista que está actuando en diversos frentes del país. A través de escenarios poco detallados, el jugador avanzará constantemente mientras puede moverse lateralmente, acabando con cuanto elemento terrorista haya a la vista.
Blades of Thunder (GameBoy)
A pesar del poco detalle de los escenarios, debido a la limitación gráfica, no todo serán construcciones y armamento enemigos, sino que también poblarán los escenarios construcciones públicas que habrá que evitar destruir. El helicóptero gozará de diversas armas para llevar a cabo su labor, desde el típico disparo hasta mísiles perseguidores.
Blades of Thunder (GameBoy)
Blades of Thunder (GameBoy)
Sin embargo, se trata de un juego bastante incompleto, que no destaca en ningún aspecto en particular y, a grandes rasgos, presenta una buena idea pero que ha sido plasmada de modo poco interesante para el usuario. A la espera de una versión final europea, poco se puede esperar de este título que no convence. O muchos cambios se hacen, o pasará con más pena que gloria...