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Playboy: The Mansion

Playboy: The Mansion

  • PlataformaXBX7PS27
  • GéneroEstrategia
  • DesarrolladorCyberlore Studios
  • Lanzamiento17/02/2005
  • TextoInglés
  • VocesInglés
  • EditorUbisoft

¿Realmente quieres ser Mr. Playboy?

Ser el dueño del imperio Playboy es ese secreto deseo de millones y millones de hombres - y de unas cuantas mujeres - de todo el planeta. Haz que se mueran de envidia a los mandos de Playboy: Mansion. Conoce nuestras conclusiones.

El Príncipe de las mujeres
Playboy: The Mansion nos pone en la piel de Hugh Hefner, el popular dueño del imperio Playboy. Monta fiestas, haz fotos a las playmates e invita a la flor y nata de la sociedad a tu inigualable mansión. Recuerda: ser rico es fácil, pero dejar tu marca es lo más importante! y no lo es tanto!

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Una vez convertidos en el magnate os preguntaréis:  ¿Y ahora qué? Pues ni más ni menos que a disfrutarlo. Organizad fiestas a las que acudan la flor y nata del famoseo interestelar, haced fotos a las Playmates que pulularán como Pedro por su casa por vuestra mansión, etc. Rodeados de tantas bellezas, seguro que se os ocurrirá algo.

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g  r  á  f  i  c  o  s
Sufrido reportero gráfico
Fotografiar las bellezas incluidas en el juego es uno de los grandes alicientes del título. Como si de un Dead Or Alive Xtreme Beach Volley se tratara, en Playboy: The Mansion podréis admirar a los monumentos virtuales incluidos en el juego en su habitat natural. Pero, a diferencia del título de Tecmo, en éste la recreación de las modelos sí tendrá un sentido práctico, que no será otro que el objetener las mejores instantáneas para poblar los números de la revista que lancéis mes a mes.

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El modelado de las mujeres incluídas es ciertamente sugerente. Incluso los personajes que no sean Playmates o Bunnies estarán dotadas de unos encantos innegables. A destacar el contoneosensual con el que las mujeres caminarán, sobre todo cuando estén en una sesión fotográfica y les pidamos que posen, amén del vaivén de las enormes protuberancias con las que están dotadas. Será entonces cuando darán rienda suelta a todas sus armas femeninas para engatusar a la cámara... Y a quien esté detrás de ella.

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Hello, beauties...
La representación gráfica es correcta teniendo en cuenta el género del que se trata, pero ni por asomo puede compararse con el fastuoso espectáculo orquestado por el Team Ninja de Tomonobu Itagaki con DOAX, el juego que, según su creador, podía jugarse con una mano. Pero Playboy: The Mansion cuenta con un arma que el grupo de programación de Tecmo no se atrevió - o no le dejaron utilizar: el Topless de las féminas. Así, entre los diferentes trajes y vestimentas con los que podréis vestir a las mujeres presentes en el juego tendréis la opción de eliminar la parte de arriba, dejando a la vista las abundantes dotes con las que los diseñadores las han dotado.

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Además, cuando Hugh se lo monte - yeah - con alguna de las mujeres del juego, éstas quedarán tambien en topless, y hay que decir que el protagonista aprovechará este dato para... ejem... recrearse con los pechos de la fémina en cuestión, y no sólamente de una forma contemplativa. Los genitales de ambos personajes, eso sí, quedarán convenientemente tapados bajo la correspondiente ropa interior. En relación a las escenas de sexo, decir que éstas se prolongarán hasta que las canceléis presionando el botón correspondiente. Por cierto, el magnate virtual protagonista del juego se descubre como una auténtica máquina sexual que una y otra vez cumplirá como un campeón en un bucle de pasión desenfrenada que amenazará con repetirse tanto como el espectador-jugador quiera.

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En cualquier caso, parece que el deseo de que el título no fuera catalogado como únicamente aconsejable para mayores de edad haya limitado los contenidos mostrados. Y es que en diferentes escenas a uno le da la sensación de que los grafistas han diseñado determinadas animaciones para ofrecer secuencias de sexo real. Pero el fantasma de una catalogación por edades parece que llegó en medio del proceso de desarrollo, no de diseño, cortando las alas del equipo de grafistas. Una lástima, porque así la sensación de carisma ilimitado de Hugh queda desvirtuada por la incompleta recompensa que se puede conseguir del personal femenino presente en el juego. Más en la forma que en el fondo, claro, porque tirarnos a todas las mujeres será algo bastante asequible...

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s  o  n  i  d  o
Los personajes dialogarán entre ellos utilizando un lenguaje oral muy similar al de los Sims, aunque carente del elevado número de matices que en la franquicia de Electronic Arts. En cualquier caso, y como en la producción de los de FIFA, cada acción tendrá su propio fx asociado. En cuanto a la banda sonora, ésta está compuesta por temas de muy diferente corte, desde el Hip Hop hasta el Rock, pasando por el Chill Out. La calidad de la mayoría de ellos es remarcable. Destaca el hecho de que están clasificados por estilos, y que podréis cambiar la emisora que englobará a cada género acercando a Hugh Hefner a alguno de los equipos de sonido de la mansión. Respecto a los artistas que han trabajado en la BSO, podéis consultar la lista completa aqui.

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j  u  g  a  b  i  l  i  d  a  d
La mejor forma de describir a Playboy: The Mansion es decir que bebe de las mismas fuentes de Los Sims. ¿Es eso algo malo? Quizá al bueno de Mr. Wright no le haya hecho mucha gracia, pero a la comunidad de jugadores la verdad es que no le tiene porqué importar.

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Hay que decir que el componente de pseudo simulación de Los Sims aquí ha sido muy descafeinado. Para empezar se ha eliminado casi cualquier referencia al tiempo, a excepción de los gastos que tendréis que desembolsar de forma periódica para costear el mantenimiento de la mansión y de la plantilla de trabajadores. Tampoco tendréis que estar con un ojo encima del reloj para planificar vuestros actos ni atender al hambre, la necesidad de limpieza o incluso de afecto, pues no existen. Lo - casi - único importante es conseguir todos los ingredientes necesarios para lanzar al mercado un nuevo número de la revista...

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La selva de las influencias
El hecho de que podáis estar interaccionando "de continuo" con varios personajes, sin que éstos abandonen la Mansión Playboy, os permitirá conseguir un gran número de amistades/contactos en una misma sesión, aunque el valor de estas relaciones será menor que en los Sims, por lo menos a nivel trascendental. Las relaciones entre personajes también son muy parecidas a la franquicia de Maxis. Cuando os acerquéis a un personaje podréis seleccionar entre diferentes temas de conversa o actitudes. El estado de la relación entre los contertulianos aparecerá en pantalla,indicada por hasta tres barras: amistad, negocios y amor. Hay que decir que la barra de amor tan sólo aparecerá en el caso de que nuestro interlocutor sea una mujer, suponemos que por requerimiento expreso del propio magnate de Playboy. Así, no puede mantener relaciones homosexuales, aunque algunas de las chicas del juego serán bastante... cariñosas entre ellas...

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Las otras dos barras tienen sus propias razones de ser. La de amistad os permitirá llegar a intimar con los personas para que formen parte de vuestro círculo más cercano, posibilitando así que podáis llamarles por teléfono cuando os apetezca estar con ellos o que ellos tomen la iniciativa de pasarse por la Mansión de tanto en cuanto. La barra de negocios, por su parte, servirá para crear afinidad entre los personajes y que éstos puedan llegar a realizar operaciones comerciales juntos.

Los niveles de acercamiento físico son principalmente tres: abrazo, bailar, beso y sexo. Cada uno de ellos implica un determinado nivel de relación con el otro personaje. Así, por ejemplo, si intentáis besar a un personaje con el que no tenéis una relación lo suficientemente "profunda" vuestra amistad podrá verse resentida. Pero tranquilos, nada que un par de palabras amigables no puedan corregir. Y es que, al contrario que en Los Sims, aquí reconducir una situación no os costará más que unos segundos de cháchara. Además, como no existe el tiempo propiamente dicho - aunque se ha implementado el efecto visual de paso del día a la noche -, las relaciones no se deteriorán a causa de que no contactéis con los personajes de forma regular.

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Mejor bien acompañado...
En Playboy: The Mansion no es que se permita la poligamia: casi se exige. Para que el dueño del Imperio Playboy tenga una imagen de, precisamente eso, de Playboy, sus asesores de imagen le recomendarán que se busque a varias novias. Para conseguir una novia, tendréis que intimar lo suficiente como para poder besarla, y entonces os debería aparecer la opción en el menú de interacción para realizar la petición.

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Las mujeres Playboy se dividen en dos grupos: las Playmate y las Bunnies. Las Playmate son las modelos que posan para la revista, ya sea en portada o en el desplegable interior. En cambio las Bunnies son las encargadas de amenizar las fiestas y veladas que se celebran. Tanto unas como otras serán necesarias para conseguir vuestros objetivos como magnate de la comunicación.

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Busca las diferencias... (pista: sólo una es de carne y hueso)

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Los cotos de caza
La mansión Playboy está dividida en diferentes áreas que se irán desbloqueando a medida que juguéis en el modo principal. Cada una de ellas podrá ser utilizada como marco de sesiones de fotos o para realizar fiestas. Para crear ambiente podréis rellenar estas áreas con objetos temáticos que puedan tener o no un uso definido, como trampolines para la piscina o cuadros para el recibidor.

La revista que lo originó todo
Cuidar la línea editorial de una publicación como Playboy siempre es complicado. En el juego se ha intentado trasladar ésto mediante la evaluación de los contenidos y el nivel de personaje -  asociado a cada uno de los que intervendrán en ellos. Así, por ejemplo, si encargamos una entrevista sobre una celebridad muy importante a un periodista mediocre, el resultado será impredecible, pero si le asignamos el trabajo a un virtuoso de las letras, tendremos muchas posibilidades de obtener un texto que catapulte las ventas de nuestra publicación.

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Retocar la decoración de la Mansion será una buena forma de invertir el dinero que consigáis con los números de la revista. Otra, el celebrar las mejores fiestas del planeta, será un trabajo bastante duro - y caro. Pero, qué demonios, alguien tiene que hacerlo.

c  o  n  c  l  u  s  i  ó  n
Playboy: The Mansion es una opción a tener en cuenta por aquellos jugadores que han explotado al máximo cada uno de los juegos de los Sims y buscan más de lo mismo. En el título de Ubi Soft encontrarán, además de ese espíritu de pseudo-simulador estratégico, muchos de los alicientes con los que se supone que la vida del propietario de la marca Playboy cuenta - o ha contado, porque Hugh ya tiene suficientes años como para ir pensando en echarle la llave a la jaula del pajarito. Eso sí, tened en cuenta que gran parte del desafío de los Sims aquí no tiene correspondencia. Playboy: The Mansion no está diseñado para derrotar al jugador, sino para ofrecerle la oportunidad de vivir una experiencia virtual muy tentadora, por lo menos a priori. A medio - largo plazo, el interés por el juego, debido a su escasa profundidad, corre el peligro de caer en picado.

l  o    m  e  j  o  r

  • Poder ligar con todas las bellezas que nos dé la gana.
  • Ir viendo crecer el imperio Playboy desde dentro.
  • El control es intuitivo, perfecto para un juego de consola.
  • La presencia de personalidades famosas.

l  o    p  e  o  r

  • No representa un desafío para el jugador acostumbrado a los Sims.
  • Que no aporte nada sustancialmente nuevo.
  • Parece como si al componente erótico-sexual se le hubiera puesto un freno en el mismo proceso de desarrollo, no en la fase de diseño.
  • Que el único personaje controlable sea Hugh.
  • Que no pueda jugarse con una mano.
7

Bueno

Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.