Sudeki, Impresiones (Xbox)

Sudeki, el esperado juego de Acción con toques de Rol para Xbox, ya está casi a la vuelta de la esquina. Gracias a la beta que Microsoft nos ha hecho llegar, hemos podido tirarle millas a la última creación de Climax. Y aquí están nuestras primeras impresiones.

La historia del Proyecto Sudeki es una historia larga. Por lo menos más larga de lo que les gustaría a los numerosos amantes de los juegos de rol de la consola de Microsoft. Esos jugones deseosos ahora de hincarle el diente a futuros bombazos como Fable o Jade Empire, tras haber hecho lo propio con perlas del calibre de Star Wars: Caballeros de la Antigua República - del cual recientemente se acaba de confirmar una segunda parte - llevan esperando a este Sudeki mucho, mucho tiempo.

Pero los cuatro héroes que protagonizan Sudeki han conseguido un equilibrio dificil de conseguir: respetar sus propias creencias y luchar por ellas, incluso utilizando la fuerza bruta si es necesario. Todo - o casi todo - vale para defender lo poco que queda inviolado en su planeta. Los peligros se sucederán

La presentación es una muestra del buen gusto de los desarrolladores. Como si de un guiñol se tratara, sombras recortadas a modo de títeres serán los actores de una obra narrada en verso por una voz en off que conseguirá cautivar al espectador con su medido tono. Por fortuna, la versión que se editará en España estará totalmente localizada.

En esos primeros momentos también conoceréis a Ailish, una damisela cuya monótona vida no consigue satisfacer sus ansías de aventuras. Su papel en la historia aún tardará en desvelarse... Pero no adelantaremos acontecimientos,

Para la realización de combos tendréis que tener un perfecto control del timing de la pulsación de botones. No valdrá cualquier velocidad, sino que la pulsación de los botones tendrá que realizarse en un margen de tiempo determinado. A medida que la aventura vaya transcurriendo los personajes irán aprendiendo nuevos combos, además de ir aumentando de nivel. Cuando se produzca el aumento del nivel de experiencia, se os dará la posibilidad de seleccionar qué habilidad queréis potenciar, lo que permitirá una gran libertad a la hora de 'crecer' a los personajes.

Los combates, a diferencia de otros juegos de rol, son totalmente en tiempo real. Incluso al activar el menú para seleccionar un objeto, hechizo e incluso invocación al más puro estilo Final Fantasy, la acción seguirá transcurriendo, pero con un curioso efecto tiempo bala -  la sombra de Max Payne es alargada - que se activará cuando despleguéis el menú del personaje. Así, la acción no se detendrá totalmente, sino que continuará transcurriendo mientras realizáis los cambios pertinentes.

A pesar de que habrá un hilo argumental principal, como en buen juego de rol las Quests o misiones que no estarán vinculadas necesariamente con la historia central serán uno de los pilares de Sudeki. Así, la obra de Climax ganará muchas horas de juego si os decidís a intentar completar todas esas misiones en vez de centraros única y exclusivamente en alcanzar el final del juego.

Mientras estéis en una ciudad o en un poblado os podréis ir de tiendas y echar un vistazo a las provisiones con las que cuenten los mercaderes del lugar. Ir a comprar objetos, pociones e incluso mejorar vuestras armas en la herrería serán formas de gastar los florines que hayáis recolectado superando misiones, liquidando enemigos o, simplemente, encontrado por el camino teniendo los ojos bien abiertos.

Eso sí, la belleza en su estado más pomposo campa a sus anchas a lo largo y ancho del juego. Como sorprenderse a uno mismo admirando el vuelo de una mariposa en un campo de trigo, mientras las espigas se mecen por el viento nocturno. O admirar una puesta de sol en el muelle, con la postrera luz del día escapándose entre las ventanas del castillo  asentado a la vera del mar,mientras los pescadores ultiman su jornada entre resignados y hastiados...

Y los programadores, sabedores de que hay momentos en los que a los jugadores les gusta deleitarse con el entorno visual, han habilitado un gran número de lugares desde los que será posible admirar todo el escenario.

Así, cosas como las simplistas texturas - algo que se pone de relieve al contemplar el agua - o, sobre todo, los impersonales rasgos de los personajes humanos, muy diferentes de los impresionantes acabados de los personajes de juegos como Final Fantasy o incluso, en su estilo, Zelda: Wind Waker. La verdad es que dudamos que en la versión final presenten un acabado que parece remontarse a bastantes años atrás, pero también que se vayan a rediseñar completamente. Y el hecho de que las secuencias cinemáticas estén generadas por ordenador no ayuda precisamente a que el apartado visual remonte el vuelo...

También nos ha sorprendido, aunque no negativamente, la presencia de gore, a pesar de que ésto quizá le reste una gran cantidad de jugadores potenciales dado el carácter, a priori, de RPG cuento que quizá podía haber atraído a un público de todas las edades. Pero las explosiones de los enemigos en nubes de sangre, y las mutilaciones, tanto las que provoquemos en los enemigos como las que han padecido los cadáveres que os encontraréis por los escenarios.