Una vida hecha a tu medida.

El fenómeno sociológico que suponen Los Sims vuelve a GBA con esta nueva edición en la que toman la calle. Pero para la portátil de Nintendo, EA ha creado prácticamente un nuevo juego a la medida de la máquina. Una elección excelente para llevar la magia de Los Sims a todas partes.

Meter Los Sims en una consola parece algo realmente difícil. Trasladar todas las opciones del PC, todos los controles que mediante teclado y ratón son tan cómodos, a una consola que se maneja tan sólo con un pad, parece algo complicado. Si además la idea es llevar el juego a una portátil, la misión se vuelve prácticamente imposible.

Al menos, la cosa se complica si se quiere mantener la idea del juego y su gran diversión. Las primeras adaptaciones para consolas domésticas fueron buenas, pero la idea de llevar Los Sims Toman la Calle a Game Boy Advance, parece algo descabellado.

Sin embargo, los chicos de EA lo han conseguido, y realmente bien, para lo que la portátil de Nintendo es capaz de hacer. Hay muchos puntos positivos en este juego, y uno de ellos es que mientras se juega, uno puede olvidarse de las versiones grandes y centrarse en este pequeño cartucho y en la diversión que proporciona.

En primer lugar, lo que llama la atención es que nuestro Sim, al que se puede crear a nuestro antojo, está de vacaciones en Sim Valley. Es como un pequeño pueblo al que acaba de llegar, y se alojará en casa de su tío. Al principio, tendrá que vivir en el granero, adaptándolo a sus necesidades, pero luego la cosa irá cambiando.

En realidad, este juego de Los Sims parece más una aventura que un juego de simulación. Es muy fácil jugar y divertirse, siendo mucho más simple que sus versiones para PC o incluso para consolas de sobremesa.

La manera de ir jugando es ir completando las misiones que se nos vayan pidiendo. Estas misiones serán cosas como cortar el césped, trasladar muebles de sitio, arreglar el tractor de nuestro tío… cosas que la gente que vayamos conociendo nos irá pidiendo.

Pero todo eso habrá que combinarlo con las clásicas necesidades de Los Sims. Es decir, no podemos olvidarnos de descansar, comer, asearnos, divertirnos. Para ello, habrá todo tipo de comodidades que nos pongan la vida más fácil.

En general, al jugar da la impresión de vivir una aventura en Sim Valley. Las misiones simplifican el modo de juego, y la gran ventaja es que las mismas son muy divertidas de realizar. Por ello, esta adaptación de Los Sims para GBA es todo lo que se podría desear en la portátil de Nintendo.

Pretender que una consola portátil ofrezca la misma calidad gráfica que un PC es un disparate. Haberlo intentado sólo habría tenido una consecuencia: el fracaso. Por ello, desde aquí solo podemos alabar el hecho de que se haya implementado un apartado visual acorde a la potencia de GBA.

En primer lugar hay que hablar de la perspectiva. Esta entrega de Los Sims está creada con un motor gráfico totalmente en 2D, que no dará tanta profundidad como sus versiones de PC, pero que ofrece un aspecto muy bien acabado. La perspectiva es isométrica, y hay que reconocer que es muy práctica para desplazarse y realizar las acciones necesarias.

Ahora es el momento de ver al Sim protagonista. Este puede ser diseñado al principio de la partida, aunque no con muchas opciones. Selección de sexo, aunque no de edad, algunos cortes de pelo diferentes y la elección del color de pelo, piel, camisa, pantalones y zapatos. Pocas opciones, pero suficientes para decorarlo a gusto.

Se hecha en falta sobre todo algún que otro detalle más en la ropa, ya que la camisa y el pantalón sólo tienen el color, siendo completamente planos. Su animación tampoco es que sea gran cosa, pero a su favor hay que reconocer que todas las acciones que puede hacer dentro y fuera de la casa están creadas con un buen hacer que dejará contento al más exigente.

Y es que nuestro Sim puede hacer de todo. Ir al baño, ducharse, cocinar, dormir, estudiar, arreglar cosas, ver la tele… y todo ello con una representación gráfica excelente.

Nuestro Sim será el único al que se pueda manejar, siendo todos los demás personajes ya creados y controlados por el juego. Por supuesto habrá que interactuar con ellos, principalmente hablando, como en cualquier otra entrega de los Sims.

Pero aquí la cosa cambia un poco. Para hablar habrá una pantalla especial con la imagen de la persona con la que hablamos, y varias frases disponibles. Algunas frases aumentarán nuestra relación con esa persona y otras las bajarán, así que habrá que escoger bien lo que se dice.

El aspecto de estas pantallas no es una excelencia gráfica, pero resulta muy práctica a la hora de entablar conversaciones con los otros Sims.

En general, todos los decorados tienen un nivel de detalle excelente, tanto casas, como interiores o exteriores… todo está dibujado en 2D, pero se ve realmente genial. Por achacar algo, se podría decir que la cámara está quizás algo cerca de más del Sim principal, y no se puede alejar ni mover, pero ello no dificulta en ningún modo el juego.

Los textos, como no podría ser de otro modo en este juego, están en un perfecto castellano; cosa importante en un juego donde hay que hablar con otras personas.

El apartado sonoro está igualmente bien tratado, como el visual. Las melodías son todas muy similares a las clásicas que vienen acompañando toda la saga; músicas tranquilas, alegres y que se dejan oír casi sin que uno se de cuenta. Aclarar que no en todas las estancias o lugares se puede oír alguna música, quedando ahí los efectos de sonido como único acompañamiento.

Los efectos de sonido, aunque parezca increíble superan a las melodías. Hay de todo para crear ambiente. Desde el sonido de la ducha, la cocina, las gallinas en el gallinero, el cortacésped, la gente que saluda al pasar a su lado, el sonido de la tele o la radio al encenderlos… hay de todo, y es muy difícil estar en silencio, ni siquiera cuando no suena la música. Y todo ello sirve para crear un apartado sonoro excelente.

Esta entrega de Los Sims no se maneja con cursor alguno. La cosa es mucho más simple. El Sim protagonista se controla directamente mediante la cruceta, como si de un juego de acción se tratara.

Al acercarse a algo y pulsar A, saldrán las opciones disponibles con el objeto en cuestión. Si es la nevera, por ejemplo, se podrá comer algo. Si es la televisión se podrá encender, apagar, o ver.

Con las personas sucede algo parecido. Al acercarnos a alguien, y pulsar A, entraremos directamente en conversación con esa persona. En la pantalla de conversación se podrá escoger entre varias frases que podrán aumentar o disminuir la relación con esa persona. Desde luego, lo mejor es aumentarla.

Este sistema de control, se combina con los elementos clásicos de Los Sims. En la pantalla tenemos las clásicas barras que muestran el estado de nuestro Sim. La higiene, la diversión, el sueño… todas ellas irán bajando poco a poco, y no hay que olvidarlas en ningún momento si no queremos que nuestro Sim lo pase mal.

Pero todo eso es la parte general del juego. La salsa son las misiones que tendremos que ir haciendo. Al empezar la partida, nuestro Sim llega a Sim Valley, a casa de su tío, donde comenzará las vacaciones. Allí empezarán a darnos nuestras primeras órdenes. Las primeras serán sencillas para irnos acostumbrando al juego, pero luego la cosa se irá complicando.

Posteriormente, habrá que trabajar para ganar dinero. El dinero servirá para ir adquiriendo bienes y facilitar la vida de nuestro Sim. También habrá que salir a la calle, como bien dice el título del juego, y relacionarse con la gente. Pero todo esto que parece tan complicado, no lo es, ya que se nos irá pidiendo poco a poco a través de las mencionadas misiones.

 Hay que reconocer que este juego engancha. Incluso habiendo jugado a otros Sims más completos o más imponentes gráficamente, este es igualmente divertido. El sistema de misiones está muy bien creado, y estas se van complicando de manera progresiva a medida que el jugador aprende, lo que facilita su control, y lo hace apto para todos los públicos.

Por otro lado, poder grabar la partida en cualquier momento facilita el poder llevarlo en una portátil y jugar en cualquier sitio. Esto, unido al excelente acabado técnico que presenta, lo convierten en una compra casi obligada. Abstenerse únicamente quienes estén cansados de tanto Sim, y los amantes de la acción, porque aquí no hay de eso.

 l o  p e o r