Camina o revienta

Lava Falls se ha convertido en una ciudad sin ley. Eres nuevo en las calles y debes ganarte el respeto cueste lo que cueste. Lo único que tienes es un coche y la resolución suficiente como para que nadie te pase por encima. Estás solo en la jungla...

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Lava Falls es ahora una ciudad sumida en el caos y controlada por las bandas. El papel de la policía es tan oscuro que eclipsa incluso al de los grupos más mafiosos de la ciudad. Y en este panorama es donde debes abrirte paso y tu única arma será tu coche.

Ni que decir tiene que no tendrás que cargar con el mismo coche desde el inicio, y si lo haces podrás modificarlo en la tienda que se encarga de eso en el distrito Este. Te unirás la banda Woody's (cuyo look corresponde más al de un atajo de payasos que al de una banda de maleantes) nada más comenzar. Ellos confiarán en ti para algunas misiones menores al principio que irán creciendo en 'responsabilidad' (y depravación) a medida que avance el juego.

Por supuesto aquí nadie se casa con nadie, pero pronto notarás que ciertos grupos demuestran más inquina hacia tu condición de seguidor de los Woody's. En una situación como está solo quedan dos opciones, golpear tu primero, o ser golpeado hasta la muerte. La supervivencia está en juego.

El logotipo excesivamente pixelado y más propio de un juego de PC de principio de los 90 que de un estreno actual auguran pocas cosas buenas, y es que el trabajo gráfico de RoadKill está a años luz de los impresionantes acabados visuales de sus hermanos de generación. Unas texturas pobres, unas estructuras muy poligonales (coches, edificios, personajes…) y algunos defectos como el 'clipping' que se aprecia en ocasiones, le dan al juego un aspecto un tanto antiguo y pasado de moda.

Sin embargo, debemos juzgar este apartado con algo más de benevolencia teniendo en cuenta lo que debe mover el motor gráfico. La ciudad no es especialmente grande, pero si lo suficiente como para que cualquier máquina note los efectos de gestionar varias refriegas simultaneas en las calles. A veces hasta 7 coches combaten en pantalla, mientras puedes apreciar de fondo a otros tantos en una particular batalla, mientras algunos miembros de las bandas 'de a pie' se dedican a utilizar sus bazokas contra ti.

Todo esto lleva a que probablemente los diseñadores se hayan visto obligados a reducir el nivel de detalle general del juego, aunque estamos seguros de que con un buen desarrollo, nuestra consola daría mucho, pero mucho más de si de lo que Road Kill nos ofrece.

A pesar de que el cuerpo de los enemigos (y no tan enemigos) que atropellaremos a lo largo del juego, nos traerán a la mente a los de aquel trasnochado 'Carmaggedon', hay que reconocer que han trabajado mucho más la física de estos, hasta el punto de verlos en ocasiones quedarse enganchados en el parachoques delantero, dando tumbos cual peleles.

Muy 'gore'. Tanto como los impresionantes chorros de sangre que saltan en ocasiones sobre la pantalla cuando impactamos contra el cuerpo de alguno de estos viandantes o la forma de rodar por el suelo, o bajo nuestras ruedas, tras recibir algún tremendo empellón.

Todas estas deformaciones (no se alarmen nuestros lectores) están muy lejos de ser permanentes, al menos para nuestro coche - que al fin y al cabo es lo que nos interesa-, ya que podrán ser arreglados en un abrir y cerrar de ojos, haciendo buena la máxima de que este juego no pretende buscar realismo.

Si dispones de sistema 5.1 no esperes que al comprar este juego lo aprovecharás al cien por cien. En realidad no hay nada que apreciar en cuanto a sonido se refiere, ya que el barullo sonoro no te lo permitirá. Probablemente aunque la calidad de sonido fuera inmejorable, nos costaría apreciarlo dada la naturaleza del juego.

Probablemente la emisora que más se adapte al espíritu del juego sea la 69.3 QQQQ, cargada de temas rockeros de indudable sabor a los 80, algunos de ellos muy conocidos. Otra opción para los que les guste un estilo más cercano al funky sería la 102.3 FUOK. A los que opten por lo más duro del dial les aconsejamos que sintonicen el 66.6 WILD, solo el nombre ya promete…

A parte de las emisoras eminentemente musicales, tenemos otras tres en las que los locutores tienen el protagonismo, eso sí, en perfecto inglés. Incluso una de ellas se dedica en plan 'monográfico' a comentar el comportamiento anárquico que debería adoptar la población ante la amenaza de la enfermedad que a todos acecha. No tiene desperdicio.

Como novato en la ciudad sin ley como en la que te encuentras, te verás obligado a aceptar ciertos encargos no muy éticos (GTA3) que te obligarán a recorrer la misma ciudad una y otra vez buscando diferentes localizaciones para llevar a cabo todos los encargos que se te requieran. Como norma la variedad de estos es puramente argumentativa, ya que a la postre se tratará de lo mismo el noventa por ciento de las veces: conducir y disparar.

En los momentos muertos en los que estás sin misión asignada podrás aprovechar el tiempo para destrozar algún coche de una banda enemiga, sin tener demasiado cuidado con los peatones, sobre todo si no se trata de alguien de tu misma banda (Carmaggedon). Todo esto lo deberemos realizar con el máximo cuidado, para no deformar nuestra carrocería hasta el punto de que estalle y nos cueste la muerte (Destruction Derby).

La tienda se convertirá en otro de los lugares a visitar, y estará marcado en el pequeño mapa que nos acompañará durante el juego con un inconfundible símbolo de dólar ($). Cuantas más veces visitemos este lugar con el bolsillo lleno, más probabilidades tendremos de salir airosos de nuestros encuentros.

La base de nuestra banda será el lugar al que acudiremos cuando no tengamos ninguna misión asignada o hayamos completado alguna. Los lugares exactos aparecerán señalados en el mapa con una 'M', y en la ciudad con una columna de haces de luz azul que subirán desde el suelo hacia arriba. Bastará con detenernos dentro de ellos para recibir las indicaciones (con la cinemática correspondiente). Las columnas de color naranja (y símbolo variable en el mapa) nos indicarán pruebas y misiones secundarias).

No solo encontraremos este tipo de mercancía acabando con los enemigos, si no que habrá lugares estratégicos a lo largo de la ciudad en los que encontraremos:

Y un largo etcétera de elementos que irás descubriendo por ti mismo en la exploración de Lava Falls.

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El mismo manejo del coche puede hacerse algo incómodo al principio aunque no se tarda en cogérsele el tranquillo a pesar de la brusquedad que se nota en un primer momento. Esto durante el juego normal puede parecer ridículo, pero cuando una de esas tareas secundarias antes mencionadas es una carrera compitiendo con varios vehículos, es más que seguro que el problema de la ligera brusquedad del control no parecerá trivial.

En cuanto a la inteligencia artificial, nos ha sorprendido comprobar como de difícil resulta encarar a un enemigo (siempre buscan estar pegados a la parte trasera de tu vehículo disparándote a ti, mientras te empeñas en girar en redondo para cazarles) y lo correctamente implementada que está la reacción de la mayor parte de los habitantes de Lava Falls durante el juego, y al mismo tiempo lo que le cuesta al individuo que nos acompañan en algunos coches como artillero (en la parte trasera), enterarse de quien es el enemigo y dónde está. En ocasiones puedes estar disparando durante 5 minutos a un coche con las armas principales, mientras el artillero en cuestión se dedica a la vida contemplativa agarrado a su poderosa ametralladora.

En este mismo menú podremos encontrar la información sobre la misión que estamos cumpliendo, las opciones del juego modificables y la posibilidad de cargar una partida guardada o salir de la actual. Como opción alternativa podremos 'Suicidarnos' haciendo explotar el coche, y volviendo al punto anterior donde guardamos.

Una buena manera de pasar un buen rato entre cuatro amigos, y un detalle a agradecer en el juego, aunque la experiencia, repetida en varias ocasiones puede llegar a resultar aburrida dada la poca variedad que RoadKill presenta a este respecto.

Un juego que lejos de sorprendernos con algo nuevo en su forma de juego, o en su presentación visual nos deja el mal sabor de boca de estar jugando a algo realmente viejo.  Sin duda se trata de un juego recomendable solo para los fanáticos del género o para aquellos que busquen diversión sin pretensiones.

l  o     m  e  j  o  r

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