La música y la originalidad cogidos de la mano.

La música como entretenimiento.
El pasado mayo del 2002 llegó a las tiendas Frequency, un juego que paso sin pena ni gloria por las estanterías de muchos comercios a pesar de ser uno de los títulos más rompedores y originales de cuantos se había visto en PlayStation2. Básicamente se trataba de seguir el ritmo de diferentes instrumentos divididos en canales, desbloqueando secciones de la canción y a medida que avanzamos escuchar el tema musical entero. Original, no?

g r á f i c o s
Técnicamente se podría decir q Amplitude no destaca por unos modelados impresionantes ni unas texturas del otro mundo, el punto positivo en este aspecto de Amplitude se lo llevan otros detalles. Una partida de Amplitude transcurre en una pista virtual como si de un F-Zero se tratara; en esta pista hay canales, cada uno de un color distinto, donde nuestras naves se irán situando. Hasta ahí técnicamente el juego es simplón, pero no por ello pierde puntos, ya que el verdadero fuerte del juego no está en ese aspecto.

El entorno de la partida, mientras estemos siguiendo el ritmo de alguna interesante canción, será como una ciudad virtual que iremos atravesando llena de pantallas con escenas de videos del tema musical, focos de luz, letreros luminosos, todo consiguiendo redondear el efecto de estar dentro de una ciudad virtual. Si a esto le sumamos la transición en los menús que siguen el mismo tipo de efecto, trasladándonos por pantallas, pistas virtuales y edificios imposibles, el resultado final de todo el producto es una presentación estelar.

m ú s i c a
No es de extrañar que en este apartado solo hablemos de elogios tratándose de un juego musical. La banda sonora esta repleta de buenos temas y grupos como Garbage, P.O.D, TCM, David Bowie, Wezzer, Quarasi o Logan7. Es compresible que en este apartado nuestra nota sea el sobresaliente; el único punto negativo puede ser que este tipo de música a camino entre el pop-rock, el tecnho y el punk electrónico no te guste.

s o n i d o   f x
Este punto no hace más que seguir la estela del anterior y acabar de completar un nivel sonoro impresionante. Para empezar hay que felicitar a Sony por el doblaje del juego completamente al castellano y con un doblaje digno de sobresaliente.

Desde el principio del juego, que nos 'obligará' a seguir un tutorial totalmente guiado por una voz en off, hasta las partidas en solitario o multijugador donde una voz de corte mas metálica o robótica, nos irá informando de los incidentes en la partida. ('Jugador 1 va en cabeza', 'Liberador!'...)

También los efectos sonoros destacan por si solos en uno de los detalles más curiosos del juego los remixes o scratches. En el próximo apartado contaremos un poco mas sobre estas dos características del juego, pero por el momento diremos que los efectos sonoros aplicables a los temas musicales son increíbles, y llegando en ocasiones a crear, si somos lo suficiente hábiles, nuevos remixes rompe pistas con las bases que trae Amplitude. En conclusión el broche perfecto en un apartado sonoro de medalla de honor.

j u g a b i l i d a d
Amplitude no destacará por ser un juego impresionante gráficamente, ni tampoco por revolucionar el panorama actual por poseer una IA espléndida, ni por que incorpore un argumento digno de película: Amplitude es sencillamente divertido y adictivo. Acaso se necesita mas?

Nada mas introducir este DVD en nuestra PlayStation2 se nos requerirá crear un Freq o "frequenciador". ¿Qué es un Freq? Será nuestro Yo en el mundo virtual de Amplitude, el encargado de 'frequenciar' la música. Podremos escogerlo de entre un elenco de personajes a cuál más estrafalario o crearlo a nuestro gusto configurando desde la cara, pasando por el cuerpo hasta los accesorios como la ropa.

'Frequenciar' es básicamente seguir el ritmo que se nos marque de una canción en sus distintos instrumentos desbloqueando secciones de canción, cuando esta sección queda desbloqueada o 'frequenciada' sonará sola sin que tengamos que hacer nada así cuantos más instrumentos o canales desbloqueemos no será más fácil de seguir el ritmo del tema y 'frequenciar'.

Si conseguimos marcar toda una sección correctamente, 'frequenciamos' ese instrumento o canal liberándolo por un tiempo limitado, tras esto nos cambiamos de canal y a 'frequenciar' otra pista. Parece complicado pero si mientras leéis esto observáis alguna de las capturas que acompañan el texto lo comprenderéis rápidamente. Básicamente este método de juego podría recordar algo al Guitar Freaks de Konami o quizás a la serie Dance Dance Revolution, en el fondo es lo mismo: Marcar direcciones o botones en el pad siguiendo el ritmo de una canción.

El caso es que para animar el juego y hacerlo algo más adictivo y rápido, tendremos ítems y combos paras sumar puntuaciones más altas. Los ítems van desde el típico desbloqueador automático de secciones hasta el que nos doblara la puntuación durante un tiempo limitado, pero el más interesante y curioso de todos el 'Liberador'. Este ítem nos transformara por momentos en una haz de luz con el que podremos hacer scratches con diferentes efectos en el tema musical que si conseguimos mezclar bien aumentaran nuestra puntuación además de ser bastante divertido. Este estilo también lo tendremos una vez desbloqueada la canción por si nos hemos quedado con las ganas de jugar un poco mas con el tema en cuestión.

En el juego multijugador tendremos la opción de enfrentarnos tres amigos mas en una competición por quien 'frequencia' mas secciones de una canción a la vez que podemos utilizar diversos ítems extras que en el juego en solitario no están presentes para entorpecer a nuestros contrincantes.

Las partidas a cuatro jugadores son toda una experiencia divertida que eleva las cotas de entretenimiento del titulo hasta niveles insospechados, por que en este modo prima aun más la velocidad de los jugadores que de la de 'frequenciar'. Al ser cuatro Freq's en pantalla e ir completando las secciones, los jugadores deben ser rápidos en cambiar de pista adelantándose a los compañeros que quizás se queden a dos velas hasta poder meterse en una sección de la canción sin 'frequenciar'.

En el método avanzado los controles en los botones cambian por L1, R1, y R2 siendo izquierda, centro y derecha respectivamente, y como en estos botones si podemos colocar un dedo en cada uno de ellos seguir un ritmo frenético ya no será cuestión de no llegar al botón con la suficiente presteza, sino de reflejos.

Para finalizar tendríamos dos controles mas q comentar, que serian el pad direccional o el stick izquierdo para cambiar de pista (Recomendamos el pad direccional) y el conjunto de todos ellos para realizar el estilo libre antes comentado. En este estilo libre cada dirección (Derecha, centro, izquierda) provocara un scratch o efecto distinto y con el stick izquierdo variaremos su amplitud y magnitud, si llegamos a dominar esto llegaremos a hacer verdaderas virguerías con los temas presentes.

c o n c l u s i ó n
Este juego no destaca en las estanterías de los comercios, ni tampoco posee una campaña de publicidad grande en revistas y televisión como otros títulos que salen en estas fechas de cara a las navidades, pero posee tanta o más calidad que muchos de los títulos con los que nos bombardearan en las próximas fechas.

Es cierto que gráficamente no es nada del otro mundo exceptuando los efectos gráficos y de luz que nos adornan la partida, pero la alta calidad de los apartados sonoro y jugable lo elevan a la posición de imprescindible, o al menos al de titulo a tener en cuenta, y que al menos deberíamos de probar alquilar por si nos convence.

Estamos con casi toda seguridad ante uno de los títulos mas infravalorados y menos conocidos de los que van a aparecer en este periodo, que nos inunda de tanta mediocridad y segundas partes, faltas de carisma y originalidad.

l  o    m  e  j  o  r :
- Divertidísimo y adictivo.
- La banda sonora.
- Multitud de modos y totalmente rejugable.

l  o    p  e  o  r :
- Que no te gusten los puzzles musicales.
- Que no te guste este tipo de música.
- Que no te guste arriesgarte en un titulo así.