Publicado el informe anual sobre la industria del videojuego en Japón

La Asociación Japonesa de Software de Entretenimiento (CESA) publicó recientemente su informe anual sobre la industria del videojuego en Japón. Según este informe, el pasado año esta industria sufrió una reducción de sus ingresos globales, pasando de los 1.450 billones de yenes (10.558 millones de euros) en 2001 a sólo 1.260 billones en 2002 (9.174 millones de euros), lo cual se debe a dos causas: por un lado, el descenso radical en las ventas de las consolas más antiguas (como la PSOne) y la reducción de precios en los sistemas de nueva generación, acuciados por una competencia cada vez más fuerte; por otro lado, se ha reducido el número de jugones en territorio japonés (según el estudio, se ha pasado de más de 25.500.000 jugadores habituales en 2001 a 23.600.000 en 2002). Además, el informe revela el escaso interés de los japoneses por los juegos en red, ya que sólo el 9,6% juega regularmente a juegos online.

En otro orden de cosas, este informe incluye una encuesta a unas cuarenta desarrolladoras en la que se les preguntaba qué plataforma era la más cara a la hora de programar un juego. El resultado revela que los costes a la hora de desarrollar en GameCube son los más altos (72 millones de yenes, 524.000 euros), mientras que PS2 es la consola más "barata" (14 millones de yenes, 102.000 euros).