Grabbed by the Ghoulies (Xbox)

Una apabullante mansión de tétrico aspecto. Más de 25 monstruosas criaturas dispuestas a aterrarnos. 50 habitaciones que explorar, repletas de puzzles y acción. ¿Un nuevo Resident Evil? No, es Grabbed by the Ghoulies, el primer juego de Rare para tu Xbox.

La chica de nuestro asustadizo protagonista (luego veremos por qué) ha sido secuestrada por los fantasmas y monstruos de la mansión de Ghoulhaven. Nuestra misión como tantas otras veces, y debido a nuestra caballerosidad más que a nuestro espíritu aventurero, será rescatarla de tan horrible mansión en la que se dan cita toda clásica de criaturas sacadas de las leyendas populares y los filmes de terror.

La mansión estará compuesta por unas 50 habitaciones, cada una con su misión característica, bien sea acabar con todos los espíritus que campean por ella o resolver diversos puzzles. A lo largo de la aventura tendremos que volver en variadas ocasiones a habitaciones anteriormente visitadas, pero que variarán sustancialmente, tanto en objetivos como en inquilinos, en nuestras posteriores incursiones.

Los espíritus nos esperarán escondidos tras las esquinas, dentro de armarios, debajo de las camas, colgados de las paredes, esperando que nos descuidemos un segundo para darnos un susto que nos ponga los pelos de punta. En dichos momentos, la cámara hará un zoom hasta enfocar la horrorizada cara de nuestro rubio protagonista. Devolverle la calma en esos momentos será vital para su salud, por lo que pasar un minijuego que nos obliga a pulsar rápidamente cierta combinación de botones del pad será la única posibilidad de devolverle la calma y que pueda continuar su azarosa odisea.

El sistema de control será a su vez de lo más sencillo, recordándonos inmensamente al gran beat'em up que fue Smash TV. Con el stick izquierdo controlamos los movimientos de Cooper, hacia dónde se desplaza; a su vez, con el stick derecho controlamos hacia dondeataca. Esto significa que podemos desplazarnos en una dirección mientras golpeamos en la opuesta. Podemos elegir entre mantener el stick derecho enfocado en una dirección, con loque descargaremos a diestro y siniestro en la dirección seleccionada, o bien pulsar el botóndel stick, con lo cual no combinaremos golpes y podremos salir corriendo más fácilmente.Con los objetos que recojamos ocurre algo parecido. Una vez cojamos un objeto con el botón A, con el mismo stick de ataque lo usaremos, bien para lanzarlo, bien para golpear con él a los espíritus que pueblan la mansión.

Esto, que puede parecer sencillo en un primer momento no lo es tanto. Con tantos enemigos como habrá en pantalla, cada uno con sus puntos débiles, con un contador de golpes que debemos ir cuidadosamente mirando, atacar  sin ton ni son no tiene mucho sentido. Pese a esto, la variedad de golpes que ejecutaremos no es tan sustanciosa como querríamos: puñetazos, patadas voladoras, espectaculares ganchos y cuando nuestros enemigos estén en el suelo, noqueados por nuestras magistrales técnicas de lucha, será el momento de acabar con su contador de impactos con lanzamientos al más puro estilo wrestling. Pero no todo serán disgustos en la mansión. NPCs sin ánimo de lucro nos  encargarán misiones secundarias, nos ayudarán en la búsqueda dándonos valiosas pistas y entregándonos objetos útiles para la aventura.

Con esto sólo queda decir que el esperado regreso de Rare, su primer juego como third-party de Microsoft, saldrá este mismo otoño, como aperitivo a unas navidades que se presentan bastante prometedoras para nuestra Xbox. Y aunque Grabbed by the Ghoulies se presenta como un buen juego, con un acabado digno de una consola de la potencia de los de Seattle, no parece ser esa enorme muestra de calidad que se espera de Rare, un juego por el que sean recordados. Puede traer algo de frescura a Xbox, así como una buena exclusiva, pero puede que esté algo lejos de ofrecer eso que hace única a una videoconsola, eso que esperan los aficionados más exigentes, lo que ansían los usuarios medios de Xbox, un juego para recordar.