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Aprovechando el tirón de la recientemente estrenada en los cines X2, secuela de X MEN, Activision, de la mano de Gene Pool Software, nos trae la enésima adaptación de un personaje del cómic al videojuego. ¿Es una adaptación más, o el juego está a la altura del carisma del personaje en cuestión? Sigue leyendo y sabrás más...

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Lobezno, uno de los personajes más carismáticos del mundo del cómic, no podía pasar por esta generación de consolas sin una encarnación suya en forma de videojuego. Héroe alejado de prácticamente todos los clichés en los que se amoldan la gran mayoría, es un mutante desarraigado, rebelde sin causa y tozudo como una mula, del que sólo se puede esperar lo más inesperado. Desde su aparición en el número 180 del Increíble Hulk, allá por el año 1974, su legión de fans no ha hecho más que aumentar, llegando a su nivel máximo con sus recientes dos apariciones en el celuloide como integrante de la Patrulla X. Ya en anteriores generaciones consoleras pudimos 'disfrutar' de adaptaciones al videojuego de las peripecias de Lobezno, con juegos que iban de lo mediocre a lo aceptable sin más... Pero en esta ocasión parece que los hasta ahora desconocidos chicos de Gene Pool Software se han tomado la cosa un poquito más en serio, y eso se ha notado en el juego que hoy nos ocupa.

El juego no es más que un beat'em up en toda regla con ligeros toques aventureros y de sigilo/ocultamiento. Y es que se ha optado por dar al jugador la opción de avanzar con sigilo (dando cuenta de los matones de turno al más puro estilo de juegos como Splinter Cell, Metal Gear, Dead to rights, Tenchu y similares), atacando a cuerpo descubierto y eliminando a los enemigos a saco, o bien combinando ambas posibilidades, adaptándose al requerimiento de cada situación para poder salir airoso de los ataques de los soldados enemigos.

Para justificar el argumento del juego, se ha optado por entregar la labor de escribir el guión a Larry Hama, uno de los mejores guionistas del cómic original, decisión que ha demostrado ser más que acertada. La trama te pone en la piel de Logan cuando descubre que el virus que introdujeron en su organismo décadas atrás, al convertirlo en la máquina de matar que es, ha sido capaz de evitar su capacidad de autocuración, tras años permaneciendo en un estado latente. El virus Shiva fue inyectado por el Dr. Cornelius (el científico que dotó a Lobezno de su esqueleto y garras de Adamantio) en todos los especimenes del proyecto Arma X, como medida de control y prevención, por si alguno de los sujetos se rebelaba. Por ello, Lobezno tendrá que regresar al complejo X, lugar fruto de sus peores pesadillas, en busca del antídoto que pueda curarle del virus que en el plazo de 48 horas dará buena cuenta de su larga y tortuosa vida.

  g  r  á  f  i  c  o  s

El sabor agridulce que provoca este título en este apartado le dice a uno que, pese a una buena labor, se pudo haber llegado mucho (muchísimo) más lejos. Las excelentes animaciones y movimientos de Lobezno contrastan con el bajísimo número de polígonos con los que se han diseñado todos y cada uno de los personajes y el pobre detalle y esmero puesto en los escenarios, por mucho que se disimulen con un acertado uso de las texturas. Los notables efectos gráficos y de partículas contrastan con el constante clipping que adolece el motor gráfico y una cámara que no acaba de encontrar el ángulo idóneo para seguir la acción. Al menos, la racanería poligonal se traduce en un manejo fluido de los elementos del juego, detalle harto importante en un juego de sus características.

  m  ú  s  i  c  a

El peor apartado del juego, y con diferencia. Melodías poco inspiradas y nada convincentes acompañan el avance de Logan por su última aventura. Lamentablemente, poquísimos juegos del género de los beat'em up tienen una música acorde con el ritmo frenético de dichos juegos. Una pena, ya que se podría dar mucho más de sí en este apartado.

  s  o  n  i  d  o     f  x

Al igual que en materia gráfica, tiene apartados notables y auténticos puntos negros. El excelente doblaje del juego cayó en manos de Mark Hamill para la voz de Lobezno y de Patrick Stewart para el profesor Xavier, en los papeles principales. Por una vez, es de agradecer que se hayan conservado las voces originales en inglés (con subtítulos en castellano, para los no habituados con el idioma de Shakespeare), ya que el doblaje original es convincente, contundente y a la talla de los dobladores profesionales al cargo. En cambio, los efectos de sonido son sencillos y repetitivos a más no poder.... Con juegos como este, a uno se le queda la impresión de que no se ha avanzado nada en esta materia desde la época de los 16 bits.

  j  u  g  a  b  i  l  i  d  a  d

Siempre fiel al género al que pertenece, el juego ofrece una jugabilidad directa, intuitiva y sin grandes complicaciones. Eso sí, se ha sabido conjugar el sabor de los beat'em ups de toda la vida con el desarrollo en tres dimensiones con unos buenos resultados. Por si fuera poco, añade al título un toque estratégico y de ocultamiento al más puro estilo Metal Gear Solid. Dicho así puede sonar extraño, pero al juego le sienta a las mil maravillas. La gracia está en combinar ambos estilos según las necesidades de la situación, encontrando contadas situaciones en las que se deba entrar a saco, o se deba avanzar con absoluto sigilo sin posibilidad de avanzar con el otro método.

Uno de los aspectos jugables y visuales más novedosos es el uso de ese instinto animal, ese sexto sentido del que hace gala Lobezno para prever las dificultades que se le avecinan. Presionando el botón L se activa dicha habilidad, con la que no sólo se oculta del enemigo (salvo contacto visual directo), sino que además es capaz de ver y sentir cosas que no vería con los sentidos humanos. Activando dicho poder, podrá descubrir minas, lásers, fuentes de calor y enemigos, incluso en la completa oscuridad. Del mismo modo podrá rastrear las huellas de sus enemigos sin el más mínimo problema. Todo ello gracias a la vibración del mando (cuyo uso es excelente en este juego) y un cambio en la visión, que recuerda a un visor termal.

Otro aspecto a destacar es la acción de ATAQUE, que permite salir airoso de más de un auténtico brete, y constituye un arma mortífera cuando avanzamos sigilosamente. Dicho ataque se puede activar pulsando el botón X en tres situaciones distintas:

- Al acercarse con sigilo y por sorpresa a los enemigos usando la habilidad de ocultación (botón L) se ofrece la oportunidad de usar el ATAQUE, que activa al pulsar el susodicho botón X una animación en la que Lobezno aniquilará el incauto de turno sin mayores problemas.

- Golpeando a manos desnudas (sin usar las garras de adamantio) a los enemigos se les llega a dejar atontados. En ese momento se puede usar de nuevo el ATAQUE, que en este caso realiza un combo devastador, cuya espectacularidad (y efectividad) varía según el combo realizado con los botones X e Y.

- Al enfrentarse con entre 2 y 4 rivales a la vez (valientes que son ellos...) también aparecerá la opción ATAQUE que, al igual que sucede con la situación anterior, variarán en su ejecución y el daño infligido según se haya apretado simplemente el X, o se hayan hecho diferentes combinaciones con X e Y. Dichos movimientos se tornan vitales en las últimas fases, en las que las confrontaciones desiguales suceden con mucha mayor frecuencia.

Tanto con el uso de dichos ataques como al eliminar a los jefes finales de fase nos otorgan placas de identificación militar, con las que se abren nuevos desafíos a superar, además de hacer aumentar y mejorar los combos posibles a realizar en los ATAQUES. Asimismo, la recolección de cómics, esparcidos a lo largo de la aventura, desbloquearán una ingente cantidad de extras, para regocijo de los fans del héroe.

Otra cualidad de Lobezno en el juego es la autocuración o regeneración. Basta con esconder las garras y no luchar, ni estar en estado de ira para ver como, lenta pero inexorablemente, la barra de energía del mutante se rellena. Esta cualidad es muy útil, ya que tanto los enemigos armados como los de fin de fase se prodigan en caricias que se dejan notar en nuestra maltrecha energía.

No es posible dejar pasar las características garras de Lobezno, arma mortífera como pocas, que se sacan y ocultan con el botón Z (aleluya... un juego que hace buen uso del dichoso botón...) Pese a la disminución en la velocidad de ataque, el resultado es devastador respecto a los puños desnudos. Además, con la garras es posible romper cajas, puertas, verjas, etc...

Y para acabar, algo tan característico como sus garras.... sus ataques de ira incontrolada. Como bien es sabido por cualquier conocedor de la vida, obra y milagros de Logan, en algunas ocasiones se deja dominar por una furia inhumana en la que su resistencia, fuerza, velocidad y fiereza se elevan muy por encima de su ya exagerado nivel. Dicha peculiaridad del personaje ha sido reflejada en el juego con la inclusión de una barra de ira. Ésta se va rellenando al dar y recibir golpes, y se reduce en los momentos de calma. A partir de cierto nivel, con un doble clic del Z (otro uso para dicho botón... increíble....) o bien al llegar a su nivel máximo de ira, Lobezno desata su furia animal que permanece activa hasta que la barra se vuelve a vaciar por completo. En esos instantes Lobezno se convierte en una bestia casi invencible, que da buena cuenta de los enemigos con una soltura pasmosa.

Con todo este catálogo de movimientos y habilidades propias de tan peculiar mutante se puede hacer uno la idea de la gran labor de Gene Pool en este aspecto. Es sin duda uno de los puntos positivos del juego.

El resto de controles, que poco o nada tienen que ver con el personaje, se resumen en el uso del B para pegar patadas, el Y para saltar, el R para agacharse, el A para golpear, el X para la ya mencionada función de ATAQUE y para el resto de funciones que puede realizar, tales como subir a escaleras, activar puertas y terminales de ordenador, etc. Con el stick C se puede manejar la cámara, función bastante útil en muchas ocasiones, 'gracias' a la tendencia de la cámara a buscar el ángulo de visión más enrevesado...

Es preciso remarcar que los enemigos pecan de falta de originalidad y de variedad de movimientos (la IA es, en ocasiones, risible...), muy típico en el género por mucho que pese. Sin embargo, el mayor de los errores del juego es el hecho de disponer de continuaciones infinitas para completarlo. Eso facilita el juego sobremanera, acortándole la vida de paso, con todo lo que ello conlleva. Para mayor INRI, cuando mueres no sigues desde el punto en que has sido abatido o en un punto intermedio en su defecto, sino que debes reanudar la fase desde el principio, como si no hubieras hecho nada antes, con el tedio que provoca en cuanto te atascas en alguna que otra ocasión. De todos modos, es de recibo decir que, pese a todo, el juego es bastante más largo que la media de su género, con un tiempo de juego que oscila entre las 15 y las 25 horas de juego, según la habilidad y experiencia en estas lides.

  c  o  n  c  l  u  s  i  ó  n

Discreto a nivel técnico, sólido en lo jugable y divertido como los beat'em up de toda la vida, X-Men 2 la venganza de Lobezno resulta una agradable sorpresa, en un mundillo en el que la explotación y el desaprovechamiento de buenas licencias constituye una triste costumbre por parte de las desarrolladoras. La bien trazada curva de dificultad (asequible, pero no fácil), además de los elementos de ocultamiento que tan bien le sientan, contribuye en el redondeo de un juego notable, que os mantendrá pegados a la pantalla durante bastantes más horas de las que cabría esperar a priori en un juego de sus características.

Se echa en falta una mayor variedad en los movimientos y algo más de esmero a nivel técnico, pero sin duda estamos ante un título de lo más digno entre los beat'em up, y desde luego ante un juegazo para la cada vez mayor legión de fans del mutante más irreverente, rebelde y carismático de la patrulla X.

  l  o    m  e  j  o  r

  l  o    p  e  o  r