Blizzard continúa limpiado Battle.net

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Blizzard, después del descalabro que ha supuesto la falta de seguridad detectada en los servidores de Battle.net y especialmente en aquellos que albergan las partidas y jugadores de Diablo II, ha decidido continuar con su agresiva política de expulsiones. En esta ocasión han sido nada menos que 120.000 cuentas de Diablo II las que han sido borradas y los números de serie de los CDs controlados, para ser anulados en caso de que el jugador continúe con una política hostil hacia la comunidad de jugadores.

Por un lado Blizzard ha detectado, además de los típicos jugadores que duplican o modifican objetos ya existentes,  a aquellos jugadores que utilizaban programas externos para conseguir una ventaja extra en las partidas. Este es el caso del archifamoso Map-hack, un programa tan sencillo como extendido entre los jugadores de Diablo II. El programa por una lado permite ver el mapa completo de los niveles así como la situación y características de las unidades allí presentes, y por el otro permite avisarnos mediante llamativos colores de la presencia en el suelo de objetos que hemos calificado de buscados.

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Y es que Blizzard sigue trabajando, cada vez con más ganas después de la dilatada programación, en la versión 1.10 de Diablo II que supondrá cuanto menos un borrón y cuenta nueva para la comunidad del juego. Así por un lado además de equilibrar y revisar a los personajes del juego, de crear nuevos y exóticas nuevas armas con las que enganchar a los jugadores, el juego mejorará la seguridad en los servidores. Para ello Blizzard abrirá una nueva cuenta para los usuarios con la finalidad de que puedan empezar desde cero un nuevo personaje, olvidándose de la anteriores cuentas cuyo mercado hace ya meses que tocó fondo.