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Splinter Cell (GameCube)

Uno de los juegos que ha ayudado a Xbox a ganarse respeto entre la comunidad jugona es Splinter Cell. Ahora en GC seguirá haciendo gala de un estilo de sigilo/aventura como no habíamos visto antes. Sam Fisher está preparado para la acción... pero, ¿y vosotros?

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Uno de los juegos que ha ayudado a Xbox a ganarse respeto entre la comunidad jugona es Splinter Cell. Ahora en GC seguirá haciendo gala de un estilo de sigilo/aventura como no habíamos visto antes. Sam Fisher está preparado para la acción... pero, ¿y vosotros?

Splinter Cell para Xbox se ha convertido desde su lanzamiento en uno de los buques insignias de la consola de Microsoft. Sabedor del tirón que ello puede ocasionar y tras varios líos de exclusividades temporales tan de moda en estos tiempos, UbiSoft se decidió a anunciar oficialmente el desarrollo del juego de Sam Fisher para el resto de plataformas, incluida GameCube, a principios de año. La noticia no cogió por sorpresa a nadie, o a casi nadie, pero lo que estaba por ver es si las nuevas versiones se acercarían al nivel técnico más que notable alcanzado en Xbox...

Splinter Cell (GameCube)

Sam Fisher es nuestro particular "splinter cell", una especie de soldado perfectamente entrenado para las misiones más peliagudas y la supervivencia en entornos hostiles. Es más que un simple "operaciones especiales". Su técnica pasa por el sigilo y los movimientos calculados fríamente, pero también por la capacidad de reaccionar en milésimas de segundo cuando la situación cambia, o partir algún cuello que otro (lo sentimos por los "malos"), en esos momentos en los que nos consideramos más amenazados y podemos percibir como la misión peligra. Convertirse en un Fisher cualquiera no está al alcance de todos así que nada mejor que ponernos a los mandos de una consola y emular a este personaje lo mejor posible. Siempre te quedará el consuelo de que al menos no recibirás balazos de verdad...

La historia nos sitúa en un momento de crisis internacional. Dos agentes de la CIA han desaparecido sin dejar ni rastro y de forma misteriosa en la antigua república soviética de Georgia. Las informaciones, inconclusas y a la expectativa, no dan excesivas pistas, pero se cree que han caído en manos de algún grupo terrorista o de presión política. La NSA (la Agencia de Seguridad Nacional), encomienda el trabajo de recuperación y extracción de los dos agentes a un sub departamento del que pocos conocen su existencia: El "Third Echelon". Tanto secretismo no es para menos, la situación desde ese lado es caótica y parece que detrás del supuesto secuestro hay algo más mucho más importante. Sam Fisher será el encargado de infiltrarse en el país y dar con los dos agentes. Es sólo un hombre, sí, pero una vez que se tiene en cuenta todas sus habilidades parece que hasta se sobra... En fin, no te revelaremos más de la historia, y aunque no hay mucho más que contar (dejemos algo para el análisis), te convendría saber que todo se complica bastante al descubrir que detrás de toda esta farsa hay un auténtico complot para cambiar el orden mundial y crear un ambiente de terror con las temibles armas nucleares de fondo... ¡Hey! Puro Tom Clancy, sin duda...

Y es que el juego de Ubi Soft ha aprovechado el indudable impulso que puede otorgar un escritor como puede ser uno de los best seller norteamericanos más de moda. Tom Clancy, sentado en el despacho de su casa de Maryland no ha dejado de escribir novelas que mezclan la ficción con las relaciones políticas entre Estados Unidos y los países que denomina del "eje del mal". No es de extrañar por tanto el corte algo patriótico y la situación en un país como Georgia para un juego basado en su universo. En todo caso esto no es un ejercicio político ni social, y lo realmente importante es aprovechar el nombre y el tipo de situaciones que caracterizan sus novelas para el último juego de Ubi Soft para tratar de ofrecernos un juego que mezcla la acción con las tácticas más novedosas del sigilo y las acciones especiales.

Apartado sin embargo un tanto de los títulos desarrollados tradicionalmente por la propia compañía del escritor, Red Storm (Rainbow Six, Rogue Spear), Splinter Cell es un juego de acción en tercera persona donde el sigilo cobra gran importancia. Quizás siga los pasos iniciados por otros juegos como el propio Metal Gear, Winback o Tenchu, pero SC siempre ha querido ir un poco más allá y otorgar ciertas dosis de realismo (dentro de lo que puede llamarse realismo en un videojuego), con la inclusión de accesorios, armas y escenarios algo más verisímiles, y con una vuelta de tuerca a los controles y la jugabilidad. Si la novedad y el realismo es algo que se haya conseguido ya lo veremos en el pertinente análisis en profundidad, pero baste decir por ejemplo que los enfrentamientos con los enemigos habrá que racionarlos para no comprometer nuestro medidor de energía, y que gran parte de la mecánica del juego se basa en aprender de los errores y reinicializar la misión, algo que en otro tipo de juegos como los plataformas puede funcionar muy bien, pero que en un título de estas características puede transformarse en un desarrollo algo repetitivo, y lo que es peor, aburrido.

Cuestión de técnica.

Splinter Cell para Xbox siempre ostentó la bandera de ofrecer un apartado gráfico muy loable, y en ocasiones sorprendente. La iluminación tuvo, con la creación de Ubi, un nuevo giro, hacia la espectacularidad y la creación de ambientes diferentes con el único uso de diferentes puntos de luz y sus correspondientes proyecciones. Lo que en un principio parecía un simple efectismo puesto al servicio de la potencia de la máquina de Microsoft, se convirtió sin embargo en un elemento importante, e incluso definitorio de lo que hoy conocemos como Splinter Cell. No sólo son los rayos luminosos que proyectan sombras, si no que también son esas sombras una parte integral del juego, y podremos aprovecharlas para escondernos o esperar agazapados mientras se pasean los guardias de turno. En GameCube parece que Ubi Soft Shangai ha querido acercarse lo más posible a la versión original en este apartado, pero mucho nos tememos que el resultado final, al igual que en el resto del apartado gráfico, no será ni mucho menos el mismo, y además parece que tampoco se han aprovechado como deberían la capacidad auténtica del hardware de Nintendo. Cuestiones de conversiones suponemos...

Las texturas también parecen haber sufrido un severo tijeretazo, no sólo en su calidad, sino también en la variedad e incluso la integración con los escenarios. Los enemigos, animaciones y un puñado de efectos gráficos tampoco lucen como en la versión para Xbox, una lástima sí, pero puede que lo olvidemos tras comprobar si el control, su adaptación al mando de GameCube, y la jugabilidad, son lo esperado.

¡Conéctate!. Bueno, o al menos inténtalo...

Uno de los aspectos más interesantes será sin duda la interconexión con el cartucho para GameBoy Advance, cuyo lanzamiento se espera para la misma fecha. En numerosas notas de prensa para sus juegos, Ubi Soft se ha encargado de recordarnos que quieren aprovechar las posibilidades de interconexión y jugables que tienen las dos máquinas utilizadas en conjunción. Ya en Rayman 3 el trabajo fue más que loable, dando lugar a una experiencia bastante divertida y gratificante, sobre todo en el mini-juego de las carreras con bloques. Para Splinter Cell sin embargo las posibilidades del cable link pasarán por la estrategia e incluso la extensión de los gadgets que lleva encima "mister" Fisher pero en la vida real... Y es que al conectar nuestra GBA con Splinter Cell, podremos acceder a un minimapa que nos presenta información de nuestra situación, la del escenario y la de los enemigos que nos rodean, o utilizar la pequeña portátil como control remoto de algunos ordenadores y cámaras de vigilancia. Quizás para rematar, gracias a este "artilugio" también podremos utilizar un tipo de arma exclusiva de la versión de GameCube, una especie de bombas lapa, que le dará un pequeño giro al desarrollo de la acción. En contrapartida, gracias a nuestras partidas en la versión doméstica del juego, podremos abrir hasta 5 niveles diferentes en Splinter Cell para GameBoy Advance, totalmente exclusivos y en teoría imposibles de abrir de otra forma.

La idea parece realmente bueno, al menos en un principio, pero ya veremos que tal se ejecutan las órdenes desde nuestra GBA y si el mapa al final no resulta más que un bonito adorno...

En fin, todavía queda algo más de un mes para que Splinter Cell aparezca en GameCube y GBA en Europa. Será en efecto un título muy a tener en cuenta debido a la falta de representantes semejantes en el catálogo de la "grande" de Nintendo, y la conexión con la portátil parece hacerla más interesante para los afortunados poseedores de ambas consolas. Pocas novedades al respecto de versiones anteriores y un apartado gráfico que en un principio podría decepcionar en comparación con el resultado de Xbox son quizás su mayor lastre, pero no nos pongamos pesimistas. A principios de Junio saldremos de dudas y podremos comprobar por fin si Splinter Cell es tan bueno como dicen o se queda en agua de borrajas... Esperemos que sea lo primero.

Splinter Cell

  • PS2
  • GC
  • XBX
  • Acción
El protagonista es Sam Fisher, un agente de Third Echelon, una "filial" de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) estadounidense. Sam está acostumbrado a infiltrarse en instalaciones secretas, obtener documentos secretos, destruir datos comprometedores y eliminar enemigos, y todo esto sin dejar rastro.
Carátula de Splinter Cell