The Legend of Zelda: A Link to the Past (GameBoy)

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Bienvenido de nuevo al siglo 20, a la era de los 16 bits y a uno de los mejores momentos de los videojuegos. Bienvenido al momento en que Zelda salió para Super Nintendo, marcando un antes y un después. Si ya lo has vivido, es el momento de volver; y si no, ¿a que estás esperando?.

Los juegos de Zelda ya se habían hecho famosos en la pequeña NES de 8 bits, aunque en aquel momento la cosa cambió bastante. Cambió la perspectiva, el sistema de juego, y por supuesto, todo el apartado técnico. Con un colorido jamás visto hasta entonces, unas melodías únicas e imborrables, y una historia a la altura de las grandes películas, este nuevo Zelda tenía todo lo necesario para cautivar a una generación entera. Y de hecho, así fue.

Y no cabe duda que todos los Zelda han sido y serán obras maestras; pero éste en particular consiguió unir de manera soberbia todo lo que un juego necesita: diversión y capacidad técnica. Así que como es lógico, Nintendo ha decidido resucitarlo para su nueva consola portátil, que tantos antiguos éxitos están pasando por sus circuitos. El juego es el mismo, con todas sus cosas buenas, y con la única que cosa que puede jugar en su contra, el tiempo que ha pasado.

Pero ¿está justificado sacar de nuevo a la venta un juego de hace casi 10 años, y por el mismo precio que un juego completamente nuevo?. Bueno, ríos de tinta se han vertido sobre el asunto; y no cabe duda de que en ciertas ocasiones, las críticas están más justificadas que en otras, salvo en ésta.

Aquí, y entrando un poco en terreno de análisis, se puede decir que de haber un juego en la historia de Nintendo que merezca resurgir de sus cenizas, es este Zelda. Incluso al precio de un juego nuevo, hay que reconocer que A Link to the Past merece ser tenido en la ludoteca de cualquier amante de los videojuegos de rol. No importa si se jugó en su día, ya que las sensaciones y la diversión que produce, son totalmente impagables.

Pero dejando a un lado las alabanzas a este juego, y volviendo al terreno del avance, procedamos a comentar lo que hay aquí. Tras el juego de palabras que esconde el título (A Link to the Past = Un Enlace al Pasado, donde Link es el nombre del protagonista, lo que se podría entender también como "Un Link (enviado) hacia el pasado"), se encuentra un juego rol muy elaborado. Sencillo en su manejo, pero divertido hasta el límite.

La mecánica de juego es sencilla. Como todos los Action RPG, Zelda pone al jugador en el papel de un personaje visto desde una perspectiva cenital, aunque con una sensación de profundidad bien conseguida. Los enemigos aparecen en pantalla en tiempo real, y con los dos botones principales se usan las armas, la general (que es la clásica espada) y la secundaria (que puede ser cualquier objeto que se encuentre durante la partida, desde un bumerán, hasta bombas).

A medida que se avanza, se van encontrando objetos y personajes secundarios con los que interactuar. Algunos de estos, irán dando forma a la historia. Ésta gira en torno a la princesa Zelda, secuestrada para ser ofrecida en sacrificio, y que deberá ser rescatada por el joven Link. A medida que se va jugando, se irán recorriendo algunos de los mejores escenarios que se recuerdan, como desiertos, pueblos, lagos, y por supuesto, montones de mazmorras.

Estos objetos, además de suponer ventajas para Link, le permiten acceder a zonas antes inalcanzables, limitando así el orden en el que jugar la aventura. Algunas de estas son el arco, el garfio, el bumerán, o el guante para levantar objetos. La mayoría, además de servir como accesorio, también pueden ser usados como arma.

Este modo de juego se llama The Four Swords (Las Cuatro Espadas), y permite que entre 2 y 4 jugadores se metan el papel de Link (todos manejan a un Link de diferente color) y recorran diferentes mazmorras. El objetivo es completar la mazmorra, para lo cual, los jugadores deberán colaborar entre sí. El único modo de resolver algunos puzzles es ayudando a los compañeros, tirando todos de diferentes palancas, o simplemente agarrando al compañero y lanzándolo a zonas inaccesibles.

Durante la partida, también aparecen enemigos finales que son casi imposibles de derrotar de manera individual, lo que fomenta el trabajo en grupo. Pero para que la partida no se vuelva aburrida con el tiempo, Nintendo ha añadido algunos elementos que fomentan la individualidad, como por ejemplo las rupias (el dinero del juego) que hay por los niveles; ¿quién conseguirá reunir más?.

Además, también están los objetos secundarios, pues sólo se puede llevar uno a la vez, por lo que habrá que escoger si se prefiere llevar una cosa u otra. Así, no se podrá llevar a la vez los guantes y las botas, por lo que habrá que escoger si se prefiere poder agarrar objetos o saltar. Si se agarra a un compañero, no sólo se le puede lanzar hacia zonas inaccesibles, también se le puede lanzar a un abismo para terminar con la rivalidad.

Quizás la única pega de este modo multijugador sea que todos tienen que tener su cartucho para poder jugar, aunque este título, bien que lo merece. La otra novedad que se mencionaba antes es la posibilidad de jugar en el futuro Zelda de Game Cube con este cartucho, aunque de ello ya se hablará en su momento.

¿Será así?, ¿cuándo llegará?... de momento no lo sabemos, pero desde aquí todos esperamos que no tarde mucho, y que venga con esa traducción. Aunque si por ella hay que esperar un poco más; pues se espera. No creo que nadie se fuera a quejar por eso... ¿verdad?.