Todos detrás del artefacto

Con Aliens vs Predator 2, Monolith Productions desarrollaron un juego muy atractivo, aunque sin alcanzar el nivel que marcó el original de los británicos Rebellion. Esta saga de acción en primera persona ya está consolidada, y Fox Interactive y Sierra encargaron a Third Law Interactive, los creadores de KISS: Psycho Circus, el desarrollo de una expansión. Primal Hunt es el resultado, y aunque técnicamente brilla a un buen nivel, sus defectos están en otros aspectos del juego. Veamos sus virtudes y sus fallos en este análisis.

Tanto el precio como las novedades que aporta Primal Hunt lo sitúan en el nivel medio-alto de lo que estamos acostumbrados a encontrar en una expansión: tres nuevas campañas monojugador, una para cada raza, nuevas armas, nuevos mapas multijugador y nuevos enemigos. Cada campaña está compuesta de tres niveles, y personalmente he tardado unas dos horas en completar cada una de ellas en el nivel de dificultad normal (hay dos niveles más difíciles y una más fácil).

En cuanto a las armas, la protagonista humana, una mercenaria colonial llamada Dunya, podrá usar un par de pistolas, una en cada mano, plantar ametralladoras automáticas en los escenarios y manejar una potente ametralladora fija. El depredador dispone de un arma que dispara rayos rápidamente y de la posibilidad de autodestruirse en las partidas multijugador.

A los usuarios les gustará que la expansión incluya todos los parches para AvP 2 y los mapas multijugador que Monolith colgó en la página oficial del juego. Todo un detalle.

Áudio y vídeo

Poco podemos añadir sobre los gráficos que no comentásemos ya en el análisis de Aliens vs Predator 2. Quizás con el paso del tiempo, esta versión del motor gráfico demuestra que no pasa el tiempo en balde. Y decimos esta versión porque No One Lives Forever 2, que usa una versión más moderna del engine LithTech, es otra historia. Las texturas y los escenarios acusan menos el "envejecimiento" que otros detalles, como las animaciones y los modelos de los personajes. A pesar de que los personajes mueven los labios y pestañean, en demasiadas ocasiones se producen saltos bruscos en las animaciones y errores de clipping de bulto con los elementos de los escenarios.

Y hablando de los escenarios, diremos que van desde los clásicos interiores futuristas de las películas de Alien hasta unas ruinas depredadores, pasando por el nido alienígena y amplios, salvajes y verdes exteriores del planeta LV1201. Incomprensiblemente, una de las mayores novedades de AvP2, los escenarios exteriores, tienen en esta expansión una presencia mínima. Por otro lado, la mayoría de ellos, con la notable excepción de los interiores habitados por humano, comparten una decoración más que espartana.

La música y los sonidos mantienen la excelente producción y fidelidad con las películas del original, y confirma nuestra primera sensación de que en el apartado técnico Third Law no han fallado y han creado un título más que correcto. Como comentaremos más adelante, la habitual alegría que produce comprobar el uso dinámico de la música, que se adapta en tiempo real a la acción que vivimos, en este caso se convierte más en un incordio. Y no podemos olvidar que el juego ha sido traducido y doblado al castellano por actores competentes, algo que desgraciadamente es cada vez más extraño.

Guión

La historia gira alrededor de un antiguo artefacto del planeta LV1201 que puede usarse para alejar o incluso controlar a los aliens. Inicialmente un depredador se hizo con él y lo activó para alejar a los alienígenas. Pasaron 500 años y Dunya, una mercenaria colonial, se lo arrebata. Lógicamente el objetivo de los alienígenas será conseguir y destruir el artefacto, mientras que las otras dos razas persiguen el objeto para usarlo en su beneficio propio.

Jugabilidad

La ambientación y el suspense, además de una más que decente calidad técnica, han sido las señas de identidad de la saga Aliens vs Predator, pero desgraciadamente Third Law no ha sabido mantener las dos primeras características. El suspense que creaba el bip del detector de movimiento de los marines ha perdido su utilidad porque en cuanto aparece un enemigo, cambia la música y nos lo anuncia con demasiada claridad. Además, tanto la campaña humana como la del depredador se limitan a echarnos enemigos por todas partes, cosa que nos obliga a escapar constantemente. Sólo la campaña alien ofrece más variedad, ya que, de forma similar a AvP 2, pasaremos por todas las fases de crecimiento desde el huevo hasta un poderoso predalien.

La inteligencia artificial no ganará ninguna medalla, aunque en parte tiene su lógica: la mayoría de veces nos enfrentaremos a aliens, que se abalanzan directamente hacia nosotros. Cuando luchamos contra humanos, la verdad es que los eliminaremos tan rápido que no podremos valorar su comportamiento. Y como no lucharemos contra ningún depredador, pues poco queda por añadir.

Los controles y los menús ofrecen todas las opciones que se nos puedan ocurrir, y merece una mención especial el menú para configurar las partidas multijugador. Podemos elegir las clases de personajes de cada tipo (marine, colonial, alien o depredador) y las armas permitidas en cada partida, además de los mapas, modos de juego y muchas otras opciones.

Estrategia y trucos

Las novedades de esta expansión no modifican sustancialmente la jugabilidad, y las nuevas armas cubren aspectos que ya quedaban bien cubiertos con las armas de AvP 2, así que os remitimos a esta misma sección pero en el análisis de ese juego.

Lo que está bien

El doblaje y la traducción al castellano, la música y el sonido, y las razas tan cinematográficas.

Lo que no está tan bien

En realidad esta expansión no aporta prácticamente nada que sorprenda, e intenta alargar la experiencia del juego original sin romper moldes. El motor gráfico denota el paso del tiempo. Más vale ahorrar un poco más y comprar un juego completo como No One Lives Forever 2, que sale en la contraportada del manual.

Enlaces

Manual

Las 30 páginas del manual no dan para demasiado, y menos si tenemos en cuenta que sólo poco más de la mitad habla del propio juego. Además de explicar el proceso de instalación, el manual repasa las novedades de la expansión, desde las armas hasta nuevos comandos de consola y opciones multijugador. Antes de los créditos encontramos un resumen con todos los controles. En verdad, para una expansión se necesita poco más.

Requisitos del sistema

Equipo mínimo

Aliens vs Predator 2, Windows 98/Me/2000/XP, Pentium III a 450 MHz (recomendado a 600 MHz), 128 MB de RAM (recomendado 256 MB), Tarjeta aceleradora de hardware 3D de 16 MB compatible Direct3D (recomendada con 32 MB), Unidad de CD 4x, Ratón, Teclado, Módem de 56K o LAN para modos multijugador, 600 MB de espacio libre en disco, Tarjeta de sonido compatible DirectX

Equipo de pruebas

Athlon XP 1800, 512 MB de RAM, Tarjeta gráfica GeForce4 Ti4600 128 MB, Tarjeta de sonido con procesador Audigy. Lógicamente con este equipo de pruebas el juego se ejecutó fluido en todo momento, y con reducidos tiempos de carga.